La Evaluación de Riesgos Laborales para la selección de EPIs. La Evaluación de Riesgos Laborales en extinción de incendios

Transcripción

1 La Evaluación de Riesgos Laborales para la selección de EPIs. Natera Rivas Rafael. Subdirección de Incendios Forestales y otras Emergencias. Agencia de Medio Ambiente y Agua Consejería de Agricultura Pesca y Medio Ambiente. Junta de Andalucía. Introducción Conviene comenzar exponiendo que de los dos procesos reflejados en el título del presente documento (Evaluación de Riesgos Laborales y Selección de EPIs), y en aplicación de la Ley 5/1995 de Prevención de Riesgos Laborales, el primero debe ser realizado obligatoriamente, y el segundo, podrá o no ser necesario, precisamente en función de los resultados que arroje nuestra Evaluación de Riesgos y de la aplicación previa de los principios de acción recogidos en la legislación preventiva, debiéndose siempre considerar la ERL como el punto de partida, ya que serán los resultados obtenidos en la realización de esta los que nos indiquen la necesidad o no de utilización de EPIs, así como su tipología y características. Ahondaremos a continuación de manera concisa en los conceptos ERL y EPI, para posteriormente y a través de ejemplos, ver cómo se relacionan ambos dentro del proceso de la gestión del riesgo, tratando de exponer a la vez algunos de los problemas, soluciones y casuísticas con los que los responsables de la elaboración e implantación de las medidas recogidas en las ERL suelen encontrarse. La Evaluación de Riesgos Laborales en extinción de incendios La evaluación de los riesgos laborales es el proceso dirigido a estimar la magnitud de aquellos riesgos que no hayan podido evitarse, obteniendo la información necesaria para que el empresario esté en condiciones de tomar una decisión apropiada sobre la necesidad de adoptar medidas. (Art. 3 RD 39/1997, de 17 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de los Servicios de Prevención). Para la extinción de incendios y sus riesgos asociados, no existe una legislación nacional ni comunitaria concreta de la que pueda derivarse métodos específicos de análisis, por lo que la ERL en extinción de incendios se aborda desde métodos generalistas, siendo de obligada referencia el documento divulgativo sobre Evaluación de Riesgos Laborales editado por el INSHT. En todo proceso de evaluación de riesgos podemos diferenciar las siguientes etapas: 1º) Identificación de riesgos y sus factores asociados. 2º) Evaluación de los riesgos identificados. 3º) Propuesta de medidas preventivas. Estas tres etapas en su conjunto definen lo que entendemos por GESTION DEL RIESGO Asimismo, es obligación del empresario la realización de la ERL, debiendo darse participación en el proceso a los trabajadores y sus representantes legales. Es deseable hacer de esta necesidad legal una virtud, ya que nuestros EPIs finalmente seleccionados 1

2 serán mejor acogidos por nuestros trabajadores de manera directamente proporcional al grado de participación que estos y sus representantes hayan podido tener en el proceso de selección. Como aspectos principales a tener siempre presentes en el desarrollo de nuestras ER, debemos destacar: La ERL debe hacerse para todos y cada uno de los puestos de trabajo que intervienen en la extinción de incendios, incluidos los mandos, debiendo a su vez estar claramente identificadas las tareas a realizar por cada una de las categorías y puestos de trabajo a evaluar (necesidad de claridad en las competencias y ocupaciones profesionales). Deben tenerse en cuenta las condiciones de trabajo existentes o previstas, así como la posibilidad de que el trabajador que lo ocupe sea especialmente sensible, por sus características personales o estado biológico conocido, a alguna de dichas condiciones. La entrega de protectores solares a aquellos trabajadores con especial sensibilidad a las radiaciones solares es un ejemplo de aplicación del precepto expuesto. El trabajador debe estar informado de los resultados de la ERL de su puesto de trabajo, debiendo quedar registro, para ello, de las ER suelen derivarse documentos como las fichas de seguridad que deben ser entregadas al trabajador, debiendo quedar registro de ello. La ERL es un proceso dinámico, debiendo revisarse periódicamente, y tanto en su desarrollo y revisión, se deben considerar, entre otros, los resultados de la investigación sobre las causas de los daños sobre la salud de los trabajadores, así como los cambios introducidos en lo referente a nuevos métodos o equipos de trabajo. Los Equipos de Protección Individual La normativa legal de referencia respecto a los EPIs es el RD 773/1997 de 30 de Mayo sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud relativas a la utilización por los trabajadores de equipos de protección individual. De la obligada lectura y aplicación del RD 773/1997 para todo aquel gestor o responsable de desarrollar e implantar las ERL, y por no extendernos, destacamos las siguientes definiciones y consideraciones: Se entiende por EPI, cualquier equipo destinado a ser llevado o sujetado por el trabajador para que lo proteja de uno o más riesgos que puedan amenazar su seguridad y/o su salud, así como cualquier complemento destinado al mismo fin. Los EPI se utilizarán cuando los riesgos no hayan podido evitarse o limitarse suficientemente, por medios técnicos tales como la protección colectiva o mediante medidas, métodos o procedimientos de organización del trabajo, y queden aún una serie de riesgos de cuantía significativa. 2

3 Los equipos de protección individual estarán destinados, en principio, a un uso personal. Si las circunstancias exigiesen la utilización de un equipo por varias personas, se adoptarán las medidas necesarias para que ello no origine ningún problema de salud o de higiene a los diferentes usuarios. En extinción de incendios, no son raras las situaciones en las que los trabajadores por las circunstancias del desarrollo de las distintas tareas pueden acabar compartiendo EPIs (zahón protector anticorte, protectores auditivos.). Como documento guía en lo referente a EPIs para la extinción de incendios, normativas aplicables y características mínimas que deben cumplir los EPIs de extinción, resulta de obligada consulta y referencia el documento Catálogo de Equipos de Protección Individual publicado por el CLIF. Casos y situaciones de selección de EPIs A continuación tomaremos como ejemplo algunos EPIs usados en la extinción de incendios como punto de partida sobre los que exponer y debatir problemas, soluciones adoptadas y situaciones a las que nos enfrentamos a la hora de desarrollar e implantar nuestras ER y llevar a cabo la selección de EPIs. EPI: Bota polivalente o bota mixta. Con este caso, reflejamos lo que ha supuesto en los últimos años la evolución del mercado para acabar desarrollando un producto que viene a solucionar uno de los problemas que habitualmente nos encontramos en las ERL en extinción de incendios, la simultaneidad de factores de riesgo presentes, y la a veces imposibilidad de proteger adecuadamente y de forma simultánea ambos riesgos. En concreto en Andalucía los trabajadores del Dispositivo INFOCA venían siendo dotados de bota de extinción que no protegía del riesgo de corte por motosierra, por lo que se inició un proceso de dialogo competitivo entre varias empresas y fabricantes que desembocó en el desarrollo de un producto final que aunaba protección ante el riesgo térmico y de corte. En el calzado de protección para el combatiente forestal, se hace también evidente la dificultad que solemos encontrarnos para encontrar en nuestros EPIs el adecuado punto de equilibrio entre protección y ergonomía, habiéndose obtenido en Andalucía resultados satisfactorios en este sentido en los valores de la protección Clase II en la bota polivalente. EPI: Sistemas anticaidas en los VCI Este ejemplo pone de manifiesto la necesidad de la mejora continua de nuestras ER, identificando aquellos nuevos riesgos y los factores que con anterioridad pudieran no estar adecuadamente recogidos para las distintas categorías profesionales. Para las tareas que los conductores operadores de autobombas forestales y de vehículos especiales (Unidades móviles de meteorología) deben desarrollar en la cubierta del vehículo (acceso a diferente material transportado, procedimiento de cambio de rueda, despliegue de equipos etc), el trabajador en cuestión, está expuesto al riesgo de caída a distinto nivel, siendo la altura de la plataforma de trabajo superior a dos metros sobre el nivel del suelo, por lo que de no existir una adecuada protección colectiva, es obligatorio dotar al trabajador de EPI que le proteja del mencionado riesgo. En la Comunidad Andaluza se dio un paso adelante ante el riesgo de caída en altura al instalar en el año 2011 sistemas anticaida en todas las autobombas forestales y vehículos especiales, no estando anteriormente recogida 3

4 medida de protección alguna contra el mencionado riesgo de caída en altura (salvo nuevos vehículos que ya incorporan barandillas). EPI: Casco de extinción. Este ejemplo demuestra como a veces recurrimos a EPIS presentes en el mercado que aún cumpliendo con la normativa y recomendaciones vigentes, no se adaptan por completo a nuestras necesidades de protección, ergonomía y polivalencia por no estar específicamente pensados en origen para atender los factores y condiciones propias de los trabajos de extinción, o bien, de adaptarse y existir en el mercado, la habitual necesidad de dotar a amplias plantillas en los dispositivos de extinción y el alto precio unitario del producto, hacen económicamente inviable acceder a ellos. En el caso andaluz se ha pasado de dotar a los integrantes del dispositivo con lo que en su tipología, diseño y prestaciones definimos como casco básico de protección para la industria, a dotarlos con un casco que ofrece mayor protección y ergonomía, acercándose en sus prestaciones a los cascos de alta gama de emergencias pero a un precio razonable, todo ello tras un proceso de estrecho diálogo y contacto con fabricantes y proveedores donde se expusieron claramente las pretensiones, necesidades, y disponibilidades económicas posibles. EPI: Guante de extinción. En este caso, la evolución del mercado ha minimizado el problema de la seguridad frente a la ergonomía antes mencionado. Era y es queja tradicional de los usuarios del guante de extinción con el que habitualmente dotamos a nuestros dispositivos (íntegramente de serraje en sus orígenes) la poca ergonomía y falta de sensibilidad de este, lo que dificulta ciertas operaciones habituales que los combatientes realizan (recogida y suelta de helibalde, empalme de racores ) siendo a fecha de hoy un problema más o menos resuelto con la aparición y evolución de los denominados guantes mixtos de serraje y piel flor. En INFOCA, mejorar las prestaciones ergonómicas del guante de extinción, es un objetivo a lograr en el corto-medio plazo, estando inmersos en la búsqueda del mejor guante en relación protección-ergonomía para cada categoría profesional, habiéndose en este caso intentado hacer partícipe en la selección final del EPI al usuario final con la entrega de diferentes muestras de guante de extinción para prueba en campo. Resumen y Conclusiones Como principales problemas y casuísticas propias y habituales en las ER en extinción de incendios y en relación a la selección final de EPIS podemos concluir: Necesidad de proteger de varios riesgos de forma simultánea. Dificultad para encontrar el adecuado punto de equilibrio entre protección y ergonomía. Aunque en los últimos años se han producido grandes avances en el mercado, aún se necesita una mayor diversificación y especialización del mercado en EPIs de extinción. 4

5 Importante gasto en dotación de EPIs por el elevado número de integrantes de los dispositivos de extinción. En ocasiones, necesidad por las circunstancias del trabajo de tener que compartir EPIs. Y como aspectos a tener presentes para una mejor y más eficaz selección de EPIs: Adecuada identificación y valoración de los distintos factores de riesgo presentes en las tareas de extinción por categorías profesionales, siendo el registro e investigación de incidentes en extinción uno de las más eficaces herramientas a emplear. Estimular y dirigir el mercado a través del contacto directo con fabricantes y proveedores, buscando exponer claramente nuestras necesidades y circunstancias. En la medida de lo posible, probar los EPIs antes de la selección final. Implicación de los representantes de los trabajadores en las ERL y en la gestión del riesgo en general. Constituir y fomentar foros de debate y conocimiento donde los responsables de los distintos dispositivos puedan intercambiar sus experiencias en desarrollo e implantación de ER en extinción, selección de EPIs, redacción de pliegos técnicos etc. Como reflexión final, no debemos nunca olvidar, que por más que mejoremos nuestros EPIs, y procesos de selección de estos, en cualquier actividad laboral y si cabe aún más en extinción de incendios, siempre primará la seguridad activa (acciones que permiten evitar un riesgo), frente a la seguridad pasiva (protección frente a un riesgo materializado) * siendo los protocolos y normas de seguridad aplicables a la extinción de incendios nuestro mejor aliado a la hora de combatir la materialización de los riesgo de más severas consecuencias en extinción de incendios. * Morales Mesa Ignacio. Prevención de Riesgos en el trabajo forestal. Seguridad en Incendios Forestales. Bibliografía - Análisis de los riesgos en la prevención y extinción de incendios en el sector agrario. Comisión Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo. Marzo Guía Técnica del INSHT: Evaluación de Riesgos Laborales Manual de procedimientos de Prevención de Riesgos Laborales. INSHT Manual de Seguridad en Extinción Plan INFOCA. Agencia de Medio Ambiente y Agua. Junta de Andalucía. - Prevención de Riesgos en el trabajo forestal. Seguridad en Incendios Forestales. José Ignacio Morales Mesa. Ed. Tecnos