LAS ELECCIONES AUTONÓMICAS DE 2003 EN CANARIAS Francesc Pallarés Jordi Muñoz El marco político Tras las elecciones de 1999, ningún partido obtuvo la mayoría absoluta en el parlamento canario, por lo que se formó un gobierno de coalición formado por el grupo mayoritario en la cámara (Coalición Canaria) y el Partido Popular, reeditando la fórmula que había estado vigente en la anterior legislatura. Sin embargo, esta legislatura no ha sido tan estable como la anterior, y en esta ocasión las diferencias entre los socios de gobierno han provocado importantes crisis políticas en el archipiélago, especialmente la que se derivó del caso Tendaya, un escándalo de corrupción que afecto a CC y que generó una división en el seno del PP entre los diputados leales al partido y los que formaban parte del gobierno, que votaron junto a CC. La fuerte crisis que esto originó se cerró el 25 de enero de 2001 con la firma de un nuevo Pacto de Estabilidad en virtud del cual se formó un gobierno monocolor de CC con el apoyo externo del PP (a cambio del apoyo que CC presta al PP a nivel estatal). De esta manera, CC optó por seguir sus acuerdos con el PP, rechazando las ofertas socialistas de formar una nueva coalición de gobierno. Junto a esta crisis de gobierno, durante la legislatura se han vivido otros momentos de inestabilidad, vinculados la moción de censura presentada por el PSC-PSOE en ocasión del debate sobre el estado de la nacionalidad de 2001; a supuestos casos de corrupción, a crisis políticas en municipios relevantes (como es el caso de San Bartolomé de Tirajana) o a conflictos como la huelga de médicos de atención primaria y especialidades del Servicio Canario de Salud (SCS), que duró ocho meses. 1
Las fuerzas políticas y la campaña Coalición Canaria, partido que ha gobernado Canarias los últimos años gracias a acuerdos de diversa índole con el PP, se presenta en esta ocasión con el objetivo de conseguir la mayoría absoluta en el parlamento de Canarias, aunque reconoce la dificultad de lograr este objetivo, y no se pronuncia de antemano sobre su política de pactos postelectorales. Encabeza la lista Adán Martín, hasta la fecha vicepresidente del gobierno, mientras que el que ha sido en esta última legislatura presidente del gobierno canario, Roman Rodríguez, opta en esta ocasión a la vicepresidencia y a la Consejería de Economía y Hacienda. CC hace una campaña basada en la defensa de su actuación en el gobierno, y en los réditos de su colaboración con el PP en el Congreso de los Diputados, en Madrid. Critica al PP por la inestabilidad generada durante la pasada legislatura y por su dependencia de Madrid, y especialmente al PSOE por su gestión en los años en que estuvo en el gobierno autonómico. Sus ejes programáticos son la creación de la policía autonómica (cuestión que la enfrenta al PP) y el control de la inmigración, la ampliación del autogobierno, el desarrollo sostenible y las relaciones con Europa, especialmente por lo que se refiere a la preservación de sus privilegios como región ultraperiférica en la nueva constitución europea. El PP, por su parte, asume el objetivo de ganar las elecciones con mayoría absoluta para conseguir la presidencia del archipiélago. Para ello, tiene como candidato a José Manuel Soria, que abandonará la Alcaldía de Las Palmas, que ocupa desde 1995, y, en caso de cumplirse sus objetivos, haría "doblete" al encabezar también la lista al Cabildo de Gran Canaria por lo que renunciaría a la presidencia del Cabildo, dada la incompatibilidad legal de ambos cargos. 2
El PP se presenta ante los electores como un partido cohesionado, que ha superado sus divisiones internas y preparado para gobernar el archipiélago. Critica duramente la gestión de CC en el gobierno autonómico (especialmente desde que salieron del gobierno) y defiende la conveniencia de una mayoría absoluta del PP como garantía de estabilidad para Canarias. Su campaña se basa en resaltar los logros de la gestión del PP allá donde ha gobernado, y especialmente en el gobierno central. Se destaca el incremento de las inversiones en Canarias con los gobiernos del PP y se hace especial hincapié en la necesidad de trasladar a la esfera autonómica las políticas del gobierno del PP, especialmente en materia de empleo y política fiscal. Se enfrenta a CC por la cuestión de la policía autonómica y pide un mayor control de la inmigración. El PSOE, por su parte, aspira a crecer electoralmente y a situarse como primera fuerza del archipiélago, lo que le habría de permitir gobernar en minoría. Acusa al PP y CC de tener ya un acuerdo de gobierno preparado para después de las elecciones, por lo que se presenta como única alternativa a la actual gestión del gobierno canario. El candidato del PSC-PSOE a la presidencia autonómica es Juan Carlos Alemán, secretario regional del PSC-PSOE, diputado desde 1995 y portavoz de su grupo en el Cabildo tinerfeño. A parte de la crítica al eje PP-CC, el PSC-PSOE tiene como tema prioritario de su campaña la mejora del sistema sanitario canario (y en especial la reducción de las listas de espera), que ha sido objeto de importantes polémicas y conflictos como la larga huelga de médicos de 2001. Otros aspectos destacados de su campaña son las políticas a favor del pequeño comercio, o la petición de referéndums autonómicos para decidir sobre aspectos como la posible extracción de petróleo de las aguas del archipiélago. El acento en las políticas sociales es una de las características esenciales de la campaña socialista en Canarias. 3
Los resultados La participación La participación electoral sigue siendo baja en Canarias (66,6%), a pesar de que el contexto general de movilización y repunte de la participación ha afectado también al archipiélago y la abstención en esta ocasión ha caído más de 5 puntos respecto a la registrada en 1999 y se aproxima más a los niveles que, hasta el año 2000, habían sido habituales en las elecciones generales (alrededor del 30-32%), mientras que queda significativamente por debajo de los niveles tradicionalmente registrados en citas autonómicas (que solían oscilar entre el 35 y el 38%). En términos absolutos, este incremento de la participación, junto a un ligero incremento del censo electoral, se traduce en un total de 81.000 votantes más que en 1999. Por provincias, se mantiene la pauta tradicional, siendo Tenerife ligeramente más abstencionista que Las Palmas (un 1,9% más). En Las Palmas el descenso de la abstención con respecto a 1999 ha sido de casi 6 puntos mientras que en Tenerife este se ha situado en los 5,05 puntos. Por islas, Lanzarote sigue como la más abstencionista (con un 41,3%), mientras que en esta ocasión la más participativa ya no es, como tradicionalmente había ocurrido, ni El Hierro ni Fuerteventura, sino Gran Canaria, donde un fuerte incremento de la participación (de 6,65 puntos) ha situado la abstención en un 31,1%, frente al 33,1 de El Hierro o el 35,95 de Fuerteventura, que destaca por ser la única isla en la que la abstención no se ha reducido respecto a 1999, sino que incluso ha subido alguna décima. Canarias: Elecciones autonómicas de 1999 Resultados 2003 Dif. 03-99 Dif. 03-00 Participación 66,61% 5,52 5,99 % s/voto Diputados PP 30,44 3,80-10,89 17 (+2) PSOE 25,28 1,66 3,31 17 (-2) IU 1,31-1,43-1,11 0 (=) CC 32,72-4,15 3,02 23 (-1) FNC 4,80 1,38 5,99 3(+3) 4
La orientación del voto CC repite como fuerza más votada en Canarias, con 298.000 votos, repite como fuerza más votada en el archipiélago, a pesar del retroceso de más de 4 puntos experimentado con respecto a 1999. Esto parece indicar el techo de CC, que en 1999 obtuvo su mejor resultado y que en esta ocasión no ha logrado repetir. Este retroceso se produce a pesar de la incorporación de la Agrupación Herreña Independiente en CC. La AHÍ, primera fuerza en El Hierro, a pesar de representar pocos votos a nivel absoluto, es una fuerza con una cierta importancia en la política canaria, dado que el especial sistema electoral canario le permitía tener representación parlamentaria (en la pasada legislatura obtuvo 2 escaños con un 0,3% de los votos totales). De nuevo es en la provincia de Tenerife donde CC obtiene sus mejores resultados (44,12%). La distancia de resultados entre una y otra provincia se ha agudizado, puesto que el retroceso de CC se concentra en la provincia de Las Palmas, donde pierde 9,6 puntos y se queda en un 21,7%; mientras que en la de Tenerife avanza dos puntos porcentuales con respecto a 1999. Como segunda fuerza se queda el PP, que obtiene el 30,6% de los votos logrando recuperar prácticamente los 4 puntos perdidos en 1999 (recupera 3,8 puntos porcentuales). Esto, unido al ya mencionado retroceso de CC, sitúa la distancia entre ambas formaciones en tan solo 1,7 puntos (aproximadamente 16.000 votos). La distribución territorial del voto popular sigue su pauta tradicional: los mejores resultados los obtiene en la provincia de Las Palmas, y especialmente en Gran Canaria. Esta pauta se ha visto agudizada en esta ocasión porque el avance del PP se ha concentrado esencialmente en este territorio, en el que gana 7,25 puntos, mientras que en la provincia de Tenerife sufre una ligera pérdida de porcentaje de voto (-0,25%). En Gran Canaria, el PP obtiene sus mejores resultados, con el 47,3% de los votos (más de 7 puntos más que en 1999) mientras que el peor resultado para los populares es el registrado en La Gomera, donde obtienen el 7,73% (3 puntos menos que en 1999). 5
El PSOE se mantiene en tercera posición, con el 25,3% de los votos (233.353 votos), lo que supone un ligero avance de 1,66 puntos con respecto a 1999 pero dado el avance del PP la distancia entre ambas fuerzas ha crecido en esta ocasión, pasando de 3 a casi 5 puntos. Este resultado parece confirmar que el PSOE ha parado la fuerte tendencia descendente que venía experimentando en Canarias desde principios de los años noventa, aunque sigue sin mostrarse en disposición de revertir totalmente la tendencia y recuperar el terreno perdido (recordemos que desde 1982 hasta 1993, el PSOE fue la primera fuerza en el archipiélago). Por provincias, se mantiene la mejor implantación en Tenerife (30,39%) que en Las Palmas (20,8%), mientras que por islas los resultados oscilan entre el 20,5 de Gran Canaria y el 55% de La Gomera (tradicionalmente estas han sido las islas donde el PSOE ha obtenido sus peores y mejores resultados respectivamente). El resto de islas se mueven entre el 21 y el 30% aproximadamente. Entre las otras fuerzas, destacar que en Canarias IU no ha conseguido aún revertir su progresiva pérdida de apoyos y en esta ocasión vuelve a perder la mitad de sus votos, quedando en 11.785 votos, que suponen un 1,28% de los sufragios. El FNC recupera posiciones, llega al 6,14% de los votos y consigue 3 escaños, todos ellos pertenecientes al PIL de Dimas Martín. 6
CANARIAS: Evolución electoral 1979-2003 60 % s/votantes 50 40 30 20 10 AP/PP UCD/ CDS PSOE PCE/IU AIC/CC 0 G79 G82 A83 G86 A87 G89 A91 G93 A95 G96 A99 G00 A03 El nivel institucional CC gana las elecciones y obtiene 23 diputados (-1). Así pues, sufre un desgaste mínimo pero queda lejos de la mayoría absoluta. El PP, por su parte, gana dos escaños y se queda en 17, aún lejos de la primera fuerza. Empatado a escaños con el PP se sitúa el PSOE, que con 17 escaños, pierde dos respecto a los anteriores comicios. La novedad es la entrada de la Federación Nacionalista Canaria en la cámara, con 3 escaños (+3), todos ellos obtenidos en Lanzarote por el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL) liderado por Dimas Martín y que en esta ocasión sí que cumple los requisitos de la Ley electoral canaria para entrar en la cámara, al ser la primera fuerza en su isla. La Agrupación Herreña Independiente se integra en esta ocasión en CC. Así pues, la cámara canaria se conforma sin mayorías absolutas. Tras los comicios se consuma de nuevo un pacto de gobierno entre CC y el PP, aunque en esta ocasión sí que prevé la entrada de miembros del PP en el ejecutivo autónomo. Este pacto se consuma, a pesar de la crisis interna que desata en CC, debido a la exclusión de Román Rodríguez de los cargos de vicepresidente y consejero de economía y hacienda que le corresponderían según los pactos internos de CC. Finalmente, Adan Martín es investido con los votos de 7
CC, el PP y el PIL de Dimas Martín, cosa que genera también una fuerte polémica interna en CC. En cuanto a los cabildos insulares, CC obtiene la victoria en El Hierro (de la mano de AHÍ), La Palma, Tenerife y Fuerteventura (aunque en este caso sin mayoría absoluta). El PSOE gana en La Gomera mientras que en Lanzarote la victoria es para el PIL de Dimas Martín, apoyado por CC y el PP que rompen así el Pacto por Lanzarote que pretendía cerrar el paso de Dimas Martín dados sus antecedentes por corrupción. El acuerdo PP-CC se extiende también a los cabildos y a la mayoría de ayuntamientos en que las dos formaciones pueden formar mayorías. 8