Encuentro de prevención de riesgos laborales (Castilla y León) Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 1

Transcripción

1 Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 1

4 La aplicación de fitosanitarios en los cultivos agrícolas generalmente se realiza con productos líquidos. Para los cultivos bajos los pulverizadores hidráulicos son los más utilizados, ya que aseguran mayor uniformidad en la distribución superficial. Para los cultivos arbóreos se utilizan atomizadores y nebulizadores, ya que la corriente de aire mejora la penetración ene l interior del vegetal La forma de acción del producto fitosanitario condiciona la aplicación. Con un herbicida de acción radicular la aplicación se debe realizar sobre el suelo para que sea absorbido por las raíces. Si la acción del producto es foliar debe aplicarse sobre la planta. Los de acción por contacto deben cubrir la zonas en crecimiento. Los sistémicos deben aplicarse con gota gruesa para que sean absorbidos fácilmente por la planta. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 4

5 Los insecticidas deben alcanzar la zona por la que se desplazan los insectos que se necesita combatir. Las gotas producidas deben contener producto suficiente para eliminar el insecto que las reciba. Los fungicidas de acción por contacto deben cubrir la superficie de la planta sobre la que puede atacar los hongos. Esto no es necesario en los fungicidas sistémicos que son absorbidos por la planta y realizan una protección desde dentro. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 5

6 Estas son las recomendaciones generales para los diferentes tipos de producto. La dosis de aplicación estará en función del tamaño medio de las gotas formadas. Para producir gotas en los pulverizadores agrícolas se utilizan preferentemente las pulverizaciones hidráulica, neumática y centrífuga (mecánica). En la pulverización hidráulica se hace pasar un líquido a presión por un orificio (boquilla) en contacto con la atmósfera. El tamaño de las gotas depende de la forma y dimensiones de la boquilla y de la presión a la que llega el líquido. La pulverización neumática es la consecuencia del choque de una corriente de aire con el líquido que sale pulverizado. La pulverización centrífuga es la consecuencia de la fuerza centrífuga que se genera en un elemento en rotación sobre el que se deposita el líquido que se quiere pulverizar. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 6

7 Para conseguir producir aire a alta velocidad es necesario utilizar ventiladores centrífugos. Los ventiladores de flujo axial producen mayores caudales de aire, pero a menor velocidad. En función de la técnica utilizada para romper el líquido en gotas y la forma en la que se transportan hasta el objetivo se establece la clasificación de los equipos de aplicación. Se marcan los grupos que tiene mayor interés comercial. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 7

8 La eficacia de un producto fitosanitario distribuido por pulverización se consigue cuando la cobertura de la zona tratada es homogénea y en un porcentaje determinado de la superficie. Se ha podido observar que es la cobertura en términos de gotas/cm 2 la que garantiza la eficacia de un aplicación. Estas gotas pueden ser de diferente tamaño, lo que condiciona el volumen de aplicación. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 8

9 Con la misma cantidad de líquido el número de gotas formadas depende del tamaño de las mismas. Utilizando gotas más pequeñas la cantidad de producto se reduce, siempre que se pueda controlar la trayectoria de las gotas hacia el objetivo. Cálculo de volumen necesario en función del tamaño medio de las gotas y la cobertura deseada. El valor obtenido hay que multiplicarlo por el Índice de Área Foliar. También ha que considera la falta de homogeneidad de la población de gotas formadas. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 9

10 La pulverización de un líquido, cualquiera que sea la técnica utilizada, no proporciona gotas en el espectro que se considera distribución normal. Unas pocas gotas gruesas se llevan el mayor porcentaje de líquido. Por ello, para caracterizar la poblaciones de gotas obtenidas por pulverización se utiliza la mediana volumétrica de las gotas. El VMD, o diámetro de la gota de volumen mediana, es el diámetro de la gota que divide la población de gotas formadas en dos mitades, cada una de las cuales contiene el 50% del líquido pulverizado. De igual forma el NMD es el diámetro de la gota mediana numérica. La uniformidad de la población se defina por la relación entre la mediana volumétrica y la numérica (span). La homogeneidad de la población de gotas es diferente según la técnica de pulverización utilizada. Con la pulverización centrífuga se consigue la mayor homogeneidad. Sin embrago, la pulverización hidráulica es la más utilizada, ya que aprovechando la energía cinética de las gotas se puede conseguir la mejor distribución sobre el objetivo (solapamiento entre boquillas). Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 10

11 Las gotas de pequeño tamaño se evaporan y también son arrastradas por el viento, lo que produce pérdidas de producto y contaminación por deriva. Convienr limitar el porcentaje de gotas de menos de 100 µm. El volumen de aplicación depende del LAI del cultivo. Una aplicación de 200 L/ha en cultivo bajo se considera de bajo o de medio volumen, mientras que en cultivos arbóreos las aplicaciones en medio volumen se realzan con 500 a 1000 L/ha. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 11

12 La pulverización cubriente con gotas finas se recomienda para productos en los que conviene cubrir determinada superficie. La pulverización mojante para los productos de acción sistémica que son absorbidos por las plantas Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 12

15 La cantidad de materia activa contenida en el producto fitosanitario comercial es muy pequeña en término de gramos o litros por hectárea. Para poder distribuirla correctamente por pulverización hay que mezclarla con un diluyente (generalmente agua). La mezcla (caldo) se distribuye homogéneamente sobre la zona en la que se realiza la aplicación. El residuo que queda en la cuba hay que eliminarlo sin que produzca daños en el ambiente. El tamaño de las gotas pulverizadas y la cobertura superficial condiciona la eficacia del tratamiento. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 15

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20 Hay diferentes alternativas en las boquillas que ofrecen diferentes perfiles de distribución y tamaños de gotas. Entre ellas se encuentran las de inyección de aire. Como alternativa s eueden utilizar las boquillas líquidoaire con doble circuito que permiten ajustar volumen de aplicación y tamaño de gotas sin cambiar de boquillas Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 20

24 El aumento de la anchura de trabajo hace más difícil la estabilización de las barras y su plegado para el transporte. A partir de 12 m de anchura de trabajo las barras deben disponer de un sistema de estabilización lateral Lo sistemas de regulación por presión constante no son adecuados para las aplicaciones con pulverizadores hidráulicos de barras. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 24

25 Hay una tendencia a la agrupación de los controles en el mismo lado del pulverizador para reducir los tiempos de mantenimiento. Se generaliza la inclusión de depósitos para la mezcla del caldo y la limpieza de los envases. Es muy importante el diseño del depósito y las conducciones para un volumen residual mínimo Los sistemas de circulación continua facilitan la limpieza total del equipo. Las nuevas boquillas pulsantes permiten modificar el caudal sin que cambie el tamaño de las gotas Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 25

26 Con los depósitos de agua para enjuagado se facilita la limpieza del equipo y la eliminación del residuo en la propia parcela tratada. Los sistemas de posicionamiento global con equipos que permitan el control de la pulverización en tramos de boquillas permiten reducir las cantidades de productos aplicadas y evitan la sobredosificación. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 26

27 En los sistemas de aire los colectores y deflectores debe adaptarse a las características de la plantación Los equipos con el diluyente separado permiten reducir el vertido de agua para el lavado del equipos Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 27 53

28 Tomar siempre como referencia las indicación del fabricante del producto fitosanitario para elegir tipo de boquilla y presiones de trabajo- El proceso de calibración debe incluir siempre la verificación del caudal de las boquilals Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 28

29 El desgaste de las boquillas ocasiona pérdida de uniformidad en la distribución, a la vez que aumenta la irregularidad en la formación de gotas- Las boquillas de material cerámico son más resistentes al desgaste pero las partículas que acompañan al caldo pueden producir roturas en el orificio de salida. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 29

30 Deben realizarse antes y durante los tratamientos. 1.- Medir el caudal de la boquilla con equipo inmovilizado. Material necesario: probeta graduada y cronómetro. 2.- Control de la cobertura en campo. Material necesario: papel hidrosensible En determinadas áreas geográficas se han establecido distancias de seguridad para la realización de los tratamientos. Se refieren a las separaciones con respecto a zonas pobladas, escuelas y cauces de agua. Esta distancia está condicionada por la deriva esperada en función del tipo de tratamiento. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 30

31 La distancia de seguridad debe estar en función de las condiciones ambientales y del tipo de boquillas utilizadas. En el cado de los tratamientos con equipos de aire las bandas de seguridad establecidas suelen ser mayores que para las aplicaciones sobre cultivos bajos. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 31

33 Se estudian alternativas combinando los sistmas de cortina de aire con la carga eléctrica para reducir la deriva y mejorar la penetración de las gotas en la vegetación El buen funcionamiento de un equipo depende del estado en lo que se considera 11 puntos críticos. Previa a la presentación del equipo a una inspección administrativa el usuario puede verificar el estado de su equipo para tener la seguridad de que supera el control. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 33

34 Se recomienda realizar esta calibración al comienzo de la campaña de tratamientos. Si se utiliza el banco de distribución se detecta, además de las diferencias de caudal de las boquillas, los daños en las barras porta boquillas. Las diferencias entre boquillas no deben superar el 10% con respecto a la media. Permiten determinar el estado de la bomba (desgaste) así como el de los manómetros. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 34

35 Almacenar los productos en un local apropiado y cerrado con llave. Leer detenidamente la etiqueta del producto y las recomendaciones de empleo antes de comenzar la utilización. Protegerse de manera adecuada a la toxicidad del producto: guantes, gafas, máscara, botas, traje... Verificar regularmente y mantener en buen estado el equipo de aplicación. Controlar el llenado del depósito, evitando derrames y contaminación de las fuentes de abastecimiento; mezclado conforme a las recomendaciones fijadas para cada producto. Realizar el triple enjuagado de los envases, vertiendo el sobrante en la cuba del pulverizador, y llevar los envases al lugar señalado para su eliminación. Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 35

36 Elegir, cuando sea posible, los periodos de tiempo en los que no se perjudique a los enemigos naturales de las plagas, o a insectos beneficiosos como las abejas (evitar las horas centrales del día). No tratar en días lluviosos en los que se produciría el arrastre de los productos. No realizar aplicaciones en las proximidades de los cursos de agua, balsas y acequias Realizar las aplicaciones en condiciones atmosféricas favorables, especialmente viento y temperatura, que garanticen un bajo nivel de deriva, evitando siempre el arrastre de los productos fuera de las zonas de tratamiento. Ajustar la pulverización (volumen de caldo, tamaño de gotas, aire de apoyo, etc.) a las condiciones ambientales y del cultivo. Respetar el plazo de seguridad entre el último tratamiento y la cosecha, o la entrada de animales al campo. Limpiar el pulverizador con agua, eliminado los fondos de lavado del depósito y conducciones sobre la parcela tratada. Limpiar los equipos de protección personal. Lavarse las manos y tomar una ducha. Eliminar los residuos y envases de manera segura para el ambiente, Buenas prácticas en la aplicación de fitosanitarios - Luis Márquez 36