La Corona de la Divina Inocencia Crucifcada y. Triunfante.

Transcripción

1 1 La Corona de la Divina Inocencia Crucifcada y ==== Triunfante. Mensaje de Jesús NS y María Santísima dado al mundo por medio de Patricia, en Inglaterra la Dote de María Santísima y por el Enemigo, transformada en la Capital del Aborto. ( ) La bestia del racionalismo (Apoc.13:11) difunde la ciencia de la Serpiente que guerrea contra la Sabiduría Divina, y organiza y dirige Grupos de Apoyo y Fundaciones que imparten pláticas y cursos a padres de familia que recurrieron al aborto, y también a personas de todas las edades cuya inocencia ha sido crucifcada por situaciones de sufrimiento en la infancia, como es la pérdida de uno de los padres, la violencia en la familia y fuera de ella, o que han sido víctimas de violación o abuso.

2 2 En un asunto que viene a ser una cruel burla porque directa e indirectamente porque las heridas del corazón y el alma solo pueden ser sanadas por su Hacedor. Esos grupos se basan en la psicología, ciencia que guerrea contra Dios, y que por lo mismo, el fn es separar aún más de Dios a las almas, y lo cual viene a ser el medio de ahondar y congelar las heridas y hacer que las almas, corazones y vidas se vayan sin ser sanadas y efectivamente ayudadas por el poder del amor de Dios con los medios que Él ha dado para todos sus hijos. === Dolor de Dios por su pueblo. Jer Mi dolor no tiene remedio, mi corazón desfallece. Los ayes de mi pueblo se oyen por todo el país: Ya no está el Señor en Zión? Ya no está allí su Rey? Y el Señor responde: Por qué me ofendieron adorando a los ídolos, a dioses inútiles y extraños? Pasó el verano, se acabó la cosecha y no ha habido salvación para nosotros. Sufro con el sufrimiento de mi pueblo; la tristeza y el terror se

3 3 han apoderado de mí. No habrá algún remedio en Galaad? No habrá allí nadie que lo cure? Por qué no puede sanar mi pueblo? De las Heridas Mística y Ocultas de María, nuestra Santísima y Dolorosa Madre Celestial, mana el bálsamo de Galaad (EL Bálsamo de la alegría) representado en los poderosos rayos que manan de sus manos como aparece en la imagen de la Medalla Milagrosa. Jesús Dice, Recurrid a las Heridas Místicas y Ocultas de vuestra bendita Madre. No hay sufrimiento o dolor que no sea mitigado por el bálsamo de sus Heridas. Traed a ellas a vuestros hijos y vosotros mismos refugiaos en lo profundo de ellas. Patricia: Durante el rezo del Rosario, vi en cuán íntima, profunda y extrema forma espiritual nuestra Señora experimentó la Pasión y Crucifxión de Nuestro Señor Nadie puede realmente explicar o entender, sino en pálida forma la agudeza de la agonía que los Dos sufrieron en ésos pocos días. El contemplar esto,

4 4 aun brevemente como hoy, es para nunca olvidarlo y el querer hacer todo lo que está en el poder de uno para agradecerles y amarlos, no importa lo que cueste. Nuestra Señora me mostró en forma espiritual sus Heridas Ocultas, vaciándose sobre la tierra. Agua y sangre vertía de sus manos, pies y corazón. Cuánto Ella nos ama! Ella acompañó a Jesús a través de su Pasión y Muerte, como otro Cristo. Jesús Dice, No hay una herida ni un dolor, que no sea sanado y mitigado por invocar las Heridas Místicas que por vuestro amor, llevó de manera oculta vuestra Madre. === María Santísima ha urgido a orar esta Corona para detener la ola de suicidios, los cuales son instigados por los hijos de la familia del Enemigo. También, Ella habló a los padres de familia sobre la importancia de orar el Santo Rosario con los hijos, y a enseñarlos sobre los peligros de doctrinas venenosas como son las técnicas del control mental usadas para incitar al suicidio.

5 5 Todo Cristiano debe unirse a esta campaña de rescate, de liberación de los espíritus de miedo, de tristeza, de frustración, de los que procede la depresión y preparan el camino a las ideas suicidas, a las sugerencias por telepatía, a las voces que les ordenan matar a otros y luego cometer suicidio, etc. === MARÍA, MÁRTIR DEL GRAN PERDÓN. Jesús NS Dice, Bajo esta luz debéis contemplar a Mi Madre, la Mártir del Gran Perdón, y a las almas corredentoras para las que en el cielo existe un lugar muy especial porque más que ninguna otra, éstas son los otros cristos de que Yo hablo-, y en ese lugar estarán junto a Ella, la Redentora que con el Redentor llevó a cabo la Obra de Salvación del género humano. De la Obra Monumental de Jesús, el Dios- Hombre. Vol. 11. pág.554 María, Madre de las Heridas Místicas y Ocultas.

6 6 María, de pie, afigida, con una mano sobre el pecho y la otra colgando, con una voz que destroza, pregunta, Qué debo perdonarte, pobre hijito? Qué? A ti nada. Juan levanta la cara, la cara de un pobre niño que llora y grita, Porque lo abandoné! Porque huí! Porque no lo defendí! Oh, Maestro mío, Oh Maestro, perdón! Debería haber muerto antes de haberlo dejado! Madre, Madre! Quién me quitará este remordimiento? Calma, Juan. Él te perdona. Te ha perdonado ya. Jamás ha pensado en tu extravío. Te ama. María habla despacio, haciendo pausas entre frase y frase, como presa de ansia, con una mano sobre la cabeza de Juan y la otra contra su pecho que palpita con aficción. Ni anoche pude comprenderlo Me dormí, cuando Él nos pidió que velásemos. Abandone a mi Jesús! Luego escapé cuando aquel maldito llegó con la soldadesca enviada por los del Templo.

7 7 Juan, no maldigas. No odies, Juan. Deja al Padre que juzgue. Escucha, dónde está ahora? Juan vuelve a caer con la cara sobre la tierra y llora más fuerte. Madre!... yo ha sido Ha sido condenado, lo sé. Te pregunto, en estos momentos dónde está? Hice todo lo posible porque me viese procuré recurrir a los que puedan hacer que sufra menos, por compasión. No le han hecho mucho mal No mientas, Juan. Ni siquiera por compasión a una Madre. No lo lograrías. Sería inútil. Lo sé. Desde anoche lo he seguido en su dolor. No lo ves. Pero mi cuerpo ha sido acosado con los mismos fagelos, sobre mi frente he sentido las espinas, he sentido los golpes todo. Pero ahora no veo más. Ahora ignoro dónde esté mi Hijo condenado a la Cruz A la Cruz! Oh, Dios, dame fuerzas! Él debe verme. No debo sentir mi dolor mientras Él siente el suyo. Cuando todo

8 8 haya terminado, haz que muera, Oh Dios! Si quieres, ahora no. Por Él no, para que me vea. Vamos Juan. Dónde está Jesús? Sale de la casa de Pilato. Eso que oyes es la gritería que lanza la plebe a su alrededor. Está amarrado en los escalones del pretorio, esperando la Cruz, o bien ya va hacia el Gólgota. Háblale a tu madre, y a las otras mujeres. Vámonos. Toma el cáliz, ese pan, esos lienzos y ponlos aquí. Nos servirán de consuelo después y vámonos. Juan recoge los objetos del suelo y va a llamar a las mujeres. María lo espera, pasándose por el rostro los lienzos como para hallar en ellos la caricia de la mano de su Hijo. Besa el cáliz, el pan, y lo pone todo en un armario. Se arropa en su manto, haciendo que le llegue hasta los ojos, sobre el velo que le cubre la cabeza y que lo envuelve en el cuello. No llora. Pero si tiembla. Parece como si le faltase el aire, pues abre la boca para respirar. Juan entra seguido de las mujeres que vienen llorando.

9 9 Hijas, calmaos! Ayudadme a no llorar! Vámonos. Se apoya en Juan que la guía y sostiene como si fuese una ciega ==== La Corona de la Inocencia Crucifcada y Triunfante. Esta Corona cuando es dicha entre las 3 y 6 de la tarde, rinde especial honor a la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo, pero puede ser dicha a cualquier hora. Otras peticiones pueden ser añadidas, tal y como lo dice Jesús mismo, de conceder a través de la Cruz de la Inocencia Crucifcada y Triunfante y de la Corona, el remedio y consuelo a las heridas que llevan los corazones y las vidas de sus hijos, y alcanzar cualquier otra cosa que se pida, en tanto que ésta no vaya en contra de Su Santísima Voluntad. Esta Corona es para ser recitada en las cinco cuentas que van unidas a la cruz de un rosario

10 10 común, y que representan las 5 Heridas de Jesús NS y las de María Santísima. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. Acto Penitencial; Padre Nuestro; Ave María; el Credo y un Gloria 1.- Después de persignarse haciendo la Señal de la Cruz como pedido para dar inicio al Santo Rosario- En honor de la Pasión y Muerte de nuestro Señor Jesucristo, las Heridas Mística y Ocultas de Nuestra Señora y el triunfo de la Inocencia Crucifcada. 2.- Mi Dios y mi Rey, permite que la tardanza en el Triunfo de la Inocencia Crucifcada, nos permita un verdadero dolor de penitencia, lavando así nuestros corazones, almas, espíritus y cuerpos hasta limpiarlos. Que alcancemos en nuestras vidas una santa inocencia y pureza por medio de la penitencia corporal, y así lograr el triunfo de Cristo Niño en la Inocencia Crucifcada. Una vez más,

11 11 depositamos esta oración en Tú Inmaculado Corazón, dulce Madre de Dios y Señor Nuestro, para que así, de los frutos que Tú deseas y vayamos siempre en la dirección por la que Tú quieres guiarnos y aceptar la muerte que Tú quieras darnos. (Nuestra Madre Santísima, pidió que se agreguen a esta letanía, los santos de la propia devoción a los santos cuya intercesión se desee invocar) Jesús Infante. de nosotros. Virgen de la Encarnación. nosotros Ten misericordia Ruega por Virgen de los Dolores. María, Madre Inmaculada. Santa María de Guadalupe. Nuestra Señora del Carmen. María, Reina de la Paz. María, Reina de los Ángeles y Santos.

12 12 María, Reina de los Apóstoles. María, Reina de Todas las Victorias. San José, padre y señor mío. San Juan el Bautista Santos Pedro y Pablo. San Juan Evangelista. Santa María Magdalena. Santa Rosa de Lima. San Juan de la Cruz. Santo Domingo. San Gabriel de la Dolorosa. San Gerardo María Mayela. San Ignacio de Loyola. San Francisco de Asís. Su Santidad Juan Pablo II Santa María Faustina Kowlaska. Santa María Valtorta.

13 13 Todos ustedes ángeles y santos. Todos ustedes santos hombres y mujeres. Almas Benditas del Purgatorio. La Iglesia Sufriente. Inocencia Crucifcada en el Mundo. Iglesia Triunfante en la Inocencia. San Juan Diego. Niños mártires de Tlaxcala y todos los santos mártires mexicanos y del mundo entero. (Agréguense los santos que sean de la propia devoción. 3.- Ven, Oh Espíritu Santo! Ven, a través de la poderosa intercesión del Inmaculado Corazón de María, tu dulce y bienamada Esposa. 4.- Sacratísimo Corazón de Jesús, ponemos toda nuestra confanza en Ti. 5.- Oh, Divina Inocencia!, mira con lástima sobre la inocencia crucifcada por el mundo, y a través de las Heridas Mística y Ocultas de Nuestra

14 14 Santísima Madre, y las Gloriosas Heridas de Nuestro Señor y Salvador Jesucristo, alcanzad para nosotros el Triunfo de la Inocencia Crucifcada y la salvación del mundo. Amén. 6.- En las cuentas grandes, en vez de Padre Nuestro, se dice: Oh, Heridas Sacrosantas y Gloriosas de Jesús nuestro Señor, R.- Por la intercesión de las Heridas Místicas y Ocultas de María Santísima, sálvanos por tu amor redentor. 7.- En las cuentas pequeñas se repite 5 veces la siguiente jaculatoria: Heridas Místicas y Ocultas de Nuestra Señora, R.- Sánanos, por la intercesión de los santos y santos mártires. Oración Final. Oh poderosa Reina de los Cielos! Nuestra querida Madre, a través de tus Heridas Místicas y Ocultas rogamos por una lluvia de Gracias sobre

15 15 nuestro país, ten lástima de nosotros pecadores y heridos como estamos, y obtén para nosotros la conversión de nuestra mente y corazón, del alma y cuerpo, para que así, la Voluntad de Dios sea hecha perfecta en nosotros. Alcanza de nuestro Padre Celestial que este país nuestro sea una espléndida estrella en la coronación de gloria de tu Inmaculada Concepción, para que también podamos gozar de una perfecta unidad con los Corazones Eucarísticos de Jesús y María. Reina de los cielos, rogad por nosotros. Santa María de Guadalupe, Reina de Todas las Victorias, Madre de todos los niños, sánalos y sálvalos. Divina Inocencia Crucifcada, sé nuestro Triunfo.