Introducción A veces cuando pensamos en gobierno pensamos en un rey como Salomón, otorgando leyes y haciendo justicia a su pueblo, o, con una visión más moderna, a un presidente teniendo propuestas de leyes y tomando todas las decisiones necesarias para que su pueblo viva adecuadamente. En nuestros sistemas modernos de gobierno, si simpatizamos con quien está en el poder, no concebimos que alguien deba desobedecer al gobernante, pues está haciendo su trabajo para el bien de la sociedad, hasta que las decisiones de ese gobernante nos afectan negativamente, entonces pensamos que debería preguntarnos y hacer encuestas de opinión, pues estamos en una democracia. Aristóteles decía que la peor forma de gobierno es la democracia, porque ésta da igual peso a la opinión del que nada sabe cómo de la persona que estaba mejor preparada y con una mayor visión. También ese filósofo opinaba que la mejor forma de gobierno era la monarquía, en la que el monarca tenía satisfechas todas sus necesidades personales, de manera que podía concentrarse en el gobierno del pueblo sin desviaciones o vicios comunes. Si profundizamos en esta propuesta filosófica, podríamos ver que esto sólo sería válido existiendo un ser que realmente tuviera satisfechas todas sus necesidades, lo cual no aplica a ningún humano habido o por haber. Documento para análisis 02-marzo-2014 Cuál es la forma de gobierno que Dios ha establecido para su pueblo? De acuerdo a numerosas citas bíblicas como Sal 5.2; 95.3, 1Ti 1.17, podríamos decir que en la monarquía, pues se presenta al Señor como Rey. A la monarquía donde el monarca es Dios, también se le llama teocracia (Dios tiene el poder), aunque a lo largo de la historia humana, vemos desviaciones debido al ejercicio humano de la teocracia, es decir, a que Dios no siempre se presenta ante el pueblo y ejerce directa y visiblemente a todos ese poder.. En toda forma de gobierno conocida hay diferentes cargos y autoridades de gobierno estratificando el poder, cuáles son estas en la Iglesia? Cómo está conformada la estructura del gobierno de Dios en la Iglesia? A una estructura manifestada así la Iglesia de Dios Universal le ha llamado El gobierno de Dios. Qué dice la biblia al respecto? Qué es gobernar? De acuerdo con el diccionario de la lengua española 1, gobernar es ejercer la dirección (conducir), la administración y el control de una colectividad; guiar el comportamiento de una persona o influir mucho sobre ella. Otra definición 2 señala este término como dominar, mandar, regir. 1 Diccionario Manual de la Lengua Española Vox. 2007 Larousse Editorial, S.L. 2 Diccionario Enciclopédico Vox 1. 2009 Larousse Editorial, S.L. Pág. 1 de 6
Es necesario hacer la aclaración de que la labor de los diccionarios no es delimitar a las sociedades para que se conduzcan dentro de sus definiciones, sino más bien presentar lo que la sociedad, en cierto momento, utiliza y entiende por el término. En este sentido, las definiciones que hemos revisado nos dicen lo que la sociedad actual entiende por el término gobernar, pero aún queda lo que la sociedad de los hijos de Dios deban entender por ese término. El gobierno en la Iglesia de Dios del nuevo testamento, tuvo la completa influencia de lo que era el gobierno en el pueblo de Israel. Como veremos más adelante, muchas de las estructuras de este nuevo grupo estaban ligadas a las del antiguo testamento. Considerando las definiciones mencionadas, analicemos la labor de dirigir o conducir, administrar y aún controlar al pueblo de Dios en la Biblia y veamos cómo es el estilo de gobierno que Dios utilizaba. Gobierno antes de Israel En la época patriarcal, la conducción y guía del pueblo se daba a través de los más viejos de la familia, del padre o abuelo. Abraham, Isaac y Jacob, eran quienes gobernaban su casa, a todos sus descendientes. Marcaban literalmente la dirección y rumbo del peregrinar, a quién se debían inclinar y adorar, aunque vemos en la Biblia que esos rumbos y direcciones no los inventaban ellos, sino que los recibían del Señor mismo (Gn 12.1; 28.10-22; 35.2, 9-11). Cuando Abraham despidió a su hijo Ismael y a la madre del muchacho, no lo hizo por su propia decisión o por la petición de Sara, su mujer (Gn 21.8-14). Cuando llevó a sacrificar a su hijo, el Señor determinó quién debía morir, dónde y cuándo (Gn 22.2, 13). De manera que podemos identificar que el gobierno real (conducción y aún dominio) lo ejerció el Señor y que los patriarcas prestaron el servicio de voceros del Señor para su familia, para que ellos conocieran lo que Dios requería y la dirección o camino que debían tomar. Gobierno en Israel Al principio de la formación del pueblo de Israel, a la salida de Egipto, Moisés intentó seguir utilizando el modelo de los patriarcas tomando él todo el peso de regular esa gobernación; sin embargo, el Señor le hace ver que esa idea no era conveniente ni para él ni para el pueblo (Ex 18.13-27). Moisés pidió al pueblo que le propusieran a quienes iba a nombrar por jueces, algo que podría tomarse como un caso de elección popular, pues era necesario que aquellos jueces tuvieran buen testimonio delante del pueblo (Dt 1.13-15). Aunque en ocasiones vemos que Moisés habló a todo el pueblo, en realidad hablaba con los que los representaban, con los ancianos: Primero, porque sería muy difícil que fuera escuchado por seiscientos mil varones reunidos, aunque guardaran silencio, y Segundo, porque la bilia lo deja ver (Ex 24.1, 9). Jueces y ancianos La estructura más primitiva de gobierno del pueblo de Israel fue a través de jueces en diferentes campos y amplitudes, de manera que Moisés, el profeta, transmitía las decisiones y conducción del Señor directamente sobre los otros jueces y estos, a su vez, la transmitían al pueblo. Sin embargo, es necesario hacer notar que Moisés (funcionando como profeta) y los jueces (re-transmitiendo el mensaje o instrumentando su cumplimiento), prestaban el servicio al pueblo para que conocieran la ley de Dios, su voluntad, su dominio (Lv 24.10-14). Los ancianos eran precísamente ese grupo de líderes israelitas, quienes también repre- Pág. 2 de 6
sentaban al pueblo (Éx 24:1, 9; Nm 11:16, 24-25). Los sacerdotes y profetas Casi de inmediato al establecimiento de jueces que operarían con Moisés, el pueblo de Israel tuvo un mecanismo de gobierno que operó en paralelo, aunque en otra línea de necesidades del pueblo, con atribuciones completas y un orden muy específico: los sacerdotes. Los sacerdotes además de sus funciones generales como presentadores de los sacrificios, desempeñaron funciones de gobierno en órdenes sanitarias (Lv 13), y de juicio o consulta al Señor a través del Urim y Tumim (Ex 28.30; Nm 27.21; Esd 2.63). En estas citas es claro que su función fue la de enlace con el Señor y daban, pues, el servicio al pueblo de mostrar lo que el Señor les comunicaba. También, de forma paralela a las formas anteriores, aunque esporádicamente, el Señor estableció jueces para gobernar al pueblo, si bien, con una función más de caudillos, también ejercían funciones de dirección diversas. Tal fue el caso de Samuel, que fue gobernador o juez y profeta (1 Sam 7.15-17; 8.3-5), mientras Samuel juzgaba, los ancianos, en representación del pueblo fueron a verlo, ejerciendo gobierno también. En todo caso, Samuel solamente fue el portador de los requerimientos y palabras del Señor para el pueblo (1 Sam 8.7). Posteriormente, aunque continuaban existiendo los ancianos con sus funciones, coexistieron con los sacerdotes, los profetas (como Samuel) y los reyes. Éstos tuvieron gobiernos más absolutistas, no obstante muchos de ellos respetaban los otros órdenes de gobierno: encontramos a los ancianos tomando decisiones políticas (2 Sam 5:3; 2 Sam 17:4,15), aconsejando al rey (1 R 20:7); los sacerdotes ejercieron su función junto con los reyes apoyando en la conducción del pueblo (1Sam 23.2; 2Sam 2.1; 2Sam 21.1) con el Urim y Tumim. Para estos momentos, el gobierno del pueblo ya era bastante complejo, porque si bien David era el rey, por ejemplo, había otros órdenes a través de los cuales Dios manifestaba la guía, conducción y control de su pueblo. Todos estos órdenes se complementaban y respetaban, pues al final tenían la misma encomienda: transmitir al pueblo la guianza del Señor. Gobierno en la Iglesia Cuando fue formada la Iglesia por el Señor, el gobierno que manejaron los apóstoles tomó cierta similitud de la estructura compleja que venía existiendo en el pueblo de Israel, aunque con algunas modificaciones: En Israel había un consejo, el Sanedrín, que aglutinaba a quienes se reconocían como autoridades por el pueblo (ancianos y en este caso fariseos), a los sacerdotes (saduceos). El gobernador general estaba puesto por el reino romano, ocupado más de las cuestiones civiles, y se mantenía al margen de asuntos relativos a sus costumbres y cultura. Con este escenario en la mente de las personas que formaron parte de la primera Iglesia es que se inicia su funcionamiento. De acuerdo con diversos textos en el nuevo testamento, el gobierno de la Iglesia del primer siglo se ve conformada por Obispos, Apóstoles, Pastores, Diáconos, Maestros y Profetas, no obstante la biblia no deja ver que existiera un orden de jerarquía 3 entre estos. 3 Wikipedia: Jerarquía es el criterio que permite establecer un orden de superioridad o de subordinación entre personas, instituciones o conceptos. Organización o clasificación de categorías o poderes, siguiendo un orden de importancia. Tiene un uso frecuente en las Pág. 3 de 6
Saulo de Tarso fue ungido para ser cristiano y lleno del espíritu santo por un hermano llamado Ananías (Hch 9.10-18). La biblia no indica si este hermano tenía un encargo específico, pero podemos suponer que estaba autorizado para imponer las manos, por lo que sería parte del presbiterio (Hch 8.18 y 1Tim 4.14); en otras palabras era un anciano. Luego, estando en Antioquía, algunos profetas y maestros (Hch 13.1-3) fueron instados por el espíritu de Dios para encomendar a Saulo una labor importante, le impusieron las manos, con lo que se conforma a Saulo (Pablo) como apóstol. Esto lo podríamos interpretar como que los ancianos (profetas y maestros) impusieron las manos para establecer apóstoles. Posteriormente, vemos a Pablo instituyendo a Tito para que estableciera ancianos (Tit 1.5). Luego el apóstol instituye ancianos, y estos a otros. Cuando los apóstoles tuvieron la necesidad de establecer a algunos que se dedicaran para el servicio de administración de recursos (diáconos), la escritura nos indica que fueron propuestos por la multitud de discípulos. Pero haciendo cuentas, para aquel tiempo, la iglesia ya estaría conformada por varios miles de miembros en Jerusalem y otros tantos en Judea; así que cabe preguntar, los doce apóstoles juntaron a los miles de discípulos para que escogieran a siete? Aquí como en el caso del Israel antiguo, sería muy lógico pensar que los ancianos representaron al pueblo y la multitud de quienes se congregaron, según el libro de los Hechos, fueron los ancianos, de quienes se propuso y encomendaron los diáconos. clasificaciones mitológicas y teológicas; y se aplica a todo tipo de ámbitos (físicos, morales, empresariales, etc.). Otra perspectiva es que los los doce discípulos del Señor, convocaron a la multitud de hermanos de la congregación en que estaban en ese momento y los diáconos fueron elegidos de entre los presentes, queriendo decir que fueron elegidos entre hermanos sin cargo pero que cumplían los requisitos. Estos dos razonamientos parecen ser coherente con lo descrito en 1 Tim 3.8-13, relativo a los requisitos de los diáconos, pues ya sea que hubieran sido ancianos o hermanos sin cargo, cumplían ante los ojos u opinión de esa multitud con los requerimientos: tenían testimonio de ello. Estructura Tomando como parámetro lo que hemos aprendido en la historia de las diversas formas de gobierno del pueblo de Dios, el objetivo de cualquier estructura de gobierno en el pueblo de Dios es servir de enlace y de transmisión de la guianza y conducción del Señor sobre su pueblo para llevarlo hacia él, para llevarlo por el camino del bien que está en su palabra. Pues queda claro en la escritura que Cristo es la cabeza de la iglesia y su suprema autoridad (Efesios 1:22-23, 4:15; Colosenses 1:18). Entre los gobiernos humanos es muy común el buscar un orden según sus costumbres y deseos, para asegurar el poder y mantener el control. De manera que las estructuras militares, por ejemplo, tienen una relación de dependencia, en las que los niveles más bajos siempre dependen de los niveles más altos; lo mismo es aplicable a las formas de gobierno conocidas (parlamentos, monarquías, democracias, oligarquías, aristocracias, plutocracias, etc.). El Señor enseñó entre sus siervos que en el reino de Dios no sería como en los demás reinos (Mt 20.25-28; Mt 23.5-12); el Señor deja ver más bien una estructura completamente plana de la Iglesia, en la que todos somos Pág. 4 de 6
hermanos, todos participamos con diferentes funciones de interdependencia 4 y con un sólo Señor y real gobernante (1Co 8.6), Jesucristo. En este sentido, en el reino de Dios (la Iglesia) no hay subordinación lineal directa y unidireccional(jerarquía), sino funciones diferentes, capacidades y actuares interdependientes con principios comunes. La similitud que hace el Señor de esta estructura con el cuerpo humano es fantástica (1 Co 12), porque en el cuerpo todas las partes son interdependientes o inter-subordinadas y no hay dependencia o subordinación lineal unidireccional (jerarquía), sino funciones diferenciadas con un objetivo o principio común. De manera que el cerebro, tiene una función de dirección, pero sin el corazón no tendría sangre, y la sangre sin los pulmones no tendría oxígeno, pero todos sin los intestinos no tendrían nutrientes. La intoxicación de todo el sistema por mal funcionamiento del intestino grueso (para muchos un miembro de bajo nivel) acabaría con todos, de manera que no hay miembro más importante, no hay dependencia lineal, no hay jerarquías propiamente dichas. En el ejercicio dentro de la Iglesia, estando los ancianos predicando, son autoridad y nos sujetamos o subordinamos ; luego, cuando pasa el hermano X a dirigir algún canto, podría cambiar su velocidad, ponernos de pie o sentarnos y nos sujetaríamos o subordinaríamos a ese hermano X, incluso el anciano 4 Wikipedia: La interdependencia es la dinámica de ser mutuamente responsable y de compartir un conjunto común de principios con otros. Este concepto difiere sustancialmente de la "dependencia", pues la relación interdependiente implica que todos los participantes sean emocional, económica y/o moralmente "independientes". La interdependencia reconoce la verdad (o la validez) en cada una de las posiciones, y las desarrollan siempre o juntos. que predicó; así podríamos manejar otras funciones para los niños, enseñanza, canto, evangelismo, etc. De manera que no hay una regla de subordinación unidireccional, sino inter-subordinación o interdependencia. Dones ministeriales Será bueno indagar acerca de lo que la biblia señala de esos dones interdependientes que el Señor puso en la Iglesia y conocer un poco más de ellos y sus funciones o atribuciones en el cuerpo. Ancianos Tiene cierta relación con la figura de los ancianos del antiguo testamento. Este término da la idea de personas mayores, con experiencia, maduras, y ese es el fondo del término para este grupo de hermanos: la madurez en las cosas de Dios (Hch 11.30; Hch 14.23; Hch 15.2, 4, 6, 23; Hch 20.17; 1 Tim 5.17; Tit 1.5; 1 P 5.1, 5). Los ancianos son un grupo muy genérico que puede incluir apóstoles, obispos, maestros, profetas, pastores y diáconos. Por ejemplo, en Hch 20.17 se les llama ancianos, y las mismas personas en Hch 20.28 son descritos como obispos a los que se les exhorta a apacentar a la grey (función de pastores). Las funciones principales de estos fue la de enseñar y pastorear (Hch 20.17-32). En 1 P 5.1, 5 Pedro (apóstol) invita a los ancianos y se considera anciano también, en 1 P 5.2 les otorga la fuinción de apacentar o pastorear a la Iglesia, siguiendo al Príncipe de los pastores (1 P 5.4). Pablo encarga a Tito nombrar ancianos Tit 1:5 y luego en Tit 1:7 llama a esos ancianos como obispos. Cabe hacer la acotación que en las escrituras siempre se menciona a este sector en plural para las iglesias. Algunos han propuesto que en esto se visualiza la necesidad de algo como un consejo de ancianos en cada congrega- Pág. 5 de 6
ción que operaban para la dirección del grupo. Obispos El término episkopos tiene varias acepciones: la más comunmente aceptada es la de supervisor o sobre-veedor (Hch 20.28; Fil 1.1; 1 Tim 3.2; Tit 1.7); sin embargo, en la escritura también se utiliza el término como protector o cuidador 5 (1 P 2.25). En cierto sentido, y dada la definición de cuidador, la palabra episkopo es completamente sinónima de pastor. Dado el análisis realizado para el término ancianos, podemos homologar sus funciones a la enseñanza, cuidado de la grey y dirección. Diáconos La palabra castellana diácono es una transliteración del griego diakonos, que se utiliza treinta veces en el nuevo testamento y se traduce sólo tres veces en nuestra versión RV60 por diácono (Fil 1.1; 1 Ti 3.8, 10). Originalmente, el diácono era un criado que servía a la mesa, una especie de mozo de comedor. En el nuevo testamento, esta palabra, diakonos, se aplica a Cristo mismo, al apóstol Pablo y a varios otros siervos de Dios que realizaban un servicio espiritual o material. Es traducido en muchos de estos pasajes por ministro (2 Co 3.6; 2 Co 11.23; Ef 3.7; Ef 6.21; Col 1.7, 23, 25; Col 4.7; 1 Ti 4.6; Ro 16:1), o servidor (1 Co 3.5; 1 Ts 3.2). Pastores A los pastores se les destaca la idea de provisión de alimento y cuidado, a la vez que enfatiza el carácter y el cuidado amoroso sobre las personas puestas a su cuidado. Se emplea en Ef 4.11 y como verbo lo encontramos en (Jn 21.16; Hch 20.28; 1 P 5.2). Dadas las descripciones anteriores de obispos y ancianos, correspondería en la mayoría de los casos con ellos. Conclusión De acuerdo con la información vertida en este documento y que se puede verificar en la biblia y algunos otros léxicos griegos, podemos decir lo siguiente: 1. La Iglesia de Dios tiene una estructura de gobierno plana, teniendo como único jerarca de todos al Señor Jesús. 2. Todas las funciones entre obispos, ministros (diáconos), pastores, ancianos, y hermanos en general son interdependientes y no existe la posibilidad de jerarquía. 3. Cada una de los dones ministeriales tienen diferentes atribuciones y funciones, dentro de las que pueden estar la dirección, guianza y conducción del grupo (gobierno), sin señorío. 4. De acuerdo al manejo plural de la palabra anciano, parece que la biblia apoyaría la dirección de las congregaciones por un grupo de ancianos y no por una sola persona. Esto apoya la idea de una estructura plana sin encumbramientos. 5. De acuerdo con la biblia son términos equivalentes anciano y obispo, en algunos casos también son equivalentes con el término pastor y apóstol. 6. El nombramiento de ancianos y diáconos se hace por imposición de las manos de otros ancianos. 7. Son términos equivalentes diácono y ministro, aunque también suele ser utilizado el término en la biblia para cualquier otro anciano. 5 Según el New Testament Greek Lexicon - New American Standard (Número Strong: 1985 episkopoß). Dudas y aclaraciones con el hno. Ismael Cedillo. Capulhuac. Pág. 6 de 6