PRIMER DÍA: LAS RAÍCES DE DON BOSCO DEPARTAMENTO DE PASTORAL La próxima semana celebraremos la fiesta de Don Bosco. Por ello, vamos a dedicar estos días a su figura para recordar los motivos que nos animan a celebrar su vida por todo lo alto en cada casa salesiana. Puesto que el lema de este año es Crece la vida, os propongo imaginar: si Don Bosco fuera un árbol qué tipo de árbol sería? Se os ocurren ideas? Podría ser un árbol de gran tronco, muchas ramas y muy altas, capaz de vivir muchos años y que no deja indiferente a nadie. Yo lo imagino como un roble. Para que un árbol sea así, debe de tener unas raíces también grandes y profundas. Cuáles fueron las raíces de Don Bosco? Quién le ayudó a dar sus primeros pasos? Mamá Margarita, su madre, fue la figura clave en la educación de Don Bosco. Ella inculcó a su hijo los valores que después él enseñaría a sus muchachos y que los educadores de este colegio os transmitimos a vosotros: - amor sin condiciones a los demás, especialmente a los más débiles; - esfuerzo y sacrificio en cada proyecto o tarea que emprendemos; - y la convicción de que todo es posible cuando ponemos nuestra vida en las manos de Dios y confiamos en él. Don Bosco dice que aprendió a rezar en las rodillas de su madre. Con palabras muy sencillas, les hablaba de Dios. Y la lección se prolongó mucho más allá de su infancia. Cuando su hijo era ya sacerdote, le dijo un día: " Vosotros los sacerdotes. Estudiáis mucho! Sabéis teología, pero la madre también sabe cosas. Sabe que debéis rezar! " Mamá Margarita ayudó a Don Bosco a crecer: mediaba entre él y sus hermanos, le animaba a estudiar, le apoyó en su sueño de convertirse en sacerdote y, una vez que Don Bosco vio claro que su misión sería ayudar a los jóvenes que vagaban por Turín a tener una vida mejor, lejos de la cárcel, aceptó acompañarle y convertirse en la madre de esos jóvenes. A pesar de que a veces era muy difícil por el comportamiento de los chavales! Vídeo propuesto sobre la relación de Don Bosco y su madre: http://www.youtube.com/watch?v=hv4re0dvgai - Quiénes te han ayudado a crecer? qué te han enseñado? Trae la imagen de tus padres que ha acompañado tus pasos desde que naciste. Agradécele a Dios todo lo que ellos hacen, con amor, por ti. PADRENUESTRO
SEGUNDO DÍA: EL TRONCO (FORMACIÓN) DE DON BOSCO Aquéllos y aquéllas que lleváis muchos años en el colegio, recordaréis que Juan Bosco era un soñador: se marcaba siempre metas altas. Para un campesino pobre, de familia analfabeta como él, convertirse en sacerdote era una meta muy alta. Él lo tuvo claro desde muy pequeño: veía a los curas de los pueblos y se daba cuenta de que solo trataba con los adultos, no prestaban atención a los jóvenes. Él quería ser un sacerdote diferente y, con esa idea, se propuso formarse para alcanzar ese sueño. Juan, cuando tiene catorce años, conoce a don Calosso, viejo párroco de un pueblecito vecino. Encuentra en él a un buen amigo del alma, aprende con él a a sacar provecho de los sacramentos de la Eucaristía y de la Reconciliación, y a hacer cada día un rato de oración personal. Más tarde, Juan se trasladó primero a Castelnuovo y después a Chieri, y mientras trabaja como aprendiz de diferentes oficios, asiste a clase con compañeros más jóvenes que él. Su memoria y su despierta inteligencia hacen que adelante rápidamente y, en pocos años, adquiere el nivel propio de su edad. Durante su estancia en Chieri, Juan se convierte en el líder de sus compañeros de escuela y de diversión, gracia a su simpatía, su facilidad con el estudio y su honestidad. Funda con ellos la Sociedad de la Alegría, que tiene por base estas dos reglas: 1. evitar todo aquello que no es conforme al Evangelio 2. responsabilidad en el estudio y en la vida cristiana. Una vez ordenado sacerdote, llegó el momento de decidir dónde trabajaría, cuál sería su misión. Otro sacerdote, su amigo y confesor, José Cafasso, le ayudó a tomar la decisión: llevó a Juan a las cárceles, donde quedó impactado por la cantidad de chicos de 12 a 18 años que había en ellas. Al ver las condiciones en las que vivían, Don Bosco se preguntó: Quién sabe si estos muchachos, de encontrar un amigo que les ayudare, les enseñara y les formara cristianamente, no se verían libres de esta vida?. Eso fue lo que se propuso ser para ellos: su amigo, su maestro, su padre; ésa fue la base firme de su vida. - Qué proyectos o ideas te ayudan a crecer? Sirven para ayudar a los demás? Pidamos hoy que Dios nos ilumine para marcar grandes metas que nos hagan crecer y que sepamos escuchar los consejos de las personas que nos conocen. PADRENUESTRO
TERCER DÍA: LAS RAMAS (COLABORADORES) DE DON BOSCO Don Bosco no hubiera podido realizar solo su tarea: su misión era demasiado grande como para llevarla a cabo él solo. Recuerdas cómo empezó? Según él mismo cuenta, comenzó con un Avemaría. El día de la fiesta de la Inmaculada de 1841, estaba preparándose para celebrar la misa en la iglesia de san Francisco, cuando el sacristán, viendo a un chico que pasaba por allí le invitó a que ayudara como monaguillo en aquella celebración. El muchacho se excusó porque no sabía ayudar en misa. Enfadado el sacristán lo echó fuera a patadas. Don Bosco, dolido por la escena, llamó al chico, que se llamaba Bartolomé Garelli, y le invitó a que asistiera a la celebración. Después habló con él y descubrió que el muchacho tenía voluntad de aprender, pero debido a su escasa formación, sentía vergüenza. Le invitó a volver al domingo siguiente y se comprometió a enseñarle a leer, escribir y a conocer a Jesús. A este primer muchacho, se le unieron al domingo siguiente otros, y después muchos más. Los jóvenes asistían a misa y, después, se iban a un prado para disfrutar de un tiempo de juegos, canciones, bailes y concluir con una oración. Así era el Oratorio de San Francisco de Sales, algo parecido a nuestro Nuevas Rutas. En pocos años, el Oratorio sin lugar de encuentro fijo, se convirtió en un proyecto que daba formación humana y cristiana y cobijo a más de mil jóvenes. Desde los inicios del Oratorio, Don Bosco buscó colaboradores que le ayudaran a llegar al corazón de los chicos y atender sus necesidades. Entre sus primeros ayudantes cuenta Don Bosco, con un carpintero, un comerciante, un pastelero, un tipógrafo, un quincallero, un joyero e incluso aristócratas le ayudaban a enseñar el catecismo. Él les llamaba sus cooperadores. Con el tiempo, hubo jóvenes que se sintieron atraídos por el estilo de vida de Don Bosco y su misión que decidieron hacerse sacerdotes y acompañarle. Con ellos fundó la Congregación Salesiana. En ella, tenían cabida esas otras personas que, sin ser sacerdotes colaboraban con él: los cooperadores. Y, como en aquellos tiempos, chicos y chicas recibían educación por separado, buscó a una mujer que compartiera sus principios educativos y trabajase con las chicas: María Mazzarello. Don Bosco solía decir que Una cuerdecilla sola, es débil, pero unidla a otras dos y veréis qué difícil es romperla.
- Soy capaz de trabajar en equipo? Logro mejores resultados así? - Pido ayuda cuando la necesito? Valoro la ayuda que me ofrecen? Don Bosco fue una persona humilde, capaz de reconocer que sus éxitos no hubieran sido posible sin todos esos brazos, esas ramas que estuvieron a su lado. También decía que todo se lo debía a María Auxiliadora, pues sentía que acompañaba cada uno de sus pasos. Recémosle a Ella hoy para que nos ayude a ser humildes y agradecidos como Don Bosco. AVEMARÍA. CUARTO DÍA: LAS HOJAS Y LOS FRUTOS El trabajo de Don Bosco y sus colaboradores dio frutos: lograron buscar trabajo a miles de jóvenes en Turín, consiguiendo para ellos unas buenas condiciones y logrando que evitaran convertirse en ladrones y acabaran en la cárcel. Entre esos muchachos, muchos de ellos, decidieron seguir su ejemplo con otros muchachos y se convirtieron en salesianos. Los salesianos se extendieron por otras ciudades de Italia y llegaron a Francia y España, lugares que, Don Bosco, visitó personalmente. En sus sueños, Juan Bosco imaginaba llevar su labor a otros continentes y así, envió salesianos a Argentina, Uruguay, Brasil, Chile y Ecuador. Hoy en día, los salesianos trabajan en 131 países donde, además de escuelas desarrollan su labor en Centros Juveniles, Colegios, Escuelas de Formación Profesional, Parroquias, Centros de asistencia a marginados, Escuelas de Formación del Profesorado, Universidades, Residencias, Misiones, centros de comunicación social y otras presencias al servicio de la juventud. Don Bosco cumplió su sueño, el sueño de Dios para su vida y, gracias a ese sueño, ayudó a millones de personas. Nosotros y nosotras, somos un fruto de ese sueño. Estos días, en el colegio, tenemos un proyecto con el que ayudar a crecer a un chico guineano de 8 años, Luis Javier, recordáis? Si cada uno de nosotros aporta al menos 50 céntimos, reuniremos 365 euros que garanticen la educación y unas condiciones de vida dignas durante todo un año. Te animas? Ayudas a crecer a Luis Javier? En portería encontraréis un árbol con el que recordar este proyecto en el que nos embarcamos todo el colegio. Por cada aportación realizada, colocaremos una hoja en el árbol de Luis Javier.
- Qué es lo que más te gusta de Don Bosco? Has aprendido algo al recordar su historia? - Puedes ayudar a crecer a otros? Cómo? Padre, te damos las gracias por conocer personas que, como Don Bosco, se esforzaron en ayudar la juventud. Te damos las gracias, Padre bueno, porque también Don Bosco cuenta hoy con nosotros, para seguir haciendo de nuestra escuela un lugar donde todos nos sintamos y aprendamos a mirar a nuestro alrededor y poner en marcha soluciones con las que mejorar nuestro mundo. Gracias, Señor.