Página1 BALCÓN CON VISTAS AL MAR Quisiera regresar allí donde siempre hubo una primera vez, sin sentir el férreo peso del tiempo que nos consume, lejos de la falsedad de todo, de la lenta mentira. De esas fracturas que son el pábilo oscilante que alimenta las malas lenguas. Allí a veces el viento olvida regresar a la orilla y nos perdemos en la sombra del cuerpo envejecido de sueños, con el dedo que cincela el placer y dibuja la carne a su paso por la piel temblorosa. Los labios, el fruto de la sufrida ansiedad de la juventud, el sabor amargo de la pérdida que oprime en la lejanía. El bocinazo del silencio en el puerto a las cinco de la mañana, la quietud del mar al alba, las olas que restallan sobre la proa de tus labios, las manos entrelazadas y anhelantes que se creyeron naufragar en el aroma de las tardes de julio. Sólo inmensidad de tiempo, perfección de las olas, sin escollos, sin tapujos. Desnudos. Al otro lado del espejo, más allá de todo.
Página2 EL TÚNEL "...en todo caso, había un solo túnel, oscuro y solitario: el mío". (Ernesto Sábato) Y ahí sigues, corazón distante, en la ceguera del espejo sin vislumbrar jamás la orilla, anhelando el instante que arrasa el viento sin esperar a que lo alcances. No hay más túneles que el propio, tejido de desencanto.
Página3 EL TIEMPO Y EL VELO Altazor encerrado en la jaula de su destino (Vicente Huidobro) Un día gris ceniza para los vuelos sin sentido. Existen fracturas que tan sólo se cubren con el barniz de la mentira. Las huellas del pasado socavan la mente y renacen las luciénagas en la solitud del silencio, sutilezas infrahumanas que regurgita el tiempo. Los besos ya no son de almizcle, y una débil flor marchita cierra el camino.
Página4 A LA LUZ DEL VERSO Báilame la luna para disfrazar la soledad. Enrédate una y otra vez entre mis cabellos empapados de sal y noches de espinas, que la totalidad de nosotros se bañe en el hálito perfumado del cuerpo exhausto.
Página5 HEAUTONTIMORÚMENOS Orfandad del llanto, rasga sangre el sayal. Regreso a la habitación de arena, donde nada pasa.
Página6 RES NON VERBA Despojos del verbo sobre la herida: ofréceme tan sólo un pétalo para esculpir esta flor de angustia.
Página7 HABITACIÓN DORMIDA De nuevo la sordidez del silencio, sábanas y desamor ocultan el cuerpo, de nuevo la noche exuma el lamento.
Página8 MEMENTO "...adoro mi propio ser perdido, mi sustancia imperfecta, mi golpe de plata y mi pérdida eterna" (Neruda) Cala frío el recuerdo. Tan sólo un fogonazo en el tiempo.
Página9 PEREGRINO Quién se atrevió a darme alas para atarme así a la libertad?
Página10 BREVES DISONANCIAS DEL TIEMPO Hemos llegado a la punzante vastedad de la nada. Fue así como nos hallamos el uno al otro despojados de todo, de ti y de mi imagen de mi, en los albores de aquello que llaman senescencia. Tal vez se apagó también la llama del deseo temblorosa entre tus manos sobre la piel prohibida que anhela siempre la marea voraz en crecida. Puede que los ojos ya sólo se ahoguen en miradas perdidas. Tal fue tu anhelo, así amé mi destino. Déjalo, mi amor, ya no nos quedan orillas, ya el río se ha llevado esos despojos que han quedado tallados en la piedra fría de la soledad inmisericorde. Has ido sorteando tantos besos, y tan sólo esa mirada impertérrita a lo que nunca quisiste redimir. Para mi tus labios siguen siendo el refugio en la isla de oscuridad donde te he necesitado entrelazada en sombras, tejiendo y componiendo retales y desgarros de versos desordenados, como tú, como yo, como la vida misma, huyendo de la sordidez del vacío, atrapada siempre en el flujo del tiempo sin retorno.