1 Juan 4. Permaneciendo en Dios y en Su Amor

Transcripción

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3 1 Juan 4 Permaneciendo en Dios y en Su Amor A. El espíritu de verdad y Protección contra el espíritu de error. B. El amor perfeccionado en nosotros. C. La naturaleza de una relación de amor con Dios.

4 C. La naturaleza de una relación de amor con Dios. 1. (12) Viendo a Dios a través de la evidencia del amor. 2. (13-15) La seguridad de la obra de la Trinidad en nosotros. 3. (16) La respuesta del Cristiano a Dios y Su amor. 4. (17-18) El perfeccionamiento del amor, ahora y en la eternidad. 5. (19) La razón de nuestro amor por Jesús. 6. (20-21) El mandamiento a amar.

5 1. (12) Viendo a Dios a través de la evidencia del amor. 12 Nadie ha visto jamás a Dios, pero si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente. 1Ti 1:17 Por tanto, al Rey eterno, inmortal, invisible, al único Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. Juan 4:24 Dios es espíritu

6 Dios permanece entre nosotros Algunas personas piensan que la mayor evidencia de la presencia y obra de Dios es el poder y/o la unción. Algunas personas piensan que la mayor evidencia de la presencia y obra de Dios es la popularidad. Algunas personas piensan que la mayor evidencia de la presencia y obra de Dios es sentimientos y emociones apasionadas. Pero la mayor evidencia de la presencia y obra de Dios es el amor. Donde Dios está presente y obrando, habrá amor.

7 entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente (RV 60 Perfeccionado) Plenamente (RV60) Perfeccionado utiliza la palabra griega teleioo, la cual no significa perfecto sino maduro pleno y completo. Si nosotros nos amamos unos a otros, entonces el amor de Dios es maduro pleno y completo en nosotros. El Cristiano maduro será conocido por el amor.

8 2. (13-15) La seguridad de la obra de la Trinidad en nosotros. 13 Cómo sabemos que permanecemos en él, y que él permanece en nosotros? Porque nos ha dado de su Espíritu. Permanecer en Jesús no es trabajo de una sola parte, nosotros batallamos para permanecer en Él, y el permanece en nosotros. Juan 15:4 Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes.. Juan 15:7 Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes.

9 14 Y nosotros hemos visto y declaramos que el Padre envió a su Hijo para ser el Salvador del mundo. testigos de Su presencia, ellos vieron, es decir, fueron testigos oculares (1 Jn1:1)

10 15 Si alguien reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. Juan declara tres verdades esenciales sobre quién es Dios y cómo nos salva. (1) Que el Padre ha enviado a su Hijo. (2) Que Él hijo fue enviado como el Salvador del mundo (3) Saber y conocer que Jesús es el fundamento para permanecer en Él (Todo aquel que reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios.) Se puede saber algo sin estar de acuerdo con ello, pero reconocer implica creer todo de El.

11 3. (16) La respuesta del Cristiano a Dios y Su amor. 16 Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.

12 De eso es de lo que se trata tener comunión con Dios. La personas responden a Dios de diferentes maneras. Algunos responden con un sentido de superioridad ( Soy tan grandioso, hasta Dios me ama! ) Algunos responden con duda ( Puede Dios amarme verdaderamente? ) Algunos responden con maldad ( Dios me ama, así que puedo hacer lo que se me dé la gana. ) Dios quiere que respondamos conociendo y reconociendo con humildad (por experiencia) y creyendo el amor que Dios tiene para con nosotros.

13 4. (17-18) El perfeccionamiento del amor, ahora y en la eternidad. 17 Ese amor se manifiesta plenamente entre nosotros para que en el día del juicio comparezcamos con toda confianza, porque en este mundo hemos vivido como vivió Jesús. En el amor no hay temor,

14 Puede que sepas ahora que eres un pecador, pero realmente lo sabrás en el día del juicio. Puede que sepas ahora que por ti mismo no eres mejor que aquellos que van a ir al infierno; pero realmente lo sabrás en el día del juicio. Puede que sepas ahora la realidad del infierno; pero realmente la sabrás en el día del juicio. Puede que sepas ahora de la grandeza de la salvación de Jesús; pero realmente la sabrás en el día del juicio.

15 18 sino que el amor perfecto echa fuera el temor. El que teme espera el castigo, así que no ha sido perfeccionado en el amor. Eclesiastés 12:13 y 1 Pedro 2:17, nos dice que debemos temer a Dios. El temor del cual Juan está hablando aquí, no es la reverencia que debemos tener a Dios, sino el tipo de temor que involucra tormento ese tipo de temor agonizante que roba a nuestra alma todo gozo y confianza delante de Dios. Es el temor opuesto a la confianza en el día del juicio.

16 5. (19) La razón de nuestro amor por Jesús. 19 Nosotros amamos a Dios porque él nos amó primero. si un hombre no ama a Dios, tampoco es nacido de Dios. Este versículo nos dice el por qué amamos a Jesús, y cómo podemos amarle más.

17 Jesús te amaba cuando vivías descuidadamente, cuando rechazabas su palabra, cuando tu rodilla no se doblaba en oración. Ah! Él amó a algunos de ustedes cuando estaban en la pista de baile, en el teatro o aun en el burdel. Él te amó cuando estabas en la puerta del infierno y tomabas condenación en cada sequía. Él te amó cuando no podías haber estado peor o más lejos de Él. Maravilloso, oh Cristo, es tu amor! (Spurgeon)

18 6. (20-21) El mandamiento a amar. 20 Si alguien afirma: «Yo amo a Dios», pero odia a su hermano, es un mentiroso; pues el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios, a quien no ha visto. Se puede conocer la Palabra, nunca faltar a un servicio, orar fervientemente y demostrar tener dones del Espíritu. Sin embargo, en todo eso se puede ser como Caín, quien ofreció a Dios el fruto de sus manos y no el fruto del Espíritu. Después odió a su hermano hasta matarlo!

19 Jua 13:35 De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros.

20 21 Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano. Cómo puedo amar a un Dios que es invisible? Dios nos diría, Aprende a amarme, a quien no puedes ver, amando a Mis hijos, a quienes puedes ver.

21 Mat 5:23»Por lo tanto, si estás presentando tu ofrenda en el altar y allí recuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, 24 deja tu ofrenda allí delante del altar. Ve primero y reconcíliate con tu hermano; luego vuelve y presenta tu ofrenda.

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