1 de 6 11. EL TEATRO ESPAÑOL POSTERIOR A 1936: TENDENCIAS, RASGOS PRINCIPALES, AUTORES Y OBRAS MÁS SIGNIFICATIVAS 12. 1. El teatro en el exilio (Rafael Alberti, Max Aub ). El teatro de los años cuarenta: la comedia burguesa, el teatro de humor (Enrique Jardel Poncela y Miguel Mihura). 12.2. El realismo social del los años cincuenta: Buero Vallejo y Sastre. 12.3. El teatro desde los años sesenta a 1975: teatro comercial, teatro social, teatro experimental (Fernando Arrabal y Francisco Nieva), teatro simbolista y teatro independiente. 11.1. EL TEATRO EN EL EXILIO (RAFAEL ALBERTI, MAX AUB ). EL TEATRO DE LOS AÑOS CUARENTA: LA COMEDIA BURGUESA, EL TEATRO DE HUMOR (ENRIQUE JARDIEL PONCELA Y MIGUEL MIHURA) El teatro español de la posguerra sigue la misma línea que la poesía y la narrativa. Frente a las manifestaciones oficiales y conservadoras van surgiendo nuevas propuestas escénicas. En las salas comerciales triunfa un teatro de corte tradicional: la alta comedia o comedia benaventina. A finales de los sesenta y setenta aparecen algunos dramaturgos y <<compañías>> innovadores. Son jóvenes que escriben y representan un teatro diferente, que con frecuencia ha de enfrentarse a la censura. En esta época el panorama teatral es bastante pobre. Por un lado, las innovaciones propuestas por Valle-Inclán o Lorca desaparecen junto a sus autores. Por otro lado, el exilio de autores como Alejandro Casona, Max Aub y Rafael Alberti dejan vacía la escena, a esto se une la censura y el afán comercial de los empresarios. Los espectadores cansados de la situación social que viven acuden al teatro para entretenerse y olvidar con obras insustanciales la vida diaria. Por ello los empresarios se dedican a estrenar comedias rosas, revistas y vodeviles. Hay otra parte de la población que desea un cambio, a finales de los cuarenta despuntan ciertas actitudes sociales que se plasman en el teatro realista y existencial de mediados de los cincuenta. En los sesenta y setenta se produce un nuevo cambio y se experimenta con nuevas formas teatrales. Liderando estas innovaciones encontramos a Fernando Arrabal o Francisco Nieva cuyas obras suelen representarse al margen de los circuitos comerciales. Tras la muerte de Franco todos los autores apartados de la escena volverán a representar. Teatro en el exilio RAFAEL ALBERTI: compuso obras dramáticas de diversos tipos: 1. Un auto vanguardista, El hombre deshabitado, sobre la creación, tentación y caída del hombre. 2. Teatro político: Fermín Galán, escrito a raíz de la sublevación contra la continuación de la monarquía. De un momento, reflexiones acerca de la caída de las clases sociales privilegiadas, y Noche de guerra en el Museo del Prado, representación del salvamento de los cuadros del Museo del Prado para protegerlos del ataque de las tropas franquistas.
2 de 6 3. Teatro poético. El trébol florido, expresión del conflicto entre la tierra y el mar a través del amor entre un molinero y una pescadora, y El adefesio, análisis de una sociedad oprimida en la que una joven ha de permanecer encerrada en su casa debido a las supersticiones que la rodean. MAX AUB: con una técnica vanguardista muestra la incapacidad del ser humano para comprenderse a sí mismo y al mundo y para comunicarse. Es el caso de obras como Narciso, sobre el mito clásico. Su obras más importantes fueron escritas en el exilio y abordan temas de la realidad contemporánea como el nazismo, la segunda GM, como Morir por cerrar los ojos, El rapto de Europa El teatro de Aub tiene la misma voluntad experimental y cuidada elaboración que su narrativa. Entre sus rasgos más destacados su carácter documental, la estética realista y cierto tono épico. ALEJANDRO CASONA: su trayectoria teatral se inició con La sirena varada, obra con la que ganó el premio Lope de Vega en 1934. Escribió luego varias piezas pero fue en el exilio donde desarrolló su producción, La dama del alba, Los árboles mueren de pie Son rasgos de Casona el lirismo, el simbolismo, el lenguaje poético, la propensión al melodrama, el conflicto entre realidad y fantasía, el didactismo La comedia burguesa: Se trata de un teatro burgués, con gran éxito de público, cuyas características son las siguientes: 1. Concede especial importancia a la obra bien elaborada: gran habilidad en la construcción de la trama y los diálogos, dominio de los juegos escénicos... 2. Es un teatro superficial e ingenioso, con grandes dosis de humor. Pero también aparecen en ocasiones obras más serias que plantean problemas morales o de conciencia. 3. Hay cierta monotonía temática. El tema del adulterio o la infidelidad es el eje de numerosas comedias. Entre los representantes más notables de este tipo de teatro se encuentran José María Pemán, Juan Ignacio Luca de Tena y Joaquín Calvo Sotelo. Destacan especialmente Víctor Ruiz Uriarte y Edgar Neville: Víctor Ruiz Uriarte combina lo maravilloso y lo fantástico, la farsa, la comedia psicológica y la sentimental en obras como Un día en la gloria y El puente de los suicidas. Edgar Neville presenta en sus obras una visión amable de la vida, que propicia la evasión de la realidad. Su originalidad se basa en la ironía y la hipérbole con intención desmitificadora, y también en las situaciones absurdas, destacan El baile, Prohibido en otoño y Tiempos mejores. El teatro humorístico: Enrique Jardiel Poncela y Miguel Mihura son los autores que intentan una renovación del teatro de humor español, en una línea más conservadora encontramos a Alfonso Paso. ENRIQUE JARDIEL PONCELA Pretendía romper con las formas tradicionales de lo cómico, concentradas en lo verosímil, pero su propuesta dramática tuvo que suavizarse para poder representar. La novedad de Jardiel radica en el encadenamiento de situaciones inverosímiles y el empleo de un humorismo de raíz intelectual. Obras: Cuatro corazones con freno y marcha atrás, Un marido de ida y vuelta, Eloísa está debajo de un almendro y Los ladrones somos gente honrada. MIGUEL MIHURA Su vida estuvo ligada al espectáculo pues su padre era autor de libretos de zarzuela. En 1941 funda La Codorniz en la que colaboraron los mejores humoristas de ese tiempo. Es elegido miembro de la RAE en 1976 y muere un año después.
3 de 6 Tres sombreros de copa es su entrada en el teatro, tardó veinte años en estrenarse. Por su originalidad esta pieza supone una ruptura completa con el teatro cómico anterior. Desarrolla el tema de la libertad alcanzada y perdida. El protagonista es un joven ingenuo, Dionisio, que se aloja en un hotelito de provincias la víspera de su boda. A lo largo de la noche por su habitación pasa todo un elenco de personajes grotescos que lo introducen en un mundo que pone en entredicho valores como la fidelidad, el honor o las convenciones sociales. Mihura combina el humor trágico, la verdad profunda y el ridículo, y caricaturiza el miedo a contravenir las normas. Otras obras son Sublime decisión, A media luz los tres, La bella Dorotea... El humor de Mihura consiste en ridiculizar a los personajes y las acciones de la realidad inmediata, como puede advertirse en la crítica a la tontería y al esnobismo de El caso del señor vestido de violeta o en la caricatura de la vida española, en contraste con la parisina, en Ninette y un señor de Murcia. ALFONSO PASO Muestra una gran habilidad para enlazar y desenlazar la intriga, crear situaciones sorprendentes y manejar el diálogo. Su producción dramática puede dividirse en dos grupos: teatro social, Los pobrecitos, y teatro policiaco, Usted puede ser un asesino o Receta para un crimen. 11.2. EL REALISMO SOCIAL DE LOS AÑOS CINCUENTA: ANTONIO BUERO VALLEJO Y ALFONSO SASTRE TEATRO SOCIAL Antonio Buero Vallejo y Alfonso Sastre muestran en sus escritos su disconformidad. Son dos formas distintas de entender la protesta: política, en Sastre; social, en Buero Vallejo. En cuanto a Max Aub, el exilio, la cárcel y los campos de concentración dejan una profunda huella en su obra. ALFONSO SASTRE Tras unas primeras tentativas dramáticas su teatro de los años cincuenta muestra una insistente preocupación por las consecuencias que tiene un poder injusto sobre los individuos que lo sufren, y ello tanto en grandes ámbitos colectivos como en grupos humanos pequeños como la familia. Al tiempo el dramaturgo indaga en las diversas posibilidades de rebelión de los seres encolar esas formas de orden injusto y en los problemas éticos que la lucha cotidiana plantea a un revolucionario, por lo que en sus obras de esta época son habituales las consideraciones morales, filosóficas y hasta metafísicas. Las influencias son las del existencialismo francés (Camus y Sartre). Técnicamente su teatro de esta época se enmarca en los moldes realistas, aunque introduce novedades como la fragmentación en diversos cuadros o el carácter simbólico de algunos espacios, personajes o argumentos. De esta época son Guillermo Tell tiene los ojos tristes, Prólogo patético, El cubo de la basura el más conocido de sus dramas de esta época es Escuadra hacia la muerte, que desarrolla la tensa convivencia entre un cabo irónico y un grupo de soldados que a su mando tienen que llevar cabo una misión suicida, en esta obra Sastre muestra sus temas predilectos: la opresión, la rebelión, la culpa, la expiación. En los años sesenta su preocupación social se acentúa pero busca nuevos cauces dramáticos, la llamada tragedia compleja, que conjuga elementos de la tragedia clásica, elementos del esperpento de Valle-Inclán, y del teatro-documento de Peter Weiss. Conejo pretende la catarsis del espectador. En estas tragedias desaparecen los elementos melodramáticos para dar paso al humor, pero un humor que lleve al espectador a reconocerse en el mundo risible y grotesco representado en la escena, de modo que llegue al convencimiento de que es necesario cambiar ese mundo. La comicidad está tanto en el lenguaje como en las situaciones y en el diseño de los personajes. Otros rasgos de estas tragedias complejas son la
4 de 6 ironía, la fragmentación de las obras en múltiples cuadros, la ampliación de las acotaciones, las intervenciones del narrador, el lenguaje salpicado de expresiones coloquiales, el empleo de música y canciones, la proyección de películas, iluso de diapositivas, fotografías, carteles, grabaciones, juegos de luces Junto a esto el recurso del anacronismo distanciado en los dramas históricos, conectando la realidad del drama con el presente del espectador, por ejemplo en La sangre y la ceniza, aunque la que más éxito le granjeó fue La taberna fantástica. ANTONIO BUERO VALLEJO La Guerra Civil en la que combatió en el bando republicano deja una profunda huella en su vida, encarcelado y condenado a muerte, se le conmutó la pena en 1946 y quedó en libertad provisional. En su vida recibió numerosos premios entre ellos el Premio Cervantes. En 1949 estrena Historia de una escalera y con ella nace un teatro arraigado en la realidad inmediata, que va en busca de la verdad y pretende remover la conciencia española. La crítica suele dividir su producción en diversos periodos, a pesar de que el autor reivindicó en numerosas ocasiones la unidad radical de su teatro. Según el propio Buero el tema común que liga a toda su producción es la tragedia del individuo, analizada desde un punto de vista social y ético. Teatro de crítica social, en estas obras se analiza la sociedad española con todas sus injusticias, mentiras y violencias: o Historia de una escalera. Plantea la imposibilidad de algunos individuos de mejorar materialmente debido a la situación social y a la falta de voluntad. o Hoy es fiesta,dos temas estrechamente ligados,el de la esperanza y el del perdón. o Las cartas boca abajo. Plantea la situación de un matrimonio que convive a lo largo de veinte años bajo la mentira. o El tragaluz. Revive la trágica historia de una familia en la España franquista. Teatro simbolista. A través de la ceguera, Buero simboliza las limitaciones humanas en su drama En la ardiente oscuridad. El tema del misterio predomina en las tres obras de corte simbolista que son, La tejedora de los sueños, Irene o el tesoro o La fundación, obra que trata el tema de la represión política y la falta de libertad. Dramas históricos. Se incluyen en esta categoría obras en las que el trasfondo histórico es a menudo un pretexto para reflexionar sobre la realidad contemporánea: o Un soñador para un pueblo. Plasma el fracaso del marqués de Esquilache, ministro ilustrado que trató de modernizar España. o Las meninas. Refleja la ocultación de la verdad, la corrupción moral y la negación de la realidad. o El concierto de San Ovidio. Plantea una situación en la que afloran lo grotesco, la injusticia y la falta de ética.
5 de 6 11. 3. EL TEATRO DE LOS AÑOS SESENTA A 1975: TEATRO COMERCIAL, TEATRO SOCIAL, TEATRO EXPERIMENTAL (FERNANDO ARRABAL Y FRANCISCO NIEVA), TEATRO SIMBOLISTA Y TEATRO INDEPENDIENTE. EL TEATRO COMERCIAL ANTONIO GALA Ha cultivado todos los géneros. Su primera obra teatral es Los verdes campos del Edén, pieza en la que aparecen dos temas que serán recurrentes a lo largo de toda su producción: la frustración y la soledad. Otras obras son: Los buenos días perdidos o Anillos para una dama. Las obras de Gala se caracterizan por su tono poético, fácil simbología, presentación escénica convencional y cierta inclinación a lo didáctico o moralizante. ALEJANDRO CASONA Su teatro se puede clasificar en teatro pedagógico y teatro fantástico. Su habilidad en la creación de una atmósfera irreal y mágica a través del lenguaje poético se demuestra en La sirena varada, Los árboles mueren de pie y La dama del alba. En obras como Nuestra Natacha, Casona intenta comunicar determinadas ideas de índole pedagógica. EL TEATRO INDEPENDIENTE A la muerte de Franco existían numerosas agrupaciones teatrales no comerciales que reciben distintos nombres: Teatro amateur. Realizado por aficionados para un público minoritario. Teatro de cámara. Reduce drásticamente la expresión escénica: decorados mínimos, escritura depurada. Evita los efectos fáciles y la exhibición estelar. Teatro universitario. Teatro innovador y no comercial, que trata de transmitir un mensaje de crítica social. Teatro experimental independiente. Desarrolla la escenificación de obras marginadas y crea una escuela de actores que siguen el método Stanislavski, sistema de interpretación basado en la vivencia de las emociones, no es su mera representación. GRUPOS DE TEATRO INDEPENDIENTE Destacan los siguientes: Els Joglars. Su cabeza visible es Albert Boadella. Sus representaciones se basan en la parodia, en la ridiculización de los caracteres, tipos y situaciones. Los Goliardos. Nació en el ámbito universitario, con el ánimo de presentar el mejor teatro contemporáneo. Tábano. Tras experimentar con las formas innovadoras que estaban de moda en Europa, evoluciona hacia un teatro popular dirigido a la juventud y a las capas sociales más pobres. Comediants. Especializado en el teatro de calle en el que se requiere la participación del público. La Fura dels Baus. Juega con la improvisación y la incorporación del espectador a la función.
6 de 6 TEATRO SOCIAL Los motivos centrales son la injusticia social, la explotación del hombre... Los autores, más representativos son los siguientes: José María Rodríguez Méndez. La denuncia y la crítica social se representan en Los inocentes de la Moncloa y El círculo de tiza de Cartagena. Carlos Muñiz. Inicia su andadura en el teatro realista con El grillo y El precio de los sueños y evoluciona hacia el neoexpresionismo, El tintero. José Martín Recuerda. Sitúa sus dramas en la Andalucía trágica y violenta. La protesta caracteriza sus obras Las salvajes en Puente San Gil, Las arrecogías del beaterio de Santa María Egipciaca. TEATRO SIMBÓLICO Atribuye a los personajes un valor simbólico y los hace actuar como nexo entre las diferentes acciones. Se distinguen dos corrientes: El teatro hermético, representado por José Ruibal y Manuel Martínez Mediero. El teatro del primero se caracteriza por los dobles sentidos y la simbología animal. Mediero evoluciona de un teatro a lo Jardiel Poncela a un teatro alegórico. TEATRO EXPERIMENTAL El teatro experimental. Sus representantes son Luis Matilla, Jerónimo López Pozo, Diego Salvador y sobre todo: Fernando Arrabal. Escribió diversas obras de teatro que revelaban su relaciono con los principios artísticos promovidos por los postistas. Imaginación, antirrealismo, elementos surrealistas, lenguaje ingenuo e infantil, ruptura con la lógica son características de estas primeras obras de Arrabal: Pic-nic, El triciclo, El cementerio de automóviles Sus obras posteriores se encuadran dentro de los que denominó teatro pánico, que recoge ingredientes del teatro del absurdo, y de las vanguardias como dadaísmo o surrealismo, con el propósito de crear un teatro total que exalta la libertad creadora y persigue la provocación y el escándalo del espectador. Con el tiempo introduce en sus obras elementos expresionistas, formas propias del vodevil y de la revista musical, situaciones eróticas y otros recursos que buscan la ruptura con lo convencional y la vulneración de lo considerado normal, prohibido o tabú. Tampoco falta en sus obras el compromiso ético o la postura ideológica como en Oye, Patria, mi aflicción. En los años sesenta una serie de autores dramáticos escriben obras en las que se plantean la identidad del hecho teatral. Dos son los más destacados: Francisco Nieva. Es probablemente el más importante de los dramaturgos españoles experimentales de la segunda mitad de siglo. Ligado al grupo literario de los positivas de fines de los cuarenta principios de los cincuenta, su teatro se mueve en la senda de lo surrealista, lo onírico, lo fantástico y lo imaginativo. Se trata, por tanto, de un teatro antirracista en el que cobran relieve la escenografía, el vesturario, el maquillaje, las luces, el sonido, etc. El alejamiento de los gustos del público hizo que resultara imposible la representación de este tipo de teatro hasta los años setenta, aunque el autor llevara escribiendo desde mucho antes. Algunos títulos de su extensa obra son: Sombra y quimera de Larra, La señora tártara Luis Riaza. Pone en entredicho la validez y autenticidad de las nuevas fórmulas dramáticas, sus obras Las jaulas, La noche de los cerdos.