justicia congelada 3 de agosto 2007 índigo

Transcripción

1 44 No. 44 DEL 3 AL 9 DE agosto DE 2007 nuevo león justicia congelada La imparcialidad del sistema judicial está en duda. Investigaciones que no coinciden con peritajes, averiguaciones que no avanzan... El caso de la controvertida muerte de Nora Hilda Vidales, todavía insoluto, es un ejemplo. Analicemos.

2 U Por hugo gutiérrez na fiscalía especializada, claras huellas de violencia y la existencia de una póliza de seguro por unos 20 millones de pesos, no han podido evitar la parálisis de la Procuraduría del Estado en el caso de la muerte de Nora Hilda Vidales Zamora en El Ministerio Público especializado para el caso mantiene congeladas las investigaciones que un magistrado ordenó reabrir después de que la Procuraduría había declarado el inejercicio de la acción penal, porque consideró que se trataba de una muerte accidental.

3 Elaboraron 11 hipótesis de cómo pudo haber caído en el baño de su casa. peritajes externos Según la fiscalía que llevó el caso en su parte inicial, Nora Hilda se encontraba en el baño de su casa, en Palmas 438 de la colonia Potrero Anáhuac, en San Nicolás, cuando se resbaló y cayó hacia atrás, golpeándose la cabeza contra el borde superior de la taza del inodoro. En el baño, que apenas mide 1.28 por 2.25 metros, el peritaje inicial de la Procuraduría constató que los cabellos de Nora Hilda quedaron en el borde del inodoro, pero también en el agua del interior del sanitario. El Ministerio Público consideró que esa muestra era irrelevante, pero dos peritajes externos a la Procuraduría establecen que esos cabellos sólo pudieron llegar al interior porque la cabeza de la hoy occisa estuvo dentro del inodoro. Pero ésa es sólo la primera duda en torno a la supuesta caída. Las conclusiones de los dos peritajes ordenados luego de la reapertura del caso, uno del servicio de Medicina Forense de la Procuraduría de Tamaulipas, el otro de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica de la Universidad Autónoma de Nuevo León, determinaron que no existe posibilidad alguna de que la mujer haya sufrido las lesiones al resbalarse en el baño. El estudio biomecánico de la Universidad dice que ni la velocidad de la caída, ni la fuerza del golpe sobre el borde de la taza del inodoro pudieron generar el impacto necesario para provocar la fractura del cráneo, lesión que causó la muerte de Nora Hilda. El doctor en ingeniería Javier Pérez Unzueta, quien firma el peritaje, elaboró 11 hipótesis sobre cómo pudo haber caído Nora Hilda. Sin embargo, todas fueron desechadas porque las pruebas biomecánicas de velocidad y fuerza demostraron Cuando murió Nora Hilda, el 29 de noviembre de 2003, la fiscalía determinó, en sólo dos días, que se trató de un accidente. Cuando el caso llegó a un Tribunal Colegiado, éste ordenó la reapertura del expediente y se solicitaron dos peritajes externos a la Procuraduría del Estado.

4 biomecánica de una muerte La caída pudo generar el hematoma en el temporal derecho, mas no la fisura en la parte posterior izquierda. El peritaje de la Universidad de Nuevo León es un estudio de biomecánica que realizó la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica. Sus conclusiones son que Nora Hilda no pudo morir de una caída en el baño de su casa. que era imposible que una caída en esas condiciones hubiera causado una fractura craneal. Un golpe se ubicó en el temporal (costado) derecho del cráneo y otro, el de la fractura de entre 4 y 5 centímetros, en el occipital (parte posterior) izquierdo. El perito señala que una caída pudo generar el hematoma en el temporal, mas no la fisura en la parte posterior izquierda. El estudio especifica que aplicando las ecuaciones de mecánica clásica, el cráneo en caída libre, suponiendo una acción de desvanecimiento o desmayo, produce una fuerza de 39.5 Newtons casi 4 kilogramos de fuerza, potencia que no es suficiente para producir dos heridas cortocontusas en la región occipital del cráneo. Agrega que al practicar las ecuaciones de mecánica de contacto sobre el borde del inodoro, no existe concordancia entre las heridas del cuerpo de Nora Hilda y la posibilidad de una caída accidental. Y aun con estas conclusiones, que fueron generadas por ecuaciones matemáticas y con pruebas hechas con un cráneo original en el lugar de la muerte de la mujer, la Procuraduría del Estado no ha promovido nuevas diligencias por parte de la fiscalía especializada. El peritaje del Servicio Forense de la Procuraduría de Tamaulipas, firmado por el doctor José Guadalupe Tijerina Bermúdez y entregado a la juez 8º de Distrito, Luisa Yolanda Salazar Llamas, coincide con el estudio de biomecánica de la Universidad. Incluso, la juez interrogó al perito. En la pregunta número cuatro de la diligencia, se le cuestionó al médico forense, Tijerina Bermúdez, que si al ver las fotografías del peritaje inicial de la Procuraduría de Nuevo León, consideraba que

5 La Ecuación del golpe A través de una ecuación, el peritaje de la Universidad de Nuevo León resolvió que la caída de la altura de Nora Hilda, de 1.59 metros, no puede provocar una fractura en los huesos craneales, que fue la lesión que causó su muerte. Nora Hilda fue víctima de agresiones físicas antes de su muerte. La respuesta del perito es contundente: Sin lugar a dudas sí. El médico de la Procuraduría de Tamaulipas respondió que los hematomas que la mujer presentó en la cadera no fueron causados por un golpe, sino por compresión. Es decir, que alguien la presionó violentamente cuando ella estaba acostada. Todas estas pruebas no sólo debieran terminar con la parálisis de la Procuraduría del Estado para que su fiscalía especial continúe con las investigaciones, sino que deberían además originar una investigación de los ministerios públicos. Quizás en Nuevo León la diosa de la justicia, Themis, no tiene una banda sobre sus ojos y la imparcialidad sólo es una apariencia. Como este caso, existen otros más en el estado. Ya sea por inmovilidad en las averiguaciones o por inclinar la balanza de la equidad hacia un actor específico, algunas investigaciones no avanzan o están muy lejos de la espada de la justicia. conclusiones de peritaje No existe duda, sólo en la Procuraduría, de que la herida en la cabeza no pudo ser causada por un resbalón junto a la regadera de su casa. La profundidad de la lesión indica que no fue causada con el borde del inodoro, además de que los hematomas en el resto del cuerpo son evidencia de un ataque violento en su contra.

6 última Una cualidad de la justicia es hacerla pronto y sin dilaciones; hacerla esperar es injusticia. Jeon de la Bruyere ( ) escritor frances