INDICE: 1 INTRODUCCIÓN... 2 2 ENCUADRE GEOLÓGICO.... 3 3 ESTRATIGRAFÍA... 4 3.1 TERCIARIO... 4 3.2 CUATERNARIO... 4 4 GEOMORFOLOGÍA... 5 5 HIDROGEOLOGÍA...6 6 CARACTERIZACIÓN GEOTÉCNICA... 7 6.1 ÁREA III 1... 7 6.2 ÁREA III2... 8 6.3 ÁREA III2... 8 7 CONCLUSIONES...9 MAPA 1: PLANO GEOLÓGICO DE LA ZONA DE ACTUACIÓN... 10 MAPA 2: PLANO GEOTÉCNICO DE LA ZONA DE ACTUACIÓN... 11 Pág. 1
1 INTRODUCCIÓN. En el presente Anejo se establece un encuadre geológico geotécnico general de la zona de actuación, con el objeto de determinar las características más relevantes del entorno, en lo que respecta a la capacidad portante del terreno. En cualquier caso, indicar que, ya que las actuaciones planteadas no incorporan estructuras significativas y ya existe una explanada consolidada, no se prevén problemas de carácter geológico y geotécnico. Para la elaboración del presente documento, se ha realizado la consulta de la bibliografía existente así como de la cartografía previa del entorno. Así se puede indicar la siguiente: Mapa Geológico elaborado por el Instituto Geológico y Minero de España, a escala 1:50.000 hoja de León (Hoja 161) Mapa Geológico elaborado por el Instituto Geológico y Minero de España, a escala 1:200.000 (Hoja 19). Mapa Geotécnico general editado por el Ministerio de Industria a escala 1:200.000 (Hoja 19) Mapa de Riesgos Geológicos de León, a escala 1:200.000 Atlas del medio natural de la provincia de León, del Instituto Tecnológico Geominero de España, editado por la Diputación provincial de León. Mapa Geotécnico y de Peligrosidad Natural de la ciudad de León y su aglomeración urbana, a escalas 1:25.000 y 1:5.000. La edición de estos mapas viene acompañada de un dossier en el que se recogen los factores naturales con incidencia constructiva, la explicación de una zonación geotécnica y el estudio de riesgos, sobre la base de los factores citados con anterioridad. Pág. 2
2 ENCUADRE GEOLÓGICO. Geológicamente Santovenia de la Valdoncina se sitúa en la margen noroccidental de la Cuenca del Duero, dentro de la Submeseta Septentrional. Afloran los materiales pertenecientes al relleno de la cuenca, terciarios y cuaternarios. La Cuenca del Duero, durante el Terciario se configura como una cuenca de antepaís simétrica cuya geometría y relleno continental vienen controlados por los relieves alpinos que la circundan, Zona Astuoccidental Leonesa al oeste y Zona Cantábrica al norte, ambas parten de la Cordillera Hercínica que es extiende al NO de la Península Ibérica. Concretamente, y en relación con los relieves de la Cordillera Cantábrica, se desarrollan amplios sistemas de abanicos aluviales en la zona, progradantes, que se van solapando y acumulando desde el Paleógeno al Pleistoceno inferior. El proceso de relleno de la cuenca se produce de una manera discontinua, existiendo épocas de interrupciones de la sedimentación de carácter estratigráfico y discordancias sintectónicas como consecuencia de la actividad diastrófica de la cuenca. También cabe destacar la desigual subsidencia registrada en unas y otras partes de la cuenca, siendo la más activa y la que presenta una mayor potencia de sedimentos la zona N y E, con hasta 2500 m de depósitos. Posteriormente, durante el Cuaternario, la cuenca sufre procesos de fuerte erosión, dando como resultado grandes extensiones superficiales de origen fluvial como terrazas, glacis, fondos de valle, llanuras aluviales, etc. Estos depósitos llegan a ocupar en superficie una mayor área que los terciarios. Sus edades están comprendidas entre el Pleistoceno y el Holoceno, así se les suele atribuir a las terrazas más altas una edad del Pleistoceno, considerándose las terrazas más bajas junto con los fondos de valle, llanuras de inundación actuales, etc. de edad correspondiente al Holoceno. Los materiales tanto de edad terciaria como cuaternaria presentan una composición litológica homogénea y una disposición estructural simple, apareciendo prácticamente indeformados y horizontales, a excepción de las zonas más cercanas a los relieves paleozoicos con mayor complejidad tectónica. Pág. 3
3 ESTRATIGRAFÍA. A continuación se realiza una descripción de las diferentes unidades situadas en la zona de actuación o próximas a esta, en las que se incluyen sobre todo materiales cuaternarios, y también algún material terciario. En el anexo I a este anejo se incluye el mapa geológico del entorno de actuación, donde se aprecia la distribución de los diferentes materiales. 3.1 TERCIARIO. Respeto a los materiales terciarios predominan los conglomerados polimícticos de cantos calcáreos y silíceos con arenas y limos con concreciones carbonatadas (Aragoniense- Vallesiense Inferior). Esta unidad forma parte del sustrato terciario y aparece en Villaquilambre, al norte de la ciudad de León y en pequeños escarpes en las terrazas de los ríos Torío y Bernesga. Los materiales aparecen en capas subhorizontales con inclinaciones de 2-4º hacia el sur, su disposición es en abanico, formando una discontinuidad sintectónica en donde las potencias llegan a superar los 1000 m. En las inmediaciones de la ciudad de León aparece la litofacies perteneciente a la Unidad Polimíctica s.l. Se trata de arenas, limos y niveles carbonatados con menor proporción de conglomerados polimícticos cementados por carbonatos, su color varía entre rojo y amarilloocre. Los sedimentos finos presentan una extensión lateral grande, encontrándose los conglomerados en zonas más localizadas y con un menor desarrollo lateral. Los niveles carbonáticos pueden aparecer bien definidos dando resaltes en laderas o bien constituir pequeñas intercalaciones centimétricas dentro del resto de materiales que forman la serie. 3.2 CUATERNARIO Como ya se ha comentado anteriormente estos materiales alcanzan un amplio desarrollo superficial, siendo los predominantes a lo largo de la mayor parte de la zona de Pág. 4
actuación. Por lo general las terrazas superiores e intermedias se asignan al Pleistoceno, mientras que las más bajas junto con el resto de depósitos cuaternarios se asignan al Holoceno. Terrazas medias y bajas de los ríos Torío y Bernesga. Se trata de sedimentos con un alto porcentaje de cantos y gravas, entre un 60 y un 70 %, los clastos son de cuarcitas, areniscas ferruginosas, litoarenitas, conglomerados, cuarzo, etc. La matriz es principalmente arenosa y silícea. Su potencia no suele superar los 4 m, estando la mayoría entre 1 y 3 m de espesor. La procedencia de estos materiales es de los sedimentos terciarios de la cuenca y de los materiales paleozoicos de la Cordillera Cantábrica y Montes de León, donde se sitúan las cabeceras de los ríos. Limos, arenas y cantos silíceos de la llanura de inundación. Son depósitos fluviales recientes relacionados con la red fluvial actual. En el caso del río Bernesga a su paso por la cuidad de León pueden alcanzar una anchura de hasta 2 km, mientras que el río Torío no suele sobrepasar el kilómetro de ancho. La litología es simular a los depósitos de terrazas aunque con un contenido en finos mayor. Aparecen, a techo, niveles de limos y arcillas de inundación sobre los que se desarrollan los suelos fértiles de la vega. En el río Bernesga se observan cauces y meandros abandonados. Arenas y gravas del lecho actual de los ríos. Son materiales asociados a los cursos permanentes de agua con frecuente presencia de meandros y cauces abandonados con depósitos de barras con arenas y gravas. En nuestra zona de estudio el cauce actual del río Bernesga se encuentran canalizado artificialmente, mientras que el cauce del río Torío se encuentra en estado mas natural. 4 GEOMORFOLOGÍA La actuación de la red fluvial cuaternaria genera la morfología de la zona de estudio, generando las zonas planas. Pág. 5
Las arterias principales de drenaje son los ríos Bernesga y Torío, los cuales se juntan al sur de la ciudad de León. El Torío deja sus terrazas básicamente en la margen derecha con poca extensión superficial y tiende a erosionar la margen izquierda. Por otra parte el Bernesga tiende a dejar depósitos fluviales a su derecha y a erosionar la margen izquierda, aunque en este caso, esa diferencia no es tan pronunciada. Las terrazas fluviales presentan distribución y desarrollo variable, escalonándose entre el cauce actual y la alta superficie aluvial. La destrucción de estas plataformas conglomeráticas por la red de drenaje secundaria da lugar a un paisaje de transición entre un relieve invertido, donde entre terraza y terraza aparece el sustrato neógeno, y un terreno suavemente alomado constituido por los sedimentos deleznables del relleno neógeno. En cuanto al grado de cementación de las terrazas se observa que es mayor en las superiores con respecto a las más bajas, que pueden llegar a encontrarse prácticamente sin consolidar. 5 HIDROGEOLOGÍA La zona de estudio forma parte del Sistema Acuífero nº 8 Región de Esla- Valderaduey. Se pueden diferenciar dos tipos de acuíferos, los formados por materiales cuaternarios superficiales y libres y los asociados a depósitos terciarios, más profundos y que pueden llegar a estar confinados o semiconfinados. Los acuíferos superficiales se comportan hidrodinámicamente como acuíferos libres, su recarga es por infiltración de agua de lluvia y escorrentía superficial. Dentro de estos los más importantes son los relacionados con las llanuras de inundación de los ríos, las terrazas bajas conectadas con las anteriores y los páramos detríticos. Pueden aparecer niveles arcillosos intercalados, impermeables a efectos prácticos, aunque no suelen tener ni espesor ni continuidad destacables. Las terrazas más altas suelen estar desconectadas y constituyen niveles colgados en Pág. 6
los que su escaso espesor, entre 1,5 y 4 m, y bajas permeabilidades y transmisividades hacen que sean de poco interés. En cuanto a los acuíferos profundos, están formados por los materiales terciarios que rellenan la Cuenca del Duero, con potencias que pueden ser superiores a los 2000 m. Su litología consiste en niveles de conglomerados más o menos cementados discontinuos de potencia métrica en una matriz semipermeable de arcillas y arenas; todos estos materiales forman un conjunto que se comporta como un acuífero heterogéneo, anisótropo, de baja permeabilidad y que puede encontrarse confinado o semiconfinado. Su drenaje suele efectuarse por escorrentía superficial a favor de pendientes, siendo la circulación del agua subterránea desde los interfluvios hacia los ríos. Se pueden producir encharcamientos. 6 CARACTERIZACIÓN GEOTÉCNICA Geotécnicamente, a partir de la información recogida en el Mapa Geotécnico de León, se pueden agrupar las unidades geológicas en 3 áreas según el tipo de materiales y sus principales características. Todas ellas se encuadran en una división de mayor rango que es la Región III y que agrupa los terrenos terciarios y cuaternarios. Estas unidades se pueden observar, indicado, en el anexo II del presente anejo. 6.1 ÁREA III 1 En ella se incluyen los materiales aluviales de la zona que comprenden los depósitos de la llanura de inundación y los del cauce actual del río. Predominan las gravas y arenas con un cierto contenido en materiales más finos, sin embargo son bastante irregulares pueden llegar a aparecer niveles casi exclusivamente arcillosos que suelen ser muy plásticos. La morfología de estos materiales es completamente llana, con mínimas pendientes. La permeabilidad es muy variable, desde muy alta en zonas de gravas hasta prácticamente impermeable para las zonas arcillosas. Pág. 7
La capacidad de carga de los materiales granulares es media con un gran margen de variabilidad, siendo la zona más desfavorable la de predominio de materiales arcillosos. También es destacable la posible aparición de asientos diferenciales debido a su fuerte heterogeneidad y anisotropía. Los materiales arcillosos presentan asientos de magnitud media. Estos terrenos pueden sufrir encharcamientos debido a que son prácticamente impermeables y llanos. 6.2 ÁREA III2 Comprende a los materiales terciarios descritos con anterioridad, conglomerados, arenas y limos. Los relieves que presentan son suaves y alomados. Solo se presentan problemas de deslizamientos y abarrancamientos allí donde la pendiente se acentúa. Su naturaleza es en general impermeable con un drenaje por escorrentía superficial y posibles encharcamientos en zonas de poca pendiente. En cuanto a las características geotécnicas de esta unidad cabe destacar que presentan una capacidad de carga media, que pueden ser menores en zonas saturadas con agua. No se esperan la aparición de asientos diferenciales ni de hundimientos bruscos. 6.3 ÁREA III2 Se trata de los más abundantes en la ciudad de León y su alfoz y corresponden a los depósitos pliocuaternarios de terrazas que aparecen bordeando los ríos Torío y Bernesga. Litológicamente son arenas y gravas muy poco o nada cementadas. Presentan morfologías llanas distribuidas en altiplanicies escalonadas y son de poso espesor. Su permeabilidad es bastante variable según la granulometría de los materiales. La litología de estos materiales, gravas y arenas, hace que tengan una capacidad de carga de media a alta con asientos posibles inexistentes. Pág. 8
7 CONCLUSIONES Los materiales presentes en la zona de actuación se pueden dividir en terciarios formados por unos conglomerados polimícticos que aparecen con arenas y limos y algunas concreciones carbonatadas y los materiales detríticos cuaternarios de los ríos Bernesga y Torío. Geotécnicamente las unidades formadas por los materiales terciarios y las terrazas no presentan problemas destacables, con una capacidad de carga media y asientos diferenciales inexistentes. En cuanto a los materiales aluviales cuaternarios de los ríos, tanto de la llanura de inundación como del lecho, se deberá prestar especial atención a los asientos y colapsos (derivados de una menor capacidad portante de los materiales más arcillosos), posibles afecciones al nivel freático que se encuentra cercano a la superficie y posibles zona de inundación en las zonas de muy baja permeabilidad. En cualquier caso, dadas las características de la actuación, que suponen la ejecución de zanjas no muy profundas de una zona muy consolidada, no se aprecia la existencia de aspectos relevantes desde el punto de vista geológico y geotécnico. Unicamente destacar que se deben tomar las medidas oportunas al objeto de garantizar la estabilidad de los taludes de las excavaciones localizadas y en zanjas, las cuales de no excavarse con el talud natural, se deberán entibar. Pág. 9
MAPA 1: PLANO GEOLÓGICO DE LA ZONA DE ACTUACIÓN Pág. 10
MAPA 2: PLANO GEOTÉCNICO DE LA ZONA DE ACTUACIÓN Pág. 11