EL CORAZÓN DEL NUEVO TESTAMENTO: Ministrar a Nuestros Hijos (Domingo 12 de abril de 2015) Pastor: Carlos Nanetti Oración: Tú eres el único digno. Ayúdanos a vivir de tal manera que podamos agradarte cada día. Señor, que no perdamos de vista el llamamiento, sé Tú santo en nosotros. Ayúdanos Señor, en el nombre de Jesús. Amén. Hemos estado hablando últimamente acerca de la mente de Cristo y la mente de Adán. Y hemos visto que la mente de Cristo puede derrotar a la mente de Adán. La caída de Adán ha sido un asunto de la mente, que fue cautivada y engañada como dice en Corintios. Por lo tanto necesitamos la transformación de nuestra mente con desesperación. No es suficiente el corazón convertido, también necesitamos la mente transformada. Este es el problema actual con el cristianismo moderno: carece de una mente transformada. Muchos representantes de la iglesia moderna hoy en día viven de manera incorrecta debido a que tienen una mente no renovada. Esto nos ha hecho hacer cosas muy extrañas, que no están en las Escrituras. Por lo tanto debemos aprender a pensar como Cristo piensa. Dios piensa en propósito eterno mientras nosotros en bien y en mal desde que Adán y Eva fueron echados del paraíso por comer de este árbol. Tenemos el problema de pensar, ya siendo cristianos, en lo que está bien y en lo que está mal; cuando en realidad la vida cristiana se trata de Su Voluntad. También hemos visto los cautiverios de Egipto, Babilonia y Asiria. Estos cautiverios nos han mostrado lo que Dios piensa de la mente carnal y como quiere cortarla, para mostrarnos Su mente. Hemos visto como los cautiverios de hoy no son físicos sino de la mente. Debemos ser libres de estos cautiverios y aprender a pensar como Él piensa. Él nos ha hecho libres. La Palabra nos dice que conoceremos la verdad y la verdad nos hará libre (Juan 8:32), y que si el Hijo nos libertare, seremos verdaderamente libres (Juan 8:36). Entonces debemos crecer día a día en la libertad del Espíritu, que es la santidad, una vida apartada para Él. Esta libertad debe darse en dos grandes áreas de nuestra vida: en el corazón y en la mente. Romanos 9:10-11 Y no sólo esto, sino también Rebeca cuando concibió de uno, de Isaac nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían obrado aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no en virtud de obras, sino de Aquel que llama) Este versículo nos muestra que no se trata de hacer bien o mal sino de cumplir el propósito. Adán quiere enseñarles a los hijos su manera de pensar en contra de Dios, y lo hace a través de su influencia en el sistema educativo. Los hijos son el blanco de Egipto, Babilonia y de la forma de pensar de Adán. El hecho de que seas un cristiano fiel no significa que tu hijo no sea blanco para que este pensamiento le sea injertado en su mente. Estás orando por el esposo de tu hija? Debes hacer esto desde que está en tu vientre. Si no lo haces estás arriesgando el destino de tu hija y tus nietos. La consecuencia puede ser que tu hija se case con un incrédulo, y que tus nietos aprendan la mente de Adán. Entonces la descendencia de tu hija será mezclada ya que con su esposo se hacen uno. Por lo tanto, les ruego en el nombre de Jesús que oren por sus hijos desde que estén siendo engendrados, en su niñez y en su juventud. Los hombres del mundo son muy astutos, así nos dice la Palabra. Y saben que decir a las hijas de los cristianos. Ellas son muy hermosas, son la codicia de la serpiente. Yo estoy convencido, y esto está escrito en la Palabra, que la serpiente se ha hecho dragón. Y la serpiente se alimenta de las almas de los hombres. Lo que tiene una hija de Dios es la 1
belleza de Cristo, y la serpiente ama comer la belleza de Cristo. El porcentaje de jóvenes cristianos cuya fe cae al entrar en la universidad es alarmante. Su fe cae por dos razones. La primera es porque no son enseñados debidamente. Es decir que carecen de fundamento, especialmente en el área de la creación. La segunda razón es porque la responsabilidad de discipular no es correctamente asignada. La mente de Adán va a enfrentar a tus hijos y si ellos no están debidamente preparados, su fe caerá. Si fueron discipulados de la manera correcta, no tendrán la fortaleza espiritual para decirle no a Adán. Daniel 1:1-8 En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino Nabucodonosor rey de Babilonia a Jerusalén, y la sitió. Y el Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de los utensilios de la casa de Dios; y los trajo a tierra de Sinar, a la casa de su dios, y colocó los utensilios en la casa del tesoro de su dios. Y dijo el rey a Aspenaz, jefe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes, muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen parecer, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos. Y les señaló el rey ración para cada día, de la provisión de la comida del rey, y del vino que él bebía; y que los criase tres años, para que al fin de ellos se presentasen delante del rey. Entre éstos estaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los hijos de Judá. A éstos el jefe de los eunucos puso nombres: puso a Daniel, Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abed-nego. Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse. Este es el plan del enemigo cuando tus hijos van a la universidad: enseñarles el pensamiento del mundo, la mente de Adán. Tu hijo sabe pararse y decirle que no a la lengua de los caldeos? Conoce tu hijo su identidad a tal punto que puede decir no a la mente de Adán? Si tu hijo no está preparado, el rey Nabucodonosor le cambiará la identidad y la comida. Para evitar esto desde pequeño debe conocer su identidad y la comida correcta le debe ser dada. Saben tus hijos el relato de Génesis? Saben de lo absurdo de la teoría de la evolución? Saben porque giran los planetas en un sentido y otros en sentido contrario? Saben porque han hecho las patas tan largas de la nave que fue a la luna, pensando que tenía muchos más años? Existen tantos argumentos sencillos que destruyen las mentiras que contradicen la teoría del creacionismo. Deuteronomio 6:5-9 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas. Estás hablando con tus hijos acerca de la Palabra del Señor cuando te levantas? Les hablas cuando vuelven del colegio? Estas discipulando a tus hijos? Esta no es tarea de la escuela dominical. En la iglesia primitiva se reunían en familias, todos juntos. La iglesia ayuda a discipular a tus hijos, pero la responsabilidad es de los padres. No se necesita tener un servicio especial diario para discipular niños. Es suficiente con abrir la Escrituras y explicarles un versículo, o leerles una historia. También debes orar con ellos y día a día llevarlos ante el Señor en oración. Isaías 10:12-14 Pero acontecerá que después que el Señor haya acabado toda su obra en el 2
monte de Sion y en Jerusalén, castigará el fruto de la soberbia del corazón del rey de Asiria, y la gloria de la altivez de sus ojos. Porque dijo: Con el poder de mi mano lo he hecho, y con mi sabiduría, porque he sido prudente; quité los territorios de los pueblos, y saqueé sus tesoros, y derribé como valientes a los que estaban sentados; y halló mi mano como nido las riquezas de los pueblos; y como se recogen los huevos abandonados, así me apoderé yo de toda la tierra; y no hubo quien moviese ala, ni abriese boca y graznase. Dios tratará con el rey de Asiria cuando haya acabado toda su obra en Sión y en Jerusalén. Mientras tanto este rey, quien es figura de Satanás no está acabado. Cuál es el plan de Satanás para destruir al mundo? Comerse los huevos. Satanás quiere comer a nuestros hijos para destruir la tierra. Estas graznando a la serpiente? Matando al alacrán? Estás moviendo los vientos? Recuerdo una mujer muy amada que conocimos con mi esposa cuando éramos nuevos en la vida cristiana. Ella fue una madre para nosotros. Después de muchos años volvimos a verla y ella nos comentó de un pesar que tenía por sus hijos. El no haber orado por sus esposos y esposas tuvo como consecuencia que se casen con incrédulos. La serpiente quiere los huevos. Cómo procede la serpiente? La porción que acabamos de citar en Isaías dice que fue prudente. Ser prudente significa hacer una separación mental, maquinar por separado. La serpiente maquina hijo por hijo, semilla por semilla, familia tras familia. Por lo tanto, nuestros hijos son el precioso tesoro que debemos cuidar. La iglesia no está para discipular a los hijos pero son los padres quienes tienen la responsabilidad y deben hacer su parte. No es algo complicado de hacer. Debes hacerlo desde que tus hijos están en el vientre. Isaías 55:1 A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche. La mente de Adán dice que necesitamos mucho dinero para criar a nuestros hijos. Por lo tanto, pasamos mucho tiempo haciendo dinero, pero no tenemos tiempo para comprar lo que se compra sin dinero: la Palabra, la oración el Espíritu. La Palabra sabe es la leche. El vino es el gozo de la salvación. Estás muy ocupado en darles cosas que se compran con dinero y no ocupado comprando vino y leche para tu familia? Esta es una trampa. Le damos mucho énfasis al trabajo. Seamos responsables para trabajar, pero lo primero debemos comprar vino y leche para nuestros hijos. Hebreos 3:1 Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús; El llamamiento celestial no es solamente para los siervos de Dios, es decir, para los pastores o apóstoles. Este llamamiento es para todos. Sabemos ir a los lugares celestes? Somos llamados a vivir en los lugares celestes, no dice acaso Hebreos que nos acerquemos confiadamente al trono de gracia? Los niños no saben cómo actúa la serpiente, son indefensos y no pueden protegerse. Quién traerá la gracia para ellos? Los padres. Dios tiene una responsabilidad y nosotros tenemos otra. El Señor no puede hacer nuestra parte. Marcos 12:29 Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. La palabra oye en el hebreo tiene un significado muy fuerte. Para nosotros es simplemente oír, pero en el hebreo significa ponerse bajo la vara del pastor. Amas tanto al Señor que estarías dispuesto a cambiar tus pensamientos por Sus pensamientos, aunque 3
estos te molesten? Dios nos lleva a lugares que no queremos y hacer cosas que no queremos. Pero como amamos a Dios hacemos lo que Él quiere que hagamos. Le amas tanto que estás dispuesto a rendir tu forma de pensar, y tu forma de verte, para agradarle? Esta es la pregunta más importante el día de hoy: amas a Dios tanto que estás dispuesto a decirle sí cuando Dios te dice que cortes algo que amas. Le amas tanto como para orar y velar día a día por tus hijos. En Juan se encuentra más de 25 veces la palabra Yo Soy. Esto significa que está hablando el Gran Yo Soy, el consejo del Soberano. Juan 15:1-2 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. Tener bienes no es llevar fruto. Llevar fruto es orar diariamente por tus hijos, graznar a la serpiente, hacer de tus hijos verdaderos discípulos. Juan 15:3-16 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado. Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos. Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. Este es el pensamiento de Dios acerca de Su hijo. Israel pensaba que era la vid del Señor. La vid es la que tiene la vida de Dios, la que se expande, y necesita cuidado especial. La vid produce uvas y de las uvas se obtiene el vino. El orgullo de Israel era ser la vid. Jesús dice que toda la plenitud está en Él mismo. Todo esto quizá no entraba en la mente de ellos. Les costó mucho para entender que Él era la vid. El paradigma de sus mentes fue un sufrimiento para ellos. Qué tenemos entre nosotros, en nuestras mentes, que no están conforme al pensamiento de Dios y no nos dejan dar fruto? De Él es la vid. Tengo en casa una vid que me regalaron. Esta planta crece, crece y crece. No para de crecer y constantemente necesita ser podada. Así es la vid, crece mucho; pero Dios quiere cortar los pámpanos que no dan fruto. Qué pámpanos que hay en nosotros no le permitimos a Dios que corte? A Dios no le gustan los pámpanos, sino el fruto. Por lo tanto debemos estar dispuestos a que el Señor corte aquellos pámpanos que no le agradan. Los pámpanos son instrumentos pero deben ser cortados. Si dejas crecer los pámpanos estos crecerán porque es la naturaleza de la vida. Y si no cortas el fruto se va debilitando hasta que no sirve, y por lo tanto no permanece. Es una necesidad cortar los pámpanos. Cuando cortas 4
los pámpanos de la vid, se ve feo. El pámpano que menos nos gusta que corte el Señor es la reputación. Nos justificamos para proteger nuestra reputación. Amamos tanto nuestra reputación. No clavo Cristo la suya en la cruz? Cuando no dejamos que corte este pámpano, no se produce más fruto. También amamos mucha nuestra cultura. Y Dios nos dice: de esta forma no es, Yo tengo otra cultura, déjame cortar este pámpano. Otro pámpano que nos resistimos que el Señor corte, es nuestra libertad. La vid necesita sal para dar buen fruto. En los viñedos se pueden ver vides torcidas y feas, pero con un fruto delicioso. Qué queremos? Nuestra propia belleza? Amamos las obras, el vernos bien, y que nos aplaudan. En el verdadero cristianismo siempre hay persecución. Amado Padre gracias por este día y este tiempo. Ayúdanos a meditar. Háblanos Señor. Háblanos, háblanos, por favor Dios. Una cosa es oír una predica, pero ahora háblanos Tú con la Palabra en el nombre de Jesús. Amén. 5