uando respondiste al amor de Dios al invitar a Jesucristo a tu vida, comenzaste un extraordinario recorrido que te conducirá a una maravillosa nueva

Transcripción

1 C C uando respondiste al amor de Dios al invitar a Jesucristo a tu vida, comenzaste un extraordinario recorrido que te conducirá a una maravillosa nueva vida con Dios y su familia. Te damos la bienvenida a este recorrido y la bienvenida a la familia! Una semillita contiene vida con un tremendo potencial. Si esta semillita cae en la tierra adecuada y recibe el cuidado que necesita, se convertirá en una planta grande y producirá frutos maravillosos. Entre la semilla y el fruto, sin embargo, habrá etapas de crecimiento. Lo que ocurre en el mundo natural se aplica también al mundo espiritual. Como un nuevo cristiano, has comenzado una vida que debe ser nutrida hasta alcanzar la madurez. Has comenzado bien. Mantente en el camino! He aquí lo que puedes hacer para crecer fuerte y saludable como creyente en Jesucristo.

2 EXPEC Una historia pensando en ti Jesús contó la historia de un sembrador que regó semillas con la expectativa de tener una gran cosecha. El tema de la historia se refería a que las semillas necesitan buena tierra para poder crecer. En la historia, una parte de las semillas esparcidas por el sembrador cayó junto al camino donde la tierra ya estaba compacta debido a los caminantes que por allí pasaban. Como la tierra estaba muy dura, la semilla no pudo penetrar rápidamente y los pájaros se la comieron. Otra parte de las semillas cayó sobre piedras y tierra poco profunda. La semilla germinó pronto, pero como la tierra era poco profunda, las semillas se secaron y murieron tan pronto salió el sol. Todavía otras semillas cayeron entre espinos. Germinaron, pero los espinos que crecían alrededor de las nuevas plantas las ahogaron. Hubo otras semillas que por fin cayeron en buen terreno, echaron raíces, crecieron fuertes y produjeron una gran cosecha. Jesús contó esta historia pensando en ti. Puedes leerla en el capítulo 13 del libro de Mateo en la Biblia. La semilla de Dios ha sido esparcida en el terreno de tu vida con la expectativa de grandes cosas. Esa semilla echó raíces cuando aceptaste a Jesucristo como tu Salvador. Dios quiere alimentar esa nueva vida en ti para que crezcas fuerte y lleves fruto. Para que así

3 TATIVA suceda, debes continuar proveyendo buen terreno un corazón receptivo en el que Dios pueda desarrollar esta nueva y emocionante vida. A medida que comienzas tu vida de cristiano, qué cambios buenos esperas? A diferencia del camino hecho compacto por los caminantes, tu corazón fue lo suficientemente blando para que la semilla de Dios echara raíces. Qué hizo que te abrieras a la obra de Dios en tu vida? Dedica un minuto para darle gracias a Dios por la nueva vida que ha echado raíces en ti.

4 Dios ha plantado su semilla en ti D D ios trabajaba al margen de tu vida incluso antes de que supieras que a él le importabas. Siempre ha estado presente en las situaciones y acontecimientos de tu vida, esperando que le permitieras plantar una nueva vida en ti. Eso es lo que llamamos gracia. La Biblia dice: «Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios, no por obras, para que nadie se jacte» (Efesios 2:8-9). Cuando aceptaste a Cristo como tu Salvador, Dios te perdonó todos tus pecados pasados. Te adoptó como miembro de su familia. Te dio su Espíritu para que te fortaleciera y te guiara. Te regaló una vida eterna.

5 GR ACIA Estas son cosas que solamente él puede hacer. Son todos regalos de él para ti. Dios continuará su obra en los días venideros y renovará completamente cada aspecto de tu vida. La Biblia dice: «Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!» (2 Corintios 5:17). Algo milagroso ocurre cuando la semilla, el terreno, la humedad y la luz solar se juntan. La vida germina en lugares donde nunca antes hubo señales de ella. Los cambios que se están realizando en tu vida son igualmente milagrosos. Esta vida no es algo que tú hubieras podido generar por cuenta propia. Es tuya por la gracia de Dios. Aprovechando el poder retroceder con la memoria, podrías recordar antes de que fueras cristiano algunos momentos cuando sentiste que la gracia de Dios actuaba por medio de personas e incluso de eventos en tu vida? Según el versículo bíblico de Efesios citado en la página anterior, qué función desempeñan la gracia y la fe en tu salvación?