La Constitución Política del Estado de México, expedida el 14 de febrero del "año del Señor de 1827", determinaba en su artículo 22 lo siguiente:

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1 LA FACULTAD DE MEDICINA: DEL INSTITUTO A LA UNIVERSIDAD 1 Carlos A. Sánchez Hernández* Fundación del Instituto Literario La Constitución Política del Estado de México, expedida el 14 de febrero del "año del Señor de 1827", determinaba en su artículo 22 lo siguiente: En el lugar de la residencia de los supremos poderes, habrá un Instituto para la enseñanza de todos los ramos de Instrumentación Pública. A principios de agosto de 1827, fueron trasladados a Tlalpan los, supremos poderes del Estado de México al edificio ubicado en la calle del Indio Triste núm. 6, hoy calle Primera de Correo Mayor No.3. A los pocos días, el 4 de septiembre de ese mismo año, el gobernador don Lorenzo de Zavala Sáenz, sin facultad expresa para dar forma y poner en vigor el precepto constitucional, abrió en San Agustín de las Cuevas, como se llamaba Tlalpan, un colegio al que dio el título de Colegio y Escuelas Lancasterianas del Instituto Literario del Estado Libre y Soberano de México; ubicándolo en una casa del señor José Vicente Villada, conocida entonces con el nombre de Piedras Miyeras. El presbítero José María Alcántara fue el primer director de este colegio. 1 UAEM. Sucesivas Aproximaciones de Nuestra Historia. Crónicas de la Universidad Autónoma del Estado de México. Toluca, México, 2000, pág * M. V. Z., Cronista de la Facultad de Medicina.

2 Al término de las sesiones ordinarias del segundo periodo constitucional, el gobernador don Lorenzo de Zavala les decía a los señores diputados: Al aprobar el plan de establecimiento Literario que el ejecutivo ha tenido el honor de presentar al Congreso, deberá dar existencia moral al grande, rico y heroico Estado de México. La separación de su antigua Capital que por otra parte se ha traído muchas ventajas, les dejó sin esos grandes colegios y demás Institutos Literarios, que si bien resienten de los tiempos en que se fundaron por el método de estudios adoptados en ellos, tienen sin embargo muchos elementos de sabiduría y virtud. Al levantar este establecimiento se va a dar atención, majestad y grandeza a pueblos que yacen en la obscuridad y el olvido. En el siguiente periodo de sesiones, los representantes populares se dieron a la tarea de formar el reglamento interior del colegio, que dio origen al decreto promulgado el 3 de marzo de 1828, que creó a su vez el Instituto Literario del Estado de México, sustituto del que provisionalmente había fundado seis meses antes don Lorenzo de Zavala Sáenz. Se estableció el Instituto Literario bajo la dirección de fray José de Jesús Villa Padierna. La temporalidad de ejercicio del expresado instituto fue, en este primer ciclo, de dos años, dos meses y veintiséis días. Funcionando hasta el 29 de mayo de 1830, en que la III Legislatura del Estado, por su decreto número 109, "dispuso que cesara el Instituto y que a su tiempo se estableciera bajo el pie que correspondiera con arreglo al artículo 228 de la primera constitución expedida en febrero de 1827". Al pasar los poderes de Tlalpan a la ciudad de Toluca, el V Congreso Constitucional, por Decreto 296, derogó el Decreto número 95 del 18 de febrero de 1828 y facultó al ejecutivo para que estableciera en la ciudad de Toluca, el Instituto Literario del Estado de México, con fecha 7 de mayo de Previniendo, además, "al mismo Ejecutivo que formara y remitiera al Congreso el Plan de Estudios y Reglamento". El mismo gobernador, don Lorenzo de Zavala Sáenz, encargó de su vigilancia y dirección a don José María González Arratia. El 30 de mayo del propio año de 1833 la citada legislatura, en su decreto número 318, declaró propiedad del Estado la fábrica conocida en Toluca con el nombre de El Beaterio y todos los bienes que

3 pertenecían, debiendo ser destinada esa fábrica, en cuanto lo permitieran las circunstancias, para local del Instituto Literario. Su segundo ciclo fue de dos años, siete meses, hasta el 5 de octubre de 1835, con motivo de la interrupción del régimen federal y entrar en vigor la nueva Constitución conocida por Las Siete Leyes que confirmaba el régimen centralista. El 7 de noviembre de 1846 el gobernador Francisco Modesto de Olaguíbel, expidió en la ciudad de Toluca un Decreto fundando de nuevo el Instituto Literario en cumplimiento de lo prevenido en la Constitución de 1827, y creando becas de gracia a once plazas de alumnos que debían cubrir los diversos Distritos en que entonces estaba dividido el Estado; además admitiéndose libre y gratuitamente en todas las cátedras a cuantas personas quisieran escucharlas. Esta disposición tuvo su exacto cumplimiento el 7 de junio de 1847, quedando designado con el carácter de director, el licenciado don Felipe Sánchez Solís. El Instituto Literario habría de abandonar dos veces su sede del Beaterio: la primera en 1848, cuando el ejército norteamericano tomó la plaza de la ciudad de Toluca y el gobernador Francisco Modesto de Olaguíbel, con los poderes constitucionales, emigró a Sultepec. Los alumnos del Instituto Literario abandonaron el edificio y se refugiaron en el rancho de la Virgen, hoy Iglesia del Ranchito, ubicada en la actual calle general José Vicente Villada, y por entonces conocida como Simón Velásquez. La segunda vez que el Instituto Literario abandonó su sede fue en el establecimiento del imperio de Maximiliano, cuando los conservadores lo trasladaron al Convento del Carmen, en la actual calle de Santos Degollado No.100 y que por aquel entonces se le conocía como calle del Carmen. La Legislatura Constitucional del Estado de México, por su Decreto 47 del 16 de octubre de 1845, autorizó al gobernador para que pudiera reformar el instituto bajo las bases contenidas en su iniciativa y en cumplimiento de esta facultad. El gobernador don Mariano Riva Palacio, con fecha 28 del propio mes y año expidió la primera Ley Orgánica y Reglamento Interior del Instituto Literario del Estado. El 15 de diciembre de ese propio año de 1886, el gobernador don José Zubieta, en uso de sus facultades que tenía concedidas por decreto número 83 de 30 de septiembre anterior, dio nueva ley

4 orgánica; en ella se determinaba que en lo sucesivo el citado plantel llevara el nombre de Instituto Científico y Literario del Estado de México, quedando consagrado a la enseñanza de las materias preparatorias y secundarias que se exigían como indispensables para las carreras en el Distrito Federal y de las que determinaba esa misma Ley". Durante el porfiriato, la Ley Orgánica se modificó varias veces, y con fecha 14 de noviembre de 1889 se le dio el nombre de Instituto Científico Literario "General Porfirio Díaz". Años después se le denominó Instituto Científico Literario "Ignacio Ramírez". Al aumentar la población estudiantil y contando con maestros progresistas, crece la necesidad de independizar del Estado el funcionamiento del Instituto Científico Literario. En 1933 se obtiene mayor autonomía para las juntas generales de profesores y consejos. En 1940 se da mayor libertad de cátedra, pero ajustada al artículo 3 de la Constitución federal. Se reconoce como suprema autoridad al Consejo Directivo del Plantel. También se establece el Principio del Patrimonio del Instituto Científico y Literario, y la aportación presupuestal se va a manejar con cierta libertad por la autoridad directiva. Todo lo anterior crea una situación inestable, provocando un movimiento de protesta contra ese modelo educativo. Los alumnos demandan de nuevo la autonomía, se realizan huelgas estudiantiles que van a desembocar en el encarcelamiento de varios de ellos. El día 12 de noviembre de 1943 inicia este movimiento y termina el 31 de diciembre, cuando la XXXVI Legislatura local aprobó la Ley de Autonomía y Patrimonio Económico. Esta resolución entra en vigor el 15 de enero de 1944, asignándole el nombre: Instituto Científico Literario Autónomo del Estado de México, siendo gobernador el señor licenciado Isidro Fabela Alfaro. Varios directores habían pensado en convertir el instituto en universidad, de las objeciones que se presentaban algunas eran políticas y otras argumentaban la cercanía de la ciudad de Toluca con la capital de la república. En 1955 se efectuó la reunión de la Asociación de Universidades de la República Mexicana en el Instituto Científico Literario Autónomo y se "determinó el sentido del termino universidad". Se convino en que para alcanzar esta jerarquía, "bastaba con que una institución educativa contara como mínimo, con tres escuelas de altos estudios".

5 El Instituto Científico Literario Autónomo del Estado de México estaba integrado por la Facultad de Leyes, Escuela de Medicina, Pedagogía Superior y Comercio. El licenciado Juan Josafat Pichardo, en calidad de director del Instituto Científico Literario Autónomo del Estado de México, entrevistó repetidamente al señor gobernador, el ingeniero Salvador Sánchez Colín, hasta que éste accedió a convertir al Instituto en Universidad Autónoma del Estado de México mediante el decreto No.70 del 17 de marzo de Se hizo la declaratoria oficial por el señor secretario de Economía Nacional, licenciado Gilberto Loyo, y por el señor presidente de la república mexicana, licenciado Adolfo Ruiz Cortines, el 6 de mayo de Bibliografía Autores varios. Siglo y medio. Sumaria tolucense, H. Ayuntamiento de la Ciudad de Toluca, México, Litográfica, México, ICLA. Boletín del Instituto Científico Literario Autónomo del Estado de México, núm. 2, abril-junio, Toluca, México, Garrido y Manuel. La ciudad de Toluca, Editorial Imprenta del Insituto Literario y de Pedro Martínez, Toluca, González Vargas, Enrique. Esquema histórico de la Universidad Autónoma del Estado de México, Imprenta Bravo, Toluca, México, Venegas J., Aurelio. Guía del viajero en Toluca, Tip, Escuela de Artes, Toluca, 1984.