American College of Gastroenterology ENFERMEDAD DE REFLUJO GASTROESOFAGEAL (ERGE) Qué es ERGE ó acidez estomacal? El término reflujo gastroesofageal hace referencia al reflujo de acido del estomago al esófago. Las personas experimentan acidez estomacal, también conocida como gastritis, cuando cantidades excesivas de ácido refluyen hacia el esófago. La mayoría de los pacientes describen la acidez estomacal como un dolor con ardor (fuego) en el pecho, detrás del esternón, que se traslada hacia el cuello y la garganta. Algunos inclusive sienten el sabor amargo (metálico) ó agrio del ácido en el fondo de la garganta. Los síntomas de ardor y presión que produce la acidez estomacal pueden durar hasta dos horas y empeoran (generalmente) con el consumo de comida. También puede expresarse con tos seca. Con qué frecuencia se presenta ERGE? Más de 60 millones de Norteamericanos sufren indigestión ácida al menos una vez al mes y en algunos estudios se sugiere que más de 15 millones de Norteamericanos sufren indigestión ácida a diario. Los síntomas son más frecuentes entre gente mayor y mujeres durante el embarazo. Debemos aclarar que esporádicamente se pueden expresar y no se trata de enfermedad sino como evento fisiológico (normal). Cuáles son los tratamientos para ERGE? En muchos casos, los médicos concluyen que se puede controlar la indiacidez mediante cambios en el estilo de vida y mediante el apropiado consumo de medicamentos de libre venta. Evitar consumir comidas y bebidas que faciliten la indigestión ácida: chocolate, café, menta, comidas grasosas ó picantes, productos con tomate, bebidas con alcohol, mate, dulce de leche. Dejar de fumar. El tabaco inhibe la saliva, la mayor barrera del cuerpo. En algunos estudios se ha concluido que el tabaco estimula la producción de acido estomacal y relaja los músculos entre el esófago y el estómago, permitiendo el reflujo del ácido. Reducir el peso en el caso de obesidad. Evitar comer 2 ó 3 horas antes de dormir.
Tomar un antiácido de libre venta ó un bloqueador H2, algunos de los cuales se encuentran actualmente disponibles sin receta. Cuidado estos medicamentos tomarlos con prudencia y esporádicamente, a fin de evitar ocultar algún mal mayor. Cuándo se recomienda consultar al gastroenterólogo por ERGE? Cuando no es posible controlar los síntomas de indigestión ácida mediante cambios en el estilo de vida, y es necesario tomar medicamentos de libre venta más de dos veces por semana, se recomienda consultar a un médico. Si ERGE no recibe tratamiento, serias complicaciones pueden presentarse, tales como fuerte dolor en el pecho que imita un infarto, estenosis esofágica (estrechamiento u obstrucción del esófago), perdida de sangre, ó esófago de Barrett (afección premaligna del esófago). Entre los síntomas que manifiestan que un daño serio ya ha ocurrido se incluyen los siguientes: Disfagia - Sensación de que la comida está atrapada detrás del esternón. Perdida de sangre Vómito de sangre ó evacuación intestinal con apariencia negra ó de alquitrán. Ahogos Sensación de reflujo ácido en la tráquea, lo cual provoca falta de aire, tos y ronquera. Qué tipo de exámenes se requieren para examinar ERGE? Es probable que el profesional quiera realizar exámenes adicionales para evaluar los síntomas, especialmente cuando no está claro si dichos síntomas resultan de reflujo ácido, ó si se trata de complicaciones de ERGE (disfagia, pérdida de sangre, ahogos), ó si los síntomas no mejoran con medicamentos recetados. El profesional puede decidir entre uno de los siguientes exámenes. Esofagrama con Bario ó rayos X del tracto gastrointestinal superior En este examen, el paciente debe beber un material (bario) mientras se toman rayos X para contornear la anatomía del tracto digestivo. Cada vez mas en desuso. Endoscopia
Este examen consiste en la inserción de una pequeña sonda flexible con luz, por la boca, en el esófago y estomago para analizar anomalías. Para realizar el examen se recurre a medicamentos que producen una anestesia ligera y breve (5 a 6 minutos). Manometría Esofágica ó ph Esofágico Este examen consiste en insertar una pequeña sonda flexible por la nariz en el esófago y estómago, con el fin de medir presiones y la función del esófago. Con este examen también es posible medir el grado de reflujo ácido en el esófago. CIRUGÍA La cirugía antirreflujo es realizada en pacientes que sufren la enfermedad de reflujo gastroesofágica desde mucho tiempo y que están cansados del tratamiento con medicamentos que bloquean el ácido (Prazoles). La técnica quirúrgica intenta mejorar la barrera natural entre el estómago y el esófago que impide la producción del reflujo ácido. Medicación usualmente recetada para tratamiento de ERGE Los medicamentos recetados para tratar ERGE y úlceras incluyen drogas denominadas antagonistas de receptores H2 (bloqueadores H2) e inhibidores de la bomba de protones (Prazoles). Estos ayudan a reducir el ácido estomacal que agrava los síntomas y promueven la curación así como los agentes proquinéticos (digestivos) que ayudan en el despeje de ácido del esófago. Antagonistas de receptores H2 Desde mediados de 1970 se han utilizado antagonistas de receptores H2 para tratar ERGE y la enfermedad de úlcera. En casos de ERGE, antagonistas de receptores H2 mejoran los síntomas de acidez estomacal y regurgitación y curan la esofagitis cuando es leve ó moderada. Los síntomas desaparecen en más del 50% de los pacientes que reciben dos veces al día una dosis recetada de antagonistas de receptores H2 (ranitidina). Es probable que para curar esofagitis se requiera una dosis mayor o un medicamento específico. Estos agentes mantienen remisión en aproximadamente 25% de los pacientes. Inhibidores de la bomba de protones
Los inhibidores de la bomba de protones (IBP), tales como omeprazol, y más recientemente pantoprazol, lanzoprazol y esomeprazol, sirven para curar esofagitis erosiva (una forma grave de ERGE) más rápidamente que los antagonistas de receptores H2. IBP no sólo alivia los síntomas sino que los resuelve en la mayoría de los casos, aún aquellos que sufren de úlceras esofágicas. Se ha demostrado en algunos estudios que con terapia IBP es posible lograr la curación completa de la mucosa endoscópica, en casos de esofagitis, a las 6-8 semanas en 75-100% de los casos. El tratamiento IBP diario resulta el mejor mantenimiento de esofagitis a largo plazo; especialmente porque mantiene los síntomas y la enfermedad en remisión en pacientes que sufren esofagitis moderada ó severa. Además, se ha demostrado que esta forma de tratamiento contiene la remisión por un período de hasta cinco años. De esta manera se logra mejorar la calidad de vida Medicamentos de venta libre Gran cantidad de norteamericanos utilizan antiácidos de libre venta y otros agentes que se encuentran disponibles sin receta para tratar malestares gastrointestinales, acidez estomacal infrecuente ó indigestión ácida. Cuidado con tomarlo con frecuencia, podríamos estar ocultando un cuadro mas grave que calma igualmente con estos antiácidos volviendo a aparecer. Consulte a su clínico o gastorenterólogo. ÚLCERAS Qué es una úlcera? Aproximadamente el 2 al 5 % de adultos sufrirán una úlcera a lo largo de su vida. Las úlceras duodenales usualmente aparecen entre los 30 y 50 años, y son dos veces más frecuentes en hombres. Las úlceras estomacales son más frecuentes después de los 60 años y en mujeres. Una úlcera es un área focal del estómago ó duodeno que los jugos digestivos y el ácido estomacal han destruido. La mayoría de las úlceras no superan el tamaño de una goma de lápiz, pero pueden causar tremendo malestar y dolor. Cuáles son los síntomas de una úlcera? El síntoma más común de una úlcera es un dolor lacerante ó ardor en la parte superior del abdomen. El dolor se siente generalmente entre comidas y a veces despierta a la gente de su sueño. El dolor puede durar minutos u horas y con frecuencia el alivio llega comiendo y
tomando antiácidos. Entre los síntomas menos comunes de una úlcera se incluyen nauseas, vómitos y pérdida de apetito y peso. Qué provoca úlceras? En el pasado, se pensaba, erróneamente, que el stress provocaba úlceras. Los médicos ahora saben que existen dos causas principales de úlceras. Muy frecuentemente los pacientes se infectan con la bacterias Helicobacter pylori (H. Pylori). Otros pacientes que desarrollan úlceras son consumidores habituales de medicamentos contra el dolor e inflamaciones denominados drogas antiinflamatorias no esteroides (AINES), entre las que se incluyen productos como aspirina e ibuprofeno. La utilización de antibióticos para combatir la infección H. pylori es un gran avance científico. Se ha demostrado, en estudios, que los antibióticos pueden curar en forma permanente el 80-90% de las úlceras pépticas. El bloqueo del ácido estomacal sigue siendo muy importante en la cura inicial de una úlcera. Helicobacter Pylori La mayoría de las úlceras se producen por la presencia de Helicobacter pylori. Dado que H. Pyloris existe en el estómago de algunas personas que no desarrollan úlceras, la mayoría de los científicos ahora creen que las úlceras se desarrollan en personas que presentan una combinación de predisposición genética con presencia de las bacterias, Helicobacter pylori. Uso de drogas antiinflamatorias no esteroides (AINES) La segunda causa principal de úlceras es la irritación del estómago provocada por la ingesta regular de drogas antiinflamatorias no esteroides. Los efectos gastrointestinales secundarios inducidos por AINES pueden ser evitados mediante la utilización de terapias alternativas siempre que sea posible. Bajas dosis de corticosteroides ó drogas soporte, tales como acetaminofeno son alternativas AINES que deben considerarse. Se ha demostrado que cuatro gramos diarios de acetaminofen son comparables con dosis antiinflamatorias y analgésicas de ibuprofeno en casos de dolores por osteoartritis; además, estos no son asociados con mayor riesgo de efectos gastrointestinales secundarios. En el caso de tomar, de manera regular, medicamentos contra el dolor de libre venta, se recomienda consultar al médico acerca de la posibilidad de desarrollar úlceras y otros efectos grastrointestinales secundarios. El profesional puede sugerir un cambio en la medicación, ó la incorporación de algún otro medicamento que, en forma conjunta con el primero, prevenga la ulceración. La sugerencia puede variar
entre cambiar a acetaminofen, utilizar antiácidos ó un producto recetado (ranitidina o IBP) junto con el medicamento contra el dolor. Cuáles son las complicaciones que generan las úlceras? Pérdida de sangre: la pérdida de sangre proveniente de una úlcera puede ocurrir en el estómago ó el duodeno y es a veces la única señal de úlcera. La pérdida de sangre por úlcera puede ser lenta, causando anemia y fatiga. Mayor pérdida de sangre puede hacer que la defecación sea pegajosa y de color alquitrán ó hasta con sangrado. Las úlceras sangrantes puede provocar nauseas y vómitos con sangre acídica. Perforación: Cuando las úlceras no son tratadas, los jugos digestivos y el ácido estomacal pueden literalmente comer un orificio en la mucosa intestinal. Las bacterias, la comida y los jugos digestivos pueden derramarse en la cavidad abdominal y causar dolor repentino e intenso que requiera hospitalización, y con frecuencia, cirugía. Obstrucción: La inflamación crónica producida por una úlcera puede causar hinchazón y cicatrización. Con el tiempo la cicatrización puede cerrar la salida del estómago e impedir el pasaje de comida, provocando vómitos y pérdida de peso. Cómo se diagnostica una úlcera? La mayoría de los médicos recomiendan un examen para evaluar la presencia de úlcera si los síntomas no mejoran después de dos semanas de tratamiento con un medicamento bloqueador de ácido (ranitidine, prazoles, etc). Los exámenes más comunes para realizar un procedimiento denominado Endoscopia ó EGD. Endoscopia: Este examen consiste en la inserción de una pequeña sonda flexible y con luz por la boca al esófago y estómago para analizar anomalías. El examen es usualmente realizado con la ayuda de sedantesanestésicos. Durante el examen, es posible tomar biopsias de tejidos para analizar. Una biopsia no causa dolor ó molestia, y generalmente no supera el tamaño de la cabeza de un fósforo. Exámenes para detectar Helicobacter Pylori: Existen varios exámenes disponibles para que los médicos puedan detectar la presencia de las bacterias, H. Pylori. Se puede analizar muestras de sangre para buscar anticuerpos de las bacterias; un examen de aliento es útil para detectar consecuencias de las bacterias; ó se puede analizar biopsias del estomago.
Cómo se trata una úlcera? Higienodietético En el pasado, los médicos aconsejaban a los pacientes evitar comidas condimentadas, grasas y acídicas. Ahora sabemos que la dieta tiene poco que ver con la cura de úlceras. Los médicos ahora recomiendan que los pacientes que sufren úlceras sólo eviten comidas que empeoran sus síntomas. Los pacientes que sufren úlceras y fuman, deben dejar de hacerlo. Se ha demostrado que fumar inhibe la cura de úlceras y que esta ligada con la reaparición de úlceras. En general, los pacientes que sufren úlceras no deben tomar AINES, como aspirina ó ibuprofeno. Cuándo se requiere cirugía? Es posible curar la mayoría de las úlceras con medicamentos. En los casos en que la cura de una úlcera fracasa ó si complicaciones, tales como pérdida de sangre, perforación u obstrucción, se desarrollan, es con frecuencia necesario recurrir a la cirugía. MEDICAMENTOS USUALMENTE RECETADOS PARA LA CURA DE ÚLCERAS Entre los medicamentos por receta para tratar ERGE y úlceras se incluyen drogas llamadas antagonistas de receptores H2 (bloqueadores H2) hoy superado por los inhibidores de la bomba de protones. Estas contribuyen a reducir el ácido estomacal que tiende a exacerbar los síntomas; promueven la cura. Inhibidores de la bomba de protones Los IBP tienen también un importante rol en el tratamiento de la enfermedad de úlcera. Dado que ofrecen la manera más efectiva de reducir la producción de ácido, resultan útiles para tratar casos de enfermedad de úlcera graves. Tal como se indica a continuación, la mayoría de los regimenes estándar para el tratamiento de infección por Helicobacter pylori incluyen inhibidores de la bomba de protones. Adaptado del American College of Gastroenterology Traducido por Agustín Caro y adaptado por el Dr. Luis E. Caro