Palabras de la secretaria de Educación Pública, Josefina Vázquez Mota, durante la Ceremonia de entrega de Becas Pronabes de Educación Superior

Transcripción

1 COMUNICACIÓN SOCIAL Versión Estenográfica 16-Diciembre-2008 Palabras de la secretaria de Educación Pública, Josefina Vázquez Mota, durante la Ceremonia de entrega de Becas Pronabes de Educación Superior Muy buenos días, sean todas y todos ustedes muy bienvenidos. Este día nos convoca el mérito, el esfuerzo y la audacia, nos convoca también la caridad y nos convoca un espíritu de grandeza. Es un muy buen día para la educación del país; pero es un buen día para México, porque es una gran razón y una razón que se multiplica en más de mil 200 hombres y mujeres de este país -jóvenes la mayoría- y que en México hay espíritus de grandeza que nos hacen sentir orgullosos. Es un muy buen día para ustedes estudiantes, algunos cuando pasaron a recoger su reconocimiento, participantes por ejemplo de la Máxima Casa de Estudios, de la UNAM, decía: Bueno Por mi raza hablara el espíritu. Algunos otros como el Politécnico: La Técnica al Servicio de la Patria y, seguramente, cada uno y cada una de ustedes, con el orgullo de su institución y su trayectoria. Así que, lo primero que quiero hacer esta mañana, es felicitarlos, felicitarlos por recordarnos a los mexicanos que somos capaces -si queremos- de estar y de ser de los mejores. Son un orgullo para nosotros, son un aliciente y les quiero reconocer esta mañana todo su esfuerzo, todo su empeño y toda su creencia en el mundo del conocimiento. A sus familias también. Muchos de ustedes vienen acompañados por sus mamás, por sus papás. Deben estar muy emocionados porque no es fácil tener la hija o el hijo de 10, de calificación perfecta, no es tan sencillo ahí están muy orgullosos. Me dio mucha emoción entregar estos reconocimientos con la representación del Presidente de México que ha hecho la apuesta más grande por la educación del país, una de las chicas que tuve oportunidad de entregárselo, originaria de Teziutlán, Puebla, y lo quiero comentar es un lugar, es un espacio que tiene que tiene un gran significado también en nuestra vida personal, familiar y se han dado cita como decía Rodolfo Tuirán, entre mil 200 algunos de ustedes de las zonas más cercanas del país, y realmente quiero decirles a sus mamás y a sus papás que este es un día para festejar, por que los mensajes que escuchamos tanto de Magali como de Raymundo, no solamente escuchamos hablar de la importancia de la educación o del conocimiento, ambos hablaron de mucho más que eso, ambos hablaron de los valores, ambos hablaron de la ética, ambos hablaron de ser mejores personas, mejores ciudadanos. Ambos hablaron de una visión integral de la educación, y aquí hay muchas horas acumuladas, de muchos espacios.

2 Primero, hay muchas horas acumuladas de sueños familiares. Algunos de los hijos o hijas de ustedes aquí becados, son los primeros en llegar a la Universidad en toda su familia. Por lo tanto, muchos de ustedes traen con ustedes no solamente sus sueños, también vienen cargando los sueños de sus abuelos, de sus abuelas, de sus padres, de sus hermanos. Algunos de ustedes fueron los primeros en llegar a la universidad o al bachillerato. También aquí hay muchas horas de sacrificio, porque aunque tal vez las mamás no van a pasar al micrófono -yo como mamá también lo sé y he platicado con muchas mamás del país, habido muchos sacrificios durante muchos años, muchas mamás han trabajado en la casa, fuera de la casa y muchas cosas que se podrían haber comprado o que podían haber tenido para ellas, lo han invertido en ustedes: En los útiles, en el uniforme, en el transporte, el que tengan todo lo que necesitan para venir a la escuela y sus tenis. Todo que requieren para que se sientan con menos preocupaciones. También, muchos sueños de muchos papás. Me da mucho gusto ver tantos papás esta mañana porque no es fácil ver que muchos papás participen en la vida de sus hijos o en agenda educativa y seguramente muchos papás pidieron hoy permiso en el trabajo para venir a festejar con sus hijos, para venir acompañarlos, para ser parte de este día. Y muchos papás han trabajado también con mucho empeño y con mucho cariño por ustedes. Me decía por ejemplo, Magali le pregunté que si venía su familia y me dijo: Sí, aquí está mi papá, con muchísimo orgullo. Así es que también quiero compartir esta alegría con las familias. Quiero decirles que esto es mucho más que una beca. Por qué es mucho más que una beca? De entrada, sabemos que esta beca, primero reconoce la calidad y la excelencia; pero también es una beca que reconoce que, en México, hay todavía pendiente una agenda de justicia, que hay jóvenes que dejan de venir a la escuela o que abandonan la escuela, porque no tienen un ingreso suficiente, y queremos que esta beca -como decía también Raymundoles permita estudiar sin preocupaciones. Les permite estudiar sabiendo que tienen para el transporte, o que tienen para sus libros, o que tiene más facilidad para adquirir aquello que realmente les hace falta. Y no ha sido una beca fácil de obtener, por eso insisto que esto es más que una beca. Déjenme contarles lo que han hecho todos los estudiantes, todos estos estudiantes extraordinarios, para ser parte de estas becas. Estas becas son la primera vez que existen en México desde la Secretaria de Educación Pública. Aunque otorgamos más de 300 mil becas aproximadamente en Superior, esta es la primera vez que estamos entregando becas de diez. Becas a los mejores de los mejores. Y estas becas, primero, tienen que ver con la excelencia y el desempeño académico; pero también tienen otros requisitos. Es muy bueno que lo sepan las mamás, los papás, sus maestras, sus maestros, que algunos están aquí y otros no estando, les voy a pedir también que les hagan llegar esta felicitación. Hay abuelitas, también algunos abuelitos que veo por acá muy orgullosos, y les quiero contar que esta beca no ha sido tan fácil de lograr, primero: la excelencia académica; después, el servicio social que estos jóvenes están haciendo o están por realizar, y va ser un servicio social que no va a ser como un mero requisito administrativo; va a ser un servicio social de compromiso con su comunidad, un servicio social que -como aquí se decía- va a retribuir a otros, mucho de lo que ustedes han aprendido y por lo cual se han esforzado tanto.

3 También, la titulación es un punto muy importante. Queremos apoyarles en su proceso de titulación, reconociendo el gran esfuerzo y el mérito que tienen y que se pueden incorporar de manera mucho más rápida, al mundo laboral. Yo le voy a pedir al Doctor Rodolfo Tuirán varias cosas: Primero, que podamos tener un encuentro entre los becarios de diez y el sector empresarial, para que sean los primeros considerados y los más valorados en las oportunidades de empleo. Creo que es muy importante que lo hagamos. Después, también le voy a pedir al Doctor Tuirán que todos aquellos, todos ustedes que logren mantener su beca por un año, por lo menos (pero creo que la mayoría, si no es que todos lo van a lograr porque lo han hecho durante muchos años), les podamos otorgar, en la siguiente entrega de becas, una computadora portátil, para que también sea un apoyo y un acompañamiento en sus estudios, para que puedan hacerlos, y para que sea realmente un aliciente, un incentivo, a todo el esfuerzo que ustedes han venido realizando. Estas becas también tienen que ver con la superación profesional y la mejora de contenidos, por ejemplo en las escuelas normales, en nuestra preparación desde los años primeros de formación en la educación superior. Ha sido un proceso (y ojalá ustedes sean las voces más importantes que lo certifiquen), hemos procurado que sea un proceso realmente transparente. Le preguntaba yo a Raymundo si de verdad se esperaba tan rápido una respuesta y decía él: la verdad no, no esperaba que me contestaran tan rápido. La gran mayoría de ustedes lo hizo por internet, accedió a la página de internet, no hubo intermediarios, no hubo ningún otro interés más que su propio esfuerzo y su gran mérito académico. Llenaron la solicitud de becas. El 8 de diciembre pudieron consultar los resultados por internet y se pudieron dar cuenta, certificar que es un proceso serio, de que es un proceso responsable. La beca la van a recibir seguramente por transferencia bancaria, de tal suerte que no tienen que darle nada a nadie, esa beca es solamente para ustedes y creo que eso es muy importante. Primero, bueno, le tienen que dar algo a sus papás. Ya ví a más de una mamá despreocupada. Tienen que ayudar! Tienen que ayudar y tienen que colaborar! Pero me refiero a que no tienen que darle nada a nadie, a algún intermediario y a alguien que les pida que: Como yo te conseguí la beca, pues ahora me toca tanto. Eso es lo que no va a suceder. Porque estamos tan orgullosos de ustedes? Porque a mí me gustaría también pedirles quienes así quisieran- que grabaran algunos testimonios que pudiéramos transmitir, por ejemplo en el canal 11, pero que pudiéramos llevar a muchas primarias del país, a muchas secundarias del país. Y por qué quiero pedirles que me ayuden con eso? Porque quiero que ustedes sean ejemplo para muchos miles de niños y jóvenes en México, que ustedes les puedan explicar que no obstante tener carencias económicas, o dificultades, o tener que viajar de un lugar a otro para ir a la escuela, o incluso tener que dejar a sus padres un tiempo para ir a la escuela, se puede ser un mexicano de diez. Necesitamos mucho más orgullo como mexicanos, necesitamos saber que somos capaces de ser un país de diez, de ser estudiantes de diez, de tener funcionarios que se apliquen en sus tareas, de tener familias y papás tan comprometidos de diez también. Porque de pronto, hay como un desaliento y hay como esta autodestrucción, y hay posters que dicen: Si, pero los mexicanos no. Y ustedes son justamente el ejemplo de lo contrario. Y creo que si los niños y los jóvenes los escuchan y ustedes les cuentan sus

4 historias, ellos van a saber que sí es posible lograr grandes tareas y tener espíritu de audacia y de excelencia. Así que yo les voy a pedir -quienes así lo decidan- que nos puedan ayudar para compartir su experiencia y su vida también con muchos otros jóvenes de México. Me gustaría también pedir al Doctor Tuirán una tercera iniciativa (con la que ya hemos visto del encuentro con el sector empresarial y las computadoras personales) Y es que -quien de ustedes así también lo decida- los podamos apoyar con un financiamiento especial para que hagan su servicio social, de preferencia, en las comunidades más pobres del país, o que vayan hacer su servicio social con las comunidades de mexicanos que viven en los Estados Unidos. En la Secretaría de Educación Pública tenemos una red de 300 Plazas Comunitarias y ustedes se van no solamente a emocionar, se van a sorprender de ver los esfuerzos que está haciendo la comunidad de mexicanos en los Estados Unidos, desde alfabetizarse en español (algunos de ellos van hablando en su lengua indígena pero no hablan, ni escriben, ni leen en el español). Su aprendizaje del Inglés, para que puedan certificar su primaria o su bachillerato, y para nosotros sería muy importante que muchos de ustedes aceptaran hacer su servicio social, ir a vivir dos meses en Chicago, en Washington, en Nueva York, los Ángeles, o San Antonio y que ahí puedan apoyar las plazas comunitarias, ser más solidarios con nosotros mismos y que aprovechen para aprender mejor el Inglés y puedan así fortalecer un segundo idioma. Así que le voy a pedir al Doctor Tuirán que abra esta opción de servicio social para nuestros estudiantes de diez y que los mejores sean quienes vayan al encuentro de las comunidades migrantes. Así que ojalá muchos de ustedes se animen con esa idea, que realmente se pueda lograr pues, con estas nuevas 50 mil becas, como decía Rodolfo Tuirán, estaremos también respaldando la equidad, la calidad ya con más de 350 mil becas de nivel superior. Y no me resta más que reiterarles mi reconocimiento y, también, les quiero alentar a que nunca se rindan. Aquí hay una pluralidad de pensamiento extraordinario en este salón. Aquí hay jóvenes que vienen de orígenes muy distintos. Yo tuve el privilegio de estudiar muchos años en escuela pública, soy egresada también del Politécnico, y eso me permitió conocer y querer de mejor manera a mi país. Le debo mucho a la educación pública de México, ustedes son el mejor ejemplo de que es una apuesta indispensable, de que la educación pública tiene que ser laica; tiene que ser gratuita; tiene que ser obligatoria, pero tiene que ser forzosamente de calidad. Que no hay razones por la cuales la educación pública no sea la mejor de las mejores. Hoy aquí están sus papás, muchos de sus familiares, y están orgullosos de ustedes y de sus escuelas también. Les voy a pedir que compartan este éxito con las personas que más quieren, que tengan gratitud a sus padres que son producto también de ellos. Nadie logra tanto de manera solitaria. Uno siempre es pedazos de muchos sueños, de muchas esperanzas, de muchas apuestas, de mucho cariño, de mucho amor de quienes le rodean, sin demérito de todo lo que ustedes han hecho por estar aquí esta mañana; pero también díganle gracias, vayan y den las gracias a sus maestros. A todos nosotros, por lo menos, nos acompaña en la vida de un maestro, de una maestra que nos ayudó a transformar nuestra vida y a ser mejores personas, y vayan y comprométanse con México.

5 México los necesita mucho más de lo que se imaginan. México necesita héroes de verdad; necesita orgullos, necesita historias de éxito. México los necesita caminando en sus comunidades, en sus rincones, en las zonas más vulnerables. Vayan y caminen el país, vayan y conozcan. Decía Mahatma Gandhi que: Uno no puede amar o no puede querer aquello que no conoce. Y para querer a este país hay que irlo a caminar, hay que irlo a conocer, hay que comprometerse. A México le hacen falta muchos estudiantes de diez, muchos mexicanos de diez, y ustedes lo son. Enhorabuena, muchas, muchas felicidades!