LA FIESTA DE LAS TROMPETAS

Transcripción

1 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS Domingo, 25 de Septiembre de 2005 Goiânia-GO, Brasil Rev. William Soto Santiago, Ph.D.

2 NOTA AL LECTOR Es nuestra intención hacer una transcripción fiel y exacta de este Mensaje, tal como fue predicado; por lo tanto cualquier error en este escrito es estrictamente error de audición, transcripción e impresión; y no debe interpretarse como errores del Mensaje. El texto contenido en esta Conferencia, puede ser verificado con las grabaciones del audio o del video. Este folleto debe ser usado solamente para propósitos personales de estudio, hasta que sea publicado formalmente.

3 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS Rev. William Soto Santiago, Ph.D. Domingo, 25 de Septiembre de 2005 Goiânia-GO, Brasil M uy buenos días, amados amigos y hermanos presentes, y los que están a través de internet en diferentes naciones o del satélite en otras naciones; es una bendición grande para mí estar con ustedes en esta ocasión, para compartir con ustedes unos momentos de compañerismo alrededor de la Palabra de Dios. Para lo cual leemos en San Mateo, capítulo 24, versos 30 al 31, donde dice: Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro. Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos permita entenderla. Para esta ocasión nuestro tema es: LA FIESTA DE LAS TROMPETAS. Que Dios bendiga nuestras almas con Su Palabra y nos abra las Escrituras y nos enseñe el significado de esta gran Voz de Trompeta que llama y junta a los escogidos de Dios. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén. En este pasaje nuestro amado Señor Jesucristo nos habla de los Ángeles con gran Voz de Trompeta, enviados para juntar a los escogidos de Dios, de los cuatro vientos, desde un extremo del Cielo hasta el otro; o sea, que será una Obra a nivel mundial. En San Marcos, capítulo 13, también encontramos en el

4 4 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 29 verso 26 al 27, las mismas palabras: Entonces verán al Hijo del Hombre, que vendrá en las nubes con gran poder y gloria. Y entonces enviará sus ángeles, y juntará a sus escogidos de los cuatro vientos, desde el extremo de la tierra hasta el extremo del cielo. Y aquí nos muestra que para esta labor de sonar la gran Voz de Trompeta y llamar y juntar a los escogidos de Dios, estarán en la Tierra los ministerios de los Ángeles del Hijo del Hombre. No será un sistema religioso el que llamará y juntará a los escogidos de Dios, no será un sistema religioso el que sonará, tocará, la gran Voz de Trompeta, sino que son los Ángeles del Hijo del Hombre. Estos son los mismos Ángeles que aparecen en San Mateo, capítulo 13, verso 30, en la parábola del trigo y de la cizaña, donde dice: Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero. Y ahora, el trigo es recogido en el granero del Señor, y la cizaña será quemada en la gran tribulación. Esto nos habla de los hijos de Dios representados en el trigo, esos son los hijos del Reino; y la cizaña son los hijos del malo. Y ahora, en San Mateo, capítulo 13, versos 37 al 43, explicando Jesús la parábola del trigo y de la cizaña, vean aquí... vamos a leer un poco antes, desde el verso 34 en adelante, dice: Todo esto habló Jesús por parábolas a la gente, y sin parábolas no les hablaba; para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; Declararé cosas escondidas desde la fundación del mundo. donde ustedes están hay bautisterios, hay ministros y ropas bautismales, para ser bautizados en el Nombre del Señor Jesucristo. Y que Cristo les bautice también a ustedes con Espíritu Santo y Fuego. En el Nombre del Señor Jesucristo. Amén. Dejo nuevamente al Reverendo Salomón Cunha, para continuar e indicarles hacia dónde caminar para colocarse las ropas bautismales. Dios les bendiga y les guarde a todos. LA FIESTA DE LAS TROMPETAS.

5 28 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 5 Jesucristo en estos momentos. Y que Cristo les bautice con Espíritu Santo y Fuego y produzca en ustedes el nuevo nacimiento. El bautismo en agua tipifica que ustedes han muerto con Cristo al mundo y que ustedes han sido sepultados con Cristo, y que ustedes han resucitado con Cristo; cuando ustedes han recibido a Cristo como Salvador, ustedes han muerto al mundo; y cuando ustedes son sumergidos en las aguas bautismales, ustedes están siendo sepultados con Cristo, dando testimonio que cuando Cristo fue sepultado, usted fue sepultado con Él. Así como cuando usted recibe a Cristo, usted muere al mundo, y por consiguiente usted murió con Cristo cuando Él murió dos mil años atrás aproximadamente; y ahora cuando usted es levantado de la aguas bautismales, tipifica que usted resucitó con Cristo, cuando Cristo resucitó; y ahora usted ha resucitado a una nueva vida, a la Vida eterna. Que Dios les continúe bendiciendo a todos, y les bautice con Espíritu Santo y Fuego, luego que ustedes sean bautizados en agua en el Nombre del Señor Jesucristo. Muchas gracias por vuestra amable atención, y dejo al Reverendo Salomón Cunha, el cual les indicará hacia dónde caminar para colocarse las ropas bautismales y ser bautizados en agua en el Nombre del Señor Jesucristo. Hay agua? Hay agua y un bautisterio. Hay ropas bautismales? Hay ropas bautismales también. Hay personas que les ayudarán? Hay personas que les ayudarán también. Por lo tanto, bien pueden ser bautizados en agua en el Nombre del Señor Jesucristo en estos momentos. Muchas gracias por vuestra amable atención, y que Jesucristo les continúe bendiciendo a todos. Los que están en otros países y recibieron a Cristo como Salvador, también pueden ser bautizados en estos momentos; En las parábolas de nuestro amado Señor Jesucristo, fueron habladas cosas que estaban escondidas desde la fundación del mundo. Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo. Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre. El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo (o sea, que en esta parábola le está hablando de seres humanos). El enemigo que la sembró es el diablo (o sea, el que sembró la cizaña; y el que sembró la buena Simiente, el Trigo, es el hijo del Hombre)... El enemigo que la sembró es el diablo (o sea, el que sembró la cizaña); la siega es el fin del siglo (esto es para el fin de la Dispensación de la Gracia); y los segadores son los ángeles... O sea, que esa gran Cosecha corresponde al ministerio de los Ángeles del Hijo del Hombre; y con él, con esos ministerios, estarán maravillosos ayudantes que estarán trabajando en esa labor de gran Cosecha en este tiempo final. De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo. Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles ( a quién enviará Jesucristo, el Hijo del Hombre? A Sus Ángeles), y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad, y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes (o sea, que serán echados en la gran tribulación, donde los juicios divinos vendrán sobre la raza humana. Y qué de los justos? Qué del Trigo?). Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino

6 6 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 27 de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga. Y ahora, hemos visto que el ministerio que llevará a cabo la gran Cosecha del Trigo, de los hijos e hijas de Dios, que recogerán a los escogidos de Dios, es el ministerio de los Ángeles del Hijo del Hombre que corresponden al ministerio de los dos Olivos y dos Candeleros de Oro, que son los dos Ungidos que están delante de la presencia del Señor, conforme a Zacarías, capítulo 4, versos 1 al 14; y Apocalipsis, capítulo 11, verso 3 en adelante. Y estos ministerios son los que estarán llevando a cabo el recogimiento de todos los escogidos de Dios; estos son los ministerios que tocan, que suenan la gran Voz de Trompeta, la Trompeta final. No hay otros ministerios prometidos para sonar la gran Voz de Trompeta y recoger a todos los escogidos de Dios. Primero son recogidos los escogidos de la Iglesia del Señor Jesucristo y colocados dentro de la Iglesia del Señor Jesucristo. Esas personas están escritas en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero; y esos son los que recibirán a Cristo en este tiempo final, serán bautizados en agua en Su Nombre, Cristo los bautizará con Espíritu Santo y Fuego, producirá en ellos el nuevo nacimiento; y por consiguiente entrarán al Reino de Dios, y estarán seguros en el Reino de Dios. Y luego serán llamados ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, doce mil hebreos de cada tribu; y son doce tribus; y por consiguiente doce mil por doce, son ciento cuarenta y cuatro mil; y ahora, encontramos que eso es lo que está prometido para suceder en este tiempo final, bajo el ministerio del Espíritu Santo operando los ministerios de los dos Olivos, los ministerios de Moisés y de Elías. También Jesucristo habló en San Mateo, capítulo 13, versos 47 al 40, de esto mismo, usando otra parábola. Dice: Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, Señor Jesucristo, Te ruego perdones mis pecados, y con Tu Sangre me limpies de todo pecado, y me bautices con Espíritu Santo y Fuego, y produzcas en mí el nuevo nacimiento, luego que yo sea bautizado en agua en Tu Nombre. Quiero entrar a Tu Reino eterno, quiero vivir eternamente, quiero nacer en Tu Reino, quiero nacer a la Vida eterna. Señor Jesucristo, en Tus manos encomiendo mi alma; salva mi alma, Señor Jesucristo, Te lo ruego en Tu Nombre eterno y glorioso, Señor Jesucristo. Amén y amén. Y con nuestras manos levantadas a Cristo al Cielo, todos decimos: La Sangre del Señor Jesucristo me limpió de todo pecado! La Sangre del Señor Jesucristo me limpió de todo pecado! La Sangre del Señor Jesucristo me limpió de todo pecado! Amén y amén. Y ahora, con nuestras manos levantadas al Cielo a Cristo, le decimos: Señor Jesucristo, gracias por Tu Sacrificio en la Cruz del Calvario por mí, gracias por perdonarme y limpiarme de todo pecado; y ahora seré bautizado en agua en Tu Nombre; bautízame con Espíritu Santo y Fuego, luego que yo sea bautizado en agua en Tu Nombre. Te lo ruego, Señor Jesucristo. En Tu Nombre eterno y glorioso. Amén y amén. Y que Cristo también llame a vuestros familiares, y les dé también la salvación y Vida eterna. Ahora, ustedes me dirán: Quiero ser bautizado en el Nombre del Señor Jesucristo en agua lo más pronto posible. Cuándo me pueden bautizar? Por cuanto ustedes han creído en Cristo de todo corazón, y Cristo dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado. Por cuanto ustedes han creído de todo corazón en Cristo, bien pueden ser bautizados en agua en el Nombre del Señor

7 26 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 7 venir, puede venir. Algunas veces hay personas tímidas que escuchan la predicación del Evangelio de Cristo, nace la fe de Cristo en su alma, creen en Cristo y luego les toca dar testimonio público de su fe en Cristo, y por ser tímidos se detienen porque piensan que los van a ver venir a los Pies de Cristo, y se avergüenzan. Pero no nos podemos avergonzar de Cristo, porque Él se avergonzaría de nosotros delante del Padre Celestial. Él dijo: El que se avergonzare de mí, delante de los hombres, Yo me avergonzaré de él delante de mi Padre que está en los Cielos. Y también dijo: El que me confesare delante de los hombres, Yo le confesaré delante de mi Padre que está en los Cielos. Eso está en San Mateo, capítulo 10, versos 32 al 33. Por lo tanto, queremos que Cristo nos confiese delante del Padre celestial como creyentes en Él, que hemos creído en Él y que lo hemos recibido como nuestro único y suficiente Salvador. Vamos ya a orar por las personas que han venido a los Pies de Cristo. Si falta todavía alguna persona, puede venir para que quede incluido en esta oración. Vamos a levantar nuestras manos al Cielo a Cristo, y vamos a orar con nuestros ojos cerrados (los que están aquí presentes y los que están a través de Internet o del satélite), y repitan conmigo esta oración: Señor Jesucristo, vengo a Ti, creyendo en Ti de todo corazón, luego de haber escuchado la predicación de Tu Evangelio. Señor Jesucristo, creo en Ti de todo corazón, creo que Tú eres el Hijo de Dios, creo en Tu muerte en la Cruz del Calvario como el Sacrificio de la Expiación por mis pecados; y doy testimonio público de mi fe en Ti, y Te recibo como mi único y suficiente Salvador. que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera. Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos... La separación del trigo y de la cizaña, de los malos y de los buenos, será realizada por el ministerio de los Ángeles del Hijo del Hombre. Eso es lo que está prometido. Y a los malos los echarán, dónde? En el horno de fuego....y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes. Serán echados los malos en la gran tribulación, donde los juicios caerán sobre la raza humana. Esto es lo que está prometido para suceder en este tiempo final. Por lo tanto, la gran Voz de Trompeta o Trompeta Final, es la misma Fiesta de las Trompetas, de Levítico, capítulo 23, versos 23 al 25; esa Fiesta de las Trompetas será cumplida en este tiempo final; o sea, lo que significa aquella fiesta, será realizado en este tiempo final; aquello solamente es el tipo y figura de lo que Dios estará haciendo en este tiempo final. Vean aquí en Levítico, capítulo 23, versos 23 al 25, dice: Y habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: En el mes séptimo, al primero del mes tendréis día de reposo, una conmemoración al son de trompetas, y una santa convocación. Ningún trabajo de siervos haréis; y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová. Esa fiesta es tipo y figura de lo que Dios estará haciendo en este tiempo final, esa Fiesta de las Trompetas siendo cumplida, será bajo el ministerio de los Ángeles del Hijo del Hombre enviados con gran Voz de Trompeta, para llamar y juntar a todos los escogidos de Dios. Los escogidos de la Iglesia primero y para la Iglesia, y después los escogidos del

8 8 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 25 pueblo hebreo, que serán ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Por eso en Apocalipsis, capítulo 7, nos habla desde el verso 1 en adelante: Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol (o sea, esos Ángeles detienen la guerra, están deteniendo a las naciones para que no haya una tercera guerra mundial todavía). Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar (y ahora, aquí aparece otro Ángel, y esté Ángel viene con el Sello del Dios vivo. El Sello del Dios vivo es el Espíritu Santo)... En Efesios, capítulo 4, verso 30, dice el Apóstol San Pablo de la siguiente manera (y vamos a leerlo para que tengamos el cuadro claro de lo que es el Sello de Dios): Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención (sellados con el Sello de Dios, que es el Espíritu Santo). Y ahora, este Ángel viene con el Sello del Dios vivo, viene con el Espíritu Santo. En Efesios, capítulo 1, verso 13 al 14, dice: En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa. Con qué sella Dios al ser humano que recibe a Cristo como Salvador? Con el Espíritu Santo. Por lo tanto, los creyentes en Cristo nacidos de nuevo están sellados con el Espíritu Santo, tienen el Sello del Dios vivo. Y ahora, este Ángel viene con el Sello del Dios vivo, es un creyente en Cristo nacido de nuevo, tiene el Espíritu Santo, y momentos, y yo oraré por usted. Si oyes hoy Su Voz, no endurezcas tu corazón, Él te está llamando para darte la salvación y Vida eterna. Pueden continuar viniendo a los Pies de Cristo los que faltan por venir, antes que se cierre la Puerta de la Misericordia, la Puerta del Reino de Dios, antes que Cristo se revele al pueblo hebreo. Los niños de diez años en adelante también pueden venir, pues Cristo tiene lugar en Su Reino para los niños también. También en las demás naciones que están a través de internet o del satélite, pueden venir a los Pies de Cristo, pues Cristo tiene lugar en Su Reino para ustedes también. Pueden continuar viniendo a los Pies de Cristo los que faltan por venir, los cuales desean vivir eternamente con Cristo en Su Reino; ustedes están aquí presentes y también a través de Internet y del satélite, están escuchando la predicación del Evangelio de Cristo, porque el nombre de ustedes está escrito en el Cielo en el Libro de la Vida del Cordero, y el Espíritu de Dios los ha traído para escuchar la predicación del Evangelio de Cristo, para llamarlos y colocarlos en Su Reino eterno. Usted está escrito en el Cielo en el Libro de la Vida: por eso está aquí escuchando usted en este lugar o allá a través de internet donde se encuentra. Cristo dijo: Mis ovejas oyen mi Voz y me siguen. O sea, que escucharían el Evangelio de Cristo siendo predicado por el Espíritu Santo a través de los diferentes Mensajeros que Cristo enviaría a Su Iglesia. Pueden continuar viniendo a los Pies de Cristo los que faltan por venir. Vamos a orar dentro de algunos segundos por todos los que han venido a los Pies de Cristo. En las demás naciones pueden continuar viniendo a los Pies de Cristo, para que queden incluidos en esta oración que estaré haciendo. Vamos a estar puestos en pie para orar. Si falta alguno por

9 24 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 9 suceder en este tiempo final, y preparan al pueblo hebreo para la expiación, para recibir la expiación por sus pecados, que es la Expiación que realizó Cristo en la Cruz del Calvario; verán la Expiación, verán a Cristo, creerán en la muerte de Cristo como el Sacrificio de la Expiación por sus pecados. Todo esto bajo la Fiesta de las Trompetas. Hay miles o millones de hebreos que han creído en Cristo desde el Día de Pentecostés en adelante; y aun en los días del ministerio de Jesucristo. Y para este tiempo final hay una bendición grande para el pueblo hebreo también. Cuando Cristo se revele al pueblo hebreo y comience a llamar y a juntar y a sellar esos ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, se cerrará la Puerta para los gentiles; porque la Puerta de la Gracia, que es Cristo, se cerrará para los gentiles, se habrá completado la Iglesia del Señor Jesucristo. En San Lucas, capítulo 13, versos 25 al 27, Cristo enseña que entremos por esa Puerta, y que esa Puerta va a ser cerrada, y luego vendrá el crujir de dientes para los que no entraron por esa Puerta que es Cristo. En San Juan, capítulo 10, verso 9, Cristo dice: Yo Soy la Puerta, el que por mí entrare, será salvo. Por lo tanto, mientras hay oportunidad de entrar por la Puerta del Reino de Dios (y la Puerta es Cristo), entren los que faltan por entrar. Ya yo entre al Reino de Dios por la Puerta del Reino, que es Cristo, recibiéndolo como mi único y suficiente Salvador. Y quién más? Cada uno de ustedes también. Si hay alguna persona que todavía no ha entrado al Reino de Dios, por la Puerta del Reino, que es Cristo, recibiendo a Cristo como Salvador, puede hacerlo en estos momentos para que Cristo le reciba en Su Reino. Yo estaré orando por usted en estos momentos, para que Cristo extienda Su Misericordia sobre ustedes. Puede venir a los Pies de Cristo en estos por consiguiente tiene el Sello del Dios vivo; y solamente puede venir entonces en medio y de en medio de los creyentes en Cristo, de en medio de la Iglesia del Señor Jesucristo, para llevar el Evangelio de Cristo al pueblo hebreo, luego que haya completado su labor en medio de la Iglesia del Señor Jesucristo. Por lo tanto, todo se prepara en este tiempo final para el llamado de los hebreos señalados en Apocalipsis 7, como ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Por lo tanto, en la Iglesia del Señor Jesucristo las labores del Espíritu Santo estarán siendo realizadas a gran prisa, para completar Cristo Su Iglesia y después hablarle al pueblo hebreo. Será el mismo Espíritu Santo que habló a través de los Profetas y que habló a través de Jesucristo, y que habló a través de los Apóstoles, será el mismo Espíritu Santo hablando en este tiempo final, y operando los ministerios de los dos Olivos. Vamos a continuar leyendo en el capítulo 7 del Apocalipsis, verso 2, dice:...y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar, diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios. O sea, que hasta que sean sellados los siervos; cuando habla de los siervos, se refiere a los hebreos, que es el pueblo de los siervos de Dios; cuando habla de los hijos de Dios, se refiere a los miembros de la Iglesia de Jesucristo. Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel. De la tribu de Judá, doce mil sellados. De la tribu de Rubén, doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados.

10 10 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 23 De la tribu de Aser, doce mil sellados. De la tribu de Neftalí, doce mil sellados. De la tribu de Manasés, doce mil sellados. De la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Isacar, doce mil sellados. De la tribu de Zabulón, doce mil sellados. De la tribu de José, doce mil sellados. De la tribu de Benjamín, doce mil sellados. Aquí no aparecen Dan ni Efraín, porque en esas tribus se habían colocado en cada una de ellas un becerro de oro, el cual mandó a colocar el rey de las diez tribus del Norte (Jeroboam) para que el pueblo no fuera a Jerusalén a adorar a Dios, y para que el pueblo no se volviera al rey de Judá (Roboam). Y esto fue un pecado grande ante Dios: colocar esos ídolos en medio del pueblo hebreo. Y la Escritura dice que cualquier nación o cualquier tribu o persona que adore o que cargue ídolos (un ídolo), será raído de debajo del *Cielo [Deuteronomio 29:16-20]; y eso pasó con esas tribus; porque los idólatras no estarán en el Reino de Dios, serán raídos y no vendrán a existir sobre la Tierra en el Reino Milenial de Cristo ni en la eternidad. Ahora, aquí fue colocada la tribu de Leví en lugar de la tribu de Dan; y fue en lugar de la tribu de Efraín: José. O sea, que José vino a ocupar el lugar de Efraín. Por qué José? Porque José tuvo dos hijos: el mayor, Manasés, y el menor, Efraín. Y la Bendición de la Primogenitura vino sobre Efraín. Y ahora, la Bendición de la Primogenitura no se puede perder. Y ahora, José tipifica a Cristo. Por lo tanto, en este tiempo final habrá una bendición grande para la Iglesia del Señor Jesucristo y para el pueblo Iglesia en el pasado. Por lo tanto, la Fiesta de las Trompetas corresponde a este tiempo final en Su materialización para el pueblo hebreo. Es la misma Voz del Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, del Eterno que habló a través de los Profetas y habló a través de Jesús, y habló a través del Apóstol Pedro y del Apóstol Pablo y demás Mensajeros, hablándole a Su Iglesia en este tiempo final; y después le hablará al pueblo hebreo, y eso será la Fiesta de las Trompetas materializada, cumpliéndose en este planeta Tierra. LA FIESTA DE LAS TROMPETAS. De esto habló Cristo cuando dijo: Y enviará a Sus Ángeles con gran Voz de Trompeta, y juntarán a Sus escogidos. Hemos visto que la gran Voz de Trompeta corresponde al ministerio de los Ángeles del Hijo del Hombre, que son los ministerios de los dos Ungidos, de los dos Olivos y dos Candeleros que están delante del Dios de toda la Tierra; conforme a Zacarías, capítulo 4, verso 1 al 14; y Apocalipsis, capítulo 11, verso 3 en adelante; y Apocalipsis, capítulo 7, verso 2 en adelante. Por lo tanto, este es el tiempo para estar escuchando esa gran Voz de Trompeta que escuchó Juan, en Apocalipsis, capítulo 1, verso 10 al 11, en el Día del Señor. Estamos en el tiempo correcto. Ya comenzó el séptimo milenio de Adán hacia acá o tercer milenio de Cristo hacia acá; siendo el séptimo milenio de Adán hacia acá: es el milenio de descanso, el milenio sabático, donde la Voz de Cristo habla con esa gran Voz de Trompeta. Por lo tanto, estemos atentos a lo que esa gran Voz de trompeta estará hablándonos en este tiempo final. LA FIESTA DE LAS TROMPETAS. Hemos visto lo que es la Fiesta de las Trompetas: es la fiesta en donde la trompeta o trompetas revelan las cosas que han de

11 22 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 11 creyentes en Cristo del pasado que han muerto, Cristo los va resucitar en cuerpos glorificados; y a los de nuestro tiempo que han muerto físicamente, también los va resucitar en cuerpos glorificados; y a los que queden vivos los transformará, y entonces todos seremos jóvenes, representando de 18 a 21 años de edad, y por consiguiente seremos inmortales y estaremos a imagen y semejanza de Cristo, para ir con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero en el Cielo. Cuando ya tengamos el cuerpo nuevo, cuando ya los muertos en Cristo hayan resucitado, vamos a estar todavía aquí en la Tierra de 30 a 40 días. Así que, vamos a estrenar bien el cuerpo nuevo. Cristo cuando resucitó, luego estuvo 40 días apareciendo a Sus discípulos en esta Tierra, y después subió al Cielo y una nube le quitó de los ojos de ellos. Y ahora, estamos esperando nuestra transformación para luego ir con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero; y para eso estamos escuchando la gran Voz de Trompeta, que es la Fiesta de las Trompetas sonando en este tiempo final, la gran Voz de Trompeta que llama y junta a todos los escogidos de Cristo y luego los escogidos del pueblo hebreo. Y enviará Sus Ángeles con gran Voz de Trompeta, y juntarán a Sus escogidos, desde un extremo del Cielo hasta el otro. Y ahora, todo esto se manifiesta en la Iglesia de Jesucristo y después en medio del pueblo hebreo. Con la gran Voz de Trompeta o Trompeta Final, recibimos la fe para ser transformados y llevados con Cristo a la Cena de las Bodas del Cordero. La gran Voz de Trompeta o Trompeta final, en donde escuchamos la Voz de Cristo por medio de Su Espíritu Santo, hablándonos a través del Evangelio de la Gracia y del Evangelio del Reino; por eso es una gran Voz de Trompeta, es mayor que lo que ocurrió durante las diferentes etapas de la hebreo. Y ahora, vean ustedes en Apocalipsis, capítulo 14, verso 1 en adelante, dice (ya para este tiempo, ya estarán recogidos los ciento cuarenta y cuatro mil hebreos): Después miré, y he aquí el Cordero estaba en pie sobre el monte de Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil, que tenían el nombre de él y el de su Padre escrito en la frente. Ahí tenemos doce mil de cada tribu, que son ciento cuarenta y cuatro mil en total, sobre el Monte de Sion, sellados en sus frentes y con el nombre del Cordero y del Padre escrito en sus frentes. Por lo tanto, la labor del Espíritu de Dios en el Ángel que viene con el Sello del Dios vivo, podemos ver aquí en esta profecía, que será de bendición esa labor, y cumplirá el propósito para el cual Dios envía ese Ángel Mensajero con el Sello del Dios vivo. En ese Ángel estará el Espíritu Santo operando el ministerio de los dos Olivos, el ministerio de los dos Ungidos que están delante de la presencia de Dios. En Apocalipsis, capítulo 14, sigue diciendo el verso 2: Y oí una voz del cielo como estruendo de muchas aguas, y como sonido de un gran trueno; y la voz que oí era como de arpistas que tocaban sus arpas. Y cantaban un cántico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro seres vivientes, y de los ancianos; y nadie podía aprender el cántico sino aquellos ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los de la tierra. Estos son los que no se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes (o sea, no se contaminaron con sistemas religiosos gentiles)... Sigue diciendo: Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero; y en sus bocas no fue hallada mentira, pues son sin mancha

12 12 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 21 delante del trono de Dios. Ahí podemos ver el grupo de ciento cuarenta y cuatro mil hebreos, doce mil de cada tribu, ya llamados y recogidos. Eso va a ocurrir conforme a la Escritura; ya está profetizado, y así se va a cumplir, bajo el ministerio del Ángel que viene con el Sello del Dios vivo, sonando la gran Voz de Trompeta, la Trompeta final. Esa gran Voz de Trompeta de la cual habló Jesucristo en San Mateo 24, verso 31: Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro. Por lo tanto, eso es lo que está prometido y eso es lo que estará cumpliéndose bajo la materialización de la Fiesta de las Trompetas. Por esa causa en Apocalipsis, capítulo 1, nos habla de la Trompeta. Capítulo 1, verso 10 al 11, dice (del Apocalipsis): Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta. Aquí encontramos que un Tiempo, el Día del Señor, en donde habrá una gran Voz de Trompeta: es esa gran Voz de Trompeta de la Fiesta de las Trompetas materializándose para llamar y juntar a todos los escogidos de Dios para la Iglesia de Jesucristo y después para llamar y juntar ciento cuarenta y cuatro mil hebreos. Y ahora, vamos a ver de quién es esa Voz:...que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Y quién es el Alfa y la Omega? Quién es el primero y el último? Nuestro amado Señor Jesucristo, es la Voz de Jesucristo llamando y juntando a Sus escogidos, es la Voz de Jesucristo por medio de Su Espíritu Santo en Su Iglesia, en el Día del Señor. Un día delante del Señor es como mil años, y mil años como un día. [Salmo 90:4] Ese Día del Señor es el Pero como entonces el que había nacido según la carne perseguía al que había nacido según el Espíritu, así también ahora. Mas qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo, porque no heredará el hijo de la esclava con el hijo de la libre. De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre. O sea, no de la Jerusalén terrenal, sino de la Jerusalén Celestial. Porque nuestra ciudadanía está, dónde? En los Cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo. Eso está en Filipenses, capítulo 3, verso 20 al 21, donde dice: Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra... Para qué estamos esperando al Señor? Para que Él transforme nuestro cuerpo, y así nos dé el cuerpo físico glorificado....el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya... O sea, para que sea semejante a Su cuerpo glorificado, o sea para que nosotros tengamos un cuerpo glorificado, joven y eterno, como el cuerpo glorificado de Jesucristo....por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas. Él tiene el poder para transformar nuestros cuerpos y hacerlos como el cuerpo glorificado Suyo, y tiene el poder para resucitar a los creyentes en Él que han muerto físicamente, lo cual Él mostró resucitando a Lázaro, que ya tenía cuatro días de muerto. Por lo tanto, no importa cuántos siglos o milenios tengan los

13 20 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 13 justos hechos perfectos, a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel. Y ahora, es en el Monte de Sion, la Iglesia del Señor Jesucristo, la Jerusalén Celestial, en donde Cristo en Espíritu Santo ha estado hablándole a Su pueblo por medio de Su Espíritu Santo, y por consiguiente es Cristo en Espíritu Santo el que habla desde el Cielo a Su Iglesia. Y ahora, en Gálatas, capítulo 4, también el Apóstol Pablo nos habla de la siguiente manera: verso 22 de Gálatas, capítulo 4, dice: Porque está escrito que Abraham tuvo dos hijos; uno de la esclava, el otro de la libre. Pero el de la esclava nació según la carne; mas el de la libre, por la promesa. Lo cual es una alegoría, pues estas mujeres son los dos pactos; el uno proviene del monte Sinaí, el cual da hijos para esclavitud; éste es Agar. Porque Agar es el monte Sinaí en Arabia, y corresponde a la Jerusalén actual (o sea, a la Jerusalén que está en medio de Israel), pues ésta, junto con sus hijos, está en esclavitud. Mas la Jerusalén de arriba, la cual es madre de todos nosotros, es libre. Y ahora, hay una Jerusalén terrenal y hay una Jerusalén Celestial. Porque está escrito: Regocíjate, oh estéril, tú que no das a luz; Prorrumpe en júbilo y clama, tú que no tienes dolores de parto; Porque más son los hijos de la desolada, que de la que tiene marido. Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa. séptimo milenio de Adán hacia acá. Así como el séptimo día de la semana es el día del Señor (el día de reposo para el pueblo hebreo), y así como Dios reposó el séptimo día, ahora el séptimo milenio de Adán hacia acá, es el Día del Señor, es el Día de reposo para el planeta Tierra y para la raza humana. Es el Día en que Dios cumplirá esta promesa. Por lo tanto, este es el tiempo más glorioso de todos los tiempos. De Adán hacia acá conforme al calendario gregoriano, ya hemos entrado al séptimo milenio, y llevamos cinco años dentro del séptimo milenio; y conforme al calendario profético, ya llevamos unos treinta años o alrededor de treinta años, dentro del séptimo milenio; o sea, dentro del Día del Señor. El Día del Señor no es un día de veinticuatro horas, es el séptimo milenio, en el cual Dios establecerá el Reino Mesiánico que será de bendición para Israel y para todos los que vivirán en ese Reino. Por lo tanto, la gran Voz de Trompeta del Día del Señor, está representada en la Fiesta de las Trompetas, bajo el Mensaje de la gran Voz de Trompeta, son anunciados los juicios divinos que han de venir, es dado a conocer lo que ha de acontecer en este tiempo final, las cosas que han de suceder. Vean aquí en Apocalipsis, capítulo 4, dice: Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas. Y ahora, esta Voz de Trompeta no es una trompeta literal, es la Voz de Cristo, el Ángel del Pacto hablándole a Su Iglesia las cosas que deben suceder pronto; para la cual la Iglesia sube a un nivel más alto: la Edad de la Piedra Angular. Y lo que Cristo esté hablando desde el Cielo, desde el Trono Celestial,

14 14 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 19 estará siendo comunicado a la Iglesia del Señor Jesucristo por el Espíritu Santo en el Ángel y a través del Ángel que viene con el Sello del Dios vivo. Un Ángel es un Mensajero o un hombre enviado por Dios ungido con el Espíritu Santo, para el Espíritu Santo hablar a través de él, y dar a conocer lo que Dios quiere que el pueblo conozca en ese tiempo que Él envía a ese Mensajero. Y ahora, encontramos que para este tiempo final la promesa es que Dios nos estará hablando por medio de esa gran Trompeta o Trompeta final. En Primera de Tesalonicenses se nos habla de una trompeta también. Primera de Tesalonicenses, capítulo 4, nos dice de la siguiente manera... y vamos a leerlo (verso 15 en adelante): Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. Eso es lo que está prometido. Aquí tenemos al Señor hablando con Voz de mando, con Voz de Arcángel y con Trompeta de Dios. *Y ahora, en Primera de Corintios, capítulo 15, versos 49 en adelante, dice: Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial. Por lo tanto, todos seremos a imagen y semejanza de Cristo, con cuerpos glorificados, eternos, inmortales, igual al cuerpo glorificado de nuestro amado Señor Jesucristo. Y ahora, podemos ver que Dios ha estado obrando conforme a esas fiestas, materializando esas fiestas que le dio al pueblo hebreo. Y ahora, en este tiempo la Fiesta de las Trompetas es la gran Fiesta que primero en medio de la Iglesia se lleva a cabo y después en medio del pueblo hebreo; y esa gran Trompeta de esa Fiesta de las Trompetas, es la que llama y junta a todos los escogidos de Dios, primero de la Iglesia de Jesucristo y después del pueblo hebreo. Esta es la Trompeta de Isaías, capítulo 27, verso 13 que dice: Acontecerá también en aquel día, que se tocará con gran trompeta, y vendrán los que habían sido esparcidos en la tierra de Asiria, y los que habían sido desterrados a Egipto, y adorarán a Jehová en el monte santo, en Jerusalén. Los esparcidos corresponden a la tribu de Judá, al reino del Sur. Y los desterrados corresponden a las diez tribus del Norte. Y ahora, encontramos que todo esto está prometido para este tiempo final. Veamos también lo que nos dice la Escritura en Amós, capítulo 3, verso 4 (y el capítulo 1, verso 2 también), dice: Dijo: Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén... Y ahora, desde dónde va rugir Dios? Desde Sion, y dará Su Voz desde Jerusalén. Cristo es el León de la tribu de Judá, y rugirá desde Sion. En términos espirituales la Iglesia del Señor Jesucristo es Sion. De esto fue que habló San Pablo en Hebreos, capítulo 12, versos 22 en adelante, donde dice: Sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los

15 18 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 15 y luego el día cincuenta es la gran Fiesta en donde se ofrece a Dios, se ofrece a Dios el nuevo grano a Jehová. Y ahí encontramos que se cumplió también el Día de Pentecostés, en donde nacieron de nuevo ciento veinte personas, que estaban esperando el Espíritu Santo, y después Pedro predicó y vinieron como tres mil personas a los Pies de Cristo. Y ahora, todo eso ocurrió en el día cincuenta. Y miren aquí dónde estaba tipificado. Capítulo 23, verso 15 en adelante de Levítico: Y contaréis desde el día que sigue al día de reposo (o sea, contaréis desde el domingo), desde el día en que ofrecisteis la gavilla de la ofrenda mecida; siete semanas cumplidas serán. Hasta el día siguiente del séptimo día de reposo contaréis cincuenta días; entonces ofreceréis el nuevo grano a Jehová. Y eso se cumplió el Día de Pentecostés. Y ahora, encontramos que faltan algunas fiestas de ser cumplidas. Falta la Fiesta de las Trompetas para Israel, y falta que Israel vea y crea en la Fiesta de la Expiación que ya fue cumplida dos mil años atrás; y entonces se abrirá para Israel una Fuente para quitar el pecado, conforme a Zacarías, capítulo 13, verso 1 (aunque ya esa Fuente fue abierta allá en Jerusalén, pero no la han visto todavía, Israel como nación todavía no la ha visto. Pero ya está abierta): En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la purificación del pecado y de la inmundicia. Y para Israel se va a abrir la oportunidad para recibir la Expiación que fue efectuada en la Cruz del Calvario, por nuestro amado Señor Jesucristo. La Fiesta de la Expiación ya fue cumplida. Pero Israel como nación no lo ha comprendido todavía, pero lo va a comprender. También falta la Fiesta de los Tabernáculos que tipifica el Reino Milenial de Cristo. Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción (o sea, que no vamos a estar en el Reino Milenial de Cristo con estos cuerpos mortales, sino con un cuerpo inmortal, un cuerpo glorificado, un cuerpo eterno como el cuerpo glorificado de nuestro amado Señor Jesucristo)... ni la corrupción hereda la incorrupción. Por lo tanto, no podemos vivir eternamente con estos cuerpos mortales, porque la corrupción no hereda la incorrupción. Vamos a vivir eternamente en un cuerpo incorruptible, en un cuerpo que no se pondrá viejo, en un cuerpo que no morirá, en un cuerpo que no será destruido, un cuerpo que no se corromperá. El cuerpo físico se pone viejo, muere, lo echan al sepulcro, y se corrompe. Pero el cuerpo nuevo que Cristo dará a los creyentes en Él, será inmortal, y por consiguiente incorruptible, será joven para toda la eternidad, representando de 18 a 21 años de edad. Ahora, continuemos leyendo aquí, porque queremos saber cuándo Él nos va a dar ese cuerpo nuevo. Sigue diciendo: He aquí, os digo un misterio (este es uno de los misterios grandes de Dios): No todos dormiremos (o sea, que no todos vamos a morir físicamente); pero todos seremos transformados. Aquí está hecha la promesa de una transformación, una transformación física. Así como ha ocurrido una transformación espiritual dentro de nosotros, y ha producido el nuevo nacimiento. Sigue diciendo:...en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta (ahí tenemos la Trompeta de nuevo); porque se tocará la trompeta (o sea, que tiene que sonar esa Trompeta para los muertos en Cristo ser resucitados y los que vivimos ser transformados), y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados.

16 16 LA FIESTA DE LAS TROMPETAS 17 Es la promesa que Dios ha dado para todos los creyentes en Cristo. Si mueren físicamente, serán resucitados en cuerpos glorificados, en cuerpos incorruptibles y jóvenes para toda la eternidad. Si continuamos vivos hasta ese momento en que los muertos en Cristo resuciten, qué sucederá con nosotros? Seremos transformados. Esa es la promesa divina para mí. Y para quién más? Para cada uno de ustedes también. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Es necesario para poder tener juventud eterna y Vida eterna física en un cuerpo glorificado como el de Jesucristo. Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. Y desaparecerá la muerte física para los hijos de Dios. Ya de ahí en adelante no morirán físicamente los hijos de Dios, porque ya tendremos un cuerpo mortal e incorruptible y glorificado. Esto es lo que está prometido para ser cumplido bajo la Fiesta de las Trompetas, que es lo que Cristo dijo que ocurrirá en este tiempo final, y enviará Sus Ángeles con gran Voz de Trompeta y juntarán a Sus escogidos, desde un extremo del Cielo hasta el otro. Y ahora, estamos en el tiempo correcto, para que estas cosas ocurran en medio de la Iglesia de Jesucristo, y después en medio del pueblo hebreo. Esta gran Voz de Trompeta o Trompeta Final es la Fiesta de las Trompetas siendo materializada en medio de la Iglesia y después en medio del pueblo hebreo. Así como la Fiesta de la Pascua era tipo y figura de la muerte de Cristo en la Cruz del Calvario, como el Cordero de Dios, el cual Juan el Bautista presentó diciendo: He aquí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. [San Juan 1:36] Y ahora, aquella fiesta ya fue cumplida en la muerte de Jesucristo en la Cruz del Calvario; y también la Fiesta de la Expiación fue cumplida con la muerte de Cristo en la Cruz del Calvario, porque Él es nuestra Expiación por nuestros pecados. Todas esas fiestas hebreas son tipo y figura de lo que Dios iba a realizar en Su Programa. Por ejemplo, también tenemos la Fiesta de la Gavilla Mecida, la cual era mecida el día quince del mes primero religioso, que era el mes de Nisán o de Abid, lo cual era el tipo y figura de la resurrección de Cristo. Ahora, veamos, vamos a verificar bien la fecha, el día. Eso está en Levítico [23:9-12]. Dice: Y habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies, traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra siega. Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá. Y el día que ofrezcáis la gavilla, ofreceréis un cordero de un año, sin defecto, en holocausto a Jehová. Y ahora, después del sábado, después del día de reposo, se ofrecería a Dios la gavilla mecida, lo cual tipifica a Cristo resucitando y siendo presentado ante Dios, y esto era después del día de reposo. Encontramos aquí que después del día de reposo la gavilla sería mecida ante Dios. Eso nos habla de la resurrección de Cristo, el primero, el cual es las primicias. Y ahora, es el primero que llegó a madurez. Y ahora, esa Fiesta de la Gavilla Mecida ya fue cumplida con la resurrección de Cristo. Y ahora, la Fiesta que se realiza durante las siete semanas,