13/03/2012 SHALE GAS EN CHILE Qué es el gas de esquisto o shale gas? Es gas natural atrapado en formaciones de esquisto ( shale, en inglés). Las rocas de esquisto son rocas sedimentarias compuestas por partículas finas que pueden contener petróleo y gas natural. El interior de estas rocas presenta baja permeabilidad; por eso, para extraer el gas de su interior, se requiere fracturarla. Desde el inicio del siglo XXI, los avances en la tecnología de perforación horizontal y fractura hidráulica han permitido el acceso a grandes volúmenes de shale gas, cuya extracción no había sido económicamente viable hasta entonces. La producción de shale gas ha revolucionado la industria. Cómo se extrae? Los métodos que utiliza la exploración de shale gas, son superficiales y subterráneos. En algunos casos, se requieren metodologías sísmicas para generar mapas de las áreas subterráneas. La fractura hidráulica (a la que se alude habitualmente con el término inglés "fracking") es una técnica que inyecta agua, químicos y arena en los pozos, a gran presión, para generar fracturas que liberen los hidrocarburos atrapados en las rocas. Cuando este método se aplica junto con la perforación horizontal, la fractura hidráulica permite extraer gas de modo económicamente viable. Sin estas técnicas, el shale gas no fluye con la suficiente rapidez y no se consiguen cantidades comercialmente atractivas. Esquema de la Fractura Hidráulica Extracción habitual Pozo se torna horizontal Shale Gas Fisuras a presión Por qué el shale gas es diferente? El shale gas es gas natural. Lo que es diferente es su extracción. Los reservorios de gas convencional se crean cuando el gas natural migra de una formación rica en componentes orgánicos, a una roca permeable en la que queda atrapado por una capa de piedra impermeable. En contraste, el shale gas queda atrapado en la formación rica en componentes orgánicos pero sin poder migrar por la baja permeabilidad de esta formación Hay experiencias exitosas de producción de shale gas? Sí, una de las cuencas de esquisto más conocidas, de la que se ha extraído gas por una década, es la Barnett Shale, en Texas. La experiencia con esta cuenca fue relevante para mejorar la eficiencia de los procesos de extracción. Otra cuenca importante es la Marcellus, al este de los Estados Unidos. TEMAS DE NEGOCIOS Hallazgos en EEUU: La Energy Information Administration (EIA, agencia del gobierno de Estados Unidos reconocida como autoridad mundial en temas de energía) estima que en 2012, Estados Unidos posee 2214 billones de pies cúbicos (Tcf) de gas natural técnicamente recuperable (i.e., potencialmente extraíble), ya sea por reservas probadas o por estimaciones no probadas. El gas natural recuperable (por reservas probadas y estimadas) de fuentes shale asciende a 542 Tcf. Con el ritmo de consumo de Estados Unidos (24 Tcf anual), el gas recuperable alcanza para algo más de 90 años (sin shale gas, la disponibilidad sería de 70 años). El 90% del gas natural que se consume en Estados Unidos proviene de fuentes domésticas; el shale gas permitirá que por un siglo no se dependa de importaciones. Muchas formaciones shale, especialmente la denominada Marcellus, son tan grandes que sólo una pequeña porción ha podido ser probadas y puesta a producir. Por eso, la estimación de fuentes disponibles es bastante incierta, y se actualiza regularmente. Se estima que en 2035, 45% del gas consumido en Estados Unidos va a constituir shale gas Proyección Producción de Gas en EEUU Shale Gas Tight Gas Otros tipos de gas convencional
Las reservas mundiales de shale gas. En abril de 2011, la EIA afirmó que la disponibilidad de shale gas agrega 40% a las reservas globales de gas natural. Este dato es muy sensible a la tecnología disponible: en la medida que se desarrolle la tecnología y sea económicamente viable, las disponibilidades podrían aumentar. El shale gas técnicamente recuperable fuera de Estados Unidos se localizaría en 32 países, y ascendería a 5760 TcF. Si se suma el dato de Estados Unidos, los recursos totales de shale gas ascienden a 6302 TcF en el mundo. Para poner este dato en perspectiva, el gas natural técnicamente recuperable a nivel mundial, sin incluir shale gas, asciende a 16000 TcF. Lo anterior implica que el aporte del shale gas a todo el gas técnicamente recuperable, equivale a un 40% del total. Las reservas se encuentran principalmente en Estados Unidos y China, país que posee activos recuperables 50% mayores que los de Estados Unidos. La EIA destaca que entre los países dependientes de importaciones de gas, para los que se estiman reservas significativas de shale gas, están: Francia, Polonia, Turquía, Ucrania, Sudáfrica, Marruecos y Chile. La EIA estima que Chile posee 64 TcF de shale gas. En 2009, el consumo de gas natural en Chile fue de aproximadamente 0.10 TcF Cuencas con estimaciones de gas shale Cuencas sin estimaciones de gas shale Países dentro del alcance del estudio Países fuera del alcance del estudio Shale Gas Técnicamente Recuperable Por País
Shale Gas en Chile La Cuenca Magallanes se ubica en la zona austral del país y tiene una superficie de 65000 millas cuadradas. A pesar que sus reservas no han sido probadas, los informes de la EIA la catalogan como una zona con un gran potencial de shale gas. La mayor parte de la cuenca está en territorio argentino, donde se denomina Cuenca Austral. La fracción chilena está localizada en Tierra del Fuego. En la actualidad, es el yacimiento de extracción del 100% del petróleo chileno. Area Prospectiva Inmadura Petróleo Gas Húmedo o Conden. Gas Seco Cuenca Austral Magallanes Ciudad Agua La roca principal de la cuenca (lower inoceramus shale) contiene esquisto negro con alta presencia de materia orgánica. Basándose en el reporte de EIA y en las propiedades geológicas de la roca, se estima un total de shale gas de 420 Tcf, debido a la amplia superficie de la cuenca. Sin embargo, sólo 84 Tcf pueden considerarse gas económicamente extraíble. Una segunda roca principal son las magnas verdes; se componen de esquisto y marga con un nivel moderado de carbono orgánico. Se estima un total de shale gas de 351 Tcf, debido a la amplia superficie de la cuenca. Sin embargo, sólo 88 Tcf se considera gas económicamente extraíble. A pesar de que en ambas rocas se podrían extraer 172 Tcf, sólo 64 Tcf le pertenecen a Chile (el resto es argentino).
Avances en Exploración - Shale Gas en Chile A mediados de 2011, ENAP inició una licitación para buscar socios con los que explorar nuevas reservas de gas natural en Magallanes. En las cláusulas se incluyó la obligación de perforar al menos un pozo de shale gas. El proceso se cerró el 12/9/2011 con la firma de los acuerdos de participación entre ENAP, Geopark, Wintershall e YPF. Pocos días después, las empresas presentaron solicitudes de Contratos Especiales de Operación Petrolera (Ceops) al gobierno chileno, para la adjudicación de cinco bloques: Isla Norte, Flamenco, Campanario, San Sebastián y Marazzi-Lago Mercedes. El bloque San Sebastián (579.51 km2) fue adjudicado a YPF y el de Marazzi-Lago Mercedes (584 km2), al consorcio YPF- Wintershall. Para ENAP-Geopark se asignaron tres bloques que cubren 1705.3 km2: Isla Norte (555.4 km2); Campanario (578 km2); y Flamenco (571.89 km2). En el primer bloque se constituirá una sociedad en la que Geopark tendrá una participación del 60%, y en los dos últimos, la correspondencia será 50% para cada una (Geopark y ENAP). En los tres bloques, el operador será Geopark. En los primeros tres años de exploración, el 100% de la inversión estará en manos de Geopark, proponiendo esta empresa invertir US$101 millones y comenzar los estudios sísmicos hacia fin de 2012 (la prensa indica que antes del llamado a licitación, a mediados de 2010, Geopark habría ofrecido US$ 500 millones para quedarse con todas los bloques luego licitados, pero la oferta fue rechazada) Si se encuentra gas y petróleo, la producción de los eventuales pozos se repartirá en las proporciones antes referidas. En ambos casos, las petroleras internacionales correrán con el 100% de la inversión requerida para la prospección.
Geopark: Propiedad de Geopark Negocios y Exploración de Shale Gas en Chile Geopark se dedica a la exploración y producción de petróleo y gas. Todas sus reservas de gas (probadas, probables y posibles) ascienden a 713.7 miles de millones de pies cúbicos (BcF). Los bloques que opera Geopark son: Bloques recientemente adjudicados e inversión comprometida en Tierra del Fuego País Cuenca Bloque Particip.% Area Acres AreaKm2
Extracción de Shale Gas y el Medio Ambiente La combustión de gas natural genera menos contaminación que el carbón o el petróleo, al emitir menores niveles de dióxido de carbono y dióxido de azufre. En generación eléctrica, cuando se usa en plantas de ciclo combinado eficientes, la combustión de gas natural emite la mitad de dióxido de carbono que la combustión de carbón por unidad de electricidad generada. La producción de shale gas tiene impacto sobre el medio ambiente porque la fractura hidráulica requiere grandes cantidades de agua. Cada fractura demanda entre 15/20 millones de litros. Los fluidos que resultan de la fractura requieren tratamiento cuidadoso, pues contienen químicos peligrosos; un derrame o cualquier exposición al medio podría contaminar las áreas circundantes. Las aguas con contaminantes requieren tratamiento antes de su reutilización, e incluso en caso de desecharse. Finalmente, estudios geológicos reconocen que la fractura hidráulica causa pequeños terremotos, que casi siempre son menores y no constituyen una preocupación para la seguridad; sin embargo, la reinyección de los fluidos como método de desecho puede generar terremotos suficientemente grandes como para ser percibidos y generar algún daño. El impacto medioambiental de las técnicas para extraer shale gas genera gran controversia: El diario sudafricano Mail&Guard publicaba hace unos meses: Dependiendo de quien hable, la fractura hidráulica se describe como el gran enemigo en ciernes, o el gran salvador a la vuelta de la esquina. Los enemigos hablan de tierras arrasadas y pozos de agua envenenados. Los defensores la consideran el camino a la seguridad energética, la creación de empleo y millones de inversión Fuentes de este trabajo: Presentaciones de GeoPark en su sitio web http://www.geo-park.com/ir/index.asp; trabajos de la US Energy Information Administration (EIA) en http://www.eia.gov/analysis/studies/worldshalegas/. Mayor detalle, solicitar a Nora Balzarotti en npb@nevasa.cl
Nora Balzarotti Gerente de Estudios Karen Schweitzer Analista Jorge García Analista Gerencia de Estudios de Nevasa: npb@nevasa.cl (562) 411 9863 R o s a r i o N o r t e 5 5 5 P i s o 1 5 L a s C o n d e s S a n t i a g o F o n o ( 5 6 2 ) 4 1 1 9 8 0 0 Este documento y su contenido no constituyen una oferta o una solicitud de compra o de suscripción de ningún valor u otro instrumento, o de realizar una inversión, sino que tiene un propósito meramente informativo. Por ello, la información contenida en este documento no corresponde a objetivos de inversión específicos, situación financiera o necesidades particulares de ningún receptor del mismo. Antes de realizar cualquier inversión, los inversionistas deberán informarse sobre las condiciones de la operación, así como de los derechos, riesgos y responsabilidades implícitas en ella. Por lo que Negocios y Valores S.A. no asume responsabilidad alguna, ya sea directa o indirecta, derivada del uso de este documento o su contenido. Cualquier opinión expresada en este material está sujeta a cambios sin previo aviso de Negocios y Valores S.A., quien no asume la obligación de actualizar la información contenida en él. Negocios y Valores S.A. o cualquiera de sus relacionados, vendedores, agentes u otros empleados podrán hacer comentarios de mercado, orales o escritos, o transacciones que reflejen una opinión contraria a aquéllas expresadas en el presente documento. Negocios y Valores S.A. Corredores de Bolsa no acepta responsabilidad de ningún tipo por pérdidas directas o indirectas, que se presenten por el uso del documento o su contenido. La información obtenida de terceros se basa en fuentes confiables pero no están garantizadas como exactas. La empresa no ha verificado independientemente la información, y por lo tanto no da garantía de su exactitud, integridad o corrección.