Platanus hispanica Mill. ex Münchh

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1 Platanus hispanica Mill. ex Münchh Plátano, plátano de paseo, plátano de sombra; cat.: plàtan; eusk.: platano arrunta, alboa; gall.: pradeiro Jesús PEMÁN GARCÍA, Jesús COSCULLUELA GIMÉNEZ, Alfonso LÓPEZ VIVIÉ 1. Descripción Esta especie se considera originada por la hibridación de Platanus orientalis L. y P. occidentalis L. El primero procede del SE de Europa y SO de Asia, encontrándose en Macedonia, Tracia, Chipre, Asia Menor, Norte de Irán, Afganistán y la Cordillera del Himalaya. El segundo, en su variedad occidentalis, se extiende por la costa del NE de Canadá y USA, mientras que en su variedad palmeri se encuentra en el NE de México y Texas (Nixon y Poole, 2003). Se considera que P. hispanica se originó en los jardines de Aranjuez en el siglo XVII, en los que se plantó las especies parentales (Ruiz de la Torre, 2006) Morfología Platanus hispanica es un árbol corpulento que suele alcanzar los 35 m e, incluso, superar los 50 (Clopés, 2008). Su tronco es derecho, con corteza delgada y gris verdosa que se desprende en placas duras, dejando ver manchas irregulares amarillentas o blanquecinas. Las ramas son abiertas y extendidas que dan lugar a una copa oval de joven y redondeada y amplia de adulto. Las ramillas pueden ser grisáceas, verdosas o parduzcas con verrugas blanquecinas. Las yemas tienen dos escamas cónicas, soldadas formando un capuchón. Las hojas, de x cm, se disponen de manera alterna, son caedizas, grandes, coriáceas, palmeado-lobuladas, con 3-5 lóbulos, pubescentes, de color verde vivo en el haz y más claras en el envés. Su sistema radical se compone de una raíz principal profunda y de raíces secundarias más superficiales, por lo que requiere suelos profundos para desarrollarse convenientemente. Su crecimiento es rápido y constante Biología reproductiva Es una especie monoica, con flores unisexuales que se agrupan en capítulos esféricos, densos, sobre pedúnculos largos, terminales y colgantes, ubicados en el extremo de los brotes (Ruiz de la Torre, 2006; Bonner, 2008). Cada pedúnculo puede llevar de 1 a 3 cabezuelas. Según describe Ruiz de la Torre (2006), los capítulos masculinos son mucho menores que los femeninos, estando formados por flores y escamas cuneiformes y persistentes con un perigonio rudimentario y con 3-6 estambres. Según el mismo autor, las cabezuelas femeninas disponen de escamas análogas a las anteriores, con flores de periantio algo mayor y ovario unilocular, unilovulado, con estilo ganchudo y rojizo. Florece en la segunda quincena de marzo y durante el mes de abril, madurando sus frutos en el verano. Se trata de una especie de elevada producción polínica y de dispersión 31

2 Producción y manejo de semillas y plantas forestales Figura 2. Aquenios de Platanus hispanica. anemófila. Aunque empieza a florecer a los 6 ó 7 años, la fructificación en masas naturales no se registra normalmente hasta los 25 años, teniendo lugar el óptimo de producción entre los 50 y los 200 años (Nesom, 2002; Bonner, 2008). Las infrutescencias, en capítulos esféricos, pueden tener entre 25 y 40 mm de diámetro, ubicándose generalmente por pares en cada pedúnculo. Cada uno de los frutillos es un aquenio coriáceo, de 8 a 9 mm de longitud, claviforme, rodeado en la base por pelos rígidos, pardos y muy ásperos que se esparcen al desintegrarse el capítulo esférico (Nesom, 2002; Ruiz de la Torre, 2006). Su color varía de un marrón-verdoso al marrón cuando madura. La maduración de los frutos se produce en otoño y su diseminación tiene lugar durante el invierno. Las infrutescencias permanecen en el árbol todo el invierno y caen en la primavera siguiente. Fructifican anualmente y de forma abundante cada 1 ó 2 años (Nesom, 2002; Bonner, 2008). La diseminación es anemócora e hidrócora, ya que el fruto flota fácilmente en la superficie de los cursos de agua Distribución y ecología Figura 1. Infrutescencia de Platanus hispanica (Foto: J.I. García Viñas). Como consecuencia de su naturaleza híbrida, esta especie no tiene un área natural de distribución, aunque ha sido ampliamente difundida por Europa y Norteámerica como árbol ornamental en parques y calles de muchas ciudades. Su resistencia a la contaminación atmosférica ha contribuido a esa difusión. En España, origen del taxón, además de su uso en jardinería, cuenta con un interés forestal en las provincias de Barcelona y Girona, donde se planta desde finales del siglo XIX en terrenos aluviales de ríos y torrentes, como complemento del chopo (Clopés, 2008). 32

3 Platanus hispanica Mill. ex Münchh El plátano se ha distribuido desde el nivel del mar hasta los m de altitud, llegando incluso a superar esta cota en algunas plantaciones de carácter ornamental. Prefiere los climas templados o templado-fríos, tolerando una continentalidad no muy extrema. Su temperamento es robusto. Aunque se distribuye sobre una gran variedad de suelos, prefiere los fértiles y profundos, que puedan suministrarle las necesidades hídricas que precisa para su desarrollo; por ello, su utilización se ha centrado en los suelos aluviales de los cursos de agua. Suele rehuir los suelos arcillosos, mal drenados, calizos secos o superficiales. 2. Materiales forestales de reproducción 2.1. Marco normativo. Identificación de los materiales de reproducción Los materiales forestales de reproducción de P. hispanica no están regulados por la normativa de comercialización en España. Debido a que la forma habitual de propagar esta especie es mediante multiplicación vegetativa y que su uso ornamental y en restauraciones está muy extendido en ciertas regiones, parece oportuno realizar un esfuerzo para garantizar el origen y la diversidad genética de los materiales vegetales utilizados. No obstante, cabe también pensar que la diversidad genética existente puede ser muy baja, dado el origen artificial del taxón. El género Platanus está incluido en la normativa sobre pasaporte fitosanitario. Figura 3. Distribución de Platanus hispanica y Regiones de Identificación de sus materiales de reproducción (Fuente: Mapa Forestal de España, 1: ). 33

4 Producción y manejo de semillas y plantas forestales 2.2. Técnicas de manejo y propagación Semillas La recolección de los frutos se realiza de árboles en pie, bien utilizando plataformas o, bien, directamente desde el suelo mediante el empleo de vibradoras mecánicas. Aunque se puede realizar en cualquier momento una vez madurado el fruto, se suele esperar a la caída de las hojas para facilitar las operaciones. La época de recogida es a finales de otoño y en invierno, preferentemente durante los meses de enero o febrero. Si los frutos se han recolectado temprano, la extracción de las semillas exige un desecado previo por su alto contenido en humedad. A tal fin, bastará extenderlos en capas finas en un local seco y bien ventilado. Una vez secas, las cabezuelas deben deshacerse mediante desgrane o trillado utilizando molinos de martillos o discos o, si se trata de pequeñas cantidades, frotándolas contra una malla de alambre que las desbaste. Una vez independizados los aquenios, se debe eliminar todos los pelos que pudieran haber quedado adheridos a los mismos con el objeto de facilitar su manejo y siembra. Para ello habrá que frotarlos con una malla muy fina y, posteriormente, retirar la pelusa mediante aventadoras o aspiradoras (Bonner, 2008). La manipulación de los frutos de los plátanos exige disponer de ciertas medidas de seguridad para los operarios, como mascarillas antipolvo, ya que los pelos adheridos a los aquenios pueden provocar dificultades respiratorias. Sus semillas son ortodoxas y pueden conservarse con un contenido de humedad del 5-10%, en recipientes herméticos y a temperaturas entre 0 y 5 ºC por un período de 5 a 10 años (Bonner, 2008). La mayor parte de las semillas de los plátanos no precisan tratamientos previos para germinar, aunque la estratificación en un medio húmedo entre 60 y 90 días a 5 ºC suele acelerar la germinación las semillas de P. racemosa (Bonner, 2008). En el monte, no germinan bien a la sombra ni sobre una hojarasca densa ni con temperaturas fuera del rango de 15 a 30 ºC (Nesom, 2002). Las tasas de germinación son altas si se refieren exclusivamente a las semillas llenas, dado que en estas especies existe un alto porcentaje de semillas vanas debido a las dificultades de una polinización cruzada y a la incompatibilidad de la autopolinización. La germinación de las semillas de esta especie es epigea. No se dispone de valores de referencia de lotes de semillas de P. hispanica, pero sí de sus especies parentales, cifras que se recogen en la Tabla 1. Como procedimiento para evaluar la germinación de lotes comerciales del género Platanus, las reglas ISTA (2011) establecen unas condiciones de germinación que consisten en una alternancia térmica (20-30 ºC) según un ciclo de 16-8 horas, con una duración del ensayo de, al menos, 21 días Vegetativa Los plátanos pueden propagarse vegetativamente mediante estaquillas de tallo o de raíz o empleando técnicas de cultivo in vitro (Vlachov, 1988; Grolli et al., 2004 y 2005). La estaquilla de tallo es el material usualmente empleado para la producción de planta ornamental y es una buena alternativa para el vivero forestal, debido al elevado porcentaje de semillas vanas que produce este género. El enraizamiento de las estaquillas varía según 34

5 Platanus hispanica Mill. ex Münchh Tabla 1. Datos característicos de lotes de semillas de Platanus occidentalis y P. orientalis. Pureza (%) Facultad germinativa (%) Nº semillas kg 1 Referencia Platanus occidentalis Catalán (1985) 80 (1) (2) Bonner (2008) Platanus orientalis Catalán (1985) (1) Porcentaje referido a semillas viables. (2) Procedencia Louisiana. (3) Procedencia Dinamarca (3) Bonner (2008) el genotipo, la posición de la vareta en la planta donante, el tipo de estaquilla (basal, media, apical) y su diámetro, la época de su recolección y la humedad y temperatura del medio de enraizamiento (Vlachov, 1988; Grolli et al., 2005). La propagación con estaquillas apicales recolectadas en el momento posterior a la caída de la hoja ha dado muy buenos resultados, posiblemente por el mayor nivel de contenido en carbohidratos en esta época. Colocadas en alvéolos de 180 a 250 cm 3 y puestas bajo doble túnel de plástico, siempre con una humedad relativa por encima del 60%, este tipo de estaquillas ha registrado una tasa de enraizamiento entre el 86% y el 94%. Grolli et al. (2005) recomiendan la utilización de estaquillas con tres yemas, de 20 a 30 cm de longitud y con diámetro entre 1 y 2 cm; la época de recolección más adecuada es en diciembre. Deben tratarse con ácido indolbutírico (AIB) a una concentración de 2 mg ml 1 y aplicárseles un tratamiento de calor de fondo o basal durante 10 días, antes de ser plantadas en las eras del vivero. El porcentaje de enraizamiento de las estaquillas de raíz es elevado cuando proceden de plantas jóvenes, alcanzando valores del % cuando la estaquilla se obtiene en invierno, disminuyendo notablemente si se recolecta en verano (Vlachov, 1988). 3. Producción de plantas Debido a su potente sistema radical y al crecimiento del tallo tan vigoroso, las plantas se cultivan a raíz desnuda. El plátano americano se produce de 1 savia (1 + 0), mientras que el plátano de Levante suele producirse de dos savias (1+1 ó 2+0) (Bonner, 2008). La planta de una savia de P. occidentalis puede alcanzar los 3 m (Nesom, 2002). La siembra se realiza en primavera enterrando las semillas de 3 a 6 mm, en líneas separadas de 15 a 20 cm, obteniéndose densidades de 55 a 110 plantas m 2 (Young y Young, 1992; Bonner, 2008). El sustrato debe mantenerse húmedo durante la germinación; un ligero sombreo puede ser útil durante el primer mes. En algunos viveros suele repicarse las raíces 35

6 Producción y manejo de semillas y plantas forestales Figura 4. Planta de Platanus hispanica a raíz desnuda (Foto: A. López Vivié). a mediados del verano para promover el desarrollo de un sistema radical secundario. Con objeto de reducir el tamaño de las plantas, es práctica habitual cortar parte del tallo a finales de julio o agosto. Los plátanos pueden alcanzar alturas de 1-1,8 m al finalizar el primer período vegetativo, por lo que se ofrecen dos opciones: Arranque y trasplante, siempre con raíz, a la plantación definitiva. Corte de la parte aérea de las plantas para obtener estacas de cm con raíz (barbados), y trasplante a caballones con una separación de aproximadamente un metro entre sí para su posterior arranque (con dos, tres y, a veces, hasta cuatro metros de altura). En el caso de producir plantas mediante propagación vegetativa, la distribución de las estacas en los caballones depende del criterio del viverista y de la maquinaria utilizada en el cultivo, pero es normal que aquellos estén separados 1 a 1,5 m y las estacas o estaquillas 10 a 20 cm entre sí. 4. Uso en repoblaciones y restauraciones Las repoblaciones forestales con esta especie en España, fuera de su generalizado uso ornamental en calles y jardines de muchas ciudades, se limitan a Cataluña, donde se extiende en una superficie de ha. Algo menos de la mitad de esta área (2.612 ha) 36

7 Platanus hispanica Mill. ex Münchh corresponde a masas donde el plátano es la especie dominante, formando en el resto de los casos masas mixtas con especies de ribera, como alisos y chopos (Gracia, 2004). Estas plantaciones se concentran en las provincias de Barcelona y Girona, concretamente en las riberas de los ríos Ter, Tordera, Fluviá y Besós. 5. Planificación de la repoblación La labor de desbroce previo a la repoblación con plátano suele ser intensa, mediante laboreo o el empleo de desbrozadoras, no siendo recomendable el uso del fuego o el desbroce químico (Twedt y Wilson, 2002). Debido al potente sistema radical que desarrollan los plátanos, es necesaria una buena preparación del terreno, con una labor profunda antes de la plantación. Las plantas, con raíz y sin podar, suelen colocarse en hoyos abiertos con retroexcavadora, a profundidades de 1 a 2,5 m, hasta alcanzar la capa freática. La mejor época para efectuar la plantación es a finales de invierno o principio de primavera. En el pasado era habitual efectuar la plantación en marco real de 5x5 m, pero en los últimos años, para obtener diámetros mayores, se utilizan espaciamientos de 6x6 m, 5x7 m o similares. No se recomienda el empleo de tubos invernadero, ya que las experiencias realizadas con estas especies, o bien no muestran influencia alguna en el crecimiento en altura y la supervivencia (Torbert y Johnson, 1993; Burger et al., 1997; Sharew y Hairston-Strang, 2005), o bien implican una reducción del diámetro en el cuello de la raíz, la biomasa aérea y radical y la longitud y el área del sistema radical (Burger et al., 1997). Figura 5. Monte bajo de Platanus hispanica en la provincia de Girona (Foto: J.L. Nicolás). 37

8 6. Bibliografía Producción y manejo de semillas y plantas forestales BONNER F.T., Platanus L. En: The woody plant seed manual. (Bonner F.T., Karrfalt R.P., eds.). United States Department of Agriculture, Forest Service, Agriculture Handbook 727, Washington. pp BURGER D., FOISTER G., GROSS R., Short and long-term effects of treesheleters on the root and stem growth of ornamental trees. J. Arboric. 23 (2), CATALÁN G., Semillas de árboles y arbustos forestales. Instituto Nacional para la Conservación de la Naturaleza. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Madrid. pp CLOPÉS R., Selvicultura de Platanus hispanica. En: Compendio de Selvicultura aplicada en España (Serrada R., Montero G., Reque J.A., eds.). Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Agroalimentaria, Madrid. pp GRACIA C. (dir.), Inventari Ecològic i Forestal de Catalunya. Catalunya. CREAF, Barcelona. GROLLI P.R., MORINI S., LORETI F., The micropropagation of Platanus acerifolia Willd. Adv. Hort. Sci. 18, GROLLI P.R., MORINI S., LORETI F., Propagation of Platanus acerifolia Willd. by cutting. J. Hort. Sci. Biotechnol. 80(6), ISTA (International Seed Testing Association), International rules for seed testing. Edition ISTA, Bassersdorf, Switzerland. NESOM G., Americam sycamore (Platanus occidentalis L.). USDA, Natural Resources Conservation Service, Plant Materials Program Web sites. Disponible en: [5 Jun, 2009]. NIXON K.C., POOLE J.M., Revision of the Mexican and Guatemalan species of Platanus (Platanaceae). Lundellia 6, RUIZ DE LA TORRE J., Flora Mayor. Organismo Autónomo Parques Nacionales. Dirección General para la Biodiversidad, Madrid. pp RUIZ DE URRESTARAZU M. (dir), Análisis y diagnóstico de los sistemas forestales de la Comunidad Autónoma del País Vasco. Departamento de Agricultura y Pesca del Gobierno Vasco, Colección LUR nº 4, Vitoria. SHAREW H., HAIRSTON-STRANG A., A comparison of seedlings growth and light transmission among tree shelters. NJAF 22(2), TORBERT J.L., JOHNSON J.E., Establishing American sycamore seedlings on land irrigated with paper mill sludge. New For. 7, TWEDT D.J., WILSON R.R., Supplemental planting of early successional tree species during bottomland hardwood afforestation. En: Proceedings of the eleventh biennial southern silvicultural research conference. (Outcalt, Kenneth, eds.). Gen. Tech. Rep., SRS-48. pp VLACHOV D.D., Vegetative propagation of sp. Platanus L. trough rooting of cuttings. Acta Hort. 226, YOUNG J.A., YOUNG C.G., Seeds of woody plants in North America. Discorides Press, Portland, Oregon, USA. pp