Caducifolio: Conífera: Dehesa: Esclerófila: Horizonte del suelo: Landa: Lixiviación: Pradera: Sotobosque: Suelos pardos: Suelos rojos: Xerófila:

Transcripción

1 Definiciones Caducifolio: árboles que pierden sus hojas en otoño para recuperarlas de nuevo en primavera. En España, predominan robles y hayas. Forman los bosques típicos del clima oceánico y de montaña. Conífera: especie arbórea resinosa caracterizada por tener una copa cónica, pequeñas hojas aciculares (aguja) y frutos agrupados en conos (piñas), el sotobosque suele ser escaso debido a la acidificación del suelo por las acículas. Las coníferas se pueden adaptar a las condiciones extremas de humedad o aridez, frío o calor. En España predomina el pino. Dehesa: tipo de paisaje de origen antrópico en el que el bosque de encinar, alcornocal o robledal ha ido aclarándose para dejar paso a la aparición de zonas de prados dedicadas a la ganadería. Son muy comunes en Extremadura y Salamanca. Esclerófila: vegetación que se caracteriza por sus hojas duras y coriáceas (de consistencia parecida al cuero), debido a que están constituidas por un tejido formado por células con una membrana muy gruesa (esclerénquima) gracias al cual se adaptan a la sequía. Horizonte del suelo: cada una de las capas o estratos que forman el suelo. El conjunto de estas capas da lugar al perfil del suelo, y dependiendo de cómo sean las capas y se distribuyan se clasifican en distintos suelos: jóvenes, incipientes o poco evolucionados, de perfil poco diferenciado, maduros, totalmente formados y deteriorados o en proceso de deterioro. Landa: formación vegetal de la zona templada, característica de las zonas europeas de clima oceánico. Se da en el norte de España en los pisos superiores del relieve, como resultado de la degradación de los bosques caducifolios. Brezo, tojo, genista, aliaga, helechos y retamas. Lixiviación: proceso de arrastre, por el agua de lluvia, de las materias solubles de horizontes superficiales del suelo hasta horizontes más profundos. Su intensidad depende del volumen de las precipitaciones. Si estas son demasiado intensas, pueden conducir a un empobrecimiento del suelo, que, según el tipo de terreno, recibe diversos nombres. Pradera: formación herbácea que crece donde las condiciones climáticas son demasiado áridas (calor y sequedad) para el árbol. La pradera puede ser una formación natural formada por la imposibilidad climática para que se desarrolle el árbol, o humana cuando los prados sustituyen a los bosques tras ser roturados por el hombre. Sotobosque: vegetación no arbórea de los estratos inferiores de un bosque. Está formada por la vegetación arbustiva y la herbácea. Suelos pardos: suelos totalmente formados que se caracterizan por la mezcla de materia orgánica con los compuestos de hierro. Existen diferentes tipos en función del clima y del sustrato rocoso: húmedos, meridionales o calizos. Es el más común en la Península Ibérica. Suelos rojos: suelos totalmente formados en los que la lixiviación ha acumulado en el horizonte B las arcillas, ricas en hidróxido de hierro, que dan una tonalidad rojiza al suelo. Este suelo es bastante común en la España mediterránea caliza. Xerófila: vegetación adaptada a la aridez. En España es propia del clima mediterráneo, sobre todo del subdesértico o estepario, y de las zonas bajas de las islas Canarias.

2 Las formaciones vegetales La Península Ibérica, territorio perteneciente al reino vegetal holártico, se estructura en tres regiones florales: borealpina, eurosiberiana y mediterránea. A estas se le une la región macaronésica, perteneciente al dominio canario. España presenta una gran diversidad de formaciones vegetales (bosques, prados y matorral), tanto clímax como secundarias, que dan lugar a una gran variedad de paisajes vegetales. Paisaje vegetal de clima oceánico (Región floral eurosiberiana) Bosque caducifolio: grandes masas arbóreas de árboles altos, de tronco liso y hojas grandes. Son vegetación clímax el roble (no soporta veranos calurosos, costas bajas) y el haya (tolera mal el calor y muy bien el frío, montañas de suelo calcáreo), junto con el rebollo y el quejigo (en zonas de transición). Son vegetación secundaria el castaño, el fresno, el olmo y el avellano; empleados en repoblación, el pino y el eucalipto. Landa: vegetación densa de matorral que surge con la degradación del bosque caducifolio o como vegetación clímax en pisos supraforestales. Destacan el brezo, el tojo y la retama. Prados: grandes extensiones de vegetación herbácea. Paisaje vegetal de clima mediterráneo (Región floral mediterránea) Predominio de vegetación esclerófila Bosque perennifolio: árboles de mediana altura, con tronco rugoso y retorcido, de copa globular. Destacan como vegetación clímax la encina (resistente a la sequía, todo tipo de suelos) y el alcornoque (necesita inviernos suaves, cierta humedad y suelos silíceos), que se mantienen actualmente bajo el sistema de dehesas. Como vegetación secundaria destaca el pino en sus múltiples variedades. El matorral: vegetación secundaria propia de la degradación del bosque por el ser humano o Maquia: formación arbustiva densa y alta: jara, retama y lentisco o Garriga: formación arbustiva dispersa y baja: tomillo, romero, espliego o Estepa: en el sureste peninsular. Vegetación muy degradada de hierbas bajas y arbustos en suelos pobres(palmito, espartal). Paisaje vegetal de ribera Disposición de especies vegetales en franjas paralelas al río según sus necesidades hídricas: de mayor a menor necesidad de agua, sauces (1), alisos (2), chopos y álamos (3), fresnos (4) y olmos(5). Conviven con vegetación matorral de madreselva Actualmente, son formaciones vegetales muy degradadas.

3 Paisaje vegetal de montaña (Preferentemente, región borealpina) Disposición en pisos de altura ( distintas cliseries) Montaña alpina o pirenaica. Tras el piso de robledal o encinar encontramos: o Piso basal (hasta los 1200 metros): encinas y robles. o Piso subalpino ( mts): abeto, pino negro, y arándanos en el sotobosque. o Piso alpino ( mts): prados de alta montaña y plantas rupícolas o Piso nival (+ de 3000 mts): pequeñas plantas rupícolas (musgos y líquenes) Resto de montañas peninsulares: carecen de piso subalpino y en ellas se pasa del bosque característico de su clima al piso supraforestal, en donde, como mucho, encontraremos matorral (brezo) y algún prado de media montaña. Paisaje vegetal de canarias (Región floral macaronésica) Es un paisaje de gran riqueza y variedad por el origen y la situación geográfica del archipiélago. En él abundan las reliquias vegetales y los endemismos. Se estructura en pisos de altura: o Piso basal (0-300 mts): gran aridez; matorrales ralos como el cardón y la tabaiba o Piso intermedio ( mts): aumento de la humedad: palmeras, dragos y sabinas. o Piso termocanario ( mts): zona de nieblas: bosque de laurisilva y fayalbrezal o Piso de montaña ( mts): bosque de coníferas: pino y cedro canario o Piso supracanario (+ de 2200 mts): pequeño matorral disperso: violetas del Teide.

4 El suelo Factores del suelo La roca madre, sustrato mineral que determina: o El color del suelo o La textura o tamaño de sus partículas o La estructura o forma de agrupación de las partículas o La permeabilidad o capacidad de filtración o El nivel de acidez del suelo o La naturaleza del suelo: silícea, arcillosa o caliza El clima o Las precipitaciones provocan el lixiviado del suelo: si es muy fuerte conduce a la acidez de los mismos o Las temperaturas condicionan la actividad química y bacteriana o El clima define la existencia de: suelos zonales suelos azonales suelos intrazonales La topografía o Zonas llanas = suelos gruesos o Zonas de pendiente = erosión y deslizamiento de suelos Los seres vivos o Las plantas pueden: mantener la fertilidad del suelo: procesos de descomposición vegetal favorecidos por la microflora creación de humus empobrecer la fertilidad del suelo: por ejemplo, la acidificación de las coníferas o Los animales actúan mecánicamente sobre el suelo, removiendo los componentes de los diferentes estratos El ser humano o Acciones de alteración y destrucción o Acciones de mantenimiento y mejora: abonado o repoblaciones forestales El tiempo o Suelos jóvenes: no han completado su formación evolutiva o Suelos evolucionados

5 Los horizontes y el perfil del suelo Como resultado de su evolución, los suelos están constituidos por capas u horizontes individualizados por sus características físicas, químicas y biológicas. Horizonte A: Es el más superficial y en él encontramos varias capas: o A0: Hojarasca y residuos internos o A1: de color oscuro, contiene materia orgánica en descomposición (humus) o A2: de color más claro, es una zona de lixiviado con arrastre de partículas hacia capas inferiores Horizonte B: De color más intenso, es una capa de alteración y acumulación de sustancias lixiviadas procedentes de las capas superiores y de partículas procedentes del horizonte C: o B1: zona de acumulación de partículas lixiviadas o B2: zona de alteración (transición al horizonte C) Horizonte C: Es un horizonte de profundidad. En él hallamos roca madre meteorizada, es decir, alterada y desagregada. Horizonte D: Es el horizonte más profundo. Está constituido por roca madre consolidada (no alterada). Los tipos de suelo Los suelos zonales Suelos de clima oceánico: Bastante evolucionados, ricos en materia orgánica (humus) y ácidos por la fuerte lixivación. o Sobre roquedo silíceo la acidez aumenta por la naturaleza de la roca. Tierra parda húmeda Tipo dominante, excelente para cultivos si se contrarresta su acidez con cal. Cuando la pendiente aumenta, puede dedicarse a pastizales. Rankers Situado en las zonas más altas. Sometidos a una fuerte erosión, que explica su escasa evolución (el horizonte A descansa directamente sobre el D)- Solo aptos para pastos y bosques, nunca para cultivo. Ranker asociado a tierra parda húmeda Zonas de montaña: cordillera Cantábrica occiental, Pirineo axial, Sistema Central. Pastos de alta montaña.

6 o Sobre roquedo calizo, la acidez del suelo es menor. Tierra parda caliza Excelente en cultivos de legumbres y maíz. Tierra fusca En zonas de montaña: cordillera Cantábrica oriental, Montes Vascos. Aprovechamiento forestal. Suelos de clima mediterráneo: Muy alterados por la erosión y las acciones antrópicas. o Sobre roquedo silíceo Tierra parda meridional Oeste peninsular, Sistema Ibérico, Sierra Morena Pobre, ácido, escaso de humus, de estructura suelta y fácilmente erosionable. Útil para dehesa de encina, pastos pobres o cereales (si se abona) o Sobre roquedo calizo. Formación de horizontes arcillosos de tonalidad rojiza. Suelo rojo mediterráneo Rico en nutrientes, excelente para todo tipo de cultivos Terra rossa Horizonte arcilloso reposa directamente sobre roca madre por lo que son frecuentes las afloraciones rocosas que dificultan la mecanización Pobre, poco útil Matorrales, bosques adehesados, almendros o En las arcillas y margas (valle del Guadalquivir, Tierra de Barros, comarca pamplonesa) Vertisuelos o tierras negras Los más fértiles de España (útiles para todo tipo de cultivos, salvo los arborescentes). Agrietables según grado de humedad de sus arcillas constante volteo estacional de sus materiales o En zonas mediterráneas de clima estepario (valle medio del Ebro, sureste peninsular y Canarias) Suelo gris subdesértico o serosem Muy seco, rico en caliza y pobre en humus Escaso aprovechamiento agrario (sólo en regadío) por su fácil salinización

7 Los suelos azonales Pueden darse en cualquier área climática, pues dependen del roquedo o la topografía y no de los climas. No están muy definidos porque son poco evolucionados o porque su perfil no se desarrolla al estar en zonas de pendiente. Los suelos intrazonales Pueden darse en cualquier área climática, pues dependen del roquedo o la topografía y no de los climas. Están bien definidos y tienen peculiaridades específicas, dentro de la homogeneidad de una zona, causadas por determinados factores locales (mal drenaje, estar sobre calizas, etc) Suelos pardos calizos y rendzinas o Muy diseminados geográficamente o Son suelos básicos con escaso humus por lo que o Su aprovechamiento agrario es relativo (cultivos de secano como la vid, el olivo, el almendro o los cereales, y cultivos de regadío si se le provee de suficiente agua) Suelos aluviales o Bordeando cauces fluviales y en depresiones litorales o Suelos jóvenes muy aptos para cultivar (huertas) Suelos de las zonas endorreicas (Tablas de Daimiel, Doñana, Delta del Ebro, y albuferas) o Encharcados, sin actividad biológica pobres en nutrientes o Relativa utilidad agrícola (fresas sobre turberas en Huelva) Suelos arenosos o Sobre todo en zonas de litoral o Nulo aprovechamiento agrícola por su enorme permeabilidad (son muy áridos) Suelos salinos o En zonas áridas, con fuertes índices de evaporación o A menos que se neutralicen sus sales con mucha agua, en ellos sólo sobreviven plantas halófilas Suelos volcánicos o Predominantemente basálticos y poco evolucionados o En gran parte improductivos, salvo peculiaridades locales (La Geria, Lanzarote)