Caminando con Jesús - Parte 09

Transcripción

1 Caminando con Jesús - Parte 09 Vivamos en el aposento alto (Sion) Erich Engler Hoy vamos a considerar tres diferentes montes o montañas de las cuales nos habla la Palabra de Dios, a saber: el monte Sinaí, el monte Sion, y la colina del Gólgota. Después de analizar estos tres montes, vamos a ver que lo único que queda es la gracia. Vamos a poner el énfasis precisamente en aquello que permanece, la gracia divina. En esta enseñanza, vamos a considerar también, la razón por la cual debemos estar totalmente bajo la gracia. 100% gracia y 0% ley. El plan de Dios, desde el principio mismo, fue otorgarnos su gracia. Dios, el Padre celestial, manifestó su plan de gracia al ser humano, por medio de la persona de su Hijo Jesucristo. La gracia divina tiene un rostro, y es el rostro de Jesús. Jesús personificó la gracia divina. Por eso, es que siempre decimos, que la gracia no es un tema más, entre los muchos otros que podemos considerar, sino que la gracia es una persona, y más precisamente la persona de Jesús, el Verbo divino hecho carne. Dios reside en el monte de Sion Porque vosotros (los creyentes en Cristo) no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas, y a la tempestad, al sonido de la trompeta, y a la voz que hablaba, la cual los que la oyeron rogaron que no se les hablase más, porque no podían soportar lo que se les ordenaba: si aún una bestia tocare el monte, será apedreada, o pasada con dardo; y tan terrible era lo que se veía, que Moisés dijo: estoy espantado y temblando; sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos, a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel. Hebreos 12:18 al 24. La primera parte de este pasaje, nos habla del monte Sinaí, donde el pueblo de Israel recibió la ley de Moisés. La atmósfera que reinaba sobre el monte en aquel momento, era 1

2 espantosa. Cualquiera que hubiese tocado el monte, hubiese caído muerto inmediatamente. La única razón, por la cual el pueblo de Israel pudo sobrevivir, era porque Dios había añadido gracia a su ley. Dios hablaba a su pueblo desde el monte Sinaí. La ley demandaba. El pueblo rogaba que no se les hablase más, porque no podía soportar las palabras de la ley. Cómo es posible entonces, que hoy en día, haya quienes desean escuchar predicaciones sobre los 10 mandamientos, cuando ya el pueblo de Israel no podía soportar aquello? Dios se trasladó desde el monte Sinaí, hasta el monte de Sion, pasando por una pequeña colina llamada Gólgota. La segunda parte de este pasaje, nos habla del monte de Sion. El mensaje está dirigido a nosotros, los creyentes en Cristo. Nosotros no estamos sobre el monte Sinaí, sino sobre el monte de Sion. El nuevo pacto significa, que Dios nos ha justificado eternamente por medio del sacrificio de su Hijo Jesucristo. Dios se trasladó desde el monte Sinaí hasta el monte de Sion, pasando por una pequeña colina llamada Gólgota. La Biblia se refiere al monte de Sion como nuestra morada celestial, pero el monte de Sion es también un lugar geográfico y real que se encuentra en la ciudad de Jerusalén. El monte Sinaí representa la entrega de la ley divina, mientras que el monte de Sion representa la entrega de la gracia divina. Estos dos montes nos hablan de la ley y de la gracia respectivamente. En el alfabeto hebreo, tanto la palabra Sinaí como la palabra Sion, se componen de cuatro letras cada una. El término Sinaí consta de las siguientes letras hebreas: SÁMEC - YOD NUN - YOD. Debemos recordar siempre, que el hebreo se lee de derecha a izquierda. En su respectivo orden, estas letras tienen el siguiente simbolismo: SÁMEC representa apoyo; YOD nos habla de obra o trabajo; NUN representa vida; y por último aparece otra vez YOD en relación a trabajo o esfuerzo. Si juntamos todos estos conceptos formamos la siguiente frase: el apoyarse en el propio esfuerzo para intentar obtener vida, deriva en más esfuerzo todavía. 2

3 Las letras que componen la palabra Sion son: TSADE, YOD, VAU, y NUN. El simbolismo de estas letras es: TSADE representa la justicia divina; YOD nos habla de obra y trabajo; VAU simboliza la cruz de Jesús; y NUN representa la vida. Si juntamos las cuatro letras que conforman la palabra Sion y con ella formamos una frase de acuerdo a su significado, obtenemos el siguiente resultado: la justificación solo tiene lugar por medio de la obra de la cruz, y esto nos conduce hacia la vida. Por medio de la obra de Jesús sobre el Gólgota, Dios se trasladó desde el monte Sinaí hacia el monte de Sion, donde reside en la actualidad para bendecirnos a ti a mí. Dios nos bendice desde el monte de Sion Que el Señor te bendiga desde Sion, y veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida. Salmo 128:5. Hoy en día, Dios no nos bendice desde la ley del monte Sinaí, sino que lo hace desde la gracia del monte de Sion. Esa es la razón por la cual Él se trasladó a otro monte, al monte de Sion. La gracia divina no puede sobrevivir en la presencia de la ley. Antes de ir a la cruz, Jesús compartió la Santa Cena con sus discípulos y les lavó los pies. Cada vez que escuchamos un buen mensaje de la gracia divina, estamos recibiendo un refrescante lavado de pies. Jesús secó los pies de sus discípulos con un lienzo o tela de lino. Cuando la Biblia menciona el lino, nos está hablando de justicia. En la actualidad, en muchas iglesias se escucha el mensaje de la gracia, pero, lamentablemente, al final del mismo se insta a los oyentes a cumplir con las demandas de la ley. Eso es exactamente lo mismo, que después de un refrescante lavado de pies, estos sean secados con la aspereza de la lana. Eso es lo mismo, que recibir una bofetada en el rostro. El apóstol Pablo experimentó esta situación. Cuando fue arrestado en la ciudad de Jerusalén, siendo llevado en dirección a Roma, fue traído delante del sumo sacerdote y de todo el concilio. Allí, estando él delante del sumo 3

4 sacerdote Ananías, e ignorando que era él quien le indagaba, comienza su discurso de defensa. Debido a esto, el sumo sacerdote, ordena que golpeasen a Pablo en la boca. Luego de recibir esa bofetada, Pablo le dice: Dios te golpeará a ti, pared blanqueada! Los que estaban presentes, después de escuchar esto, dijeron: al sumo sacerdote de Dios injurias? Pablo no sabía, que el que había dado la orden de abofetearlo, era el sumo sacerdote. Por esa razón, se corrige de inmediato. Pablo, representa aquí la gracia divina, y el sumo sacerdote la ley. La ley siempre intentará abofetear a la gracia. Dios no reside sobre dos montes, Él se trasladó desde el monte Sinaí al monte de Sion. El último versículo del Amntiguo Testamento culmina con la palabra maldición; mientras que el último versículo del Nuevo Testamento dice: la gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. El monte de Sion es el lugar de nacimiento de la iglesia Mas en el monte de Sion habrá un remanente que se salve; y será santo, y la casa de Jacob recuperará sus posesiones. Abdías 1:17. La gracia divina trae bendición, y hace posible que volvamos a poseer las posesiones que nos pertenecen. Como creyentes en Cristo Jesús, somos poseedores de las bendiciones divinas. Y entrados, subieron al aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano de Jacobo. Hechos 1:13. Como creyentes en Cristo Jesús, somos poseedores de las bendiciones divinas. La iglesia nace sobre el monte de Sion y no sobre el monte Sinaí. Aquí, en el aposento alto, Jesús, antes de ir a la cruz, compartió la Santa Cena con sus discípulos, y les dijo que esperaran allí la promesa del Padre celestial. Este aposento alto, se encuentra al pie del monte de Sion, en la ciudad de Jerusalén. Los 120 discípulos estaban reunidos en el aposento alto, durante el tiempo de la celebración de la fiesta judía de Pentecostés (*), la cual conmemoraba el recibimiento de la ley divina. En aquel entonces, al pie del monte Sinaí, murieron 3000 personas. Ahora, después de la llegada del Espíritu Santo, 3000 personas recibieron la salvación. (*) El fondo histórico de tal celebración se basa en la fiesta judía llamada Shavuot (fiesta de las semanas), durante la cual se celebra el quincuagésimo día de la aparición de Dios en el monte Sinaí. Por lo tanto, en el día de Pentecostés también se celebra la entrega de la Ley (10 mandamientos) al pueblo de Israel. Este momento indica el comienzo de la dispensación de la gracia y el nacimiento de la iglesia. Todo esto sucedió sobre el monte de Sion. En la numerología hebrea, el número 120, representa la finalización de las obras y los esfuerzos humanos. Precisamente después de esto, es cuando viene la gracia. Resumen: Dios se trasladó desde el monte Sinaí al monte de Sion por medio de la obra de Jesús en la cruz sobre la pequeña colina del Gólgota. 4

5 Oración y confesión personal: Gracias Jesús por tu obra en la cruz a nuestro favor. Hoy, Dios reside sobre el monte de Sion, y desde allí nos bendice. Dado a que Dios se trasladó de monte, nosotros también lo hacemos. Ya no estamos más sobre el monte Sinaí, sino sobre el monte de Sion. Amén! En la cruz, Dios demostró su amor por nosotros. Jesús, y el Padre celestial, nos aman más que cualquier otra persona en el mundo podría hacerlo. Ha sido Usted bendecido/a por esta enseñanza? Le animamos a compartirnos un breve testimonio o agradecimiento, es una manera de bendecirnos a nosotros y a otros: gracia@iglesiadelinternet.com ministerio@iglesia-del-internet.com Donaciones, transferencias bancarias: "Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, es gran cosa si segáramos de vosotros lo material? 1. Corintios 9:11 Beneficiario: Familienkirche Código Postal: 8640 Ciudad: Rapperswil Cuenta, IBAN: CH Banco: Bank Linth LLB AG BIC/SWIFT: LINSCH23 Código Postal: 8730 Ciudad: Uznach País: CH (Suiza) Más información en: 5