EL MENSAJE OCULTO DE LAS ESTRELLAS

Transcripción

1 EL MENSAJE OCULTO DE LAS ESTRELLAS ( El progreso espiritual a través del horóscopo ) Francisco Nieto Vidal

2 Con mi más profundo respeto y amor a la Fraternidad Rosacruz y a su fundador Max Heindel. 2

3 UNAS PALABRAS PARA REFLEXIONAR Cada factor en un horóscopo calculado correctamente es una representación simbólica del efecto exacto e imparcial de una causa específica. Representa la Ley cósmica e inmutable de Causa y Efecto operando en las circunstancias y experiencias de un ser humano en un progreso evolutivo de muchas encarnaciones. En un horóscopo calculado correctamente nada hay por azar, accidente, herencia, o capricho de un destino ciego. Cada posición plantearía y cada aspecto es un factor del cuerpo-alma del sujeto, una fase de su conciencia, una piedra milenaria en su sendero espiritual. De acuerdo como el astrólogo identifique sus hallazgos horoscópicos con la ley de Todo lo que el hombre sembrare, eso también cosechará estará capacitado para sintetizar correctamente el mapa en su totalidad, estará capacitado para deducir causas pasadas de condiciones presentes y estará capacitado para determinar las soluciones potenciales de los impedimentos. -Estudios de astrología- de Elman Bacher Hay un lado de la Luna que nosotros no vemos nunca, pero no por eso deja de ser esa media parte oculta un factor tan potente en la causa de las mareas, como la media parte visible a nuestros ojos. Asimismo, hay una parte invisible en el hombre la cual ejerce una influencia poderosa en la vida, y al igual que las mareas están medidas por el movimiento del Sol y de la Luna, así también las eventualidades de la existencia están medidas por las estrellas que pueden ser por lo tanto llamadas el Reloj del Destino y el conocimiento de sus naturaleza constituye una fuerza inmensa, pues para el astrólogo competente el horóscopo revela todos y cada uno de los secretos de la vida. Así pues, cuando ha dado una persona a un astrólogo la fecha de su nacimiento, le ha entregado con ella la llave de toda su alma, pues no hay secreto alguno que éste no pueda conocer. Este conocimiento puede ser empleado tanto para hacer el mal como para hacer el bien, tanto para herir como para sanar de acuerdo con la naturaleza de tal persona. Solamente a un amigo probado debe serle confiada esta llave de nuestra propia alma y, por lo tanto, no debe entregarse NUNCA a ninguno de esos que son lo suficientemente desgraciados para prostituir esta divina y espiritual ciencia por una ganancia material. Así pues, el mensaje de las órbitas astrales en su danza circular es sumamente importante y puesto que hemos dicho antes el peligro que envuelve dar la fecha de nuestro nacimiento a otro, sólo nos queda un recurso: Estudiar la astrología nosotros mismos. -Astrología Científica Simplificada- Max Heindel 3

4 PROLOGO Si examinamos un horóscopo observaremos a los signos del zodíaco en la parte externa del círculo, éstos representan las Jerarquías Divinas que ayudan a la humanidad a lo largo de su evolución. A continuación y más hacia el centro se reparten los planetas que son Espíritus representantes de otras Jerarquías más cercanas pero que tienen la misma función que las anteriores. Desde el círculo externo del zodíaco hasta el centro de la circunferencia existen unas líneas que dividen el mismo en 12 partes iguales y que llamamos Casas, éstas representan el campo donde el Ego o Alma evolucionante desarrolla sus estados de conciencia a través de su peregrinación por el mundo físico. Por último, todas esas líneas confluyen en un punto o círculo pequeño central en blanco que representa al Ego reencarnante. Todo esto unido muestra el pasado, presente y posibilidades futuras para el presente renacimiento. Por consiguiente podemos hacer dos interpretaciones importantes entre otras: 1ª. Que las Jerarquías Superiores y Espíritus Planetarios están dirigiendo su atención de forma altruista y amorosa hacia la humanidad en su desarrollo en la Tierra. 2ª. Que el espíritu reencarnante o personalidad tiene a su disposición todas esas fuerzas confluyentes en la Tierra para su propio uso y desarrollo espiritual. El Espíritu, así como el universo, fue creado por Dios pero, aún separado por el descenso del Espíritu al mundo físico, seguimos siendo parte de la Vida y la Conciencia de Dios. Somos una chispa que, separada de ese gran Fuego Creador para convertirse en llama a través de su propio desarrollo interno, no deja de ser parte de Dios al cual volverá cuando transforme sus poderes latentes en dinámicos. El horóscopo representa el laberinto por donde andaremos y nos perderemos pero donde, tarde o temprano, encontraremos la Luz que nos guiará a la salida del mundo material y a la entrada en el mundo espiritual. Aún en el laberinto estamos protegidos por los seres divinos, pero como tenemos que desarrollar la autoconciencia espiritual tendremos que hacer frente a nuestros propios errores. Sin embargo, cuando vislumbramos la luz oculta en el horóscopo, -la ayuda que tenemos a nuestra disposición y el verdadero sentido de la vidaentonces estaremos preparados para hollar el sendero espiritual a pasos agigantados. Y esto por qué? Porque esa luz hará que transformemos nuestro carácter, nuestros pensamientos y nuestra voluntad para trabajar en una sola dirección que se resume en la siguiente frase: El servicio amoroso y desinteresado a los demás es el camino más corto, más seguro y más gozoso que nos conduce a Dios. Evolucionamos un poquito cada día gracias a las experiencias y a las circunstancias que nos rodean, es más, también lo hacemos porque estamos rodeados de vibraciones pertenecientes a otras personas, más las que proceden de los Seres Divinos que nos ayudan y las de Dios mismo. De cuántas somos conscientes? Lo somos al menos de las experiencias y circunstancias? La mayoría de las veces ni siquiera eso. La unión de la personalidad con el Espíritu se consigue: 1º. Con la autoconciencia del Yo adquirida en el pasado y 2º. Por la aplicación de la voluntad y la conciencia de nuestras acciones, deseos, sentimientos y pensamientos presentes. Cuántas veces somos conscientes de esto?, o lo que es lo mismo 4

5 Cuántas veces actuamos pensando en esa unión y elevación espiritual? Pues si no nos damos cuenta de eso cómo vamos a percibir las influencias espirituales que nos rodean? La aceleración para la unión espiritual se consigue a través de métodos, técnicas, oraciones y mucha persistencia aconsejo a los interesados leer mi primer libro Métodos esotérico-prácticos para el desarrollo interno - de otra forma el camino es más fácil pero más lento aunque con cualquiera de ellos debemos desechar todo lo reflejado como negativo de los astros y trabajar por desarrollar lo positivo de los mismos. Lo negativo no es tal en los signos y planetas sino que representan las debilidades en las que podemos caer si no nos esforzamos por desarrollar sus cualidades y a la vez nos dejamos llevar por las pasiones, sentimientos y deseos más bajos. Como resulta que, de cualquier manera, todos debemos abandonar la práctica en pensamiento, palabra y obra- del mal para desarrollar el bien y así desarrollar también los poderes del Espíritu, para conseguirlo tenemos tres caminos a mi entender: 1º. La práctica del cristianismo o misticismo; 2º. El conocimiento y práctica de la verdadera filosofía oculta (ver libros de Max Heindel) que se compenetra perfectamente con el cristianismo. 3º. La astrología una vez que se sabe extraer su ayuda espiritual. Y esa es mi idea, mostrar a los lectores que el horóscopo es un libro de autoayuda más que de otra cosa. La astrología nos ayuda a responder a las vibraciones que necesitamos y a rechazar las mundanas que nos entorpecen, casi me atrevo a decir que el estudio de la astrología, desde el punto de vista espiritual, es un sendero de desarrollo personal. El verdadero astrólogo espiritual descubre la sabiduría y ayuda espiritual de los astros y del horóscopo, y a partir de ahí comienza a trabajar con el potencial que ha adquirido y que se refleja en su carta natal y a disfrutar de la vida en un nuevo nivel de conciencia que le traerá felicidad para sí mismo y comprensión y tolerancia hacia los demás. El astrólogo comprende el Plan de Dios y colabora con él, comprende que todo en el universo procede de Dios y que todo está en Dios, por consiguiente él está en Dios y debe actuar como un instrumento en vez de un impedimento. El astrólogo comprende por qué surgen los inconvenientes en sus relaciones y el motivo de ciertos obstáculos en su vida, lo que le lleva a ser más humilde, sencillo y servicial; pero también sabe que aunque la ayuda procedente de los planos superiores desciende para el buen aprovechamiento de todos, solo los que estudian esta ciencia, entre otras, saben reconocerla y ponerla en práctica para su propio desarrollo. El beneficio de la astrología está en saber poner en práctica el conocimiento profundo obtenido del estudio de los astros y del horóscopo personal, y el mayor mal que nos puede traer es pensar que nada es mejorable y que nos tenemos que conformar con lo que muestra nuestro horóscopo. Con esto no quiero decir que todas las tendencias y posibilidades del horóscopo sean fácilmente realizables, al contrario, si no nos esforzamos nada podemos esperar, en ese mismo sentido, las indicaciones sobre problemas y obstáculos también se pueden afrontar y transmutar pero si no hacemos nada se desarrollarán. Pongámonos a trabajar con todo el conocimiento que daré a lo largo de las páginas con la firme confianza y seguridad de que obtendremos un mejoramiento y elevación del carácter. A su vez, este carácter positivo se mostrará en nuestras acciones, sentimientos y manera de pensar, lo que inequívocamente, traerá un buen destino para la presente vida y más aún para la futura. El autor 5

6 INTRODUCCIÓN Como estudiante de la Filosofía Rosacruz de Max Heindel he aprendido, entre otras muchas cosas, que la astrología es una ciencia sagrada que nos puede ser de gran ayuda en nuestro progreso material y en nuestra propia evolución espiritual. El horóscopo individual nos ayuda a ver nuestros defectos y cualidades, nuestras posibilidades de progreso en todos los sentidos, nos muestra nuestro estado espiritual y las necesidades en esa misma línea y, por último, la relación entre el ser humano y el Creador del Universo. Con la práctica, el estudiante averigua en el horóscopo cuál es la naturaleza de su carácter y de sus tendencias mentales para así analizarlas y corregir sus líneas de actuación que le lleven a cambiar su personalidad en sentido espiritual a la vez que elimina las tendencias negativas. De esta forma podemos ver como cada individuo puede ser el maestro de su vida a la vez que utiliza sus cualidades para beneficiar a los demás, y este y no otro, es el principal motivo que me ha llevado a escribir este libro. Si todas las personas con posibilidades estudiaran la astrología, el mundo no sería actualmente como es. En tal caso, los profesores, educadores, políticos, médicos, jueces y otros muchos profesionales y personas altruistas y benévolas cambiarían su manera de actuar, creando, como efecto, un mundo mejor donde pensaríamos más en el prójimo que en nosotros mismos. El verdadero astrólogo espiritual sabe perfectamente que esta sagrada ciencia está íntimamente relacionada con las dos principales leyes universales que conocemos en esoterismo como: Ley de Consecuencia y de Renacimiento. De esta forma comprende que el horóscopo actual es el resultado de su evolución pasada otras vidas- de sus actos, de su búsqueda, esfuerzo, pretensiones, etc. y como tal, le ofrece toda una serie de posibilidades de progreso a la vez que elimina otros impedimentos o defectos que le harán tomar conciencia de sus errores del pasado. Basándonos en este conocimiento podemos asegurar que el momento exacto del nacimiento no es casualidad sino causalidad. Los Ángeles del Destino propician y calculan el momento exacto del nacimiento para que, según el movimiento de los astros, nos traigan esas posibilidades y oportunidades de desarrollo según seamos capaces de hacerles frente, y ahí precisamente es donde nos puede ayudar la astrología. Lo mismo que un efecto no puede existir sin una causa y lo mismo que no podemos pedir rentabilidad a un banco si no hemos ingresado dinero en él, así mismo no podemos pedir un buen destino si no hemos hecho méritos para ello en vidas pasadas. Es más, normalmente nos fijamos en los malos aspectos de un horóscopo sin darnos cuenta de la necesidad de ellos para nuestro progreso y no damos importancia a los buenos que son poderes consolidados que nos son muy útiles para vencer los anteriores. El horóscopo enseña que nada podemos conseguir gratuitamente pero la mayor rentabilidad viene dada cuando invertimos de forma altruista y no egoísta. Alguien puede pensar que no somos libres, nada más lejos de la verdad. Nuestro destino es el efecto de nuestros actos pasados pero nosotros somos libres de aprovechar las oportunidades y progresar creando un mejor horóscopo para la vida futura, o por el contrario, llevar una vida pasiva y de placer que hará que en la próxima vida estemos más limitados y, por tanto, obligados a actuar para solucionar los problemas y tomar conciencia de ellos; por 6

7 consiguiente, los astros inclinan pero no obligan. Pongamos un ejemplo: Si una persona con su Venus y Marte mal aspectados en Casa 7 o en Libra estudia este aspecto, verá que puede tener problemas en su matrimonio y entre otras cosas por su carácter, si ignora la astrología o no se esfuerza por superar esa tendencia puede terminar con unas deudas kármicas respecto a la otra persona cuando debía ser lo contrario. Si esta persona se interesa por la astrología y, como es lógico, sabe que esa relación debe terminar de forma amistosa o fraternal, se esforzará con controlar su carácter -posiblemente agresivo- para manifestar respeto y amor. De esta forma se cumple con el destino y se crean mejores causas que se reflejarán como buenos aspectos en un horóscopo futuro. El conocimiento de esta sagrada ciencia nos ayuda a eliminar con menor sufrimiento el karma negativo deudas- de nuestros destinos, a aprovechar las oportunidades para acelerar nuestro crecimiento y, en resumidas cuentas, a dominar nuestras estrellas. Es un error pensar que porque nuestro horóscopo tenga muchos aspectos negativos no podemos cambiar nuestro destino, eso sólo ocurre cuando no afrontamos los problemas buscando una salida positiva o simplemente cuando nos hundimos en la tristeza y en la depresión. Es a través de la voluntad bien dirigida y razonada como vencemos o cambiamos el karma maduro, y esa voluntad aumenta en poder cada vez que la utilizamos positivamente. La voluntad y la razón son efecto del trabajo en anteriores vidas, y en cada vida tenemos grandes oportunidades para cultivarlas y engrandecerlas, si las utilizamos en el estudio de nuestro horóscopo veremos que tenemos mucho trabajo en nuestras vidas hasta conseguir espiritualizar el carácter. El horóscopo nos dice dónde tenemos que corregir nuestro carácter, nuestros sentimientos, nuestra manera de pensar y de actuar. Una vez puestos a trabajar sobre esto podemos ver dónde encontraremos problemas o impedimentos en la vida laboral, social, matrimonial, etc. y, si hemos trabajado el carácter, podremos superar muchos de esos aspectos. Pero además, también nos indica las cualidades físicas y espirituales que traemos adquiridas con las cuales, si nos esforzamos, podemos conseguir muchos éxitos. Se dice en la filosofía rosacruz que es vencido sólo quien deja de intentarlo, lo que aplicado a la astrología significa que no conseguirá progreso o un mejor destino quien no persista en purificar su personalidad y en espiritualizar su vida por medio de sus virtudes herramientaspresentes, las cuales podemos ver en nuestro horóscopo individual. La influencia de las estrellas ha estado presente en nuestro sistema solar y en la evolución de la humanidad desde su mismo nacimiento, ellas han ayudado al ser humano a conseguir todo lo que nos rodea, pero además, también son ellas las que nos han ayudado a elevar nuestros sentimientos y a despertar la razón. Pero a la vez que nos han ayudado a desarrollas las cualidades físicas y espirituales permiten que actuemos según nuestro propio albedrío para que aprendamos de nuestros propios errores. De la misma manera que la humanidad en conjunto ha pasado de actuaciones egoístas y dictaduras a formas de gobierno y dirección más fraternales y democráticas gracias a ponerse en sintonía con las vibraciones espirituales de los planetas, así mismo el ser humano individual ha pasado por etapas similares que le han llevado a pensar más cada día en el prójimo que en ellos mimos. Lo mismo que hay crisis mundiales hay crisis individuales y sólo se superan cuando se toma conciencia de los errores y defectos personales a la vez que elevamos nuestros sentimientos, deseos y forma de pensar gracias a la apertura de nuestra conciencia a las influencias positivas estelares. Este libro por sí mismo no nos ayudará a progresar en ningún sentido ni nos solucionará los problemas pero sí nos dará las pautas para conseguirlo. Desde el momento en que conozcamos la naturaleza de los planetas y su influencia sobre los Signos y las Casas sólo tendremos que meditar sobre sus Aspectos para saber dónde y cómo debemos actuar para tener una vida más cómoda y un destino futuro mejor. Mi consejo, por tanto, es que el lector haga todos los esfuerzos posibles para aprender a interpretar su horóscopo para así poder extraer todo el beneficio posible que le brinda la vida a la vez que colabora con las estrellas en la armonía del universo. Por otro lado, también aconsejo que no prostituya esta sagrada 7

8 ciencia y que los trabajos que haga a otros sean con la única intención de ayudarles de una forma altruista y amorosa, así no obtendrá medios económicos pero sí una gran ayuda de Dios y de los seres que auxilian a la humanidad. Si una persona cumple con sus deberes y responsabilidades laborales y sociales y intenta tener una moral elevada y un punto de vista positivo respecto a todo lo que le rodea, es fácil que sea feliz aunque tenga algún que otro inconveniente material, sobre todo porque será bien valorado y estimado en todos los sentidos. Algo similar ocurre con el estudio de nuestro horóscopo. Si comprendemos y practicamos todo lo bueno que tenemos en esta vida, aunque tengamos ciertos problemas o crisis en diversas áreas de nuestro destino, podremos utilizar esos problemas, a la vez que nos fortalecemos, para superar otros futuros. Esa es la gran ayuda del horóscopo, ayudarnos a evolucionar más rápidamente en esta vida para andar a pasos agigantados respecto a otros. El estudio espiritual de nuestro horóscopo nos hace humildes, comprensivos, tolerantes, altruistas y responsables entre otras cosas; nos enseña a convivir más fraternalmente con la sociedad porque sabemos que ellos también están evolucionando. El horóscopo nos muestra lo que hemos adquirido como individuos moralidad, espiritualidad, razonamiento, etc., lo que podemos alcanzar y cómo lo podemos utilizar, pero en nosotros está actuar con discernimiento y libertad para crear el horóscopo de nuestra futura vida. Según sea nuestra actitud en la vida así será el resultado inmediato (ver El desarrollo espiritual después de la muerte del mismo autor) después de la muerte y antes de renacer cuando los Ángeles nos proponen la futura vida. No se puede pensar en un Dios tan injusto las religiones coinciden en que Dios es Amor- que facilite una vida llena de placeres a unos mientras a otros les castiga con toda una serie de sufrimientos. Lo que normalmente llamamos malo es el efecto de malas actuaciones de las que debemos tomar conciencia, pero es que además, cuando sabemos interpretar nuestro horóscopo, vemos que tenemos muchos medios para afrontarlo y superarlo. Si los planetas representan poderes o facultades, si con los signos formamos el carácter y desarrollamos los poderes internos, y las Casas representan los detalles y circunstancias de la vida, no tenemos todo lo necesario para trabajar en la formación de un mejor destino? Si cada planeta tiene una determinada vibración y sabemos que los buenos aspectos tienden a elevarlo en sentido espiritual y los malos a generar los peores defectos y dificultades no es lógico que trabajemos con los aspectos benéficos para combatir los maléficos? Si sabemos que la progresión de los planetas en nuestro horóscopo marca el momento en que determinados hechos pueden ocurrir no es lógico que lo analicemos para ver de qué mejor manera podemos afrontarlos y sacar más provecho? Si supiéramos lo que nos trae el destino respecto al matrimonio, trabajo, economía, salud, etc. y quisiéramos influir sobre esos hechos para prevenirlos o mejorarlos no es lógico que lo hiciéramos? Pues todas estas cosas se pueden conseguir cuando se estudia y analiza profundamente el horóscopo. Es cierto que, según el desarrollo o evolución de cada individuo está más preparado para ejercer ciertas profesiones más que otras, de hecho, el astrólogo se identifica con la vibración de Urano principalmente, pero eso no significa que cualquier persona no pueda estudiar la astrología y sacar un gran provecho de ella. La astrología espiritual -como yo denomino esta enseñanza- y la Fraternidad Rosacruz Max Heindel, enseñan que la astrología, como ciencia sagrada que es, no se debe utilizar para beneficio propio. Esto quiere decir que el verdadero astrólogo nunca debe obtener dinero a cambio. En mis años de experiencia y enseñanza a través de conferencias y cursos no he cobrado nunca dinero alguno, y cuando por ayudar a alguien he hecho e interpretado una carta astral, tampoco. La astrología, así como la filosofía oculta rosacruz, predican esta filosofía de vida con el único fin de que los interesados la lleven a la práctica y puedan alcanzar un gran desarrollo espiritual en esta vida. Yo, como estudiante que me consideraré toda la vida, y simpatizante de esta Escuela predico esa misma filosofía e invito a todos mis lectores a hacer lo mismo. Son muchos y lo digo por experiencia- los que quieren aprender para ganar dinero 8

9 a costa de algunos consejos y mucha palabrería en sus trabajos astrológicos, es más, lo hacen de forma irresponsable y, a veces, hacen más daño que bien a los que acuden a pedirles ayuda. Los que en esta vida hemos conectado con esta sabiduría, ha sido gracias a nuestro esfuerzo, pero también gracias a los demás con los que nos hemos puesto en contacto y a las Fuerzas Invisibles que colaboran en el esquema evolutivo de Dios. Por tanto, qué derecho tenemos para apropiarnos de algo que no es nuestro y sacar un beneficio material cuando lo han puesto en nuestro destino para que obtengamos un beneficio espiritual? Cada uno de nosotros somos un mundo, y esto es así desde que hace muchos miles de años obtuvimos la autoconciencia, desde ese momento nos pusimos en contacto directo con las leyes de Renacimiento y Consecuencia. Entonces no éramos capaces de sintonizar con las vibraciones de los planetas que guiaban el destino de la humanidad, pero desde entonces hasta nuestros días hemos evolucionado hasta el punto de poder guiar en gran parte nuestro destino. Por consiguiente, somos y nuestro horóscopo es, el efecto de nuestro propio desarrollo individual en el más amplio sentido de la palabra. Es nuestro deber, por tanto, trabajar este conocimiento para aprovechar todas las oportunidades posibles a modo de agradecimiento por el mismo mientras lo utilizamos en favor de los demás. No se trata de aceptar ciega y pasivamente las delineaciones de nuestro horóscopo, sino de saber encontrar en el mismo la manera de afrontar y superar las pruebas negativas por medio de la utilización de las virtudes obtenidas en anteriores vidas, así evolucionamos vida tras vida. Debemos ser conscientes de que no hay nada en el horóscopo que no nos corresponda y de lo cual no seamos responsables, los seres que lo administran con nuestra colaboración antes de renacer son como nuestros padres en el mismo sentido que nosotros podemos imponer un castigo o una prohibición a nuestros hijos aún teniéndoles mucho amor, por tanto nuestra obligación es colaborar con ellos y así ellos nos limitarán cada vez menos. Debemos entender el horóscopo como las instrucciones para que en esta vida consigamos elevar al Yo Superior y para que no volvamos a cometer los mismos errores del pasado. Los astros se mueven progresivamente marcando a su vez en nuestro horóscopo las oportunidades de mejoramiento y de liquidar nuestras deudas, en nosotros está saber cuándo ocurre y cómo podemos actuar para conseguirlo, no se trata nada más que de persistir, persistir y persistir. Como ya dije en mi anterior libro de bolsillo Cómo interpretar un horóscopo sin ayuda de nadie hoy ya no es necesario aprender a hacer el horóscopo ni todo lo que eso conlleva. Es cierto que lo ideal sería que el estudiante de astrología aprendiera a hacerlo tan bien como la interpretación, pues al fin y al cabo, no se necesita saber nada más que sumar y restar y tener un poco de intuición para hacer un buen resumen de su significado. Pero lo cierto es que hay programas informáticos astrológicos que, si el que lo utiliza sabe lo que hace, nos pueden hacer el horóscopo perfectamente bien. Aún así hay una regla para verificar si el horóscopo está bien hecho, esta la siguiente: Teniendo por norma que cada una de las 12 Casas representa 2 horas de las 24 que tiene el día, y sabiendo que el Mediocielo simboliza las 12 del mediodía; la cúspide de la Casa 7 a las 18 horas; el nadir o medianoche a las 24 horas; y el Ascendente o primera casa a las 6 de la mañana, es fácil comprobar si el Sol está ubicado en la casa que le corresponde según la hora de nacimiento. Naturalmente que el nativo debe saber si en el momento de su nacimiento había alguna hora de adelanto para no equivocarse en la ubicación de su Sol. Además y para más fiabilidad, debe comprobar si el Sol coincide en su signo de nacimiento. Teniendo en consideración estas palabras puede pasar a la interpretación de su horóscopo, sin embargo deber saber que: 1º.- Nunca hay que predecir nada sobre la muerte. 2º.- No es conveniente decir a una persona de una forma afirmativa que se puede quedar inválido o algo similar para toda la vida. 3º.- Tampoco es conveniente decirle que puede tener una enfermedad incurable. 9

10 Alguien puede pensar que esto no tiene importancia pero, por experiencia puedo explicar que una persona puede decir que no le importa saberlo y al cabo de un tiempo estar obsesionado y temiendo que le pueda ocurrir eso en cualquier momento. En astrología se llama progresión al movimiento progresivo que hacen los planetas día tras día y años tras año y que se puede dibujar en el horóscopo natal para ver que relación y aspectos existen entre ellos. Estos planetas progresados indican el momento en que las tendencias buenas o malas del horóscopo se pueden cumplir. Cuando en una carta astral vemos que las progresiones y tránsitos de los planetas estimulan a los planetas radicales mal aspectados indicando la posibilidad de acelerar la manifestación de un hecho peligroso y preocupante, decirlo, es ir en contra de los principios espirituales de la astrología. Estos son algunos motivos por los cuales no es conveniente decirlo: 1º.- El nativo ha podido superar esas malas tendencias por medio del cuidado de su salud, higiene, decisión, responsabilidad, etc. 2º.- Ha podido ser advertido por un astrólogo espiritual con suficiente tiempo como para hacerlo frente y cambiar algunos aspectos. 3º.- Ha podido fortalecer su voluntad de tal modo que, a través de la astrología, ha sabido trabajar con sus aspectos para transmutar sus tendencias. La regla es que se hable de tendencias y posibilidades y a continuación se sugiera los medios para transmutarlas o evitarlas. Si no es así y no tenemos precaución, el nativo puede cambiar su forma de vida, hábitos y forma de pensar y caer en cualquiera de las enfermedades que le hayamos dicho. Dicho esto podemos hablar de las enseñanzas de este libro. En él intentaré dar todos los medios que conozco para que el nativo pueda interpretar su carta astral, es decir, todos los elementos que pueden ser memorizados para que, después de un razonamiento profundo, pueda sacar las mejores conclusiones que le llevarán a cambiar en parte su destino, a aprovechar las oportunidades, y a prevenir otros aspectos negativos. Estoy en condiciones de asegurar que con todo este conocimiento cualquier persona podrá extraer una gran ayuda para actuar positivamente sobre su destino y sobre el mundo y las personas que le rodean. Que la luz de la Verdad guíe los pasos del lector para que pueda ver la verdadera finalidad de su vida El autor 10

11 CAPÍTULO I ASTROLOGÍA, ESOTERISMO Y MISTICISMO El ser humano, tal y como normalmente lo interpretamos, es la parte visible del verdadero Espíritu, así mismo, los planetas y todo el Universo son el aspecto visible del Espíritu Planetario que le gobierna y de las Jerarquías Divinas que crean y dirigen sus fuerzas. El verdadero Espíritu se manifiesta como un triple espíritu al igual que su Padre -Espíritu Divino, Espíritu de Vida y Espíritu Humano- y éste utiliza cuatro cuerpos para poder evolucionar en los mundos inferiores y más concretamente en el físico, estos son: Cuerpo mental, de deseos, vital o etérico y físico. En total forman 7 vehículos, como 7 son los planetas de nuestro sistema solar aunque la influencia sobre la tierra proceda de 12 con sus correspondientes signos del zodíaco. Los cuerpos inferiores del ser humano tienen 12 centros o chacras -aunque los más predispuestos para el desarrollo interno sean 7-, el cuerpo físico tiene 7 glándulas de secreción interna que están relacionadas íntimamente con las Jerarquías Creadoras llamadas por la iglesia católica: Ángeles, Arcángeles, Principado, Potencias, etc. y Ángeles, Arcángeles, Señores de la Mente, de la Forma, de la Individualidad, etc. según las enseñanzas esotéricas, y más concretamente con los Espíritus Planetarios de los planetas Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte, Saturno y Júpiter. Cada planeta emite su propia nota-clave que, a su vez, repercute sobre los diferentes cuerpos, los cuales según el desarrollo de cada uno de ellos, van sintonizándose en cada renacimiento. El gran Ser que normalmente llamamos Dios es el creador de nuestro sistema solar, pero detrás de ese sistema físico existen 7 mundos o planos con los cuales están relacionadas las Jerarquías Creadoras, los 7 vehículos del Espíritu y los 7 centros y glándulas que he mencionado. Por tanto, Dios ha creado, con la colaboración de las Jerarquías y de los 7 Espíritus Planetarios ante el Trono, diferentes grados de densidad de materia cada uno como campo de desarrollo y progreso para sus hijos. El ser humano evoluciona en el mundo físico que es el más denso de los 7, sin embargo, está relacionado con todos ellos y, por consiguiente, con Dios a través de esos Mundos, Jerarquías, Espíritus Planetarios, sus propios cuerpos, y la conciencia adquirida en vidas pasadas. El Ego es el ser que reencarna en los cuerpos físicos, el que siembra y recoge, y el que adquiere el progreso espiritual por medio de la toma de conciencia de sus actos buenos y malos. Pero este Ego, aunque libre en su voluntad, está aprendiendo a colaborar con Dios y con las estrellas y aún es ignorante de las leyes que Dios y las Jerarquías administran como lo es un niño que no entiende porqué le prohíben muchas cosas aún siendo por su propio bien. Estas Leyes condicionan el destino de cada uno según sus necesidades de aprendizaje y según los efectos de sus actos pasados, sin embargo, lo mismo que un niño puede desobedecer cuando se le advierte de un peligro y aprende la lección sufriendo un daño, así la humanidad evoluciona más por sus errores y maldades que por su buena voluntad. Ya hemos visto de una manera muy resumida, que el verdadero ser humano está evolucionando en el planeta Tierra pero bajo la influencia de toda una serie de fuerzas astrológicas y espirituales que le facilitan su progreso hasta que, en un futuro aún muy lejano, sea un Dios creador como su padre que está en los cielos. Dios, a su vez, está íntimamente 11

12 relacionado con otras esferas mayores de las cuales utiliza sus fuerzas para su propia creación y perfección. Su principal fuente hacia nosotros es el Sol espiritual junto con los planetas los que actúan de forma similar a nuestros chacras- pero a su vez y como auxilio para Su Obra también hace uso de otras fuerzas como son: La Constelación de la Osa Mayor, las Pléyades, la Estrella Sirio y las 12 Constelaciones del Zodíaco. Esas fuerzas constituyen Rayos, los cuales junto con los planetas, emiten una serie de aspectos que en el horóscopo se reflejan como virtudes espirituales. Dicho de otro modo, representan los medios e ideales que el ser humano debe adquirir a través de lo que siembra y cosecha en cada renacimiento. No cabe la menor duda de que cuanto más atrasada la humanidad más errores y más maldades ha cometido y comete y, por tanto más se ve limitada por los planetas encargados de que tome conciencia de ello, a su vez, esa línea de conducta impide la relación o sintonización con los planetas más elevados y con las vibraciones que más nos pueden beneficiar. Eso, al fin y al cabo, era lo que ocurría en las primeras épocas de desarrollo, y aunque nos hemos puesto en sintonía con otros planetas benéficos, lo cierto es que sólo estamos a mitad de camino. Por consiguiente, quien intenta practicar y desarrollar las virtudes astrológicas no sólo se libera de las limitaciones, sino que también se pone en contacto con esas grandes jerarquías que están deseosas de ayudarnos. Por todo esto, la evolución de la humanidad está unida a la obra de las Jerarquías Divinas que rigen los planetas y los signos del Zodíaco, y podemos asegurar que el Zodíaco y los planetas son la clave en el pasado, presente y futuro de la humanidad. La evolución de la humanidad se produce gracias al movimiento hacia atrás del Sol, lo que también se conoce como precesión de los equinoccios. Esta precesión del Sol a través de los signos años naturales por signo aproximadamente- es la que trae consigo las posibilidades de progreso. Los signos Capricornio y Cáncer que representan muerte y nacimiento respectivamente, son los signos que marcan las etapas más importes por donde la humanidad debe transcurrir, y cuando digo etapas me refiero incluso a las relacionadas con la religión, la ciencia, el arte, etc. Por consiguiente, podemos representar a la humanidad simbolizada por el Sol partiendo como tal cada año en Capricornio donde comienza un nuevo ciclo, pero también comenzó así su evolución hace miles de años para pasar después por precesión a Sagitario. Este signo, mitad hombre mitad animal representa el paso de la humanidad por un estado de conciencia similar al animal. En Escorpio, símbolo de la astucia, obtuvimos los primeros principios mentales; en Libra aumentamos el entendimiento y la responsabilidad como individuos de nuestros actos para hacer frente a la justicia del karma Ley de Consecuencia- Si con los signos anteriores adquirimos cierto progreso moral, mental y físico, con Virgo estábamos preparados para recibir el impulso de Cristo en nosotros, o sea, preparar nuestro cuerpo-templo para que en un futuro pueda nacer Cristo en él, por eso Virgo representa a la Madre Inmaculada. En Leo dimos un paso más en nuestra evolución desarrollando determinados aspectos personales que nos prepararían para entrar en la época atlante de Cáncer. Desde el signo de Cáncer hasta los últimos grados de acuario la humanidad habrá completado esta vuelta alrededor del Zodíaco, la que podría ser muy fácilmente la última y anterior a la Sexta Época. Por consiguiente, es posible que la segunda venida de Cristo se produzca antes de que entremos en esa Sexta Época, antes de volver a comenzar en Capricornio y antes de 3000 años aproximadamente. Cuando el Sol por precesión pasó por Cáncer signo de Agua- nos encontrábamos al principio de la Época Atlante. Aquí comenzamos a dejarnos llevar por las pasiones de Lucifer y a practicar el sexo para procrear cuerpos físicos, por tanto fuimos conscientes de la vida Cáncer- y de la muerte de nuestro vehículo físico Capricornio- A mitad de la Época Atlante, en el signo de Géminis, se desarrolló en gran parte la personalidad egoísta y trajo consigo las luchas y el derramamiento de sangre simbolizado por Caín y Abel. Tauro representa la última parte de la Atlántida cubierta por el agua- donde fue adorado el Toro como se representa en la Biblia respecto a los Diez Mandamientos. Cuando el Sol entró en Aries, el cordero, 12

13 comenzaron a formarse las religiones y así nació la Época Aria como sobreviviente de la Atlante donde recibimos la enseñanza que nos llevará a hacer que el Cristo místico nazca dentro de nosotros antes de que Cristo tenga su segunda venida. En la época de Cristo se llamó pescadores de hombres a los apóstoles y el pez tuvo gran importancia incluso mucho tiempo después en la iglesia que nos prohibía comer carne en determinada fecha para que comiéramos pescado; debíamos y aún debemos, dominar el deseo de la carne y dejarnos llevar por el signo contrario de la Virgen Virgo- Cuando el Sol entre en Acuario dentro de unos 500 años aproximadamente, vendrá una nueva etapa dentro de la religión exotérica del Cordero y el hombre imitador de Cristo, el que dio Su Vida por la humanidad, podrá alcanzar un nivel muy respetable en su evolución espiritual preparándose así para otra etapa superior de progreso. Las Jerarquías o Guías de la humanidad emiten su ayuda en forma de Rayos, los cuales afectan sólo a quienes han desarrollado ese grado de vibración en sus vehículos internos, pero cuando estas Jerarquías quieren limitarnos lo hacen por medio de los aspectos planetarios que se reflejan en nuestro horóscopo el cual, como sabemos, es confeccionado por los Ángeles del Destino antes del renacimiento. En la Época Lemúrica, cuando la humanidad no había obtenido aún su autoconciencia, ésta tenía una mente más bien instintiva o infantil por medio de la influencia de la Luna. Por otro lado, Marte también tenía una gran influencia ya que representa la energía dinámica que necesitamos para nuestras acciones diarias. Por último, Saturno, el obstructor que nos hace responsables, también tenía un tercer papel astrológico, pero ni uno sólo más podía influir porque la humanidad no estaba preparada para ello. Si observamos las razas, sub-razas, los continentes, la capacidad e ingenio de algunos frente a otros, etc., podemos ver que hay una gran variedad de grados de desarrollo físico, moral y mental en todo el planeta. Esto significa que hay personas que viven sin apenas hacer esfuerzos por progresar, que se han adaptado a su forma de vida pasiva y con tan poco razonamiento que casi mueren con las pocas cualidades y muchos defectos que nacieron. Por otro lado, hay otros que se esfuerzan en trabajar, crear y responder a las circunstancias de la vida, así crean muchas causas nuevas y hacen frente a los efectos de causas pasadas. Para los primeros sobran todos los planetas excepto los tres mencionados en la época Lemúrica, para los segundos, ya están en juego otros planetas de los cuales han sabido aprovechar su influencia y con los cuales se identifican cada vez más. Los primeros casi viven en sus emociones, sentimientos y deseos materiales, los segundos saben utilizar su mente para controlar esos aspectos, para razonar y para crear los más modernos inventos y tecnologías. En la Época Atlante hubo otros grupos que, además de la mente, comenzaron a sentir la vibración de Venus, la que representa las cosas bellas de las personas y de nuestro entorno, pero otros muchos entonces y aún ahora, no han conectado lo suficiente con Venus y se dejan llevar por el deseo descontrolado de placeres de Marte. Unos ven belleza en la mujer mientras que otros sólo ven un objeto de deseo para la satisfacción de sus pasiones. Venus trajo las bellas artes, el refinamiento moral y la elevación de la conciencia para valorar a los demás de forma distinta a la acostumbrada. La Jerarquía de Mercurio nos ayudó a desarrollar la mente, lo que hizo que, junto a la influencia de Venus, nos capacitáramos par razonar las emociones y deseos. Venus fue y es imprescindible para dominar la influencia marciana pero, para elevar a Mercurio, la mente personal, necesitamos la influencia de otro planeta mental de grado superior, éste es Urano. Venus y Urano transforman la manera de pensar y de amar en un sentido casi universal. Naturalmente que en cada renacimiento vamos progresando en el dominio de las fuerzas astrológicas, pero también es cierto que en determinadas vidas estamos más apoyados por unos rayos que por otros según el karma que tengamos que afrontar, sin embargo, eso no impide la utilización inteligente y razonada de otras fuerzas gracias al conocimiento de la astrología. Hace unos años se valoraba el machismo, la fuerza bruta, el poder dominar a otros, etc. pero hoy está decayendo todo eso -sobre todo en occidente- mientras que todavía existe 13

14 en otros continentes, razas y tribus. Hoy la gran mayoría de los occidentales perciben y colaboran con los rayos del Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte y Saturno pero aún se nota mucho la influencia combinada y egoísta de Marte y Saturno porque miramos más por nosotros, nuestra familia y nuestras cosas que por los demás, por tanto debemos trabajar más con Júpiter que representa otros ideales más elevados. Según seamos capaces de sentir y poner en práctica las virtudes de Júpiter, Urano y Neptuno así nos acercaremos a la Iniciación la que nos traerá un nuevo concepto de vida en todos los sentidos, entonces amaremos con la mente y pensaremos con el corazón. Ese grado, que algunos pocos ya han asimilado, hace cambiar nuestra aura de tal forma que, aunque una persona no la pueda ver, sí percibirá un desarrollo espiritual notable. Como podemos ver, el hombre va respondiendo cada vez más a las vibraciones de los planetas, va colaborando más y aprendiendo a utilizar voluntariamente sus cualidades mientras da de lado sus defectos. No hemos tomado conciencia de todos los rayos planetarios y actualmente, los más difíciles de asimilar, entender y trabajar son Urano y Neptuno, porque Plutón y el planeta que queda por descubrir no pueden influir en la humanidad porque no estamos en se grado de vibración. La luz del Sol Dios- llega a todos los planetas, bien directamente o bien reflejada, y desde allí irradian sobre la Tierra toda su influencia acompañada del grado de amor correspondiente a esas Jerarquías, luego entonces, nosotros estamos bañados por todas esas bendiciones; la capacidad de captación y absorción dependerá del desarrollo obtenido y del esfuerzo que hagamos en el presente. Es conveniente que los lectores sepan que cuando hablamos de Jerarquías Planetarias no nos referimos al aspecto físico de las estrellas y planetas sino a las conciencias divinas que utilizan estos cuerpos para manifestarse como nosotros lo hacemos a través del cuerpo físico. Cada una de las inteligencias planetarias tiene su propia nota-clave o virtud y color como reflejo de la única Luz procedente del Sol de donde ellos proceden. Así ellos irradian su notaclave hacia los demás cuerpos y muy concretamente al planeta Tierra, donde repercute en su aura y en el aura de los cuerpos de las personas. Cada uno de los Espíritus Planetarios también influye sobre los reinos, las razas, subrazas, especies, notas musicales y un largo etc. Es necesario decir para una mejor comprensión que como es arriba es abajo, es decir, en la humanidad el Ego es la Luz, Dios en formación, y Dios se manifiesta a través de sus siete cuerpos y, cuando llega al físico, tiene gobierno incluso sobre las células y todo el organismo hasta el día de su muerte. Cada espíritu reencarnante pertenece a un Rayo desde su ingreso en el proceso de individualización y desarrollo a través de los mundos. En cada encarnación renace con otros rayos como por ejemplo el de raza, pero el Espíritu como tal, tiene tres principales aspectos que son los de Dios y que debe desarrollar a lo largo del proceso involutivo hacia la materia y evolutivo de vuelta hacia su hogar. Estos tres aspectos son: Voluntad, Sabiduría y Actividad, y estos a su vez están relacionados con las cualidades representadas por las tres cruces del horóscopo llamadas Fijas, Comunes y Cardinales en ese mismo orden. De estas tres cualidades generales surge una nueva división de cuatro Triplicidades en total forman siete aspectos- relacionadas cada una con los cuatro elementos del horóscopo -Aire, Fuego, Agua y Tierra- que representan a los mundos inferiores donde la humanidad evoluciona. En realidad todo el horóscopo representa el estado de conciencia y evolución del individuo, pero ese estado de conciencia está formado por muchos aspectos y elementos del mismo. Así, cada una de las cruces Cardinal, Fija y Común está compuesta de cuatro signos que representan la Actividad, la Estabilidad y la flexibilidad en ese mismo orden y las cuatro triplicidades están compuestas cada una de ellas por tres signos del mismo elemento ya mencionados. El elemento Aire Géminis, Libra y Acuario- es mental y representa el más elevado grado de razonamiento y percepción de la mente y en realidad sintetiza las otras tres triplicidades; es la forma independiente y original de pensar separada del común de la humanidad, el genio. El elemento Tierra está representado por Tauro, Virgo y Capricornio y 14

15 estos son los signos de la acción en el mundo físico porque el deseo material de Tauro, el servicio y trabajo de Virgo y la posición elevada y honor obtenidos en Capricornio gracias a su esfuerzo y absorción así lo resumen. La triplicidad de Agua Cáncer, Escorpio y Piscis- se relaciona con los sentimientos, instintos y emociones del hombre y, como en las otras triplicidades, son signos Cardinal, Fijo y Común, que indican diferentes grados de conciencia y desarrollo personal. Pueden representar perfectamente al alma que progresa desde los sentimientos personales activos y cambiantes de Cáncer hasta los sentimientos y emociones profundas de Piscis donde cabe el altruismo y el amor fraternal y poco el odio. Cuando estos signos son estimulados desde fuera actúan de forma personal y cuando son estimulados desde dentro actúan como iniciativa del alma en sentido más elevado. Estos signos son los que nos ayudan a conectar con las regiones superiores pero también son peligrosos para quienes no saben nada del verdadero significado de la magia negra. Los signos de Fuego facilitan la elevación de la conciencia y de la personalidad gracias a sus signos complementarios y mentales de Aire. La iniciativa y actividad de Aries junto a la voluntad y auto confianza de Leo llevan al individuo a buscar los ideales más elevados y a desarrollar una mente por encima de la común gracias a Sagitario. Por tanto podríamos resumir el significado de las Cruces como representantes de los tres poderes del Espíritu: Voluntad, Sabiduría y Actividad, y las cuatro triplicidades como: Fuego, que representa al Ego; Aire, que representa el cuerpo mental; Agua, que representa el cuerpo emocional o de deseos; y Tierra que representa al cuerpo físico. Dicho de otro modo representan al Ego y sus cuerpos en cada renacimiento evolucionando en el Sendero de Perfección. Estos son algunos de los aspectos que demuestran la relación existente entre la astrología, el esoterismo y el misticismo, y aunque podría aportar algún dato más, solo quiero expresar mi deseo de que los lectores capten la siguiente idea: La humanidad está evolucionando desde su aspecto más animal hasta su futura perfección espiritual, lo hace a través del renacimiento y principalmente bajo la Ley de Consecuencia que devuelve a cada uno la cosecha de lo que sembró desde el punto de vista del amor y de la Justicia Divina. Una vez admitido esto sólo nos queda comprender que el horóscopo es una de las grandes ayudas que tenemos en cada vida siempre que veamos en él nuestra relación con Dios y las ayudas divinas que recibimos en nuestro peregrinaje a través de la materia. Por tal motivo dice la Biblia que Dios es Luz y que EN Dios vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser. Los antiguos astrólogos decían que: El sabio gobierna sus estrellas y el necio e ignorante las obedece. 15

16 CAPÍTULO II LAS CASAS Se dice que las Casas astrológicas son las 12 divisiones fijas en que se divide el espacio celeste. Estas divisiones parten de dos principales líneas que forman una cruz normalmente llamada Angular o Cardinal. La primera línea tendría una relación con el meridiano que pasa más cerca del lugar del nacimiento y que en la representación del horóscopo une las Casas IV y X. La segunda línea es la que divide la esfera celeste en dos hemisferios y que representa el horizonte del lugar de nacimiento; esta línea une las Casas I y VII. Partiendo de estos cuatro cuadrantes dividido cada uno de ellos en tres partes obtenemos las 12 Casas que bien se pueden considerar objetivas en relación con los signos considerados normalmente subjetivos. Esto quiere decir que cada signo tiene una relación directa con cada una de las 12 Casas, o lo que es lo mismo, las Casas representan el aspecto físico de las influencias de los signos del zodíaco, de aquí que se les llame Casas mundanas para diferenciarlas de las Casas celestes. La influencia de los planetas sobre nuestras vidas depende del ángulo que forme cada posición planetaria y a qué departamento afecte. Las Casas que van de la XII a la VII y que ocupan la mitad superior del círculo incluyendo el Mediocielo- se denominan diurnas y representan iniciativa, manifestación, apertura, comunicación, extroversión, etc. La otra mitad contraria es la nocturna y representa la interiorización, el ocultamiento, la retirada para la asimilación, el estado latente, etc. Por otro lado, las Casas que van de la X a la III incluyendo el Ascendente- normalmente llamadas Orientales, representan la expresión del Ego, y por tanto representan el egoísmo del individuo en sentido de individualización, independencia, la obtención de poderes para su propia expresión, etc. La otra mitad Occidental, de la IV a la IX, representan a los demás, al resto de la sociedad, la relación del nativo con ellos, y por tanto, la transformación del egoísmo por la unión o incluso el altruismo. Aunque parezca una arbitrariedad se ha demostrado que cada Casa representa un aspecto de la vida del ser humano, el cual se ve estimulado e influenciado según el signo y planetas que haya en la misma. Esa influencia se concreta en una actitud del nativo sobre ese campo de acción pero siempre teniendo en cuenta que cada persona es libre y que los astros inclinan pero no obligan. Por tanto y como ejemplo, Venus en la Casa VII facilita unas buenas relaciones matrimoniales pero nunca puede indicar si el nativo sabrá valorarlas y responder de la misma forma o no; para acercarnos a eso tendríamos que estudiar otros aspectos. Las Casas se utilizan para representar también otros aspectos como son los meses del año, las estaciones, las horas del día, etc. pero como mi única intención es facilitar al estudiante exclusivamente lo necesario para interpretar su horóscopo, no entraré en detalles. Sí es importante saber que cada Casa se corresponde con un signo, así la Casa I está directamente relacionada con el signo de Aries; la Casa II con el signo de Tauro etc. y que la Casa I se conoce como Ascendente y el signo que se encuentre en su cúspide se dice que es el signo del Ascendente. Por otro lado, también es importante tener muy en cuenta la Casa X o Mediocielo puesto que todos los elementos cercanos a él tienen una gran influencia sobre los asuntos y el destino del nativo. 16

17 La influencia general de los astros hacia un individuo procede de una combinación de los planetas y de los signos sobre las Casas, pero si consideramos estos tres aspectos independientemente, tenemos que asegurar que las Casas ejercen una influencia más importante sobre la acción y reacción del individuo en el mundo físico. El Ego se suele representar por las posiciones planetarias en los signos mientras que las Casas simbolizan el cuerpo físico y el ambiente que le rodea según su destino. Por tanto las influencias astrológicas representan las tendencias, posibilidades y poderes desarrollados o en vías de desarrollo- del individuo pero todo eso estará limitado y condicionado para su expresión por las Casas. Con esto quiero decir que, por ejemplo, un mismo planeta en la Casa V tiene más influencia que si estuviera en Leo que es el signo natural que la representa. Imaginemos que queremos consultar las posibilidades de si el nativo tendrá hijos, la Luna bien espectada en Casa V confirmaría la posibilidad, sin embargo si la Luna estuviera en Leo pero en otra Casa no podríamos afirmarlo con tanta rotundidad. Para confirmarlo tendríamos que consultar: 1º. La naturaleza e influencia del planeta en Casa V si lo hubiera-; y 2º. La naturaleza e influencia del regente del signo que haya en la cúspide de esta Casa. Naturalmente que con la práctica todo esto se va simplificando pero siempre nos encontraremos con dudas porque esa misma posición en la Casa V tendrá muchas más influencias sobre un individuo poco evolucionado que lo contrario. Las Casas están relacionadas íntimamente con el karma maduro que tenemos que afrontar, el efecto de lo realizado en vidas pasadas más las posibilidades de alcanzar nuevas metas. De aquí que algunas personas materialistas y poco evolucionadas, vean limitada la acción del planeta sobre la Casa y no vean más horizonte de trabajo para esforzarse, mientras que los más evolucionados saben utilizar las influencias planetarias junto a las del signo para trabajar ampliamente sobre la naturaleza de las Casas. SIGNIFICADO DE LAS 12 CASAS CASA I: Manifestación del Yo; la personalidad tal y como se ve ella misma y como la ven los demás; su apariencia y estado físico; sus tendencias y naturaleza mental; sus poderes latentes que podrá utilizar para hacer frente a la vida; su libre albedrío; su infancia y condiciones domésticas en la misma; el temperamento del individuo; y su vida en general. CASA II: La posibilidad de obtener bienes materiales; el dinero o ganancias personales; todo lo que el nativo puede adquirir por sus propios medios; la independencia material que puede tener; la estabilidad económica; la fortuna individual; y el posible uso que pueda hacer de ella. CASA III: Los contactos personales más cercanos hermanos/as, primos, vecinos, colegas, etc.-; las relaciones obtenidas gracias a los medios de comunicación y los desplazamientos cortos; los hermanos/as; los viajes cortos; los estudios; la mente concreta; sus escritos; las creaciones mentales. CASA IV: La familia; el hogar y más en concreto los padres; el hogar una vez independizado; la herencia como familia; el padre; las reacciones familiares sobre el nativo; sus últimos años, los bienes inmuebles del nativo; el fin de las cosas. CASA V: La creatividad del nativo; el ocio; los placeres; los amores; los juegos o especulaciones; el poder de procreación hijos-; el magnetismo personal; los niños; la educación; las obras o publicaciones del nativo; las atracciones en general entre las personas antes del matrimonio; institutos de enseñanzas; los deportes; la suerte o rentas; las realizaciones artísticas. 17

18 CASA VI: El mundo doméstico; los deberes laborales; la salud y la higiene; las relaciones con subalternos y animales; profesión normal del nativo y sus posibilidades; servicio social del nativo; sus tíos; la actitud de los que sirven; ocupaciones subalternas; papel como subordinado; enfermedades cortas y las creadas por preocupaciones y ansiedades; la alimentación; las mascotas. CASA VII: Lo complementario u opuesto; las uniones y matrimonios; las colaboraciones y asociaciones; los enemigos abiertos; los juicios; las luchas; el nativo en la sociedad; la sociedad y las colectividades; la reacción de la sociedad ante el nativo; el compañero de matrimonio; los competidores y rivales; los inconvenientes y procesos; los socios y colaboradores; los contratos. CASA VIII: Las crisis; la muerte; la destrucción; el renacimiento; la sexualidad; el dinero por parte de otros herencias, legados, etc.-; los bienes adquiridos por medio de asociaciones; ganancias o pérdidas en relación a procesos divorcio, contratos, etc.-; testamento del nativo y su legado; las finanzas del cónyuge; las facultades ocultas a punto de manifestarse; la transformación o regeneración; los donativos, pensiones y tasas; las finanzas del socio. CASA IX: Los viajes largos; el comercio al por mayor; el progreso del Yo a través de la filosofía y la religión; la mente abstracta; los ideales y aspiraciones más elevadas; la intuición e inspiración; su evolución moral; la experiencia espiritual; los ensueños y visiones; las leyes; los estudios superiores; la filosofía y ciencias superiores; las importaciones y exportaciones. CASA X: La posición social; la profesión o carrera escogida; la reputación y los honores; el poder de acción dentro de la sociedad; su renombre social y status que puede alcanzar; la popularidad; la madre o pariente que más influye sobre el nativo; su juicio o autoridad; su empleador; los posibles éxitos; las realizaciones o empresas del nativo; la capacidad para los negocios. CASA XI: Las afinidades o amigos; las protecciones y ayudas que puede recibir el nativo; las preferencias; las esperanzas y anhelos; las compañías íntimas profesionales y su actitud hacia ellas; los que nos aprecian; las aspiraciones materiales; los hijastros; los proyectos y planes. CASA XII: Las pruebas; las enfermedades crónicas; cautiverios; exilios; retiros; enemigos ocultos; fracasos; los engaños, trampas y traiciones; la prisión; las resoluciones que afligen al nativo; estados de descontrol por diferentes causas; las penas y tristezas; los trabajos forzosos por internamiento; crímenes; el internamiento forzoso; la ruina del nativo; las limitaciones y hechos fatales en general; los sacrificios propios; pérdida de libertad; la renunciación; las prácticas ocultas; la delincuencia; el vicio; la vida mística y el ocultismo. DIVISIONES DE LAS CASAS De las muchas divisiones que se pueden hacer de las 12 Casas, sólo algunas son de mayor importancia como es el caso de las Angulares, Sucedentes y Cadentes. Las divisiones se hacen de acuerdo a la armonía existente entre ellas y a su relación con los signos. CASAS ANGULARES: (I-IV-VII-X) Yo y mi situación. Son las Casas que mayor influencia ejercen sobre el individuo, sus actividades, carácter y acontecimientos. Se consideran las más notables porque ocupan los cuatro puntos Cardinales y contienen los dos más importantes significadores, estos son: Casa I o Ascendente, y Casa X o Mediocielo. 18

19 La Casa I representa a la persona misma con sus cualidades en potencia, su carácter y sus posibilidades, pero también simboliza la actividad, el entusiasmo y el uso de la energía en la vida. Si la Casa I simboliza al individuo, la Casa VII y opuesta representa a la persona más cercana a nosotros, a la que más queremos, normalmente nuestro cónyuge. Rige toda clase de uniones, contratos, sociedades, etc. pero también los divorcios, procesos y enemigos que como consecuencia nos pueden venir; la Casa VII es la Casa de las relaciones sociales e intelectuales. La Casa IV rige principalmente las condiciones de nuestro hogar y el ambiente y seno familiar paterno como cimientos de la personalidad; mientras que su opuesta, la X representa nuestro estado y nivel social en la comunidad en que vivimos con sus correspondientes efectos. Como podemos ver, estas cuatro Casas representan el medio ambiente en que nos movemos en esta vida. Las Casas I y X son más dinámicas y manifiestan inevitablemente lo que representen los planetas y sus aspectos en ellas; la VII se expresa a través de los demás y la influencia del Yo no es tan notable; la IV no es personal sino que el individuo se muestra a través del núcleo familiar. En general, estas Casas muestran como el yo exterioriza sus actividades y expresiones para que afecten al No-yo o personalidad. Los planetas que se encuentran en el lado oriental sobre todo de la Casa I a la X- se dice que ascienden y que tienen más posibilidades de expresión y desarrollo llegando a la obtención de poderes en la Casa X. Los planetas que se encuentran en la parte occidental como ocurre con el Sol a partir de mediodía o Mediocielo- se dice que descienden y que se mezcla con las demás personas para expresar todo lo obtenido por su propio esfuerzo. La Casa I o Ascendente y la X o Mediocielo suelen ser notables en la vida del individuo y a veces traen muchas experiencias. Las Casas IV y VII con sus planetas descendentes no son tan notables como las otras dos porque el Ego tiende a protegerse y a preservar, sin embargo también son activas y abiertas porque se manifiesta a través de las relaciones con la sociedad Casa VII- y con su familia y el hogar Casa IV- Estas cuatro Casas relacionadas con los signos Cardinales representan las actividades en el mundo físico del Yo pero sus efectos repercuten en la sociedad y en el mundo; los planetas en estas Casas tienen mayor poder de acción que en las otras. CASAS SUCEDENTES: (II-V-VIII-XI) Proyección de mi personalidad con propósito firme Estas Casas no son tan expresivas ni de acción dinámica como las Angulares y se relacionan más bien con los sentimientos, emociones y deseos. Como se relacionan con los signos Fijos son más estáticas y menos cambiantes que las otras, lo que significa que la influencia de un planeta aquí se fortalece en voluntad y propósito y es muy poco alterada. Sin embargo, es significativo que si la influencia planetaria es mala, como es lógico, se necesitará más esfuerzo para vencer los defectos o problemas. Estas Casas muestran los bienes materiales y morales del nativo aunque la VIII y XI son más abiertas y menos conservadoras. Lo que representen según el signo es más difícil de cambiar dada su fijación, pero también es más difícil que se pierda lo que ya se ha conseguido e interiorizado. La Casa II muestra nuestra economía y los bienes adquiridos por nuestro propio esfuerzo; la Casa VIII representa las herencias o legados que podemos recibir de otras personas; la Casa V representa nuestros hijos como medios influyentes en nuestras rentas; y la XI los anhelos, esperanzas y deseos que como hijos de nuestro cerebro implican un gasto de nuestros bienes económicos. Es decir, la II y la VIII representan ingresos o las posesiones externas del individuo, mientras que la V y la XI implican gastos y representan lo que el nativo posee en su interior. CASAS CADENTES: (III-VI-IX-XII) La realización como fruto del propio desarrollo Como Casas mentales y de asimilación de conocimiento que son, significan que pueden imponer la razón sobre las acciones físicas y sobre los deseos, sentimientos y emociones; es decir, representan la forma de pensar y reaccionar. Les falta la voluntad e 19

20 iniciativa de las Casas Angulares y la fijeza para conseguir sus objetivos de las Sucedentes; de ahí que los nativos se encuentren más cómodos efectuando trabajos como subordinados y aprovechando las oportunidades que se cruzan en su camino como resultado de las acciones de las otras Casas. Dentro de que estas Casas muestran cómo trabaja la mente y su capacidad de respuesta, hay que decir que las Casas III y IX son más positivamente dinámicas y más intelectuales, por tanto pueden llevar a cabo varias actividades a la vez. Las Casas VI y XII están más relacionadas con agrupaciones y masas de gente como por ejemplo los compañeros de trabajo y otros sitios donde se puede ver el individuo incluso en contra de su voluntad; estas Casas son menos ambiciosas e independientes. La Casa VI representa el servicio que el nativo puede prestar al mundo a cambio de bienes aunque, en cierto modo, es analítica; la contraria representa muchas veces los trabajos forzosos y sin remuneración como efecto del destino maduro pasado. Por otro lado, la VI muestra el estado de salud y las enfermedades cortas mientras que la XII indica si necesitaremos ingresar en un hospital o lugar de retiro y las enfermedades largas o crónicas. La III y IX tienen mucho que ver además de representar la mente concreta y abstracta- con el movimiento o traslados cortos o largos por causas laborales o similares. En general: Las Casas Angulares causan actividad, cambio, inquietud e individualización; las Sucedentes causan estabilidad, fijeza, obstinación, tenacidad, egocentrismo y lentitud; las Cadentes causan adaptabilidad, orden, razonamiento y equilibrio. Otra manera de interpretar las Casas más detalladamente como simbólicas del Yo y sus posibilidades en esta manifestación física es a través de los Signos que, por naturaleza, corresponde a cada Casa. ANGULARES: Representan al Yo, la situación del nativo dentro de su entorno más cercano, y su relación y estado respecto a la sociedad. Aries o Casa I: El Yo como personalidad tendencias, instintos, temperamento, etc.-; su iniciativa y empeño respecto a lo que desea o puede conseguir; y sus posibilidades para alcanzarlo. Cáncer o Casa IV: La educación y hábitos que se adquieren dentro del núcleo familiar; impulsos que caracterizan los sentimientos de amor hacia su entorno más cercano. En general, las bases y niveles emocionales donde puede desarrollarse la personalidad. Libra o Casa VII: Esta Casa y signo representan la manera en que el Yo se mezcla con su entorno social para experimentar, aprender y compartir sus sentimientos y bienes; dicho de otro modo, pone en práctica lo aprendido en las Casas I y IV. Como Casa muy sociable e íntima en sus relaciones, el nativo intenta elevarse social y positivamente para compartir sus beneficios. Capricornio o Casa X: Después de elevar la personalidad en todos los sentidos a través de su integración social y después de su experiencia personal y profesional, el yo intenta colaborar de la mejor manera para ayudar al mundo. Sus metas suelen ser conseguidas a través de su profesión o carrera, pero su nivel dentro de la sociedad le debe obligar a colaborar de alguna manera. SUCEDENTES: Estas Casas representan la manera en que se manifiesta el Yo en sus negocios y sus experiencias personales según sus cualidades y su firme propósito. Tauro o Casa II: Formación de la personalidad a través del disfrute de los placeres y bienes materiales del círculo en que se mueve. Aquí es donde se aprende a controlar sus deseos, impulsos y hábitos respecto al mantenimiento y desarrollo de sus bienes materiales. Leo o Casa V: Como Casa creativa y después de experimentar con los placeres materiales de la Casa II, esta Casa invita a compartir su creatividad, pero también sus mejores sentimientos, su amor y sus proyectos. Por tanto es una mezcla de creatividad entusiasta y de disfrute de la vida. 20