CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: San Salvador, a las once horas de cuatro de junio de dos mil trece.

Transcripción

1 CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: San Salvador, a las once horas de cuatro de junio de dos mil trece. Por recibido el oficio número 2014, de fecha veintiocho de mayo recién pasado, procedente del Juzgado de lo Civil de San Marcos, juntamente con el Proceso Civil Ejecutivo promovido por Alcaldía Municipal de la ciudad de Santo Tomás, por medio de su apoderada licenciada Delmy Aracely A.C., contra ADMINISTRACIÓN NACIONAL DE ACUEDUCTOS Y ALCANTARILLADOS, por medio de su representante legal Ingeniero Marco Antonio Fortín Huezo, constando de ciento noventa y seis folios útiles, escrito suscrito por las licenciadas Esmeralda Marleny L.D.C e Ivette Carolina M.C. y documentos que mencionan. Agréguese el escrito suscrito por la licenciada Delmy Aracely A.C.. Respecto del recurso de apelación interpuesto por las licenciadas Esmeralda Marleny L.D.C e Ivette Carolina M.C., este Tribunal formula las siguientes consideraciones: I. ASPECTOS PREVIOS. 1. La apelación es un recurso que tiene por finalidad el re-examen de las infracciones procesales y sustantivas contra resoluciones de primera instancia, a través de un procedimiento único con el que el tribunal competente (ad quem) ejercita una potestad de jurisdicción similar a la desplegada por el órgano inferior (a quo). Es un remedio procesal encaminado a lograr que un órgano superior en grado, en relación al que dictó una resolución que se estima es injusta, la anule, revoque o reforme total o parcialmente. 2. Dicho recurso encuentra su asidero legal en el Art. 508 CPCM, el cual a su letra REZA: Serán recurribles en apelación las sentencias y los autos que, en primera Instancia, pongan fin al proceso, así como las resoluciones que la ley señale expresamente. II. DE LA APELACIÓN INTERPUESTA. Las abogadas L.D.C y M.C., en su escrito de mérito manifiestan que interponen recurso de apelación de la sentencia pronunciada por la señora Jueza de lo Civil de San Marcos, a las nueve horas de dos de mayo del corriente año, mediante la cual se desestimó parcialmente la pretensión contenida en la demanda III. ANALISIS Y CONCLUSIONES. 1. De lo establecido en el Art. 508 CPCM, transcrito anteriormente se infiere que sólo puede interponerse recurso de apelación de las sentencias y autos definitivos, salvo los casos en que expresamente se establezca dicho recurso para otra clase de resoluciones; en el caso de autos

2 nos encontramos frente a la sentencia, a la que la ley expresamente ha otorgado recurso de apelación. 2. No obstante lo anterior, junto con el escrito de apelación, las abogadas de la parte apelante acompañaron dos constancias médicas de la Clínica Empresarial de ANDA, emitidas por las doctoras Ivania Lissette Arteaga de Portillo y Jacqueline Menéndez de Gil, con números de vigilancia de la profesión médica A-2974 y 85 50, respectivamente, en las cuales se hizo constar que la licenciada Esmeralda Marleny C.L.L., (sic) recibió tres días de incapacidad comprendidos del veintidos de mayo de presente año al veinticuatro de los mismos y la licenciada Ivett Carolina M.C. cinco días de incapacidad comprendidos del veinte al veinticuatro de mayo recién pasado, argumentando que por dicho motivo les fue imposible presentar en tiempo o término legal el recurso de apelación, manifestando tener justa causa en base al Art. 146 CPCM por estar impedidas de salud física. 3. En relación a lo alegado por las recurrentes, esta Cámara considera oportuno referir lo siguiente: A. Las abogadas L.D.C y M.C., a fin de probar la justa causa que según dicen les impidió presentar en tiempo su recurso, acompañaron a su escrito las constancias médicas a que se hizo referencia en el párrafo anterior, pretendiendo probar con ellas que se encontraban incapacitadas por adolecer de la enfermedad que se menciona en las mismas dentro del término concedido para interponer el recurso. B. A juicio de este Tribunal, las abogadas L.D.C y M.C. no han probado la justa causa que alegan, puesto que el hecho de que se les diagnosticó Rinofaringitis Aguda Severa y Lumbago Severo, no demuestra que conlleve fuerza mayor o caso fortuito, a que se refiere el Art. 146 CPCM, que literalmente reza: Al impedido por justa causa no le corre plazo desde el momento en que se configura el impedimento y hasta su cese. Se considera justa causa la que provenga de fuerza mayor o de caso fortuito, que coloque a la parte en la imposibilidad de realizar el acto por sí. (Subrayado es nuestro); pues si se les hacía difícil hacerse presentes al juzgado A quo, a presentar su escrito de apelación conforme a la ley, bien pudieron hacerlo llegar al respectivo Juzgado remitiéndolo con persona de su confianza dentro del término legal, conforme al Art. 54 de la Ley de Notariado, demostrando de esa manera cuidado y diligencia en su mandato, ya que la presentación de los escritos no es un acto que la parte deba realizar por sí misma; es más, con la vista del aludido escrito se evidencia que finalmente el recurso de mérito

3 no fue presentado por ellas, afirmando en tal sentido lo antes analizado. C. Además, se hace notar a las abogadas L.D.C y M.C., que el plazo para la interposición del recurso comenzó a correr del día veinte de mayo del año en curso y finalizó el veinticuatro de los mismos, siendo hasta el día veintidós (tercer día del plazo) que se le hizo el referido diagnóstico a la abogada Esmeralda Marleny L.D.C; por lo tanto, como mandataria, dicha profesional debió emplear en la ejecución de su mandato el esmero de un buen padre de familia, lo que desde la óptica jurídica, se erige como el modelo de la diligencia que debe ponerse en los negocios encomendados, como por ejemplo, no esperar hasta el último día del plazo legal. En tal sentido, pues, se evidencia que con tal proceder, dichas profesionales no estuvieron prestas, ni pendientes de las actuaciones en el proceso de mérito. Arts. 42 Incisos tres y cuatro, y 1889 Inc. dos C.C. 4. En tal sentido, de conformidad al inciso uno del Art. 511 CPCM encontramos que: El recurso de apelación deberá presentarse ante el juez que dictó la resolución impugnada, y a más tardar dentro del plazo de cinco días contados a partir del siguiente, al de la comunicación de aquélla. Asimismo, los incisos uno y dos del Art. 145 CPCM, establecen: Los plazos establecidos para las partes comenzarán, para cada una de ellas, el día siguiente al de la respectiva notificación, salvo que, por disposición legal o por la naturaleza de la actividad que haya de cumplirse, tengan el carácter de comunes, en cuyo caso aquéllos comenzarán a correr el día siguiente al de la última notificación. En los plazos fijados en días sólo se contarán los hábiles. Por su parte, en el mismo sentido el Art. 143 CPCM dice: Los plazos conferidos a las partes para realizar los actos procesales son perentorios e improrrogables, salvo disposición en contrario. Las disposiciones legales anteriormente transcritas evidencian el ámbito procesal de aplicación del recurso de alzada, por lo cual se torna imperativo dilucidar si el recurso de apelación interpuesto se enmarca o no dentro de tales disposiciones. 5. En el caso que nos ocupa, se hace notar que la sentencia que corre agregada de fs. 178 a 185 p.p., le fue notificada a las impetrantes, el día dieciséis de mayo del corriente año (fs. 186 p.p.), por medio de telefax, por lo que conforme a lo dispuesto en el Art. 178 CPCM, la notificación se tiene por realizada veinticuatro horas después del envío, es decir, que el plazo

4 empezó a correr a partir del día veinte, y hasta el día veintisiete del mismo mes y año, las interesadas interpusierón recurso de apelación ante el Tribunal respectivo, o sea al sexto día hábil, contados a partir del día siguiente de la notificación, si bien la ley concede este derecho, el mismo está limitado en el tiempo, resguardándose así el principio de legalidad y de seguridad jurídica, por lo que el plazo para la interposición del recurso de apelación establecido en el Art. 511 CPCM, que es de cinco días, por disposición expresa es perentorio e improrrogable, sin que se haya demostrado la existencia de un justo impedimento para no cumplir con tal exigencia, pues el hecho alegado a que se hizo referencia no lo constituye. 6. Consecuentemente, se evidencia que la alzada fue interpuesta fuera del plazo señalado por la ley, debiendo rechazarse el mismo, por haber precluído la oportunidad para hacerlo, siendo extemporáneo; y así deberá declararse. 7. En virtud que se denegará la admisión de la alzada y para los efectos del Art. 513 CPCM, considera esta Cámara que en el sub júdice no existe abuso del derecho por parte del recurrente, puesto que el recurso de apelación, se interpuso de una resolución apelable, y que no obstante ser extemporáneo, esta cualidad deviene de un error excusable. En consecuencia, de conformidad a las razones expuesta y disposiciones legales citadas, se RESUELVE: 1) DECLÁRASE INADMISIBLE, por extemporáneo, el recurso de apelación interpuesto por las licenciadas Esmeralda Marleny L.D.C e Ivette Carolina M.C., como apoderadas de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados, (ANDA) habida cuenta de las consideraciones anteriores; 2) Omítase la imposición de multa a que se refiere la parte final del inciso primero del Art. 513 CPCM, en base a las razones expuestas; y, 3) Notifíquese a la apelante y apelada en los números de telefax proporcionados para tal efecto en escritos de fs. 112 a 115 p.p. y 1 a 11 p.p, respectivamente. 4) Sobre lo solicitado por la licenciada A.C., sin lugar en razón de lo resuelto en el presente auto. 5) Oportunamente, devuélvase la pieza principal al Tribunal de origen, con certificación del presente, para los fines de rigor. HÁGASE SABER.

5 PRONUNCIADO POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LO SUSCRIBEN. DCA/122-ECSM-13