Que tal amigos, si ya encontraron el pasaje de este día, vamos a darle lectura:

Transcripción

1 Mateo 6:2-9 Por Chuck Smith Que tal amigos, si ya encontraron el pasaje de este día, vamos a darle lectura: Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. (Mateo6:2). He visto servicios en los que el evangelista ha dicho Ahora Dios me ha revelado, quiero quince en los que Dios haya estado hablando a su corazón ahora, para darme esos miles de dólares. Quiero que se pongan de pie, sabe a que me refiero?. Ahora, en lo que respecta a Dios, no recibirá recompensa de parte de Dios por esos miles de dólares que ud. acaba de ofrendar. Usted ya tiene su recompensa porque en algún sentido Ud. ha hecho tocar la trompeta. Ha hecho una escena pública de su ofrenda, y todos saben cuán generoso es Ud. Se ha puesto en pie, recibió el aplauso del público, así que disfrútelo bien, porque será toda la recompensa que Ud. obtenga. Para mí esto es en verdad trágico y triste, el hecho de que haya muchas personas que alientan a otras a dar con esa clase de motivación, porque aún al recibir los fondos de las personas, usándolos como motivación, detrás de ello están robándole a la gente ese galardón que Dios les daría por la ofrenda que han realizado. Y yo creo que los evangelistas son responsables. Lo deberían saber mejor que nadie. Las ovejas con frecuencia son crédulas, y no lo entienden bien, pero aquellos que reciben el dinero de ese modo lo debieran saber bien y por ello son responsables. El Señor dijo que no debía usted dar con jactancia, de modo que sea visto de los hombres. No hacer un desfile, no hacer una gran cosa por lo que usted le ha dado a Dios. Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha (Mateo6:3): 1

2 Solo de, no haga todo un asunto de ello. para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público (Mateo6:4). Así que nuestra ofrenda debe ser simple, con simplicidad. Nuestra ofrenda a Dios, nos dice Pablo en la epístola a los Corintios, nunca será siendo constreñidos o por presión. Nunca deberíamos sentirnos presionados de dar a Dios. Dios no quiere personas que den motivadas por la presión que se ejerza sobre ellos. Oh, aquí está el comité financiero tocando a la puerta. Vienen a buscar nuestro tributo anual. Oh no!! que vamos a decir esta vez? Se da cuenta?, por supuesto estoy bajo presión. Aquí están estas personas importantes, está el banquero, el abogado, el doctor, ve?, están todos ellos allí y yo estoy en la silla y esta me quema porque tengo que hacer mi pago a la iglesia para este año. Y todos estos sujetos van a saber cuanto es que voy a poner. No quiero parecer un miserable. Y entonces, Qué es lo que voy a hacer? Siento la presión y digo Bueno, este año pienso que vamos a esforzarnos y dar mil dólares a la iglesia. Mil dólares a la Iglesia?!!, bueno, usted sabe que realmente estamos queriendo agregar algunos programas a la iglesia así que necesitamos en verdad Bueno, tal vez pueda dar un poco más, Se da cuenta?. Así que después viene el primer mes y debo 100 dólares y Oh no, no tengo para pagar los 100 dólares. Pero tengo que hacerlo, prometí que lo iba a hacer. Y cada mes me veo rechinando mis dientes, y esforzándome tratando de dar mi tributo, y me quejo por ello, y estoy desilusionado. Hey, Hey. Dios no aprecia nada de lo que le dé a El quejándose. Sería mucho mejor para usted no dar, que hacerlo y quejarse. Deje que piensen que está apretado de dinero, deje que piensen que no es benevolente, que piensen lo que quieran, pero no le de a Dios porque lo presionan a hacerlo. Pablo dijo, Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Lo que sea que usted pueda 2

3 dar a Dios alegremente, déselo. Lo que usted no puede dar alegremente, guárdelo. Dios no lo quiere, el no lo necesita. Por lo tanto, el dar a Dios debe ser siempre una asunto personal entre el Señor y nosotros, y es algo que hacemos porque amamos al Señor y estamos motivados por nuestro amor a El, pero no estamos buscando el favor del hombre, ni estamos buscando recibir del hombre grandes elogios por causa de nuestra generosidad y dádivas a Dios. Ahora entonces viene la pregunta acerca de los sobres de diezmo. Es necesario para los propósitos de la tesorería. Se completan cheques o se llenan los datos en un sobre de lo cual debemos mantener un registro en caso de que se hagan preguntas de parte del gobierno en cuanto a las ofrendas. Pero estos archivos son estrictamente confidenciales. Están entre usted y el Señor. Y esas son cosas que nosotros se las enviámos, su recibo, al final del año, y es algo entre ud y el Señor solamente. Ni siquiera yo sé acerca de ello. No me interesa indagar esos archivos. No me preocupa. Es algo entre Ud. Y el Señor, es personal. Y queremos mantener las ofrendas en la forma más personal posible. Así que su ofrenda, que sea con simplicidad, que salga de un corazón alegre, y que sea motivada por su amor al Señor, y no por su deseo de ser visto de los hombres. Siguiendo la lectura en el verso 5 dice: Y cuando ores (Mateo6:5), Hay una modo equivocado y un modo correcto de orar no seas como los hipócritas; porque ellos aman el orar en pie en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos de los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. (Mateo6:5). Ahora bien, la oración era algo importante en la vida de un judío. Dos veces al día el tenía que decir el Shemá, la cual constaba de tres secciones de escrituras del Antiguo Testamento comenzando por Deuteronomio 6, Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de 3

4 toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y esa era la primera cosa que tenía que decir por la mañana, y la última cosa que tenía que decir en la noche. El debía decirlo antes de las 9 en la mañana y antes de las 21hs a la noche, Tenía que repetir el Shemá que debía decir dos veces al día. Después había una segunda forma de oraciones, las Shmoná. Estas son de hecho 18 oraciones separadas luego ellos llevaron el número a 19, pero mantuvieron la palabra Shmoná que significa dieciocho. Habían dieciocho oraciones que ellos memorizarían como un niño, y debían decirlas tres veces al día: a las nueve de la mañana, a las 12 del mediodía, y a las tres de la tarde. Debido a que ellos tenían que decir las mismas oraciones cada día, mañana, tarde y noche, esto se transformó en una costumbre, como todo lo que, como usted sabe, hacemos por costumbre, y se convirtió en algo sin sentido para muchos de ellos. Déjeme que le explique algo, es como un deber, Tengo que hacerlo, así que usted se apura con estas oraciones diciéndolas tan rápido como puede. Es un deber tengo que hacerlo, son las 9 en punto, y bien ahí vamos..se apura para decirlas Luego son las 12 en punto, tiempo de hacerlo de nuevo y se apura para decir las mismas dieciocho oraciones. Ahora, con ese trasfondo, había aquellos que se harían tiempo, de modo que cuando llegaban las 9 en punto de la mañana, ellos estuviesen en un lugar prominente en la esquina. Bien llegaron las 9, la mantilla por encima, envolviéndose y así van a través de las 18 oraciones. Todos dicen No es asombroso? Se ha detenido justo en medio de su tan ocupado día, allí en la calle, en la esquina para atender a las 18 oraciones, oh!! El debe ser una persona espiritual, y es posible que mientras que está yendo a través de las dieciocho oraciones esté pensando Oh, se que me están mirando y saben cuan espiritual soy. Saben que soy un hombre santo. No es esto glorioso? Que todos sepan cuan justo soy. Mmm, Señor Gracias, se da cuenta? Ahora bien, todo lo que repitamos una y otra vez, las mismas palabras, se pueden transformar en insignificantes. Instalamos esos pequeños grupos de 4

5 patrones en nuestro cerebro y todo lo que tenemos que hacer es sintonizar ese canal en particular y apretar el botón y lo podemos decir sin siquiera pensarlo. Ahora me voy a acostar, Oro al Señor que guarde mi alma. Si muero antes de despertar, ruego al Señor que tome mi alma, le resulta familiar?. Quiero decir, presiona el botón y en marcha. Es como algo que está programado en usted. Dios es grandioso, Dios es bueno, te agradecemos, Padre, por los alimentos, amen Y usted puede que este pensando en algo más mientras dice estas palabras. No siempre es necesario estar pensando sobre lo que estoy diciendo, porque puedo decir las palabras en forma mecánica mientras pienso en otra cosa. Y por lo tanto las oraciones se transforman en vanas repeticiones de frases. De modo que, primero cuando vaya a orar no he de buscar un lugar prominente así todos verán que soy una persona de oración. Escuché de la reputación de un ministro. Todos dijeron Oh, es un hombre de oración. Yo estaba ansioso de conocer a este sujeto porque había escuchado acerca de su reputación de ser un hombre de oración. Y así fue que estaba yo en un colonia de verano hablando, y el estaba en el mismo sitio que yo. Y averigüé como fue que el obtuvo su reputación como hombre de oración. Cada mañana a las 6 de la mañana, en la capilla, usted podía escuchar a este hombre orar; por todo el barrio podía oírle orando. Desde las 6.00 a las 7.00, le escuchaba orar en la capilla, clamando al Señor. Y con frecuencia me pregunté, Será que Dios quiere que nosotros tengamos la reputación de un hombre de oración? Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta,(c) ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. (Mateo6:6). No me sorprendería, pero la recompensa que ese hombre obtuvo de su vida de oración, no es el hecho de que tenía una reputación tremenda de ser un hombre de oración? Y el ama esa reputación, hace todo para mantenerla viva, orando en tal forma que todos noten el hecho de que está orando. 5

6 Tenemos que ser cuidadosos en cuanto a la motivación, aún en la oración, lo que yo oro es probado por la motivación. Santiago dijo no tenéis lo que deseáis, porque no pedís, y luego añade, Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. En otras palabras, es posible para mí que aún tenga la motivación incorrecta para orar lo que estoy orando. La motivación es algo importante y ello es por lo que la Biblia dice Que todo hombre se examine a sí mismo, porque si nos juzgamos a nosotros mismos no seremos juzgados de Dios. Y está bien examinar, Porqué hice aquello? Bien, no siempre lo se, También es posible que yo me engañe a mí mismo. El rey David, se dio cuenta de la posibilidad de engañarse a sí mismo, en lo concerniente a motivaciones personales, y dijo, Señor, Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. El dice, Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí (no lo puedo alcanzar, realmente no me conozco); Alto es, no lo puedo comprender. Y así concluye el salmo diciendo, Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno. Oh Dios examíname. Muéstrame, revela Tú lo que está en mí corazón porque puedo estar engañándome a mí mismo. A Dios no lo puedo engañar, puesto que El escudriña mi corazón, lo que reina en él. Dios conoce que motivos están detrás de cada cosa que hago. Y Dios sabe que no quiero malgastar mi tiempo. Si lo he de hacer, lo quiero hacer con la motivación correcta y quiero recibir las recompensas del Señor al hacerlo. Y así en nuestras oraciones, seamos cuidadosos que no busquemos orar atrayendo atención hacia nosotros u orar para impresionar a las personas para que esas oraciones sean vistas de los hombres. La idea detrás de esto es que estamos tratando de impresionar a las personas. Tenga cuidado usted de no tender a impresionar a la gente; sino que pretenda impresionar a Dios. Vaya a su cuarto, cierre la puerta. Y su padre que ve en secreto le recompensará en público 6

7 La segunda negativa es, Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles [Como hacían en aquellos días], que piensan que por su palabrería serán oídos. (Mateo6:7). Cuando venga a Dios, siéntese, declare sus problemas a El, abra su corazón a El, deje todo delante de Dios, y sea breve, conciso. No es ni lo largo de la oración ni el tiempo empleado en la oración lo que hace que la misma sea válida. Las oraciones registradas en la Biblia, son todas muy cortas. Así que muchas veces pensamos que las oraciones no se convierten en algo realmente efectivo, en tanto no nos postramos sobre nuestras rodillas por una hora. No hay sentido en simplemente llenar el tiempo con pequeñas frases estereotipadas e insignificantes cuando estoy hablando con Dios. porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis. (Mateo6:8). La oración no es tiempo de información donde yo le informo a Dios de todo lo que está yendo mal en mi vida diaria. Dios conoce todas las cosas que han ido mal. No tengo que repasárselo a El, ni tengo que ir a través de una larga lista de mis necesidades. Dios conoce lo que necesito antes de que se lo pida. Y así que no use vanas repeticiones solo para llenar el tiempo. Los paganos o gentiles piensan que serán oídos por su palabrería, pero no se trata del mucho hablar. Ahora Jesús nos hizo provisión de la oración modelo. Es trágico que muchas personas hayan tomado esta oración modelo y la usen como vana repetición. Y es así que dicen esta oración modelo una y otra y otra vez, que no son sino vanas repeticiones, precisamente lo que Jesús denunció, pensar de que será escuchado por lo mucho que habla. No, estimado amigo, no será escuchado. Y solo el repetir el Padre Nuestro de memoria realmente no tiene 7

8 valor. Tiene mucho valor si usted la toma lentamente, frase a frase, piensa y medita sobre ella. Pero básicamente, el nos está dando un modelo de oración. Y al darnos El este modelo de oración, tenemos que saber primeramente que la oración es siempre dependiente de nuestra relación, y por lo tanto es significativo que la oración se abre expresando la relación que tenemos con Dios. Leamos en Mateo cap. 6 verso 9 Padre Nuestro Ahora, si el no es su Padre, no tiene derecho a llamarlo así. En el cap. 9 del evangelio de Juan vemos que el ciego dijo a los Fariseos cuando le estaban desafiando en cuanto a como había sido sanado, : Bueno, este hombre vino y puso sus manos sobre mí y puedo ver. Ellos dijeron Da la Gloria a Dios. En lo que concierne a este hombre no sabemos nada acerca de el. El dijo, No es algo maraviolloso? Aquí está alguien del cual no conocemos nada y Jesús está abriéndo los ojos al ciego. Haciendo la obra del Mesías. Y ellos se enojaron con ese hombre que habra dicho, Hey, sabemos que Dios no oye las plegarias de los pecadores. Quiero decir, debe estar haciendo algo bien si Dios contestó Sus oraciones. Note ahora por favor, que esto no es una verdad necesariamente bíblica. Esto es una declaración de un hombre ciego a los fariseos, porque en verdad Dios oye las oraciones de los pecadores. Una oración al menos Dios, ten piedad de mí, un pecador. Gracias a Dios el oye esa oración. David dijo Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, El Señor no me habría escuchado. Esa otra verdad divina: no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios Esa es una verdad divina. El pecado separa al hombre de Dios. Sin embargo hay una relación 8

9 involucrada en la oración, es la de un niño viniendo al Padre. Soy un hijo de Dios por medio de mi fe en Cristo Jesús. Por lo tanto puedo decir Padre. Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. (Mateo6:9). 9