RETOS EN LA ACCIÓN GUBERNAMENTAL PARA IMPULSAR EL DESARROLLO DE LAS PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS EN MÉXICO PAULO ROBERTO CANTILLO GÓMEZ ÍNDICE

Transcripción

1 ÍNDICE Introducción Importancia de las Mypimes en el país Retos de la acción gubernamental Reflexiones finales Referencias INTRODUCCIÓN Las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) son unas de las principales fuentes de crecimiento económico y generación de empleos en muchos países. Por el peso específico que éstas tienen en el entorno local, nacional e internacional, los gobiernos destinan parte de sus presupuestos públicos para incentivar la creación, desarrollo y posicionamientos de Mipymes que sirvan como motores de crecimiento y bienestar para cada uno de los países. Dada esta perspectiva, en el presente artículo del Reporte Contorno se hará un breve análisis de los principales retos y líneas de acción que enfrentan las estrategias gubernamentales en el proceso de impulso y desarrollo a este sector importante del país. IMPORTANCIA DE LAS MIPYMES EN EL PAÍS En la actualidad, las Mipymes se clasifican de acuerdo con los criterios establecidos por el Acuerdo por el que se establece la estratificación de las micro, pequeñas y medianas empresas publicado en el Diario Oficial de la Federación el 30 de junio de En este sentido, el gobierno mexicano considera una empresa como micro, pequeña o mediana si tiene hasta 100 trabajadores en los sectores de comercio y servicios, y hasta 250 en el sector industrial. Según cálculos de la Fundación Idea, en el país las Mipymes constituyen el 99% de todas las empresas, contribuyen con el 52% del PIB (2006), y emplean a casi tres cuartos de la población (72% en 2006) (Saracho y Gutiérrez, 2009). Si se analizan estos datos en el contexto latinoamericano, se observa claramente la importancia que tienen las Mipymes en la región. Se nota el amplio porcentaje de participación en los mercados nacionales que tienen las microempresas, que representan más del 90% en la mayoría de países excepto en Argentina y Costa Rica, y en la mayoría de los casos representa más del 70% de los empleos formales en los países (ver gráfico 1).

2 Gráfico 1. Participación de establecimientos y nivel empleos de las Mipymes en América Latina Fuente: Observatorio Mipyme del Banco Interamericano de Desarrollo En el caso mexicano, se ha visto gran interés en el gobierno de impulsar iniciativas que potencien la creación y desarrollo de Mipymes. Según los últimos datos del Presupuesto de Egresos de la Federación, la asignación presupuestal al Fondo PyME, que es el principal instrumento del gobierno federal para impulsar este tipo de iniciativas, ha venido creciendo en términos reales desde el año 2006, en donde el período tuvo un incremento del 45,68%, en el período de un 22,29%, y en el período este incremento resultó ser del 46,71% (ver gráfico 2). Pero a pesar de este crecimiento real en la asignación de recursos a las Mipymes en el país, diversos expertos han señalado algunos retos a los que se somete la política de promoción y desarrollo de estas empresas, los cuales se presentan a continuación. Gráfico 2. Presupuesto asignado al fondo PyMe. RETOS DE LA ACCIÓN GUBERNAMENTAL

3 Articular los programas de ayuda a las Mipymes con las políticas que manejan el entorno económico y social del país. La Corporación Andina de Fomento (CAF) señala que una de las estrategias gubernamentales que más detonan el desarrollo de las Mipymes es tener un entorno económico y social favorable para su funcionamiento (Oneto, 2007). En este sentido, señala que la estabilidad macroeconómica, el desarrollo de la infraestructura y los programas de desarrollo social son fundamentales para crear un ambiente propicio en el cual puedan desarrollarse los negocios. Sin embargo, no hay una relación entre los programas de apoyo a las Mipymes y los programas gubernamentales encargados de gestionar las áreas mencionadas. En el caso de la política tributaria, el gobierno maneja un esquema tributario que no ha querido ajustar para promover el desarrollo de nuevas empresas, y mantiene todavía las exenciones fiscales a muchas de ellas que en la práctica no han solucionado los problemas de empleo. En el caso de los programas de desarrollo social, generalmente éstos están orientados a superar las carencias económicas que tienen las familias a través de subsidios focalizados, pero muy poco se preocupan por desarrollar capacidades productivas en dichas familias para que aprendan a depender cada vez menos de las ayudas gubernamentales. Por tanto, se puede decir que las políticas tributaria y social del país corren por vías separadas de la política de estímulos a las Mipymes (Oneto, 2007). Integrar entre sí los programas de apoyo federales. Ha sido tanto el interés del gobierno en aplicar programas para el desarrollo de las Mipymes, el que ha creado diversos instrumentos de este tipo. Sólo si se remite a los programas en el ámbito federal, se pueden encontrar con al menos 4 programas cuyo objeto son impulsar las Mipymes: el Fondo PyME (ya mencionado); el acceso a los servicios de consultoría y capacitación especializadas que brinda el Comité Nacional de Productividad e Innovación Tecnológica (COMPITE); el Programa de Financiamiento al Microempresario (PRONAFIM); el Fondo de Microfinanciamiento a Mujeres Rurales (FOMMUR); y el Fondo Nacional para las Empresas de Solidaridad (FONAES). Si bien cada uno de los programas mencionados cuentan con sus reglas de operación, lo que les permite tener sistemas de selección de beneficiarios y de monitoreo de los resultados alcanzados por dichos programas, el hecho de que casi todos tengan como población objetivo las Mipymes hacen que puedan crearse especies de carteles de empresas que acaparan la mayoría de las ayudas públicas entregadas por estos programas. Lo anterior ocurre debido a que como los objetivos de cada programa mencionado son distintos entre sí, una misma empresa puede justificar de manera adecuada el acceso a los financiamientos federales debido a la multiplicidad de objetivos de cada programa (OCDE, 2007). Integrar las políticas federales con las políticas estatales y municipales. Ahora bien, si lo anterior ocurre entre los programas federales, también hay que advertir la situación que producen los programas de apoyo a las Mipymes por parte de los gobiernos estatales, y en muchos casos hasta los municipales.

4 Generalmente la labor de los primeros es sumamente importante ya que tienen las facultades para mejorar el estado de derecho local, facilitar el registro de apertura de empresas, incrementar el nivel de la educación superior, proteger el medio ambiente y garantizar la seguridad jurídica y pública de los ciudadanos y las empresas. Además de los programas que pueden implementarse para mejorar el ambiente de negocios, los Estados pueden intervenir directamente para mejorar la competitividad de las PyMEs. Un ejemplo es la creación de clusters dirigidos a un sector empresarial 1 (Saracho y González, 2009). Entre tanto, se dice que el nivel municipal podría ser más eficiente para mejorar los costos y tiempos para obtener los distintos permisos necesarios para su funcionamiento por parte de las Mipymes, por lo que es más fácil y barato reformar dichos procesos en el nivel municipal (International Finance Corporation, 2008). Es por eso la importancia que el nivel federal coordine casos de programas para Mipymes donde los costos o beneficios no se limitan por fronteras estatales o municipales. REFLEXIONES FINALES En el presente artículo se describieron por un lado, la importancia económica que tienen las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) tanto en México como en Latinoamérica; y por el otro los tres retos que tienen que afrontar los programas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas en el país que son: articular los programas de ayuda a las Mipymes con las políticas que manejan el entorno económico y social del país; integrar entre sí los programas de apoyo federales; e integrar éstos con las políticas estatales y municipales. Dentro de los retos del manejo del entorno económico en la promoción de la pequeña y mediana empresa están el crecimiento económico, el manejo responsable de las finanzas públicas y la mejora en el clima de las inversiones, que son las detonantes de que en el país pueda haber mayor generación de Mipymes. Por eso es necesario que dentro de los programas gubernamentales de apoyos a estas empresas se incorporen temas de tratamiento fiscal y seguridad jurídica a estas organizaciones, con el fin de que pueden desempeñar mejor su papel de generadores de empleo y bienestar social entre la población. Se requiere entonces que las autoridades hacendarias y las promotoras a las Mipymes puedan establecer reglas claras que beneficien por un lado a las finanzas públicas, y que a su vez traigan beneficios a la promoción y desarrollo de este tipo de empresas. En cuanto a las políticas de desarrollo social, éstas tienen el reto de integrar a los beneficiarios a los procesos productivos de las regiones, debido a que por lo general dichos beneficiarios terminan siendo dependientes de las ayudas gubernamentales. Es importante que haya un diálogo franco entre los implementadores de los programas sociales y de los programas para las Mipymes, puesto que existe un fuerte 1 Un clúster es la unión/reunión/agregación de empresas de distintos tamaños en una industria en conglomerados con el objetivo de que éstas puedan acceder a la innovación, tecnología, capital humano y oportunidades de negocio de manera colectiva, lo cual minimiza los costos y el riesgo.

5 potencial de sinergias entre ambos, ya que se puede pensar en un esquema que tenga como meta que en un mediano plazo los beneficiarios de los programas sociales pueden ser sujetos de ayudas de los programas de Mipymes, y con esto poder brindar herramientas para cerrar el círculo vicioso que les da incentivos a que siempre sean receptores de subsidios para superar carencias. Finalmente en cuanto a integrar entre sí los diferentes programas federales, y a su vez éstos con los estatales y municipales, el reto es aún mayor. Para esto se necesita un fuerte diálogo entre los tres niveles de gobierno, donde se fijen las economías de escala pertinentes y se delimite cuáles funciones le quedan mejor a cada nivel de gobierno desempeñar. La regla general en la literatura es que a nivel federal se coordinen los temas que puedan traer beneficio al interior de varias regiones al mismo tiempo como lo son temas de cadenas productivas, y a nivel más local lo que tiene que ver con licencias y permisos de funcionamiento, que tiene que ver más con las especificidades de cada región. Debido a que en México la mayor parte de las ayudas a las Mipymes provienen de fondos federales (Góngora- Biachi et al, s/a), es importante que sea la Federación la que convoque a mejorar el arreglo institucional de los programas que vayan encaminados a fortalecer este sector que tanto aporta a la economía nacional. REFERENCIAS Góngora-Biachi, Gabriel; García-Pérez, Domingo; Madrid, Antonia (s/a). Los programas de apoyo a la pyme en México. Un estudio descriptivo desde la perspectiva de la agencia de desarrollo. España. International Finance Corporation (2008). Municipal Scorecard 2008: Midiendo las barreras administrativas a nivel municipal en América Latina. Washington D.C.: Banco Mundial. Oneto, Andrés (2007). Políticas de apoyo a las pymes. Corporación Andina de Fomento. Venezuela. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico OCDE-. (2007). SMEs in Mexico: Issues and Policies. Paris: OCDE. Saracho, Alberto y Gutiérrez, Carlos (2009). Manual de buenas prácticas para programas de apoyo a pequeñas y medianas empresas. México.