Madroños aún inmaduros.

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Emilia Velázquez Alcaraz
hace 5 años
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En el ambiente sombreado y abrigado de las mohedas parreñas encuentran refugio las leñosas menos resistentes a la sequedad y los contrastes térmicos, que se estiran hasta abrirse hueco en la bóveda

1 En el ambiente sombreado y abrigado de las mohedas parreñas encuentran refugio las leñosas menos resistentes a la sequedad y los contrastes térmicos, que se estiran hasta abrirse hueco en la bóveda forestal. Las más conspicuas resultan Phillyrea latifolia (la llaman "durilla" en Oliva de Mérida; según la bibliografía, "agracejo" parece el apelativo más común por toda la Mariánica; en Oliva de Mérida llaman grancejera a Viburnum tinus; en Nogales, Phillyrea latifolia comparte el nombre con la siguiente especie), Rhamnus alaternus ("palo sanguino") y Viburnum tinus ("grancejera" en Oliva de Mérida; "durillera" en muchas partes). Son la cohorte habitual de alcornoques y agalleros pero, debido al sustrato básico, en La Parra la encina prevalece sobre ellos. Madroños aún inmaduros.

2 Durillera (Viburnum tinus) en flor

3 Bupleurum fruticosum sólo se cría en los rincones más húmedos. A estas especies se suman otras que germinan sin problemas también a pleno sol. De entre ellas, entran en el encinar Pistacia terebinthus ("cornicabra"), que en terreno quebrado calizo suele desplazar a la charneca, resultando una de las más comunes en La Fuente junto a Rhamnus lycioides ("espino negro"), Colutea atlantica, Lonicera implexa ("mariselva" en Feria y La Lapa; "chupaores" en Nogales) y Phlomis purpurea ("ardeviejas"); también abundan Crataegus monogyna ("azoferfio"), Cistus salviifolius, Jazminum fruticans ("jazmín amarillo" en muchos pueblos, más común en las orlas y claros junto a Coronilla juncea en los llanos fontaneses y en La Lapa, donde abunda además Teucrium fruticans; en Cabrera, en ese mismo ambiente, aparece Dorycnium pentagynum), Cytisus scoparius ("retama negra", como la siguiente especie), Cytisus striatus, Coronilla valentina subsp. glauca, e incluso Osyris alba, Daphne gnidium ("torvisca"), Quercus coccifera ("coscoja") o Arbutus unedo ("madroñera", "madroña")

El zumaque, muy cultivado hasta no hace mucho para la extracción del tinte rojo, se considera espontáneo en la provincia,

4 Rodal de coscojas (Quercus coccifera) encaramándose por encima de los olivos (Olea europaea, de aceitunas mucho mayores que el autóctono, llamado azaúche) y los zumaques (Rhus coriaria). El zumaque, muy cultivado hasta no hace mucho para la extracción del tinte rojo, se considera espontáneo en la provincia, aunque nunca se le ve en espesinales bravíos. El mismo tinte se extraía en muchos lugares de las agallas con que reacciona la coscoja ante la picadura del "quermes" (de ahí el vocablo "carmesí")

5 El interior de un coscojar maduro viene a mostrar la misma estampa que un encinar, sólo que más umbrío.

6 Si bien las diferencias morfológicas entre la hoja de la encina y la coscoja resultan inapreciables, el verde fresco, el brillo y el tono similar por ambos lados diferencian a la última (derecha) de la primera (izquierda), con el envés blanco y el haz pardusco. Abajo, detalle de ambas especies.

7 .

8 Las hojas del palo sanguino (Rhamnus alaternus, sobre estas líneas) se diferencian de las de coscoja (Quercus coccifera) en los nervios, que en el primero frecuentemente se unen por las puntas, y el mayor número de dientes, mucho más numerosos y lacerantes en la segunda.

9 Las hojas opuestas a pares del agracejo (Phillyrea latifolia, sobre estas líneas) lo diferencian del palo sanguino, con hojas altern

10 Arriba y debajo: Colutea arborea

algún ejemplar de lentisco, que suele desaparecer de los

12 En el término de La Fuente, sólo los cervigones de las Jasminum fruticans (jazmín amarillo) tierras buenas crían algún ejemplar de lentisco, que suele desaparecer de los suelos calcáreos junto con la charneca en cuanto se quiebra el terreno.

13 En otoño, al principiante le resulta fácil distinguir la cornicabra (Pistacia terebinthus, tonos rojizos de la foto izquierda) de la charneca (Pistacia lentiscus, a la derecha), con hojas también compuestas, pero perennes

14 En verano, ayuda fijarse en las dos bandas verdes que recorren el rabillo de la hoja de la charneca (izquierda), de las que carece la cornicabra (derecha).

15 En cualquier caso, las agallas de la cornicabra, unas excrecencias con forma de cuerno, delatan a esta especie que en las sierras calcáreas de nuestros contornos suele desplazar a la charneca.

16 Teucrium fruticans

17 Coronilla valentina subsp. glauca

18 En la resolana del morro de Cabrera no es raro encontrar algarrobos (Ceratonia siliqua) por las lindes. Podría tratarse de cultivos asilvestrados, pero su emplazamiento en un lugar tan característico como el risquero de la mesaíta y la presencia de restos fósiles desde época prerromana en lugares próximos hacen pensar en un carácter autóctono del árbol en esta tierra.

19 Cytisus striatus (Escoba) Cytisus scoparius (retama negra)

20 Torvisca (Daphne gnidium)

21 Campo de arbolagas (Genista hirsuta)

22 Ardeviejas (Phlomis purpurea) Las diversas clases de jaras y juagazos se caracterizan por encerrar la simiente en cápsulas. En la foto, Cistus salviifolius.

23 Legumbres de Dorycnium pentagynum y de Coronilla juncea

24 A la izquierda, azoferfias, frutos de Crataegus monogyna, que crece en los lugares más encharcados junto a los rosales bravíos (Rosa sp. pl, a la derecha)

25 Retama loca (Osyris alba), abundante en llanos, sobre todo cerca de cultivos y actividades humanas A la derecha, en fruto.

26 En los claros suelen aparecer retamas (Retama sphaerocarpa, con bolitas amarillas en la foto). En muchas partes se las deja crecer por su capacidad de fijar el nitrógeno del aire en el suelo, con lo que se consigue fertilizar el sustrato. Esto, unido a la tenue penumbra que proyecta, favorecería el desarrollo de los pastos, pero en Fuente del Maestre se habla de todo lo contrario, diciendo que cría un pasto muy malo.

27 Rubus ulmifolius (zarza, zarzamora), siempre presente en los terrenos encharcados. Con los rosales bravíos y las zarzas que acabamos de ver, traban el conjunto enredaderas como Lonycera implexa (probablemente mariselva en Feria y La Lapa; en Nogales, chupaores ), así como esparragueras negras (Asparagus acutifolius, Asparagus aphyllus), blancas (A. albus), de caña (Tamus communis), y mocosas (Bryonia dioica), además de Rubia peregrina

28 Lonicera implexa, llamada en muchas partes chupadores por fabricarse con los tallos los caños para las pipas de fumar; debajo, detalle de la flor, que se abre al atardecer.

29 Resulta costoso distinguir entre Asparagus acutifolius y A. aphyllos (esparragueras negras)

30 Asparagus albus (Esparraguera blanca), frecuente bajo los azaúches.

31 Rubia peregrina

32 Tamus comunis (espárragos de caña)

33 Hojas de los espárragos mocosos (Bryonia dioica), que recuerdan a las de la parra, enmarcando un yerbazal esciófilo.

34 Aunque herbácea anual, Vicia vicioides (colores pardos) alcanza alturas sorprendentes en Salguero. Junto a ella, pueden apreciarse las campanillas, enredaderas que buscan los olivos y las lindes del monte con los cultivos.

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