Nuestra relación con Dios

Transcripción

1 Lección 12 Nuestra relación con Dios Ya hemos aprendido que el amar a Dios constituye nuestra responsabilidad principal como cristianos. Según estudiamos en la lección 11, guardamos sus mandamientos porque le amamos. Así que nuestra relación con El es de amor. En 1 Corintios 13 se incluye una descripción hermosa del amor. Los versículos 4 al 8 dicen que el amor es sufrido, benigno, no tiene envidia, no es jactancioso, no se envanece, no es indecoroso, no busca lo suyo, no se irrita. No guarda rencor, no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, el amor nunca deja de ser. Lo anterior suena como un retrato ideal de lo que es el amor. Pero esta es la clase de amor que cada creyente cristiano debería expresar hacia Dios y sus semejantes. Esta es la clase de amor incondicional que Dios nos da. No es casualidad que los capítulos anteriores y subsecuentes al 13 se refieran a los dones que Dios da al creyente. El capítulo del amor está relacionado con los de los dones porque éstos se deben ejercer en amor. Amar y compartir van unidos porque cuando amamos a otros queremos también darles lo que más anhelan. En esta lección usted estudiará... Los dones de Dios para nosotros Nuestros dones para Dios Esta lección le ayudará... A describir por lo menos tres dones de Dios para sus hijos. A consagrarse para darle a Dios los dones del amor de los cuales El es digno. LOS DONES DE DIOS PARA NOSOTROS Objetivo 1. Identifi car algunos dones de Dios para sus hijos. El primer don que Dios nos da cuando creemos en El, es el de la salvación. 56

2 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe (Efesios 2:8-9). Si somos creyentes, Dios es nuestro Padre celestial y nosotros somos sus hijos. Mateo 5:16 le da a Dios este nombre precioso: Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. Es maravilloso saber que podemos hablar con Dios de la misma manera en que hablamos con nuestros padres. Cristo nos enseñó a hablar con El de esa manera cuando dijo: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre (Mateo 6:9). Aunque Dios es el creador, es también el Padre de aquellos que han nacido de nuevo en su familia. En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios (1 Juan 3:10). Para pertenecer a la familia de Dios necesitamos aceptar a su Hijo Cristo Jesús como nuestro Salvador y Señor. La vida principia al recibirle: Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios (Juan 1:12). Cada padre amoroso se goza al suplir las necesidades de sus hijos. Nuestro Padre celestial también suple todas nuestras necesidades. Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús (Filipenses 4:19). Dios nos vigila para protegernos porque somos sus hijos. Nos cuida día y noche. No dará tu pie al resbaladero, ni se dormirá el que te guarda (Salmo 121:3). Los ojos de Jehová están sobre los justos, y atentos sus oídos al clamor de ellos (Salmo 34:15). Muchos versículos bíblicos como éstos en los Salmos se refieren al cuidado que Dios tiene de nosotros. Cuando nuestro Padre dice que hará ciertas cosas por nosotros, le llamamos a esos versículos promesas. Las promesas son un don de Dios. Podemos recibir las bendiciones y obtener las promesas de Dios por medio de la oración y creyendo en su Palabra. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo (Juan 14:13). Estas son palabras textuales de Cristo. Los cristianos también reciben bendiciones de Dios ayudando a otras personas. El Salmo 41:1 dice: Bienaventurado el que piensa en el pobre; en el día malo lo librará Jehová. Podemos recibir muchos dones de Dios si creemos y se los pedimos. A este acto se le llama fe. Nuestra fe le agrada a Dios y no solamente nos salva y nos da otros dones que hemos mencionado, sino que también nos sana y nos da el bautismo en el Espíritu Santo. Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan (Hebreos 11:6). En Santiago 5:15 dice que recibimos sanidad por medio de la fe: Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiese cometido pecados, le serán perdonados. El bautismo en el Espíritu Santo también se recibe por medio de la fe. Para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu (Gálatas 3:14). Sin embargo, el mayor de los dones se encuentra en Romanos 6:23:... Mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre... (Santiago 1:17). 57

3 1 Lea el Salmo 91. Cuáles palabras se podrían usar para describir estas promesas que son un don de Dios? 2 Lea los versículos de la columna izquierda. Escriba frente a ellos el número de la promesa de la columna derecha que se menciona en el versículo..... a Romanos 5: b Eclesiastés 2: c Ezequiel 11: d Mateo 11: e 1 Corintios 12:6 1) Sabiduría, ciencia y gozo 2) Habilidades 3) Gracia abundante 4) Corazón y espíritu nuevos 5) Descanso 3 Escriba en las líneas siguientes por lo menos tres dones que usted ha recibido desde que aceptó a Cristo como su Salvador. NUESTROS DONES PARA DIOS Objetivo 2. Reconocer los dones que los creyentes le pueden ofrecer a Dios. No parece extraño darle algo a Dios, quien todo lo posee? En su Palabra dice lo que podemos darle. Podemos darle a Dios nuestra adoración. El Salmo 95:6 dice: Venid, adoremos y postrémonos; arrodillémonos delante de Jehová nuestro Hacedor. Se puede adorar a Dios por medio de la oración, dándole gracias por sus bendiciones, alabándole y dándole nuestras ofrendas para su obra. Colosenses 3:16 dice:... Cantando con gracia en vuestros corazones... También le adoramos cuando nos damos a nosotros mismos a Dios sin ninguna reserva. Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta (Romanos 12:1-2). 58

4 Otra forma de adoración consiste en darle a Dios nuestro dinero. Y cuando le damos, también recibimos. Dios lo prometió en Malaquías 3:10: Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. El diezmo es el 10 por ciento de los ingresos. Como cristianos, todo debemos hacerlo para el Señor. Cristo presenta un interesante relato en Mateo 25, de algunas personas que recibieron recompensas por haberle dado de comer y de beber agua al Señor Jesús y por haberle visitado en la prisión. Cuando estas personas preguntaron cuándo lo habían hecho El les contestó: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. En otras palabras, la generosidad llega a formar parte de nuestra vida. La adoración constante no significa que hemos de estar de rodillas todo el tiempo, en oración. Si vivimos día tras día de tal manera que le agrade a Dios, El lo contará como adoración constante. No creemos que sea difícil dar siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo (Efesios 5:20). El es digno de ello. 4 Cuál obsequio le podemos ofrecer a Dios que se menciona en los siguientes versículos? a Isaías 38:20 b Habacuc 2:20 c Salmo 103:1 d Juan 4:23 e 1 Timoteo 2:8 f Hebreos 10:25 5 El Salmo 76:11 dice que usted debería traerle a Dios todos los dones que le ha... 6 Cuáles de las siguientes cláusulas podrían considerarse como adoración o dones para Dios? a Cantar himnos mientras lava la ropa b No enojarse con su patrón cuando éste no tiene la razón c Asistir a la iglesia el domingo d Dar gracias a Dios antes de tomar los alimentos e Sentarse en silencio a meditar sobre las bondades de Dios 59

5 1 Su respuesta. Podría resumir el Salmo más o menos así: Morar bajo la sombra del Omnipotente. 4 a Nuestros cánticos. b Guardar silencio delante de El. c Bendecirle. d Adorarle. e Orar con las manos en alto. f Reunirse con los creyentes y animar a otros también. 2 a 3) Gracia abundante. b 1) Sabiduría, ciencia y gozo. c 4) Corazón y espíritu nuevos. d 5) Descanso. e 2) Habilidades. 5 prometido. 3 Su respuesta. Pudo haber sido sanado de alguna enfermedad, conseguido un empleo, haber sido rescatado del temor o haber encontrado una nueva esperanza. Sus dones son muchos. 6 Todas las cláusulas son medios por los cuales adoramos a Dios. 60