ESTUDIO DE 1ª CARTA DE CORINTIOS Por: Rubén Álvarez Resolviendo conflictos dentro de la iglesia Introducción 1 Corintios 6: 1 Osa alguno de vosotros, cuando tiene algo contra otro, ir a juicio delante de los injustos, y no delante de los santos?2 O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas? 3 O no sabéis que hemos de juzgar a los ángeles? Cuánto más las cosas de esta vida? 4 Si, pues, tenéis juicios sobre cosas de esta vida, ponéis para juzgar a los que son de menor estima en la iglesia? 5 Para avergonzaros lo digo. Pues qué, no hay entre vosotros sabio, ni aun uno, que pueda juzgar entre sus hermanos, 6 sino que el hermano con el hermano pleitea en juicio, y esto ante los incrédulos? 7 Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. Por qué no sufrís más bien el agravio? Por qué no sufrís más bien el ser defraudados?8 Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos. 9 No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. 11 Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios El apóstol Pablo abre un nuevo asunto que se estaba dando en la iglesia de Corinto: Andar en la carne no solo provocaba la división de la iglesia entre cuatro facciones de liderazgo, no solamente los apartaba de recibir la sabiduría de Dios, no solo le había provocado una horfandad espiritual, no solo había ocasionado pecados graves que eran conocidos y tolerados; sino que además también había dado a luz pleitos entre particulares que eran llevados ante los tribunales, como dice Pablo, iban a juicio delante de los injustos. Bueno pues muchos graves problemas estaban ocurriendo en la iglesia de Corinto. Pareciera que el apóstol Pablo los va llevando en aumento. Sobre este problema en particular el Espíritu Santo establece:
DESARROLLO 1. Deben ser atendidos dentro de la iglesia y no fuera. Que los problemas entre hermanos de la iglesia deben ser atendidos dentro de la iglesia y no fuera de ella ante tribunales. Cuál es la razón para ello que ofrece el Espíritu Santo? Que los santos de Dios han recibido sabiduría para atender los problemas y llevar a una solución los asuntos. Y es que el resultado final del juicio hecho por los santos no es la condenación, sino el arrepentimiento, la restitución de los daños, ya sea en palabras o bienes y la reconciliación entre los hermanos; lo cual jamás ocurre en un juicio ante los tribunales civiles o penales. 2. La actitud correcta debiera ser pasar por alto el agravio. El segundo punto que el Espíritu Santo establece es que la actitud correcta ante algún agravio de algún hermano sería sufrirlo y pasarlo por alto; no salir de pleito con él. Obviamente para que esto suceda dicho cristiano necesariamente ha de andar en el Espíritu y no en la carne. Quien anda en la carne siempre demanda aclaración, confrontación, salir ganando de la discusión. Y dice el Espíritu Santo: Por qué no sufrís más bien el agravio? Por qué no sufrís más bien el ser defraudados? Mis amados, mucho me he enterado de que los mismos cristianos no quieren contratar a otros cristianos para algún servicio o trabajo, precisamente por el temor de ser defraudados. Sucede que entre los cristianos se ha apoderado un tipo de pensamiento de que todo servicio o trabajo debe ser gratis y entonces se espera pagar muy poco o nada por los servicios recibidos, y de igual manera quien brinda los servicios o trabajos lo hace con tal mala calidad pensando en que pues al fin y al cabo somos hermanos. Creo que toda esa cultura no corresponde al Reino de Dios. La cultura del Reino es de excelencia y alta calidad, mucho más cuando un trabajo es realizado a un hermano en Cristo. Igualmente en el pago, si tu estás dispuesto a pagar por un servicio cierta cantidad entonces podrías incluso pagar más para bendecir a unos de tus hermanos. Entonces contratan preferentemente a injustos, porque a ellos si les pueden regañar si el trabajo es malo, porque les pueden descontar si algo salió mal. Es eso una cultura de Reino? Son esos los pensamientos del Espíritu de Dios? Por otra parte, por qué las cristianos recurren a sus autoridades en la iglesia hasta que ya tienen un grave problema y no antes cuando apenas se darán los negocios o alianzas para prevenir algún potencial problema? Muchas veces hemos prevenido a hermanos nuestros en la fe sobre negocios con personas que ya sabemos que haciéndose llamar cristianos son defraudadores,
pero no nos hacen caso, y después, cuando ya tienen el problema entonces vienen buscando ayuda para resolver el conflicto. Ahora bien, dice la Palabra de Dios que no nos unamos en yugo desigual con los no creyentes, entonces: por qué no hacemos caso a la Palabra de Dios que nos previene? 3. Los injustos no heredarán el Reino de Dios. En tercer lugar, el Espíritu de Dios deja muy claro dentro de la iglesia que los injustos no heredarán el Reino de Dios. A quienes se refiere? Dice que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Ahora bien, hace la aclaración. Antes de venir a Cristo quizá éramos eso y hasta más, pero una vez que hemos sido perdonados y redimidos por Su sangre, debemos ser transformados por el Espíritu para dejar de ser todo lo anterior. Así que si hay alguno dentro de la iglesia que aún sigue estafando a otros en sus negocios, que no se engañe, así no podrá heredar el Reino de Dios. Es por ello tan necesario que todos estos casos de agravios, ya sean verbales o en hechos, puedan ser atendidos dentro de la iglesia bajo la sabiduría de Dios y no la de los hombres, porque mucho más importante que el agravio sea restituido es que el alma del defraudador o del adúltero, o del maldiciente, sea rescatada a través del arrepentimiento; pues que por ellos es que Jesús murió en la cruz. No vino por los sanos, el mismo dijo; sino por los enfermos. 4. Nosotros hemos de juzgar al mundo y a los ángeles. Ahora bien, como parta de la justificación que el apóstol Pablo da para establecer que los juicios debieran realizarse dentro de la iglesia por los santos de Dios, el Espíritu Santo revela que somos nosotros quienes hemos de juzgar al mundo y aún a los ángeles. Sí, cuando Jesús venga como Rey de reyes y Señor de señores, se sentará sobre su trono para juzgar al mundo y a los ángeles caídos o mejormente llamados demonios. Ellos se rebelaron en contra de la autoridad de Dios respaldando la insurrección del querubín Luz Bel quien pretendía tomar el trono. Y de acuerdo con Apocalipsis 20: 4, se sentarán en tronos aquellos santos que hayan recibido la facultad para juzgar. Este evento dará como resultado mil años en que Jesús reinará sobre la tierra junto con los santos. Ahora bien; Cómo es que estos santos juzgarán? Veamos lo que dijo Jesús:
Mateo 12: 41 Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán; porque ellos se arrepintieron a la predicación de Jonás, y he aquí más que Jonás en este lugar Si ustedes han leído el libro de Jonás, los habitantes de Nínive eran grandemente pecadores, de tal forma que ya había sido establecido por Dios su destrucción y como última oportunidad les había mandado al profeta Jonás para que les predicara. Jonás no quería que Dios los salvara, por el contrario deseaba que fueran aniquilados. Pero Dios tenía misericordia de ellos y les enviaba a un profeta para advertirles que serían consumidos si no se arrepentían de sus pecados. Así que Jonás, en contra de su voluntad, pero obedeciendo a Dios, predicó en la ciudad, con tan grande unción que desde el rey hasta la persona más humilde se humillaron delante de Dio y se arrepintieron, por lo cual la destrucción fue detenida y fueron salvados de este terrible juicio. Pues bien, dijo Jesús que aquellos hombre de Nínive que se arrepintieron bajo la predicación de Jonás se levantarán en el juicio en contra de aquella generación que no se arrepiente, siendo que es mucho mayor Jesús que Jonás. Jesús no solo los lleva al arrepentimiento para evitar el castigo, sino que los lleva al Reino de Dios. Arrepiéntanse porque el Reino de los Cielos se ha acercado Así que en aquel juicio, todos los que no se arrepintieron aún y cuando conocieron a Jesús y Su salvación, serán condenados bajo el testimonio y juicio de los hombres de Nínive que si se arrepintieron ante una predicación de Jonás. Mateo 12: 42 La reina del Sur se levantará en el juicio con esta generación, y la condenará; porque ella vino de los fines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón, y he aquí más que Salomón en este lugar. También la reina de Saba, o reina del Sur, quien viajó enormes distancias buscando la sabiduría de Salomón, se levantará en el juicio en contra de quienes teniendo tan cerca la sabiduría de Dios no acuden a ella, sino que la menosprecian. No saben la cantidad de Palabra de sabiduría que Dios ha dado en este lugar. Hemos hablado de matrimonios, familia, economía, principios de sabiduría, etc. Pero la gente de esta misma congregación la desprecia. Después, cuando tienen problemas matrimoniales entonces piden una cita para consejería. Vienen, me cuentan sus problemas y lo primero que yo les pregunto es: Y dónde estaban cuando hablamos de matrimonios? Siempre dicen: Ah es que no pudimos venir, es que el horario, es que la distancia, es que los hijos, es que el dinero, en fin. Cómo podrán justificarse de estos problemas cuando se presenta no la reina de Saba que viajó miles de kilómetros para escuchar y ver a Salomón, sino a gente de este congregación que sin auto, salen de aquí a las 10 de la noche buscando un transporte para llegar a sus casas en otros municipios?
Para otras muchas cosas si hay tiempo, si hay dinero, si hay ánimo. Pero para recibir la sabiduría de Dios, no la hay. Y entonces dicen: Bueno no venimos pero aquí estamos ya con este problema: Qué hacemos? Entonces ahora el problema es del pastor, sencillamente porque no hicieron lo correcto durante mucho tiempo. Y así igualmente llegan con problemas económicos, sociales, etc. estaban cuando la palabra de Dios, que es sabiduría sin igual, se dio? Dónde La reina de Saba y los de Nínive serán jueces en aquel día, porque apreciaron la obra de Dios y la buscaron con desesperación. Y así puedo decirles que se levantarán en juicio aquellos que a pesar de las presiones y adversidades a que fueron sometidos se mantuvieron fieles a Dios y persistieron en la fe, en lugar de presentar estas como excusas para decir: Por eso nos fuimos, por culpa de este o aquel ya no estamos. Muchos pretextos siempre habrá en todas las cosas, pero quiero que sepas que el juicio de Dios es perfecto. Nunca una excusa podrá justificarte delante de Él, sino el arrepentimiento y la restitución del daño. Dejemos de pensar como carnales, toma los pensamientos del Espíritu y verás muchas cambios importantes.