ESPIRITUALIDAD DE ORIENTE (Mística Ortodoxa)

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José Carlos Ojeda Redondo
hace 7 años
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2 JESÚS CASTELLANO ESPIRITUALIDAD DE ORIENTE (Mística Ortodoxa) EDITORIAL DE ESPIRITUALIDAD Triana, MADRID

3 Índice Págs. PRESENTACIÓN... 9 I. LA EXPERIENCIA DEL ESPÍRITU SANTO EN LA IGLESIA DE ORIENTE Centellas de luz en una teología dialéctica del espíritu La liturgía, acción y efusión del espíritu La vida según el espíritu Conclusión Textos antológicos de la iglesia de Oriente sobre el Espíritu Santo 48 II. EL BAUTISMO CRISTIANO EN LOS PADRES La experiencia del bautismo a través de algunos testimonios personales La experiencia bautismal a través de las catequesis mistagógicas de Teodoro de Mopsuestia El compromiso de la vida bautismal Conclusión III. EL CUERPO Y EL CÍRCULO IV. EL MISTERIO DE MARÍA EN LA IGLESIA ORTODOXA Antropología Mariana: Humanidad y feminismo Theotókos, Panagia, Deixis: Misterio y misión de María Celebración litúrgica y contemplación iconográfica V. EL ICONO, SACRAMENTO DE LA BELLEZA DIVINA Una aproximación al icono sagrado Elementos de estética iconográfica Espiritualidad del icono

4 170 ÍNDICE Págs. VI. EL CARMELO TERESIANO Y LA ESPIRITUALIDAD ORTODOXA Datos significativos de un acercamiento actual del Carmelo Teresiano a la Ortodoxia Una serie de acercamientos y diálogos a nivel doctrinal Conclusión

5 Presentación Para mí es un honor presentar este volumen en el que se recogen algunos trabajos del P. Jesús Castellano sobre la espiritualidad del Oriente Cristiano. Había nacido en Villar del Arzobispo (Valencia) el 30 de julio de 1941, y falleció repentinamente en Roma, el 15 de junio de Era carmelita descalzo desde el 1957, fecha en que hizo su profesión religiosa en el convento del Desierto de Las Palmas (Castellón). Sus estudios de teología los realizó en el Teresianum de Roma, en donde, una vez presentada su tesis doctoral, inició su magisterio como profesor en los primeros años setenta. Tarea a la que se dedicó durante toda su vida. En dicha facultad tuvo diversas responsabilidades académicas importantes, como la de Presidente de la misma. Pero también otros centros académicos romanos, y no sólo romanos, tuvieron la suerte de poder contar con sus cursos en una u otra ocasión. En aquellos primeros años setenta, en los que le tuve como formador y profesor, ya era un hombre abierto a la nueva sensibilidad teológica nacida del Vaticano II y a todas las tradiciones y corrientes espirituales, desde las antiguas a las modernas, con una fuerte sintonía, por ejemplo, con el sentido litúrgico de Taizé y con toda la tradición litúrgico-espiritual del Oriente Cristiano (las tradiciones Ortodoxa y Griego-Bizantina). De todas las dichas tradiciones, tanto las más directamente litúrgicas como las más espirituales o pastorales, sabía sacar lo más positivo e integrarlo en su pensamiento y magisterio. A este respecto, recuerdo también vivamente sus clases sobre liturgia y

6 10 PRESENTACIÓN eucaristía, y, cuando en esos mismos años, empezó a dar un curso sobre nuevos movimientos eclesiales. Aunque con realismo, hablaba con tal amor y pasión de todos ellos, que parecía simpatizar con todos. Fueron muchos los campos de la teología y de la espiritualidad en los que fue abriendo cada vez más su reflexión y sobre los que nos fue dejando sus aportaciones escritas en innumerables publicaciones. Habló y escribió sobre eucaristía, sacramentos, liturgia, mariología, teología espiritual, oración, vida consagrada, santa Teresa de Jesús, san Juan de la Cruz, Teresa de Lisieux, espiritualidad carmelitana en general, teología mística, figuras espirituales del siglo XX, movimientos espirituales, oriente cristiano, etc También la Santa Sede contó durante décadas con sus continuas y valiosas aportaciones. Aunque su magisterio académico lo ejerció fundamentalmente en Roma, supo hacerse presente en el ámbito de la lengua española a través de sus publicaciones. De ahí que, desde los primeros años setenta, y prácticamente hasta la fecha de su fallecimiento, los lectores de la Revista de Espiritualidad hayan podido leer sus interesantes y siempre sugerentes artículos sobre los más variados temas. La espiritualidad Ortodoxa y del Oriente Cristiano, ciertamente, no fue uno de sus primeros focos de atención intelectual y académica. Pero, muy pronto, como he dicho más arriba, movido por unas u otras razones, se fue acercando y, casi diría yo, enamorando de ella. Sentía una gran sintonía con el pensamiento que le gustaba repetir a Juan Pablo II de que la Iglesia debía volver a respirar con los dos pulmones de las ricas tradiciones de oriente y occidente. Algo que, por ejemplo, el Papa polaco lo dejó así plasmado en el siguiente texto de la Novo millennio ineunte, al concluir el gran jubileo del año 2000: En esta perspectiva de renovado camino postjubilar, miro con gran esperanza a las Iglesias de Oriente, deseando que se recupere plenamente ese intercambio de dones que ha enriquecido la

7 PRESENTACIÓN 11 Iglesia del primer milenio. El recuerdo del tiempo en que la Iglesia respiraba con «dos pulmones» ha de impulsar a los cristianos de oriente y occidente a caminar juntos, en la unidad de la fe y en el respeto de las legítimas diferencias, acogiéndose y apoyándose mutuamente como miembros del único Cuerpo de Cristo (nº 48). Al menos de lo que me consta, Jesús Castellano no nos ha dejado una elaboración sistemática sobre la espiritualidad del Oriente Cristiano. Pero sí tenemos abundantes acercamientos y presentaciones suyas de uno u otro aspecto o autor de dicha corriente o mundo de la espiritualidad cristiana. En el presente volumen se ha querido ofrecer al lector lo más importante de lo que nuestro autor publicó en la Revista de Espiritualidad sobre el Oriente Cristiano, incluyendo también un artículo sobre la espiritualidad de los Padres de la Iglesia, a los que, como se sabe, está y ha estado siempre muy vinculada dicha espiritualidad. El volumen se cierra con un interesante trabajo de nuestro autor sobre las posibles vías de acercamiento y diálogo entre la espiritualidad del Oriente Cristiano y la del Carmelo Teresiano. José-Damián Gaitán, o.c.d. Madrid, 10 de enero de 2010 Fiesta del Bautismo del Señor

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