SOLITARIO. Acto I. Escena 1

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Óscar Castellanos Redondo
hace 8 años
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1 SOLITARIO Acto I Escena 1 está en un jardín de grandes frutas. Es un gigante enorme, muy gordo. Pasea por el jardín y agarra muchas frutas. Se las hecha todas juntas a la boca. Esta es la historia de un gran glotón. Le llaman, porque no quiere compartir con nadie, aunque el nombre más apropiado para él sería egoísta, pues lo único que le importa es saciar su inmensa hambre. Creo que cada día estoy más flaquito. (Muestra la guata) No están de acuerdo ustedes? Hoy solo comí dos kilos de manzana, tres de plátano, nueve de naranja (pero como juguito) y una ternera bien asada. Es poco para un joven en edad del crecimiento como yo. sale de escena. El problema es que aquel jardín solía pertenecer a los habitantes de las Montañas, que ese invierno pasaban mucha hambre. Dos niños entran en escena, son chicos muy mal alimentados. Uno mira al otro al jardín. y luego

Creo que cada día estoy más flaquito. (Muestra la guata) No están de acuerdo ustedes?

2 Que lindas se ven las manzanas. A mi me gustan las peras. Yo no sé que sabor tiene una pera. Es como una manzana, pero más mojada. El Gigante sale gritando y asusta a los niños. No vengan a meterse a mi jardín niños de la montaña! O me los como a ustedes! La verdad es que, contrario a lo que se piensa, los gigantes rara veza comen niños. Y cuando lo hacen, los prefieren con salsa de ajo. El gigante se sienta en una roca y mira el atardecer. Los gigantes no siempre fueron así, pero ahora,, último de su especie, vive momentos amargos ya que simplemente odia a la humanidad Los niños lo miran de lejos. Se escucha la voz de una mujer a lo lejos. Niños, dónde están?

La verdad es que, contrario a lo que se piensa, los gigantes rara veza comen niños. Y cuando lo hacen, los prefieren con salsa de ajo.

3 Escena 2 e caminan por el sendero montañoso que llevaban en su aventura anterior. e, campeones de la luz, son jóvenes héroes que viajan hacia las montañas a reunirse con el Consejo de Fuego. Sin embargo escuchan voces que los llaman. Oiga patroncito! Jefe! se sobresalta al ver a los niños. toma una varita mágica. Si dan un pazo en falso los transformaremos en patos. A mi no porfa, pero a mi hermano sí, quedaría más lindo. El niño 1 le da un coscorrón. Ustedes son e, hemos escuchado su leyenda. Y queremos que maten a un gigante. (Molesto)

Sin embargo escuchan voces que los llaman. Oiga patroncito! Jefe! se sobresalta al ver a los niños. toma una varita mágica.

4 Qué matemos a un gigante? Qué leyenda es esa que escucharon? La luz que brilla en todas las cosas nos guía y no hemos venido a matar a nadie. Es que se come nuestra comida. Se comió a todos los pavos de mi abuela. Se tomó toda la leche del tío Alexander. Niño 3 Y se tragó a los treinta cerdos de la señora Paullette. Quizás tenía hambre. se toca la pera, está pensando. Genial. (suspira) Niños los ayudaremos, pero no usaremos la violencia. Tengo un plan. Ella siempre dice eso Salen de escena.

Se comió a todos los pavos de mi abuela. Se tomó toda la leche del tío Alexander.

5 Escena 3 y los niños están colocando un cartel. Bueno, le plan se echó a andar., que tiene la mejor letra, escribió: Se dará un banquete en honor de las criatura voluptuosas, tendremos ciento sesenta vacas, doscientos corderos, quinientas veinte tortas, y miles de tecitos, sin azúcar, para no engordar. Firma: Los Ogros. El Gigante sale a ver que pasa. Qué pasa? Oh los ogros siempre creen que pueden comer más que yo! Les demostraré que no es así. (saliendo del escondite) Vamos Niños.! Sale de escena muy apurado. Todos salen de su escondite y corren al huerto del gigante. Así nuestros héroes recuperan parte de la riqueza del jardín y la devuelven a la gente de la montaña. Todos estaban felices, claro que el gigante, no. Como era de esperarse. Gigante cae de rodillas y llora. Era una mentira, los ogros no me dieron ni un pan con mantequilla. Y ahora se robaron mis tesoros.

azúcar, para no engordar. Firma: Los Ogros. El Gigante sale a ver que pasa. Qué pasa? Oh los ogros siempre creen que pueden comer más que yo! Les demostraré que no es así.

6 (tras el gigante), tú le quistaste a la gente su comida. Es que tengo mucha hambre en invierno. Ahora me moriré de hambre y frío. No, no lo permitiremos. La gente del pueblo te manda esta comida. Los niños llegan con dos carretillas de comida. Así aprendió que las cosas compartidas son más ricas, esta fue una lección muy importante, porque desde entonces fue el guardián de la gente de la montaña. Ya no existe el cruel, que comience la historia de el Protector! Todos saltan y gritan de alegría

Así aprendió que las cosas compartidas son más ricas, esta fue una lección muy importante, porque desde entonces fue el guardián

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