Porque nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde aguardamos ardientemente al Salvador, al Señor Jesucristo, FIL3:20

Transcripción

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2 Porque nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde aguardamos ardientemente al Salvador, al Señor Jesucristo, FIL3:20

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4 diciendo el tiempo se ha cumplido y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el Evangelio ) Mt. 4:17

5 Primero, el tiempo ; es el tiempo Kairos, fijo, apropiado, definido, en que Dios planeó revelar a su hijo al mundo (Gá cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envío a su Hijo ). segunda, es una dimensión de decisión ponga su vida, habla de una carácter, el nivel que se manifiesta en dar, entregarse, y rendirse en sacrificio,

6 Tercero, nos pide arrepentíos ; hagamos un cambio de orientación, pensamiento, mentalidad, arrepentíos ; que reconsideremos lo que hemos vivido hasta aquí y piensen diferente

7 Si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos (Mateo 18:3)

8 1. Jesús, nos ilustra volverse : La palabra volvéis ; habla de girar, darse, la vuelta, torcer hacia el otro lado, transformar una cosa en otra

9 2. Jesús promete bendición: Cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel... y heredaréis la vida eterna.

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11 Hay que destacar que el compromiso empieza por Jesús. Él ha cambiado nuestra condición de valor delante de Dios. Ef 2:11-18

12 Así pues ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino que sois conciudadanos con los santos y miembros de la familia de Dios, Ef 2:19

13 Primero, que bueno es saber, que para Dios, ya no somos extranjeros ; segundo Pablo ahora dice de nosotros; sois conciudadanos ; como si fuera de la misma nación o región, se le puede llamar un paisano o compatriota.

14 Tercero, Santo, vine, dice: significa separado, y por ello, en la Escritura, en su sentido moral y espiritual, separado del pecado y por lo tanto consagrado a Dios, sagrado....

15 Cuarto; miembros de la familia de Dios, se refiere a personas o miembros de una misma casa (Gá.6:10). Quinto, habla de la nueva naturaleza de la iglesia, ya no es un edificio, sino las personas de todos los tiempos (A.T. y N.T.)

16 Sexto; todos somos edificados ; preparados para el crecimiento, no para el estancamiento; para participar de la morada de Dios en el Espíritu.

17 Es la forma en que Pablo nos dice que la condición de la iglesia ha cambiado delante de Dios y ahora se espera que como miembros de la familia de Dios y de su reino, aprendamos a vivir de manera sobrenatural, en las nuevas condiciones del reino.

18 1. VALOR DEL REINO: Mt El cristianismo actual ha perdido el valor del reino. El mercader de la Biblia, lo deja todo por Cristo. Habla de unos contrastes con el pensamiento humano, en cuanto descubre un tesoro y cuando nosotros descubrimos el valor del reino de los cielos.

19 primero, una persona por casualidad descubre algo tremendamente valioso. segundo la persona vende todo lo que tienen a fin de conseguirla. Según Jesús es así cuando uno descubre el valor del reino de los cielos.

20 Tercero, esta parábola muestra la oportunidad, de aprovechar lo que se da una sola vez en la vida, y a hacerlo de inmediato.

21 Así es el reino de los cielos, cuando descubrimos el valor que tiene para nuestra vida, estamos dispuestos a dar o quitar todo lo que impida disfrutar de las bendiciones del reino.

22 2. EL COSTO DEL REINO: Lc. 14:25-27; 28-30; a. El amor por la familia: (v, 25-27). Habla de prioridades; y hay que entender que el Señor, no está enseñando a aborrecer a sus padres o parientes, sino que el amor por el señor, sea superior al que sentimos por nuestra familia.

23 b. El amor por las cosas materiales: (v, 28-30) Habla de prudencia y sabiduría. Si le está diciendo que ser un discípulo de él, tendrá sus demandas y dificultades.

24 c. El amor por el éxito: (v, 31-33) La batalla y la guerra en el reino está asegurada. No hay manera de caminar en la fe, o de correr, más que de rodillas.

25 El éxito de las batallas espirituales, solo se ganan en oración.

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