8 de abril de Fray: Levanten la mano los que crean que va a venir Pedro. Obra: Apariciones a los discípulos

Transcripción

1 8 de abril de 2018 Obra: Apariciones a los discípulos Personajes: Jesús, Fray, Juan y Jimena. (Entran a escena Fray y Jimena) Fray: Hola amigos. Jimena: Hola amigos. Hola Fray. Fray: Hoy les traigo a un gran invitado. Jimena: A quién? Fray: Les voy a dar algunas pistas: es un apóstol de Jesús que estuvo con Él cuando se transfiguró. Jimena: Ese día quiénes estaban? Amigos, se acuerdan? Sí, Pedro, Santiago y Juan. Entonces es alguno de ellos. Fray: Levanten la mano los que crean que va a venir Pedro. Ahora los que crean que va a venir Santiago. Ahora los que crean que va a venir Juan. Jimena: Quién va a venir? Fray: Griten fuerte: Juan ven. Jimena: Entonces va a venir Juan. Qué emoción! Pues él junto con Pedro, fue a ver el sepulcro vacío y creyó que Jesús había resucitado. Vamos a gritarle: Juan, ven. (Entra a escena Juan. Sale Fray) Jimena: Hola Juan. Juan: Hola niños. Qué gusto estar hoy aquí con ustedes! Quiero platicarles que el ver los lienzos doblados en el sepulcro abierto de Jesús, nos había permitido creer que había resucitado. Sin embargo, 1

2 algo más grande iba a suceder. Jimena: Qué? Juan: Al atardecer de ese mismo domingo, estábamos todos reunidos, pero con las puertas cerradas, pues teníamos miedo de los judíos, cuando de repente se presentó Jesús en medio de nosotros. Jimena: Wow. Vieron a Jesús resucitado! Qué increíble! Juan: Y Jesús nos dijo: La paz con ustedes. Luego nos mostró las manos y el costado. Jimena: Era Jesús, con sus heridas en las manos por los clavos y con la herida del costado, por la lanzada del soldado. Juan: Pero su cuerpo no era el mismo, pues podía entrar, aun estando cerradas todas las puertas. Jesús ahora tenía un cuerpo glorificado! Jimena: Wow. Juan: Todos nos alegramos mucho de ver al Señor. Jesús nos dijo otra vez: La paz con ustedes. Como el Padre me envió, también Yo los envío. Jimena: Jesús con estas palabras, les dio la misma misión que a Él le había dado el Padre: implantar el Reino de Juan: Y esa misma misión la tienen ustedes y todos los que son superhéroes del Reino de Jimena: De verdad? Juan: Sí. Y después de decirnos esto, sopló y nos dijo: Reciban el Espíritu Santo. A quienes les perdonen los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengan, les quedan retenidos. Jimena: Qué significa eso? Juan: En el momento que Jesús nos sopló, recibimos al Espíritu Santo. El Espíritu Santo es quien nos purifica y 2

3 también es quien nos comunica la vida eterna, la vida de Jimena: Entonces con el soplo, Jesús les comunicó la vida de Juan: Sí y como sólo Dios es quien puede perdonar los pecados. Jesús, lo hace por ser Hijo de Dios, Pero ahora, nosotros, por tener el Espíritu Santo, el Espíritu de Dios, podemos perdonar los pecados. Jimena: Eso sí que me sorprendió. Y a quiénes pueden perdonar? Juan: Quienes busquen el perdón de Dios y sinceramente se arrepientan, serán perdonados por Dios a través de nosotros, los apóstoles y después por los sacerdotes. Sólo aquellas personas que no estén verdaderamente arrepentidas y que no quieran que Dios las perdone, quedarán con su pecado. Jimena: Y qué cara pusieron los demás cuando les platicaron esto? Juan: Al primero que le platicamos fue a Tomás, uno de nosotros los Doce, pero que no estuvo con nosotros cuando vino Jesús. Todos los demás discípulos le decíamos una y otra vez: Hemos visto al Señor. Pero él nos contestó: Si no veo en sus manos la señal de los clavos y no meto mi dedo en el agujero de los clavos y no meto mi mano en su costado, no creeré. Jimena: Tomás necesitaba una prueba que él mismo pudiera tocar, para creer que Jesús había resucitado. Juan: Y ocho días después, estábamos otra vez los discípulos y Tomás con nosotros, cuando se presentó Jesús en medio de nosotros. Y eso que otra vez teníamos las puertas cerradas, y dijo: La paz con ustedes. Luego le dijo a Tomás: Acerca aquí tu dedo y mira mis manos; trae tu mano 3

4 y métela en mi costado, y no seas incrédulo sino creyente. Jimena: Jesús sabía lo que Tomás había dicho? Juan: Él había estado presente cuando Tomás dudó, aunque ninguno lo vimos. Jimena: Y Tomás qué le contestó? Juan: Señor mío y Dios mío. Con estas palabras, Tomás está reconociendo que Jesús es el Señor y también que es Jimena: Jesús es hombre y Dios y ahora está glorificado y presente entre nosotros, aunque no lo podamos ver. Juan: Luego Jesús le dijo: Porque me has visto has creído. Dichosos los que no han visto y han creído. Jimena: Uy. Yo me he quejado muchas veces de no poder ver a Jesús. Juan: Sin embargo, lo más importante no es ver a Jesús con los ojos de la cara, sino con los de la fe. Jimena: Amigos, ustedes creen en Jesús? Y creen que resucitó y está presente entre nosotros? Juan: Entonces ustedes son más felices, más dichosos, que muchas personas que vieron a Jesús con los ojos de su cara, pero no pudieron creer en su corazón. Porque si creen que Jesús es el Hijo de Dios, tienen vida eterna. Jimena: Jesús es increíble. Es el más fuerte, Es el mejor. Es el campeón. Yo siempre quería encontrarlo y ya lo encontré. Amigos, si ven a Jesús, me avisan? Gritan resucitó. Listos? (Sale de escena Juan. Mientras Jimena canta Jesús 4

5 aparece y desaparece, luego canta con ella) Canción: Encontré al Campeón, del CD Encontré al Campeón de Palabra y Obra Erika M. Padilla Rubio Palabra y Obra Todos los derechos reservados. 5