DICTAMEN Nº. 79/2008, de 16 de abril. *

Transcripción

1 DICTAMEN Nº. 79/2008, de 16 de abril. * Expediente relativo a reclamación de responsabilidad patrimonial de la Administración Sanitaria a instancia de Dª. Z en nombre y representación de su hijo X, como consecuencia de la asistencia dispensada por los Servicios Sanitarios del Área de Salud de W dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM). ANTECEDENTES El 23 de mayo de 2007, tiene entrada en el Registro de la Oficina Provincial de Prestaciones de Ciudad Real, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, escrito de reclamación de Dª. Z, en nombre y representación de su hijo X. En él expone que el hijo de la reclamante de 13 años de edad sufrió un accidente el día 20 de junio de 2006, al golpearse en la zona hipotenar de su mano derecha. Al comprobar el dolor y la inflamación que sufría acudieron al Centro de Salud de K, por tener Servicio de Urgencias. En dicho Centro, les atendió el facultativo Esteban García, que calificó la dolencia, tras realizar la oportuna exploración como edema de la zona hipotenar de la mano derecha asociado a dolor al presionar y espontáneo secundario a contusión. La exploración no revela datos de Fx ósea, concluyendo con un diagnóstico de contusión y edema para el que prescribió reposo e ibuprofeno y revisión por su médico de cabecera a las 48 horas. Transcurrido dicho plazo, la reclamante acudió con su hijo al Centro de Salud de J, para que fuese visto por su médico de cabecera, que resultó ser el mismo que lo había atendido el día 20 de junio en el Centro de K. Tras explorar la mano, convino en la necesidad de realizar radiografías para precisar si existía fractura en la misma, por lo que gestionó que le fuesen practicadas el día 27 de junio de 2007 en el Hospital H. Ese día se personaron en el Hospital citado, la madre y el hijo, que recibieron la noticia de la imposibilidad de realizarle dicha prueba, remitiéndoles al 3 de julio. Ante la negativa de la madre de esperar por más tiempo, le aconsejaron que acudiera al Servicio de Urgencias, lo que hizo consiguiendo al fin la radiografía que constataba la fractura del cuello del 5º metacarpiano de la mano derecha, para cuya corrección precisó de intervención quirúrgica. Por todo ello, cifra el daño producido en que el menor ha tenido que soportar durante 7 días una fractura ósea por el manifiesto error de diagnóstico del día 20 de junio de 2006 y el hecho de no haber ordenado inmediatamente una prueba tan simple como una radiografía para alcanzar un diagnóstico certero [...]. Acompañaba su reclamación con los partes de asistencia sanitaria en el Centro de Salud de K y en el Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología. * Ponente: Inmaculada González de Lara y Ponte 1

2 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha Tras la instrucción del expediente, el Secretario General del SESCAM formula propuesta de resolución, por la que estima la reclamación presentada, al considerar que el daño sufrido por el menor (los siete días de retraso en el diagnóstico y en la posterior intervención) derivan de la asistencia prestada y sobre los que no existe deber de soportar por parte del menor. Difiere sobre la indemnización solicitada, euros, ya que en aplicación de la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor, la cuantía asignada por los 7 días impeditivos sería de 352,45 euros. EXTRACTO DE LA DOCTRINA -Respecto a la existencia del daño, si bien no consta ningún tipo de secuela, el mismo consiste en el retraso en el diagnóstico que supuso soportar siete días de dolor e inflamación, unido a la incertidumbre sobre el alcance de la lesión. Este daño, que es efectivo e individualizable, debe derivar en una relación directa e inmediata, de causa efecto, con la actividad de la Administración. En este caso, es indudable, que el daño que supone el retraso diagnóstico está anudado a la actividad desplegada por el facultativo del Centro de Salud de K que atendió al menor. En los supuestos de responsabilidad patrimonial por asistencia sanitaria, hay que acudir al criterio de la lex artis como método para determinar cual es la actuación médica correcta, independientemente del resultado producido. De la literatura médica aportada por la instructora del procedimiento se aprecia que una fractura de 5º metacarpiano, es una fractura típica, ampliamente conocida entre los deportistas, conocida como fractura del boxeador o de puño fallido, y no especialmente complicada de detectar, a pesar de la rápida edematización de la zona, mano en empanada, pues existe dolor a la presión y a la tracción y compresión longitudinal, con borramiento y descenso del nudillo. Señala la inspectora instructora en su informe que la presencia de deformidad, dolor selectivo en palpación ósea, crepitación o limitación funcional sugieren la necesidad de estudio radiológico para descartar lesiones óseas, sin embargo, de la historia aportada al expediente, se deduce que la exploración que realizó el facultativo no fue lo suficientemente exhaustiva ni consignó datos imprescindibles en el reconocimiento que le habrían conducido a la convicción de la necesidad de una radiografía que diera certeza sobre el diagnóstico. Abundando en lo anterior, al transcurrir 72 horas y persistir los síntomas, tampoco entonces convino en la necesidad de una prueba diagnóstica urgente, aunque solicitó personalmente su realización para el día 27 de junio de 2006, 7 días después de la fractura. Es por tanto éste un supuesto de mala praxis, de incumplimiento de deberes médicos, que convierte el daño en antijurídico que el administrado no tiene el deber de soportar y que al presentar una relación directa e inmediata con la actividad médico-asistencial de la Administración Pública, impone su resarcimiento. -Conforme viene siendo admitido jurisprudencialmente en la valoración de este tipo de daños, considera este Consejo pertinente acudir las reglas contenidas en el Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley sobre Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor. 2

3 Una vez admitido el uso del citado sistema de cuantificación, ha de significarse primeramente que las sucesivas alteraciones de las Tablas conformadoras del mismo, integradas en el correspondiente Anexo, han llevado a este Consejo a señalar la necesidad de tomar como punto de partida para el proceso de cuantificación, los criterios y cantidades correspondientes al momento de acaecimiento del percance o al de la estabilización de las secuelas resultantes del mismo, por ser éste el procedimiento que literalmente impone el artículo de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, en el que se indica que la cuantía de la indemnización se determinará con referencia al día en que la lesión efectivamente se produjo, sin perjuicio de su actualización a la fecha en que se ponga fin al procedimiento de responsabilidad, con arreglo al índice de precios al consumo fijado por el Instituto Nacional de Estadística, y de los intereses que procedan por demora en el pago de la indemnización fijada, exigibles conforme a lo establecido en la Ley General Presupuestaria. En concreto ha de precisarse que el baremo a aplicar será el correspondiente a la actualización para 2006, llevada a cabo mediante Resolución de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones de 24 de enero de 2006 y, por tanto, la cuantía asignada para los días de baja impeditiva no hospitalaria, como es el caso, es de 49,03 euros, que al aplicarse a los 7 días de espera alcanzan un monto de 343,21 euros. Ahora bien, hay que reparar en este caso, que el perjudicado es un menor de 16 años, por lo que resulta obligado realizar algunas matizaciones. Es doctrina ya asentada del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha, tal y como se recoge en el Dictamen 23/2003, que en dicha cantidad total se englobarían varios conceptos indemnizatorios que permitirían modular ese montante dependiendo de las circunstancias que concurrieran en el caso concreto. Así, en toda indemnización se incluiría en primer lugar el pretium doloris, que según una abundante jurisprudencia del Tribunal Supremo reviste una categoría propia e independiente de los demás perjuicios y comprende tanto el daño moral como los sufrimientos físicos padecidos por los damnificados. En segundo lugar, el menoscabo o impedimento de la capacidad para el desempeño de las ocupaciones habituales del perjudicado. Y en tercer lugar, la pérdida de ingresos o de la capacidad económica del sujeto. En el supuesto de un menor de edad escolar cuando tiene derecho a ser indemnizado, tanto el pretium doloris como la incapacidad para realizar sus actividades cotidianas (acudir a clases, jugar, realizar otras actividades físicas...) pueden ser modulados dependiendo de las circunstancias del caso, al igual que si se tratara de cualquier otra persona. Sin embargo los niños no sufren una merma en su capacidad económica cuando se les produce cualquier tipo de lesión o enfermedad, puesto que en condiciones normales no perciben tales ingresos. En consecuencia, de la cantidad diaria tomada como referencia, en sus diversos conceptos, deberá deducirse una tercera parte correspondiente a esa disminución patrimonial que en el caso de los escolares no concurre. Por todo lo expuesto, de la cuantía solicitada, habría que reconocer el derecho a percibir, tanto el tercio que resarce el daño moral del menor, como el impedimento sufrido durante los días de baja, al no poder realizar actividades propias de su edad, pero no cabría reconocer cantidad alguna para resarcir una merma económica que ellos no padecen ni causan, siendo, por tanto la cuantía correcta el resultado de restar un tercio a la resultante de aplicar las Tablas, obteniéndose la cantidad de 228,80 euros. 3

4 Dictámenes Consejo Consultivo Castilla-La Mancha DICTAMEN Que existiendo relación de causalidad entre el servicio público dispensado en el Área de Salud de W y los perjuicios sufridos por D. X, procede dictar resolución estimatoria de la reclamación de responsabilidad patrimonial examinada y el derecho del reclamante a percibir una indemnización de 228,80 euros que deberá ser actualizada. 4

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