CÓDICE. A 50 años de su trágica muerte. Revista del Centro PEN Guatemala. Año 2 / No. 5 / Abril - Junio 2012

Transcripción

1 CÓDICE A 50 años de su trágica muerte Año 2 / No. 5 / Abril - Junio 2012 Revista del Centro PEN Guatemala

2 Misterios del amor Mi yo volvió del futuro, tan sólo para recordar cómo son los misterios del amor en las miradas. En tiempo justo La niña va al ritmo de los pasos de su abuela. Mientras tararea una canción, sabe con certeza que el horizonte en tiempo justo se llevará a las dos. Cuando de deseos se trata No sé que deseo pidió ella. Pero hay que ver cómo se le ilumina el rostro cuando me acerco a abrazarla con mis alas de ángel. La grandeza de lo breve Brevísimos Rudy Alfonzo Gómez Rivas A cada quien su oficio Mientras duerme el sapo sueña con convertirse en príncipe y desposar a la princesa del reino. Para su mala suerte el beso sigue sin hacer efecto. Prolongada lluvia Llueve a cántaros. Debajo del paraguas dos enamorados discuten como férreos relámpagos. Él se aleja imperturbable. Ella prolonga la lluvia. Doble función Y mientras la payasa hace reír, la función debe continuar. CUENTE- CITOS Israel Pérez Cuentos hermosos Mis niñas me leyeron muchos cuentos hermosos, pero aprendieron a leer y jamás volví a escucharles uno más. Alarmada En cierta ocasión llegó una niña corriendo a su casa y muy alarmada dice a sus padres: Les juro que vi a un joven leyendo un libro! Inocencia Hubo una vez una bella época que se llamó Inocencia, llegó la Tv y la secuestró. Tiempos de Paz En la Escuela, el maestro se reunía con los padres de familia y dijo: Amigos, estamos en tiempos de paz, ya no vamos a quebrar piñatas. Darle leñazos a un muñeco es un culto a la violencia. Eso es estar atrasados. De pronto un vecino se pone de pie y a todo pulmón dice: Bravo Profe.! Ahora podemos romperla a balazos! Y por parque no se aflija! El ermitaño. Un grupo de agricultores fue a consultarle a un ermitaño, sí la luna estaba buena para hacer sus siembras. El anciano responde: Ahora ya no estoy seguro, porque esa ingrata, ya se dejó manosear del hombre. El pan nuestro Ahora en tiempos modernos, los niños ya no dicen El pan nuestro, sino, el Mc nuestro.

3 Directorio JUNTA DIRECTIVA Eduardo J. Blandón presidente Guilllermo Paz vicepresidente Dennis Escobar Galicia tesorero Carlos René García vocal I Maco Luna vocal II Gustavo Bracamonte vocal III CONSEJO EDITORIAL Dennis Escobar Galicia, Director Eduardo Blandón Guilllermo Paz AUTORES DE ESTE NÚMERO Rudy Alfonzo Gómez Rivas, Israel Pérez, Juan Pablo Escobar Galo, Víctor Muñoz, Herberth Vinicio Coronado Martìnez, Hugo Amador Us, Jairo Alarcón Rodas, Catherine Rendón, Carlos René García Escobar, Maco Luna, Jaime Barrios Carrillo, Gustavo García, Elder Exvedi Morales Mérida, Esward Maquinse Gòmez Vásquez y Dennis Escobar Galicia. DISEÑO Hernán Guerra Sandoval codicepen@gmail.com centropenguatemala.blogspot.com Oficinas 6ª. Calle A 10-12, zona 11, Guatemala. Editoras Editorial PEN Editorial Óscar de León Palacios pen INTERNATIONAL PEN editores Políticas Editoriales del Centro PEN Guatemala Se entiende por políticas editoriales al conjunto de lineamientos que el Centro PEN Guatemala le da a sus medios impresos y electrónicos, en tanto expresiones de su creación y de sus actividades. Los principios que rigen dichas políticas son: libertad de expresión constitucionalmente vigente y principio fundamental del PEN Internacional; legislación sobre derechos de autor o de propiedad intelectual y derechos de los lectores a recibir los bienes de la cultura en general. Las políticas editoriales corresponden a las siguientes acciones: Promover la creación de materiales publicables. Normar los requerimientos para la publicación de los escritos aprobados. Publicar y difundir nacional e internacionalmente los productos editoriales. El Consejo Editorial es el encargado de ejecutar las políticas editoriales. Está integrado por tres miembros elegidos por la Junta Directiva del Centro PEN Guatemala. Entre ellos se elige un director. Las atribuciones del consejo son: Programar anualmente las publicaciones. Diseñar los formatos. Acopiar materiales para publicar. Editar y autorizar las publicaciones. Supervisar la distribución de las publicaciones. Son publicaciones del Centro PEN Guatemala: Página Web del Centro PEN Guatemala. Revista impresa Códice. Revista Códice Medio impreso y electrónico en PDF que difunde nacional e internacionalmente los trabajos de creación artística (géneros literarios y periodísticos) de los miembros del Centro PEN Guatemala, así como de colaboradores que de una u otra manera estén vinculados con la organización. La Revista Códice, de distribución gratuita, será el medio de divulgación trimensual que reflejará la creación literaria, el quehacer y la opinión de sucesos coyunturales relacionados con la libertad de expresión y de pensamiento. La Revista incluirá secciones con temas relacionados a la producción literaria, noticias del PEN Guatemala y de otros países, así como del PEN Internacional. Además entrevistas, comentarios o ensayos sobre temas conexos con el arte, el periodismo y la literatura. Los escritos deben ser inéditos. Los escritos a publicar no deben exceder de 1500 caracteres en tamaño 12. Enviar en formato Word. Se aceptarán propuestas para ilustrar los contenidos, pero las mismas quedarán a total criterio del Consejo Editorial. La revista contendrá las siguientes secciones: Editorial: reflejará la opinión institucional sobre hechos trascendentales de la cultura o relacionados con la libertad de expresión. Análisis político: opinión sobre temas coyunturales de la cultura, especialmente lo literario, o relacionados con la libertad de expresión. Espacio literario: inclusión de narrativa, cuentística, poética, ensayística. Entrevista: sobre temática literaria o la relacionada con los principios constitutivos del PEN. Reseñas de libros: preferentemente de literatura y de autores nacionales. Otros: caricaturas, fotografías, pinturas u otras expresiones artísticas icónicas. Las opiniones vertidas incumben a los autores y al Consejo Editorial. Apoyamos la reproducción del material publicado en la Revista Códice, siempre y cuando se cite la fuente: Revista Códice del Centro PEN Guatemala. CÓDICE / 3

4 Educación Por qué mantener un pueblo analfabeto? Juan Pablo Escobar Galo En 1950 Guatemala tenía una tasa de analfabetismo del 74.5 %, en el año de 1989 la tasa era del 52.3%, para el 2002 cambió al 31.9% (según el INE y UNESCO); y para el la Comisión Nacional de Alfabetización tiene una proyección de llegar a reducir el analfabetismo a un 17.46%, pendiente aún de brindar dichos resultados. Estos datos son alarmantes y desalentadores, al analizar que en más de cincuenta años no hemos logrado como país, transformar significativamente la realidad de la población frente al problema del analfabetismo. Es interesante indagar en cómo las estructuras sociales y el ejercicio del poder, tanto a nivel nacional como internacional, en nuestra sociedad, no ha generado espacios reales y concretos para favorecer un desarrollo colectivo, con un énfasis en quienes sufren del analfabetismo. Por qué el deseo de no alfabetizar? Será que esto le conviene a los grupos de poder? Una sociedad letrada, es una sociedad que busca desarrollar procesos cognitivos como la compresión, la inferencia y la actitud crítica frente al acto de interpretar y expresar el significado de un texto; y conforme se logre el desarrollo de estos u otros elementos a través de la lecto-escritura integradora, la población alfabetizada poco a poco tomará conciencia de la opresión en la que vive. Alfabetizar no es el simple acto de enseñar a leer y escribir como muchos lo pretenden y al cual apuestan diversos programas que enseñan únicamente estos procesos que pueden ser llevados a la mecanización. Alfabetizar debe ser un proceso que favorezca la capacidad de interpretar, analizar, comprender y actuar sobre la realidad a través de la vida letrada favoreciendo procesos de liberación. Vale la pena recordar que Paulo Freire en su texto Educación como práctica de la libertad menciona que la mayor parte del pueblo, que emerge desorganizado, ingenuo y desesperado, con fuertes índices de analfabetismo y semianalfabetismo, llega a ser juguete de los irracionalismo ; es por esto que el sistema social en el que vivimos, no genera procesos reales de alfabetización? Nuestra sociedad no logra emerger al ejercicio de la libertad porque no generamos procesos y especialmente educativos, en pro del ejercicio de la libertad a través del desarrollo de la vida letrada. Es importante resaltar que al hablar de alfabetización, lo hemos dimensionado únicamente desde la enseñanza del castellano. Considero urgente, logar alfabetizar en los diversos idiomas maternos propios de Guatemala; de modo que podamos comprender, analizar y criticar la realidad desde la perspectiva que alguno de estos idiomas nos puede aportar. Todo ladino, debería ser letrado en algún idioma maya, xinca o garífuna. Guatemala seguirá siendo una sociedad oprimida, manipulada y maltratada, mientras no logremos avanzar significativamente en un verdadero proceso de alfabetización y por tanto lograr un claro escenario de liberación. 4 / CÓDICE

5 Había una vez Compre un elefante Víctor Muñoz Si usted está pensando en hacerse de una mascota, es conveniente que piense en una animalito que le resulte útil, cariñoso y manso. E s claro que el vulgo, cuando piensa en mascotas, piensa en perros. Eso se ha vuelto una costumbre hasta cierto punto insana. Debemos recordar que los perros son portadores de pulgas, ladran cuando no deben hacerlo, se mantienen con hambre, son promiscuos y huelen a perro. Alguien por ahí podrá decir que son muy útiles cuando de cuidar la casa se trata, pero se debe tener cuidado y no tomar tan a la ligera algunos estereotipos. La verdad es que hay perros que para lo que menos sirven es para cuidar la casa, ya que son cariñosos con todo el mundo. Los hay también que son fácilmente sobornables. Con un trozo de carne, con un pan o sencillamente con una frase amorosa, dejan entrar a cualquiera. Pero también los hay que muerden a sus amos, o lo que es peor, se salen a la calle y muerden a los vecinos poniendo en graves problemas a sus dueños. Cuántas veces no hemos oído noticias donde se da cuenta de que un perro le arrancó una mano a un niño? O le quitó la nariz? O una oreja? Sin embargo, si usted insiste en tener un perro en su casa deberá tomar en cuenta que una de las primeras cosas que debe hacer es vacunarlo contra la rabia. Es bueno saber que la rabia es el único mal que, una vez incubado dentro del organismo, no tiene cura, y que la persona que ha sido mordida por un perro con rabia y no ha tenido el cuidado de aplicarse las 14 vacunas, indefectiblemente morirá. Es bueno también saber que la muerte por rabia es una de las cosas más terroríficas y dolorosas que pueda imaginar cualquiera. Usted tiene toda la razón si en este momento llegara a afirmar que tan horrendo suceso no se lo desea ni a su peor enemigo. Si es que los tiene, claro. Algunas personas prefieren tener gatos. En la casa de mis abuelos había una gata que paría gatitos por lo menos unas tres veces al año. Cuando los gatitos cumplían un mes y medio, tía Nena los metía dentro de una bolsa de manta y nos mandaba a regalar gatos a las vecindades. Y es cosa maravillosa, pero la gente hasta se peleaba por los animalitos. Con el tiempo he llegado a creer que la gente se enamora de los gatitos porque cuando son pequeños se ven muy bonitos. Ahora bien, el tener gatos tiene una sola ventaja, y es que en verdad eliminan las ratas y los ratones. En la casa de mis abuelos la gata era indispensable, ya que se trataba de una casona enorme, y por si fuera poco, quedaba por la terminal de buses de la zona 4. La gata no se alcanzaba para eliminar ratones. Teníamos que ayudarla poniendo trampas para atraparlos. Y uno podría pensar que la gata no hacía su trabajo, pero no. Prueba de ello es que nunca se le daba de comer. El fastidio consistía en los relajos que armaba en el tejado cuando estaba en celo. Había un vecino que sacaba un rifle y se ponía a dispararles a los gatos. Era cruel el individuo; sin embargo, al día siguiente salía y saludaba muy amablemente, como si no hubiera matado una mosca. Y claro, moscas no mataba, pero sí a los gatos. El asunto es que en estos tiempos, en que las ratas prefieren vivir dentro de los desagües o en los basureros, poca justificación tiene poseer gatos. Además, los gatos tienen la mala costumbre de remover la tierra, alborotar las macetas e irse a meter a las casas de los vecinos. Y hay gente que es muy delicada. Hay también personas que se deciden por tener loros. Cuidado, mucho cuidado! Estas personas lo deben pensar dos veces, ya que está absolutamente prohibido comprar loros debido a que se trata de una especie en peligro de extinción. Aunque si bien es cierto, es prohibido comprar loros, y que por lo tanto se trata de un delito, no es cosa punible. Es decir que usted podrá hacerlo, y si lo sorprenden en el acto, no le podrán hacer nada. Además, se debe tomar en cuenta que los loros dicen palabrotas. Y qué decir de aquellos que se deciden por los peces de colores? Aquí sí que no hay pena de infringir ninguna ley. Los peces de colores son animales que no se meten con nadie. Con sólo cambiarles el agua a cada cierto tiempo y darles sus alimentos, ahí están ellos tranquilos, sin hacer escándalo ni molestar a nadie; y es más, sirven de adorno, y si uno los observa detenidamente, hasta puede eliminar el estrés. Quiere usted ser feliz? Entonces cómprese un elefante. Si usted compra un elefante podrá disfrutar de muchas ventajas tales como que podrá usarlo para transportar cosas de un lado a otro; podrá usarlo para que le mantenga limpio su jardín; podrá alquilarlo a sus vecinos para hacer fletes o para entretener niños cuando haya que celebrarles sus cumpleaños. Y lo que es mejor, a cada cierto tiempo le podrá aserrar los colmillos, los cuales podrá exportar para que los chinos fabriquen bolas de billar. Y por si todo esto fuera poco, trae buena suerte y es de buen gusto tener uno o dos elefantes en casa. Continuaremos. CÓDICE / 5

6 Desde que la conocí, recuerdo las tres características más relevantes en esa vieja: era pulcra, ordenada y delicada. Pulcra en su ropa, ordenada en su casa, delicada en su cuerpo. Pulcra para vestir, ordenada para vivir, delicada para entregarse. Era viuda de un abogado. Ella tuvo dos hijas y un hijo. La mayor se llamaba Isabel, la otra se llamaba Luisa y el muchacho se llamaba Tavo. De sus nietos, el mayor de diez se llamaba Juan. El yerno mayor, marido de la primera, era un hombre apuesto y gran caballero. El yerno menor y la nuera no pasaban de saludar y pasar desapercibidos. La química entre don Ricardo, nombre del primero de los yernos, y ella, la vieja esa del relato, era nada halagüeña. Por los parecidos físicos y conductuales entre don Ricardo y Juan, nombre del hijo de Isabel y don Ricardo, como ya había dicho yo al principio, el niño empezó a serle a ella, a la vieja, antipático. Nadie, mucho menos el pobre chico, supo por qué odiaba ella tanto a él, al pobre nieto. Tristemente, la pareja colapsó, y la madre con Juan y el resto de otros seis hijos se mudó donde la vieja de la narración. Una vez ella, la vieja del cuento literario, agarró con ira de los cachetes al patojo, y le gritó estrepitosamente: - Ay! Esa maldita cara de Ricardo. Es que por eso yo a usted no lo puedo ver ni querer. Lo odio, lo odio, lo odio! 6 / CÓDICE Había una vez La búsqueda Herberth Vinicio Coronado Martínez Y entonces comprendí yo por qué el pobre patojo ganó toda esa inquina, como salida de la tierra. Todos, las 20 personas allí reunidas y enumeradas antes, quedaron estupefactos con esa escena de un domingo en la tarde, pero la escena pasó en la memoria de todos al baúl del olvido con el tiempo. Se borró en todos los arriba descritos, menos en uno, en el pobre niño de 8 años. Ese hecho fue la marca de un latigazo en el alma de aquella inocente criatura aquel 9 de febrero de Se volvió tan introvertido que, a partir de esa horrible experiencia, ni las tristezas ni las alegrías fueron expresadas por su boca, y se volvió escritor. Y se volvió profesor. Y se volvió melancólico. La abuela marcó al nieto. La sociedad continuó el trabajo. El chico ingresó al Seminario, pero al final de la carrera a dos o tres meses de ordenarse, temió que la escena se repitiera, y que el mismo Jesús, encarnado en la figura del rector, monseñor Quezada Toruño, agarrándole con ira de los cachetes algún día, le dijera: - Ay! Esa maldita cara de Ricardo. Es que por eso yo a usted no lo puedo ver ni querer. Lo odio, lo odio, lo odio! Y sintió que no era digno de ser sacerdote. Ingresó entonces el individuo a la universidad, pero, igual, al final de la carrera, le pareció que la escena se repetía, y que don Octavio, nombre de ese abuelo suyo, y doña Chave, nombre de esa abuela suya, le decían: - Ay! Esa maldita cara de Ricardo. Es que por eso nosotros a usted no lo podemos ver ni querer. Lo odiamos, lo odiamos, lo odiamos! Y consideró que no era digno de ser un abogado. La abuela marcó al nieto. La sociedad continuó el trabajo. A la vieja la ahorcaron después de haberla violado. Fueron dos delincuentes. A don Ricardo lo mató un hermano de Juan. Fue un delincuente. Y los dos están en el mismo mausoleo. Don Ricardo y doña Chave. Cuando Juan llega a dejarles flores, nada más se toca sus propios cachetes, y recuerda aquella frase espeluznante: - Ay! Esa maldita cara de Ricardo. Es que por eso yo a usted no lo puedo ver ni querer. Lo odio, lo odio, lo odio! Más adelante, el personaje se enamoró de una muñequita que se llamaba María, que lo tenía todo, carita linda, piernas preciosas, pechos rebosantes y caderas exuberantes, más su valor agregado: era pulcra, ordenada y delicada. Pulcra en su ropa, ordenada en su casa, delicada en su cuerpo. Pulcra para vestir, ordenada para vivir, delicada para entregarse. Freud tuvo razón. El hombre busca en su pareja a la madre. Pero cuando la madre no impidió la intromisión de un vejamen deleznable, entonces cualquier Juan busca a la abuela.

7 Había una vez Por casualidad Hugo Amador Us Entonces supo que, finalmente, lo que decían era verdad. No se trataba pues de una acusación infame de origen incierto cuyo único propósito eran las puras ganas de joder al prójimo. No se trataba entonces del secular y universal insulto hijo de puta, sino de un verídico e irrefutable dictámen: tu mamá es una puta. Así lo repetían todos. Se lo decían a Jorge siempre que lo querían fastidiar, irritar, hasta hacerle saltar las lágrimas de tanta rabia e impotencia. Él o los acusadores, se escondían en el anonimato del grupo, tras la seguridad de una esquina o en la invisibilidad de la oscuridad. Cuando daba la espalda, le gritaban en falsete tu mamá es una puta y al volverse, se callaban, o cambiaban de tema o se hacían los desentendidos. Al principio, para él era un tormento, un vejamen del cual no podía resarcirse pero al cabo de un tiempo, de tanto oirlo, ya no le producía efecto, o por lo menos, eso aparentaba. Pero, cómo iba él a saberlo? No iba a andar preguntándole a cada puta con la que se acostara oiga señora, es usted por casualidad la mamá de Jorge? Y todo había sido una casualidad, acaso una zancadilla que pone el destino. Había ido al Guarda con la intención de comprar unos pantalones de segunda mano (de esos que venden bajo el presuntuoso nombre de ropa americana, que traen en pacas de los Estados Unidos) después de pasar a la Bolívar a cobrarle al Muerto un dinero que le debía desde hacía meses. Se había adentrado por una calle corta, casi sin espacio para andar de tanto negocio que invadía ambas veredas y el medio de la calle. La vio al fondo del garage de una pensión de las tantas que pululan en El Guarda para servir de encuentro de amores furtivos, de refugio de putitas callejeras o casa de estudiantes pobres que vienen del interior. Estaba sentada sobre una mesa, balanceando los pies y mascando chicle, mientras que con la mano derecha se jugaba los bucles pintados de dorado con rayitas rojas. Le hizo un ven para aca con la mano izquierda mientras lo invitaba con la cabeza a subir las escaleras. El la vio y había decidido ignorarla. Al poco rato, giró bruscamente y, decidido, se dirigió a ella a grandes pasos. De cerca parecía más joven que de lejos, con un vestido azul, de brillantinas, que dejaba ver parte de los muslos. El busto generoso, invitante, compensaba las piernas raquíticas, a medio rasurar. Hola papasote le dijo ella, examinándolo de pies a cabeza Querés subir conmigo al cuarto? No te vas a arrepentir. Torpe, ridículo, todavía nervioso, preguntó: Cuánto? Cuarenta y sin rebaja Había escupido el chicle y lo miraba con anhelo. Entonces, que decís? te animás? Me alcanza, pensó, y asintió con la cabeza. Era la segunda vez que se acostaba con una mujer. La primera vez había ido con un grupo del internado a un burdel de la Calle Martí. Había sido el año pasado, cuando estaba en Segundo Básico. Ahora, se sentía orgulloso de hacerlo solo, sin presiones y sobre todo, pagándoselo él mismo (la otra vez, por ser primerizo, lo habían invitado ). La sorpresa, o más bien, el susto, ocurrió al final, al pagar. Contrario a la práctica del gremio, ella no había querido cobrarle al principio, confío en mis clientes le había explicado. Al pagarle, ella le iba a dar el cambio cuando de su bolso cayó una fotografía a colores. Yo la recojo dijo él. Al hacerlo, reconoció a Jorge, acaso un par de años más joven. Es Jorgito le dijo ella mientras guardaba la fotografía, mi hijo que tengo en un internado. Lo había dicho sin vehemencia, sin darle ninguna importancia, como diciendo ya se fijó que aguacero está cayendo. Él, inventado cualquier excusa, le dijo que se quedara con el vuelto. Está bien accedió ella, después de negarse infructuosamente pero conste que la próxima vez no me pagas. Conmigo, las cuentas cabales m ijo. Que próxima vez ni que ocho cuartos, se dijo él al salir, casi a la carrera, tropezándo en la entrada del garage con un hombre que cargaba una mesa quien le mentó la madre por no fijarse por donde caminaba. No, no habría próxima vez. Mientras iba en el autobús de vuelta al internado (del disgusto, no había comprado ni un pantalón), no dejaba de pensar en lo ocurrido. Iba con la cabeza pegada al vidrio, viendo todo el tiempo hacia la calle, con expresión abandonada. Se sentía sucio, miserable. Que iba a decirle ahora a su mejor amigo? No iría a decirle, como si nada hubiera ocurrido, oye, fijáte que me cogí a tu mamá. Pobre Jorge, pensó mientras jalaba el cordón para anunciar su parada, entonces era cierto. CÓDICE / 7

8 Cosas que pasan Hechos extraños, peculiaridades de la vida Jairo Alarcón Rodas La vida, al igual que la realidad, tiene sucesos que no obstante son ordinarios, resultan ser inexplicables, quizás incomprensibles para nuestro entendimiento. Lo cual no implica que sean misteriosos, que en sí mismos sean extraordinarios. Sin embargo, no ocurre lo mismo con lo que estos desencadenan. Al respecto Hegel señalaba que todo lo real es racional, como lo racional, real. Los alcances de nuestra mente están supeditados a lo que ocurre en la realidad y la vida. Los límites entre la fantasía y la realidad lo constituye la razón. Lo desconocido e incomprensible en este momento, será conocido en el futuro. El tiempo y el interés humano harán factible que eso suceda. Pero, qué ocurre con lo emotivo, con los sentimientos? La realidad cambia y dado que ésta alimenta al conocimiento, este también debe hacerlo. Lo que se tomó por verdad hace 50 años en la actualidad ha ampliado su criterio. No es que un nuevo juicio sustituya totalmente al anterior, más bien, lo amplía. Esa espiral que se abre al infinito, requiere de nuestra parte, formas incesantes de entendimiento y comprensión. La realidad en sí no es compleja, lo es para los alcances de nuestra razón que requiere para estar en sintonía con ésta, de reinventarse continuamente. Dentro de esta complejidad que constituye la vida para los alcances de nuestra mente, recuerdo un hecho que en su momento pasó desapercibido, aunque para dos de los implicados resultó esencial para sus vidas. Aunque hay mucho oculto en esta historia, ya que este relato se inicia con la llegada de una persona a la casa de mi mamá, lo que se puede inferir es que con el correr del tiempo, tal suceso se mantuvo vivo y alimentó los profundos deseos de una persona. Eran los momentos del despertar a la pubertad con las fantasías y deseos sexuales que ello implica. En ese tiempo vivía con nosotros un amigo de mi hermano, quien había pasado parte de su vida en un internado, cansado de ello, recién había estado viviendo con su tía. Por problemas ente ellos decidió irse a vivir a otra parte, mi hermano, lo conoció en el colegio y lo trajo a la casa y a partir de ese día vivió con nosotros poco más de dos años. La casa de mis padres, en donde vivíamos, tradicionalmente se mantenía llena de muchachos. Los amigos de nuestros hermanos mayores la habían convertido, en su momento, en el punto de encuentro, en la sede de su club. Allí se planificaban las idas a barrancos, los partidos del futbol, las fiestas y reuniones sociales. En la casa comían, miraban televisión e incluso, muchos de ellos, ocasionalmente se quedaban a dormir con o sin el consentimiento de nuestros padres. No es que se viviera en una anarquía, más bien fue que se les permitió y se nos permitió una que otra libertad, quizás con el fin de mantenernos dentro de la casa. Fue común que la casa estuviera llena de bullicio, se entraba y salía a toda hora. Recuerdo lo fatigoso que fue para mi mamá darles de comer a tantas personas, eran ollas de café y de frijoles las que se consumían. Casi todos los días se reunían, en el cuarto de mis hermanos. Durante horas permanecían con la puerta cerrada para hablar y compartir de cosas inaccesibles para los más pequeños, seguro que también fumaban uno que otro cigarrillo, o lo que alcance la imaginación. La tradición quedó y cuando llegó nuestro turno hicimos lo mismo, llevamos a nuestros amigos a la casa. Excursiones al barranco, partidos de fútbol, chamuscas y una que otra travesura marcó nuestra existencia en ese tiempo. El amigo de mi hermano tendría unos trece años cuando fue adoptado literalmente por la familia, era uno más entre nosotros. Tras unos meses de convivir entre nosotros, le informó a su mamá, quien para esa época, residía en los Estados Unidos, que había dejado la casa de su tía y que ahora vivía en casa de un amigo. Recuerdo que tras ese hecho, su mamá le comenzó a escribir a la mía, iniciando con ello una amistad que aún perdura. Con nosotros trabajaban, por ese tiempo, casi siempre dos señoritas, las que se encargaban del servicio doméstico, regularmente eran mujeres jóvenes, que se aventuraban a venirse a la capital a buscar empleo. Encuentro valioso que siempre mi mamá nos enseñó a respetarlas y solicitarle sus servicios con buenos modales. Todavía ahora, pasado mucho tiempo, vienen a visitar a mi mamá, a recordar aquellos tiempos ya que le profesan especial cariño. El respeto que se nos demandó por parte de nosotros, para las señoritas que trabajaban en la casa y que cumplimos en sentido general, no fue así para algunos amigos que frecuentaban asiduamente la casa. Por lo que se dio alguno que otro rompimiento de las normas, sobre todo en el orden sentimental, más concretamente en el de las pasiones. La vida, repito, se nos hace inexplicable por momentos, podemos emitir juicios pero éstos escapan a lo que realmente sucede y es que quizás como lo indicaba Emanuel Kant, sólo podemos dar cuenta de lo que vemos. Es por ello que muchos acontecimientos han quedado y quedarán ocultos, siendo significativos sólo para las personas que se encuentran directamente implicadas. Lo cierto es que el amigo de mi hermano mantuvo relaciones sexuales con una trabajadora doméstica y la dimen- 8 / CÓDICE

9 sión de este hecho, para ambos fue diametralmente opuesta. Para él fue una experiencia inicial, trascendente quizás, por el placer que le produjo en su momento, para ella, por el contrario, marcó su vida para siempre. Ahora al reflexionar sobre ese hecho, lo comparo con las relaciones que mantenían los criollos y antes de estos los señores feudales en la época medieval, con sus empleadas. Era de un total dominio y sobre todo, abuso. Cuantas historias no se entretejieron tras esas relaciones de dominación. El poder que ejercen ciertas personas sobre los más débiles, disminuye la condición humana. Aquellos que hacen del tener, el medio para ejercer dominio sobre los demás, únicamente revelan la pobreza de su naturaleza social. En sociedades como la nuestra, donde la riqueza otorga el derecho para quebrantar la voluntad de los demás, los que tienen, por mínimo que sea, se sienten con la potestad de decidir sobre las vidas, de los que posean menos y en consecuencia se sientan menos. En el caso que relato no fue tanto así, al parecer hubo de parte de ella una entrega total, se enamoró del amigo de mi hermano. Él con las inquietudes de la adolescencia, ella con las expectativas que provoca el primer amor. El hecho pasó desapercibido para todos, incluso en él fue irrelevante. Pero trajo implicaciones que evidencian lo inexplicable, a la luz de nuestra razón, acontecimientos como estos. Poco más de treinta años han pasado y hace un año, mi mamá recibió una visita que al margen de ser inesperada, tuvo para la familia el signo de rareza y complejidad. Cuenta ella que le pareció extraño que una persona desconocida preguntara por su nombre. El hombre insistió platicar con mi mamá y ante tenaz solicitud, lo pasó adelante. Vengo a verla, dijo porque hace mucho tiempo trabajó en su casa una señorita que resulta ser mi madre. En aquel tiempo usted tenía viviendo en su casa a un muchacho que por azares del destino es mi padre. Atónita mi mamá le respondió lacónicamente, cómo es eso? En aquel tiempo, le dijo, mi madre renunció a su trabajo, aparentemente para regresarse a su lugar de origen, pero no fue así, lo cierto fue que estaba embarazada y el muchacho que la embarazó no respondió por ello. No vengo con ningún tipo de resentimiento, a increpar en contra de él, ni mucho menos me impulsa el deseo de gratificación alguna, tan sólo vengo para saber su paradero y lograr un contacto que nos haga conocernos y recobrar, si es posible, el tiempo perdido. Mi mamá le dijo que desde hacía mucho tiempo le había perdido la huella, que únicamente sabía que se había ido a los Estados Unidos. Prudentemente se guardó que mantenía una especial amistad con la que sería su abuela. Y es que al igual que nosotros, ella era ajena a lo ocurrido. Pensó en su amiga, en lo que representaría para ella, enterarse que era abuela en las condiciones tan particulares en las que sucedió. El hombre le contó a mi mamá que ahora, afortunadamente, era una persona exitosa, que había podido consolidar una pequeña empresa, por lo que estaba solvente económicamente. Y sólo le asaltaba el deseo de conocer a su papá y si fuera posible, ser reconocido como su hijo. Tras un buen rato de platicar con mi mamá, y no obtener pistas sobre el paradero de su padre, el hombre se marchó, dejando en el ambiente, una serie de reflexiones ante singular historia. Siempre he pensado que los vínculos humanos se construyen a partir de la convivencia, que la espiritualidad surge en seres que entienden y fortalecen la existencia social, que como dice From, el amor a uno mismo, esencial para la pervivencia individual, debe contemplar al otro. Pero en este caso, el visitante jamás tuvo contacto con el ser que lo engendró. La idea que bosquejó de éste, fue delineada por los relatos de su madre. En ella, lo sucedido hace tantos años, derivó hechos significativos para su vida, en él fue intrascendente. Podrá exigírsele a un adolescente ser responsable de sus actos. En el caso de este amigo de mi hermano, gran parte de su vida permaneció en un internado, sin el afecto familiar, si ese horizonte existencial que nos hace humanos. Ajeno a ello, el visitante se despidió de mi mamá, quizás con la desilusión de no obtener respuestas, que le hicieran calmar su inquietud. Hace unos días regresó, habló de nuevo con mi mamá, inquiriendo otra vez le preguntó, sobre el paradero de su padre. Me voy a casar, dijo y quiero que mi papá este allí, que me brinde su apellido, que me permita conocerlo y con ello poder construir la relación que se encontraba, perdida. Mi mamá le dijo que iba averiguar en qué Estado de los Estados Unidos se encontraba, averiguar las pistas que posibilitaran el poder ubicarlo. De nuevo se marchó, ahora con la esperanza de lograr un contacto con lo que parece ser, el reencuentro con su vida. En la existencia humana, habitan un sinfín de historias, en las que se entretejen situaciones extrañas, donde los valores se relativizan, en las que cada persona juzga lo vivido en función de lo que ha aprendido y se le ha enseñado durante el transcurrir de su existencia. CÓDICE / 9

10 Hoy por la mañana me enteré que Carlos Fuentes, el novelista mexicano, había muerto. En el 2009, el escritor uruguayo Mario Benedetti murió y fue lamentado a todo lo largo del continente americano. En 1998 me encontraba en San Cristobal de las Casas cuando el némesis de Fuentes, otro pensador icónico mexicano, Octavio Paz, murió. Entonces me sorprendió escuchar a niños gritar Octavio ha muerto! en una plaza de esa ciudad. En cuántos otros países habría un niño llamando a un intelectual y un ganador del Premio Nobel por su primer nombre? Y cuántas personas sabrían de quien se trataba? Tal es el poder de muchos autores en América Latina. No puedo pensar en muchas circunstancias parecidas donde con sólo pronunciar el primer nombre de alguien habrían retumbos similares, aunque por razones distintas. Una de las excepciones posiblemente seria Diana, la princesa de Gales. Fuentes (11 de noviembre de de mayo del 2012) personificaba al latinoamericano cosmopolita, pues él estaba igual a gusto en Londres, París, Buenos Aires o la ciudad de México. Cuando lo lei por primera vez, yo era aún adolescente y me pareció cautivante. Fue hasta mucho después que supe que Fuentes tuvo el dilema de escoger en cual idioma le convendría escribir, si en inglés o en español. Era bilingüe y además manejaba el francés con fluidez. Hijo de diplomáticos, y un diplomático a su vez, Fuentes publicó su primera novela antes de cumplir los 30 años. Posteriormente siguió publicando novelas, ensayos, y sus ideas acerca de una variedad de temas, incluyendo una interpretación muy suya sobre la historia latinoamericana en su libro El Espejo Enterrado: reflexiones sobre España y el Nuevo Mundo (en 1992), un texto En memoria Homenaje a Carlos F que he usado en muchas ocasiones al enseñar algun curso sobre América Latina. Su novela La muerte de Artemio Cruz (1962), será una de sus más poderosas creaciones, pues en ella sintetiza la ambivalencia y la fuerza que surgió al termino de la Revolución Mexicana de hace un siglo. Un día antes de que muriera Carlos Fuentes, otro novelista mexicano, Joaquín Armando Chacón, me había escrito lo siguiente desde la capital mexicana: el escritor de narrativa no hace filosofía (no puede, y no debe): relata eventos, situaciones, vidas, aventuras, momentos, y lo hace imaginando que construye a personajes vivos y existentes; estoy de acuerdo con Nabokov que dice que una novela es ambiente y personajes. Claro, existen los géneros, el cuento, el relato, y tantos otros como el narrador utilice para su labor y condición, y la novela se nutre de todos ellos (el diálogo, la descripción, la poesía, la reflexión...), pero todo eso lo hace a su manera y entender. Por qué escogemos un camino y no otro? Por qué contamos algo de tal o cual personaje y no contamos alguna otra cosa más? No lo sé, te puedo asegurar que nadie lo sabe; lo acosa su intuición, lo sorprende el momento, lo obliga el ritmo, y muchas veces la necedad (que no la necesidad, que también tiene que ver en el asunto). Que vidas más curiosas llevan los novelistas! Son magos, curanderas, padres y musas, y sobre todo, nos dan un espacio donde podemos reflexionar y soñar. A través de los muchos títulos que Fuentes escribió se lograron conseguir estas metas y nos ha dejado unas geografías palpables de mundos con personajes que nos permiten entender mejor nuestras circunstancias y quizás las de otras personas. La violencia constante y creciente del narco-mundo que se ha vuelto endémico en México y en la región le preocupó fuertemente a Fuentes durante sus últimos años. Y nos ha dejado una novela con sus reflexiones sobre el tema, la cual será publicada en el otoño del Desde su niñez, Fuentes tuvo fuertes lazos con los Estados Unidos, aunque también se mostró bastante crítico de este país. Mientras yo era estudiante tuve la oportunidad de escucharlo dando conferencias en las Universidades de Columbia y Brown. Sus conferencias siempre eran pulidas e inteligentes, específicas y universales a la vez. Carlos Fuentes era accesible y siempre se comportó como una persona abierta a cualquier pregunta o duda que su público tuviera, especialmente entre los jóvenes. Fuentes reconoció que la gran literatura es esencial para la psique de todas las na- 10 / CÓDICE

11 uentes ( ) Catherine Rendón ciones, y a través de su amplia obra contribuyó mucho para un mejor entendimiento tanto de México como de América Latina, no sólo para lectores hispanohablantes sino también para muchos otros en distintos idiomas. De muchas maneras Fuentes personificaba al tipo de individuo panamericano que deberíamos de emular: un ser multi-cultural, multilingüe y un ciudadano tolerante y abierto al mundo. Durante la década de los noventa tuve la oportunidad de estar presente en varios eventos organizados por Carlos Fuentes para el Festival del Centro Histórico de la ciudad de México. Él era un admirador y amigo de la novelista irlandesa Edna O Brian (nacida en 1930) y también de dos autores que serían posteriormente reconocidos por el comité Nobel de Literatura debido a sus obras: J.M. Coetzee, el autor sudafricano nacido en 1940, y el portugués José Saramago ( ). A ellos, así como a muchos otros autores, entre los que se encontraba el español Juan Goytisolo, los llevó Fuentes al D.F. para un maravilloso festival literario donde el tema era la nueva geografía de la novela. Allí pude conocer a estos autores y algunos de ellos, como Saramago, se inspiraron con la sublevación zapatista en Chiapas. En 1995 el dramaturgo británico, Harold Pinter ( , y ganador del Premio Nobel en el 2005) llegó a la capital mexicana para ver la actuación de dos de sus obras de teatro: Luz de Luna y Tiempo de Fiesta, que Fuentes las había traducido al español, y por tal motivo se festejaba la ocasión con una gran fiesta en el Teatro de Bellas Artes. Desde uno de los grandes balcones de este edificio masivo y opulento muchas botellas de champan fueron descorchadas mientras actores, dramaturgos, directores, autores y amigos celebraban la presencia de Pinter en tierras mexicanas. Pinter estaba muy parlanchín y contento y Fuentes fue un anfitrión encantador. Pinter había sufrido una larga época de sequía literaria, sin poder escribir hasta que nació Luz de luna y su aparición había sido un alivio. La esposa de Pinter, la distinguida historiadora, Antonia Fraser, estaba allí, al igual que la periodista Silvia Lemus, esposa de Fuentes. Unas noches más tardes me encontré en la residencia de los Fuentes en el barrio de San Ángel, donde pude continuar charlando con ellos. Gracias a su cosmopolitanismo, Fuentes fue criticado a menudo por no ser verdaderamente mexicano o no lo suficientemente mexicano, aunque él se identificara fuertemente con el país. Era su manera independiente de pensar y por lo tanto se rehusó a ser fácilmente clasificado, aunque ello tampoco le facilitara la popularidad. Carlos Fuentes era liberal y con una mentalidad bastante abierta. No solamente era un erudito, sino también una persona sumamente civilizada a quien ninguna frontera o idea limitaría su manera de ver el mundo a su alrededor. Aunque Fuentes recibió muchos honores internacionales, como el Premio Cervantes, jamás le fue concedido el Premio Nobel. Sin embargo muchos pensaron que se lo merecía rotundamente, pues era un escritor sumamente productivo, un pensador audaz e igual de valioso como mu- chos de sus contemporáneos, como Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa. A pesar de dar la apariencia de tener una vida exitosa, Fuentes perdió a dos de sus tres hijos. Como muchos artistas comprometidos, Fuentes decía que su trabajo (es decir, escribir) era lo único que le servía para aguantar y sacarle sentido a la vida. El acto de escribir le daba sincero gusto y le producía un inmenso placer. La muerte de Carlos Fuentes ha marcado el principio del final de una de las épocas más ricas en términos literarios de América Latina; es decir, del famoso movimiento conocido como el boom latinoamericano. Aunque Fuentes no era un narrador del realismo mágico, como algunos de sus contemporáneos, su producción vasta y amplia reflejaba un interés profundo por la región y un entendimiento de nuestra interconexión en este continente, pero no sólo acá sino también en otras partes del mundo. En alguna ocasión Fuentes escribió: Por su propia naturaleza, la novela indica en lo que nos estamos volviendo. No existe ninguna solución final. No hay una última palabra. Echaremos a Carlos Fuentes de menos, pero en su obra permanece un testamento: el de su talento y de su época, y eso quizás sirva como un posible patrón para mejor interrelacionarnos en este mundo. El 16 de mayo, Joaquín Armando Chacón me envió las siguientes palabras: Sí, qué triste la partida de Carlos Fuentes: yo lo leía, lo admiraba, y sus libros me enseñaron mucho, al grado de considerarlo uno de mis maestros. Lo conocí poco personalmente (pero, hay algo más personal que la obra de quien la crea?), pero lo leí siempre. Era un gigante. CÓDICE / 11

12 Por escrito Pont Vell Carlos René García Escobar Dedicado a José Luis Mansanet Ribes José Antonio Sirvent Mullor* Juan Antonio Alcaraz Con quienes he compartido a lo largo de veinte años el conocimiento científico de las Fiestas y las Danzas de Moros y Cristianos tanto en España como en América. De la loma que hace sombra al río allá abajo viene bajando ligeramente una joven mujer de cabellos largos y ondulados rodeando con su brazo izquierdo una ánfora cuya base se asienta en su cadera que equilibra sus movimientos con el balanceo de su brazo derecho. Su vestido va de sus hombros a las rodillas y también se mueve ligeramente dados sus pasos ansiosos por llegar allá abajo donde se extiende de una orilla a otra del río el famoso pont vell, construido en las viejas épocas iniciales del siglo XVI, diseñado para bajar a recoger agua y, en las trillas de sus contrafuertes, los descansos triangulares de sus muros, conversar socialmente y luego, como lo hacen todos los puentes, comunicar a los vecinos de las aldeas cercanas soportando el peso de los carruajes halados por animales de carga y el de los cotidianos transeúntes. Las aldeas y su puente están inmersas bajo el dominio de habitantes musulmanes de origen que, a la postre, luego de más de quinientos años de invasión conquistadora han generado cierto mestizaje con los habitantes originarios de la región. Han convivido a través del tiempo conservando diferencias culturales, políticas y religiosas, a pesar de la reciente victoria reivindicadora de los Reyes católicos sobre el poder político árabe. De ahí que los aldeanos conviven entre todos sustentando tradiciones y costumbres contradictorias que se desenvuelven entre mutuos respetos pero, también, en el fragor de los intereses personales individuales y familiares. La joven mujer ha llegado al río y luego busca debajo del puente. Allí está un hombre joven, broncíneo, barbado, semidesnudo, esperándola. Ella toma agua para su ánfora fingiendo no verlo y vigilando los alrededores. Él se le acerca y le habla. Entonces se van hacia lo más oscuro. El ruido del agua no permite escuchar los murmullos de voces que se suscitan pero que se notan agitadas y Pont Vell Durante una Fiesta de Moros y Cristianos. Foto de Rafa Penadeés (2012) para el autor. Pont Vell. (Abajo). Otra perspectiva. Foto de Valen Bataller (2012) para el autor. ansiosas. De repente salen ambos del agua y se dirigen al puente donde se sientan en uno de sus descansos para conversar y esperar algo o a alguien. Es el caluroso medio día. Los muros de piedra que rodean las orillas del río despiden el calor pero el paso del agua y sus pequeñas cataratas que se forman bajo el puente provocan sentir y respirar aire fresco. Las nubes ondean en un cielo abierto y azul. Es el cielo de Ontinyent, región tierra adentro de Valencia. Nadie ha llegado a esa cita si se esperaba a alguien, pero en cierto momento se oyen voces bajo del puente y la pareja baja presurosa a contactarse con los misteriosos visitantes. El ánfora queda olvidada en el descanso. Efectivamente, un grupo de hombres morenos los recibe con movimientos de urgencia y todos juntos caminan siguiendo el curso del río, o sea, río abajo, hasta donde se encuentra una canoa a la que suben presurosos a la muchacha y todos adentro emprenden una tortuosa navegación que los llevará al mar, el Mediterráneo, donde habrá una barcaza que los conducirá a lejanos destinos. El ánfora, todavía con agua, queda en pont vell como mudo testigo de una fuga de amor, o, del furtivo rapto de una doncella. Años después, en tierras muy lejanas llamadas las Indias una familia de apellido Belloponte, sentaba sus reales e iniciaba una nueva relación social con sus habitantes. Se trataba de un territorio de naturaleza tropical desconocida y novedosa para ellos, llamado también el Nuevo Mundo. Comenzaban a disfrutarla en medio de nuevos pero ya experimentados conflictos culturales con los habitantes encontrados en cuanto a viejas tradiciones y costumbres que se entremezclaban, produciendo un mestizaje originario que predominaría en estos descubiertos territorios allende los mares del ahora Viejo Mundo. Los Belloponte abandonaron con el tiempo su antiguo pasado que originó su apellido, no así entre muchas cosas el ánfora, que se convertiría nuevamente en las ánforas mayólicas producidas en las grandes ciudades coloniales de la Indias Occidentales del Trópico americano. *Por nuestro primer encuentro personal durante el I Congreso Internacional de Embajadas de Moros y Cristianos en Ontinyent, Valencia, julio del 2010 y por su leyenda Miriam, en Escrito en Elda. Agradezco a los fotógrafos Valen Bataller, Rafa Penadeés y Rafa Forneés las fotografías de Pont Vell enviadas a mi persona por intermedio de Juan Antonio Alcaraz Argente. 12 / CÓDICE

13 S e cumplen 28 años desde la desaparición forzada del escritor indígena Luis de Lión. Lo recordaremos siempre como el creador brillante, el poeta, el profesor rural, el catedrático universitario. Si bien el Estado reconoció, durante el gobierno de Oscar Berger, la responsabilidad de las fuerzas de seguridad y se pidió perdón a la familia, la pérdida de un ser con aquella naturaleza creativa y humana, resulta irreparable. Perdimos todos, la familia, la literatura, la cultura guatemalteca. Se trata de un legado literario que aunque truncado por la violencia Había una vez Motociqueleta Zigzagueante entre la fila de carros llegó para ponerse a la cabeza sobre el paso de cebra. Poco le importó invadir la zona del peatón. La premura le decía que lo importante era ganar la salida. Una nueva motocicleta pasó a la par; esta otra se jactabade ser más grande y más potente. Llamaba mucho la atención que su conductor recitaba fechas en voz alta: 15 de diciembre de 1974, 17 de agosto de 1965, 23 de febrero de 1950, 20 de agosto de 1920, 1 de abril de 1923, 29 de diciembre de 1975, 25 de agosto de 1984 La voz sonaba como dentro de un tubo. Un conjunto de cuero azul cubría el cuerpo del motorista declamador. El casco protector, como careta para soldar, escondía sus facciones. El de la moto pequeña se preguntaba quién era ese que aceleraba tan cerca sin detenerse y además pregonaba fechas pasadas. La luz verde le dio la orden de salida. El repartidor de comida rápida se quedó atascado en sus pensamientos mientras el otro continuaba su marcha inexorable. El de la motocicleta grande, el Tiempo, jamás volvía hacia atrás; llevaba con él la vida. El mandadero marchaba de la mano con el libre albedrío: se subía a las aceras, empujado por la prisa y la imprudencia, rebasaba a cuanto automovilista podía, aceleraba y aceilegal del Estado en aquella época dolorosa y terrible, pervive y mantiene su vigencia estética y hace de la obra de este hijo insigne de San Juan del Obispo, parte intrínseca de la historia de la literatura guatemalteca. Especialmente su admirable novela El tiempo principia en Xibalba. Maco Luna Se caracteriza esta obra por un constante fluir de significados diversos y a veces divergentes, conviviendo en un mismo texto. La Virgen de la Conleraba, como con ganas de estrellar los nervios contra las paredes. El viento, que lo acompañaba en su loca carrera, jugueteaba con sus ojos y de vez en cuando le arrebataba un salivajo; la vibración hacía que le temblaran las mejillas. Los cambios desacompasados trataban de coger brío, la motocicleta cobraba velocidad, las llantas trepidaban con fervor y entonaban una triste canción de soledad. Detrás de él, a una prudente distancia, una mujer sin rostro conducía un carro oscuro. Desde el momento en que él firmó el contrato con el restaurante de comida rápida, se hizo delgada la línea entre la vida y la muerte. 28 años sin Luis de Lión Jaime Barrios Carrillo Por qué se empeña la muerte en matar, vanamente, a la vida, si la más humilde semilla rompe la piedra más fuerte? / Luis de Lión. cepción es una prostituta que va siendo alejada del pueblo, física y mentalmente, pero también es un ídolo (substituta católica de antiguas diosas tutelares). En esta ambigüedad reside una de las claves para adentrarse en el misterioso mundo narrativo de Luis De Lión. Pero ante todo es un libro de una espesura poética luminosa. Nos recuerda al final de sus páginas, el carácter mágico y trágico de un país que se ha debatido entre mitos sublimes y realidades brutales. La paradoja entre los desaparecidos, uno entre miles es el mismo Luis de Lión, y los aparecidos: los fantasmas y demonios del imaginario popular. CÓDICE / 13

14 Aturdido y abrumado se le veía a Pangán en el fondo del local, la mesa estaba llena de litros de cerveza, él y su mejor amigo Tacuáz más allá de camaguas, la rockola del lugar seguía sonando desmesurada y las chicas de compañía ya estaban aburridas de escuchar las mismas canciones de los Terrícolas una y otra vez, que acostumbraban a poner Tacuáz, el alero de Pangán, no porque a ellas no les gustaran las canciones de dolor y sufrimiento que cantaba el grupo, si no por lo tupido que las ponían Pangán y su mejor amigo, tanto así que no dejaban a nadie poner otras canciones y toda la noche se iba en puro sufrir y sufrir, llorar y llorar. Y es que no era para menos la Lorrein había dejado a Pangán, o más bien no es que lo hubiera dejado, simplemente Pangán nunca había tenido el ph necesario para decláresele y ofrecerle algo definido y pues ya desanimada la Lorraine de recibir tarjetas de Hellow Kiti, con comentarios a lo Ken y Barbie dejó de ponerle atención a los requerimientos románticos de Pangán y sin mayor melodrama hizo mutis. Del abandono de su amada hacía más de dos años y Pangán no se recuperaba de tal desgracia, así que después de salir de su trabajo llamaba por teléfono celular a Tacuáz, se juntaban en el parque la Unión, tomaban un bus hacia Jocotenango y se iban hacia la zona roja del pueblo, donde los dos eran tratados con mucho esmero, aunque no siempre llevaban dinero para una buena borrachera, se conformaban con tomarse unas cervezas y poner canciones en la rockola y contarse sus mutuas desgracias. Tacuáz generalmente le preguntaba a Pangán. Y ahora por qué ya no te gusta ser súper héroe? Pangán con su cara redonda como de sol, su cabello negro cortado a la flaptop y sus negros ojos achinados, que todo el tiempo parecían sonreír, le contestaba. -Nel mano, ya no me gustó esa onda. Y continuaba. - Mejor márquese, Hay Luto En Mi Alma. Acto seguido los dos amigos levantaban los vasos, volvían a brindar y entre canción y canción se les iba la vida. Pangán nació al final de los años sesenta, en una aldea de Chimaltenango, entre esos maizales esmeraldas y oro del altiplano guatemalteco, que de pronto entre sus entrañas contienen un ranchito humeante, donde comúnmente vive una alegre y numerosa familia maya, nuestro personaje fue el sexto de once hijos, cuando vino al mundo la guerra civil de Guatemala estaba en uno de sus picos. Su familia vivía cerca del destacamento militar de Chupol y era frecuente en sus amaneceres o en sus alboradas, además de las canciones rancheras oídas por el radio de transistores, colgado en uno de los horcones del tapesco, se oyera también sonar el tableteo de la metralla, en su mente de niño jamás se le 14 / CÓDICE Había una vez Superpangán ocurrió, que ese tableteo de metralla fuera un ruido diferente al canto de los guardabarrancos, según él, era parte del ambiente natural. Creció el personaje de nuestra historia como el resto de los niños de la comunidad, casi desnudo, jugando con tierra y alimentado como todo hombre de maíz que se precie, con agua de chiva o lo que es lo mismo para los poco entendidos en materia culinaria del tercer mundo, agua de masa. Al llegar a la niñez, como si no fuera suficiente que su padre y su madre fueran alcohólicos, se le hubieran muerto cinco hermanos y en su rancho además de abundar los chuchos flacos no hubiera otra cosa, le sobrevino la polio, y así con sus cinco añitos vio enrarecido su ambiente y se le empequeñeció el mundo, ya no pudo, ir a cortar manzanos en septiembre al terreno del vecino, ni correr tras el viento en noviembre Ah Se le jodió la vida al pobre Pangán Pero su suerte no estaba del todo desgraciada, un día su mamá se fue a vender güicoyes y elotes cocidos de su cosecha al mercado de la Antigua y ahí se enteró que había un hospital que se llamaba del Hermanito Pedro, y que ahí ayudaban a la gente como antaño los hizo ese hombre santo y caritativo. Cuando la madre terminó su venta, se fue directo a dicho lugar, en la cabeza llevaba la compra de víveres para la semana, en la espalda llevaba a la Juanita, en la mano derecha a Mateo, en la izquierda a la Chavelita y más adelante iba Juan, el hermano mayor de Pangán, llevando en hombros a su hermano poliomielítico, el de las canías flaquitas, tiesas como de palo. Pangán por ese entonces tenía once años, pero no aparentaba más de seis, lo destacado era su cabezota, su rostro como de sol y sus ojos achinados que parecían sonrientes o asueñados todo el tiempo, casi como si fuera Buda. El superior del lugar de inmediato recibió a la mujer y al ver el cuadro familiar y escuchar la solicitud, sin más, le dio ingreso a Pangán. Con el paso los días le regalaron unos arneses para las piernas, le enseñaron a caminar con ellos, al principio apoyándose en muletas, después con bastones en ambos brazos y al final con uno solo, Pangán el niño de la cara de sol pasó a convertirse en un adolecente feliz, quien por las mañanas estudiaba y por las tardes aprendía un oficio, cuando tenía 17 años recibió su diploma de sexto grado, y además de eso se había convertido en un experto costurero, así que desde hacía años le enviaba dinero a su madre y hermanos para ayudar al gasto familiar. Al mismo ritmo él se dio cuenta que le gustaban las chicas y animado por eso y las películas de su héroe Vandam, un día se inscribió en la federación de físico culturismo y allá se fue a ponerle marcas a todos sus músculos, a ensanchar su espalda, poner como piedra sus bisceps y hacerse un fuerte muchacho, por esos años también conoció a Tacuáz, un muchacho un poco mayor que nuestro héroe, en las mismas condiciones que él, pero más dado a la buena vida que a los sacrificios y por allí se hicieron complemento. Gustavo García Pangán cada día era más y más fornido, había desarrollado una musculatura increíble, y uno de los días de visitas de las patrocinadoras extranjeras al albergue, uno de los gringos científicos de la NASA disfrazado de viejito caritativo vio al joven en su máquina de coser eléctrica y le propuso a boca de jarro. Y tu Pangán no querer ser un súper héroe? Pangán, no lo tomó en serio, pero como los hermanitos del hospital les decían que tenían que tratar con amabilidad a todas las visitas, le contestó. - Claro que me gustaría ser un súper héroe El gringo, con cara de alma caritativa, habló con el superior y a la semana siguiente estaba Pangán en un laboratorio ultra súper sofisticado de la NASA. Lo midieron lo escanearon, le hicieron pruebas de todo tipo y después de varios días que lo pasaban de un aparato para otro, le hicieron unas pruebas de fidelidad, preguntándole. Si tu tener unas piernas nuevas para qué usarlas? Pangán contestó. -Para correr como todo el mundo lo hace. Y si esas piernas nuevas ser muy fuertes y poderosas, tú qué hacer? Pensó, jugar con el equipo Antigua FC. Pero de inmediato desechó la idea, porque no le gustaría que le dijeran que hacia chanchuyo con esa súper piernas de metal, cada vez que driblara a la defensa contraria y metiera espectaculares goles. Así que pensando en su héroe Vandam contestó. - Lucharía por destruir el mal El gringo, creyendo que había sido muy exitoso con el lavado de cerebro, que le estaban propinando le dijo. No decir más, hemos hecho pruebas y pruebas y nosotros creer que podemos hacer unos arneses biónicos para tus piernas, y tu correr igual que Carl Lewis y saltar largo como air Jordan, pero no solo eso, nosotros poner rokets a tus piernas. Tu saber qué son rokets? -Sí, claro clarinetes- Dijo Pangán tratando de dar el tono, y el científico con cara de gringo caritativo continuó. -Así tu poder volar, nosotros hacerte experto en lucha cuerpo a cuerpo, con todo tipo de armas y nosotros enseñarte a usar los lanzagranadas RPG7, a conducir helicópteros Apaches, a disparar ametralladoras antiaéreas y muchas armas más. Pangán no salía de su asombro, sería casi como su héroe de las películas y preguntó en tono ingenuo.

15 - Y podría ayudar a Vandam en alguna de sus películas? El gringo con cara de buena gente, con su mejor tono le contestó. - No No poder el solo ser un héroe del cine, si él golpearse usar un doble, si él caerse usar un doble, si él hacer una toma peligrosa también usar un doble, hasta cuando él hacer el amor con las lindas chicas en las escenas románticas usar un doble, por el temor al SIDA. No, tú no ser un héroe de mentiras, como los de Hollywood, si no tu ser un héroe de verdad, combatir el mal en tu tierra y ayudar a tus hermanos los pobres y con tu ejercito y tu gobierno a imponer la paz firme y duradera. Ante semejante expectativa los asueñados ojos de Pangan se abrieron inmensos y no paró de soñar. E impondrás la paz firme y duradera- se decía felizmente para sí, como si fuese un mantra, -E impondrás la paz firme y duradera. E impondrás la paz firme y duradera. Con semejante tarea los siguientes meses fueron febriles, por el día haciendo ejercicios, entrenando en lucha cuerpo a cuerpo, pruebas de tiro, aprendiendo a usar poderosas y desconcertantes armas y por la noche viendo televisión como enajenado, al cabo de meses sus masa muscular había crecido al doble y sus arneses atómicos estaban listos, eran de reluciente acero inoxidable y traían unos zapatos con plataformas especiales que se elevaban como veinte centímetros del suelo, así que de medir 1.59 cm Pangán pasó a medir casi un metro ochenta, los aparatos tenían varias velocidades, y en la primera caminaba muy gallardo, casi como un modelo, con la segunda podía trotar y con la tercera corría relativamente rápido, como a la velocidad de una bicicleta, la cuarta y la quinta eran para volar, no tenía un aparatoso tanque de combustibles como en las viejas películas, si no usaba unas baterías rectangulares no más grandes que un puño, ni más gruesas que un teléfono móvil que se acomodaban en su espalda, se podían recargar eléctricamente en cualquier tomacorrientes casero por 24 horas y además traía su equipo un cargador subatómico, de alta eficiencia, para hacer los vuelos, en la cuarta velocidad de manera automática las baterías dan paso al cargador subatómico y allá iba Pangán volando por los aires. Al año terminaron las pruebas, Pangán parecía un verdadero y eficiente Gjoe, y en una sala especial de la NASA fue presentado al General Morales, adjunto a la embajada de los Estados Unidos y enlace de Guatemala con la agencia del espacio, y le dijo el jefe de los científicos al militar. -General Morales, le presento a 3-4t, perdón, a nuestro nuevo héroe Súper Pangán, él traer una enseñanza y un equipo que ser muy importante para salvaguardar la paz y la seguridad en Guatemala y en Centroamérica y por supuesto él estar a las órdenes de usted. Nosotros supervisar todo desde la NASA, y para que todo resultar bien usted informarnos de sus éxitos. Había una vez El General Morales no muy bueno para los discursos simplemente asintió y se cuadró ante el gringo y le pidió a Pangán que lo acompañara a su nuevo hogar. El mismo estaba en una base militar de Guatemala, volaron desde la Florida y de inmediato él se instaló y en su habitación puso el poster de su héroe del cine, un gran anuncio de la chica Gallo, y la imagen de Madona luciendo sus mejores galas a lo retro, como si fuera la Marilyn. A las 4 semanas el General Morales escribía a la NASA y al pentágono. El 3-4t Pangán ha sido un éxito, hemos desarticulado varias bandas de secuestradores con su ayuda, rescatamos varias víctimas de secuestro y ahora lo estamos usando en misiones en el campo, donde al mando de los helicópteros Apaches que nos dieron a infringido muchas bajas a los subversivos. Pangán era el arma estrella del ejército nacional de Guatemala y de manera clandestina lo sacaban en misiones ultra secretas por todo el territorio nacional y el centroamericano. Meses después de haber participado Súper Pangán en la guerra civil, la guerrilla había tomado la decisión de sentarse a negociar la paz firme y duradera, las bajas eran tantas y los combates tan impresionantes que los guerrilleros ya no querían combatir. Con el crimen organizado ocurría lo mismo, hasta en el mismo corazón de las bandas aparecía repentinamente Pangán para destruir a los malos, muchas damiselas y no tan damiselas eran rescatadas por sus poderosos brazos, después que había morongueado bien a los malhechores y ya esposados se los entregaba a la policía, para que estos se tomaran las fotos haciendo sus capturas y se las entregaran a la prensa. Cuando no estaba en combate, durante el día, participaba en un programa del gobierno de Di no las drogas y Cuidado con el SIDA, y por las noches se hacía acompañar de sus nuevos amigos oficiales del ejército a tomar Whisky, escuchar a Madona y toquetear mujeres de lupanares caros y medio caros. Fueron años de remediar cuanto entuerto fue necesario arreglar en la región y para la seguridad nacional del país. En Guatemala nadie lo decía, pero todos lo sabíamos, había terminado toda una era de oscuridad y sombras desde la venida de Súper Pangán, en su mejor momento hasta le dieron un uniforme de combate, con boina de kaibil incluida y lo condecoraron con medallas y cruces, uno de los tantos 30s de junio de la década de los noventa. Pero todo principio tiene un fin, cuando se firmó la paz firme y duradera, Pangán ya no tuvo misiones, Las Madres Angustiadas ya no lo quisieron proponer para héroe anónimo, y para colmo de males se había enamorado de la Lorraine, una chica que conoció en sus correrías por los burdeles de la ciudad y con quien creía tener un gran amor, así que al día siguiente de la firma de los acuerdo de paz, vino el científico gringo cara de buena gente, y con su mejor mirada le dijo. Ok Pangán hasta los superhéroes merecer vacaciones Acto seguido le quitó los arneses mágicos y las baterías recargables y a cambio le dio sus antiguos arneses, el cambio fue tan brusco que Pangán tuvo dificultad para caminar, en un abrir y cerrar de ojos se volvió chiquito y se quedó sin súper poderes, los primeros meses se quedó en la ciudad y a las semanas de la famosa firma lo echaron de la base militar, ese día ni el General Morales llegó a despedirlo, con lo que le había quedado de su sueldo de soldado raso vivió algunos meses en la capital y volvió a visitar a Lorraine. Semanas después cuando se le acabó la plata se dio cuenta que la chica había perdido interés en él y ya no lo acompañaba en la bebetoria para platicar. A las pocas semanas de los desaires de la amada, un tanto decepcionado nuestro héroe regresó a su amada ciudad la Antigua Guatemala, volvió a ser el costurero que era, buscó a su fiel amigo Tacuáz y ahora se divertían juntos, cada vez que podían, poniendo canciones de los Terrícolas, el grupo Miramar o de los Yonics, mientras esperaba Pangán que una nueva ola de terror que oscureciera Guatemala y lo volvieran a llamar. Así que cuando oían que habían matado otro chofer del transporte urbano, que iban cuarenta secuestros en el primer trimestre del año, que nos estamos volviendo medalla de plata en femicidio o que un sangriento motín se desarrollaba en el preventivo de la zona 18, donde los reos estaban jugando futbol con las cabezas de los decapitados, se miraba con Tacuáz, ambos sonreían esperanzados y Pangán agregaba. -Ya me van a llamar, es cuestión de días... Y Tacuáz con más entusiasmo le afirmaba. - Por supuesto, vos sos es el único súper héroe guatemalteco de verdad. Ni el mismo Tecún Umán ha estado en tantas batallas como vos! El Atanasio tzul se queda chiquito a la par tuya Hasta le deberían de poner a un estadio tu nombre como hicieron con Doroteo Guamuch Y Tacuáz volvía hacer recuentos. -Ayer tiraron una granada en un bus, antier mutilaron a seis personas, las dejaron repartidas en bolsas de basura y no han encontrado todas las cabezas. Una de las madres angustiadas será ministra de gobernación o algo así Ahora sí que te llaman De esa manera pasaban las noches Pangán y Tacuáz, haciendo recuentos de las desgracias de chapinlandia y Pangán en silencio añorando sus súper arneses, para ir a servirle al ejército y a la nación, salvar a Guatemala de la noche oscura que estaba viviendo y lograr otra paz firme y más duradera. Mientras los amigos esperaban que lo llamaran, Tacuáz ponía una canción más de los Terrícolas, y al ritmo de Sufrir, Pangán pedía. - Otro litro más CÓDICE / 15

16 Noticias del Centro PEN Guatemala MÉXICO: Líder del G-20 en matar a periodistas y escritores Ocho periodistas y escritores han sido asesinados en México en los primeros seis meses del Esta vergonzosa cifra sitúa a México al casi mismo nivel que Siria, en cuanto al número de víctimas. Aunque hay otros países del G-20 que tampoco son buenos ejemplos a la hora de proteger la libertad de expresión como Rusia y China- en ninguno de ellos se asesina a tantos escritores como en México. (PEN-INTERNACIO- NAL). Hugo Gordillo triunfa en Juegos Florales El escritor guatemalteco Hugo Gordillo obtuvo el primer lugar en la rama de cuento de los Juegos Florales Trinacionales (El Salvador, Honduras y Guatemala) de Esquipulas El cuento de Gordillo se titula El escritor y contiene diez páginas. En su último párrafo dice: Resignado ante lo que había visto, Nemo apagó el televisor, se levantó del sillón y se dirigió al escritorio. Encendió la computadora, se conectó a la Internet y empezó a enviar la novela por correo electrónico a todos sus contactos, como una muestra de aprecio para quienes sabían leer. ( ). Miguel Ángel Chinchilla publica El regreso de Uraco El escritor salvadoreño recién acaba de publicar la novela El regreso de Uraco: Fantasía Apocalìptica. El regreso de Uraco es una novela donde se relata cómo un individuo fantasmagórico, Uraco, regresa quinientos años en el tiempo al rescate de sus hijos siameses con el propósito de traerlos a la actividad del siglo XXI justo cuando la humanidad, a la luz de las predicciones mayas, se apresta a recibir una nueva era maya, terminando el 13 Bactun en este año 2012, para perpetrar una venganza histórica contra las injusticias cometidas por grupos sociales imperialistas ( ) comenta Carlos René García Escobar. PEN-Guatemala declara Presidente Honorario a Carlos René García El Centro PEN-Guatemala realizó un homenaje y entregó un pergamino en donde se declara Presidente Honorario de dicha asociación de escritores al antropólogo y escritor Carlos René García Escobar. El acto se realizó en el parque 10 de mayo de la Colonia La Florida, zona 19 de Ciudad de Guatemala, lugar donde los sábados funciona la Escuela de Artes Plásticas al aire libre y que lleva el nombre de Carlos René García Escobar. A la actividad concurrieron directivos del Centro PEN Guatemala, profesores y alumnos de la Escuela de Artes Plásticas, así como familiares y amigos de Carlos René. 16 / CÓDICE

17 -Denuncia- Elder Exvedi Morales Mérida El pasado viernes 4 de mayo, fui agredido verbalmente por un sujeto llamado Isaias Herrera, quien estaba en estado de embriaguez. Asimismo, me tomó del cuello y me conminó a darnos de golpes. Yo me negué, a pesar del agravio, y le dije que hablaríamos al día siguiente. No es la primera vez que me denigra, ya que hace unos cinco años sucedió lo mismo. En esa ocasión, me dijo que con la revista que yo publicaba se limpiaba el trasero. Claro, lo dijo con un lenguaje propio de gente de esa calaña. El año pasado sucedió lo mismo, pero el 4 de mayo, me dijo que ya le había pagado a un sujeto que solo conozco por su mote y es El uñas para que me agrediera físicamente. Ya le pagué al Uñas para que le dé una buena vergueada. Y si lo meten al bote, yo pago para que lo saquen al chile, me gritó. También me dijo que otros me matarían por las pendejadas que escribía. Se refería a mi posición firme en contra de los que atentan contra el medioambiente y porque me he convertido en la voz crítica del lugar, en donde mis opiniones se reproducen por medios impresos y radiofónicos. Este sujeto (Isaias Herrera) que labora como contador en una ONG, y cuya tarea es, supuestamente, velar por los derechos humanos, siempre ha sido violento. Ha sido detenido por la Policía Nacional Civil, pero en breve logra su libertad. Qué sucede con el sistema de justicia? Y las leyes? Se deben aplicar las penas que tengan que aplicar a todo aquel que cometa este tipo de abusos, pero entiendo que estamos en Guatemala donde todo apesta a inmundicia. Sus actos criminales que atentan contra el derecho a la vida, y la libertad son la más clara evidencia de cómo andan las cosas en nuestro país. Yo exijo a las autoridades de seguridad de Guatemala que la libertad de expresión es un derecho establecido en la Constitución Política de la República, por lo que es deber del Estado garantizar la integridad, física, moral e intelectual de toda persona que en uso de dicha garantía se vea afectada por cualquier acto en su contra; requiero al Gobierno del Estado guatemalteco las garantías necesarias para el ejercicio de la libertad de expresión y de libertad de prensa, en virtud de que hechos como el ocurrido provocan temor entre los profesionales de la información. Cómo es posible que estos tipos que, casi siempre andan armados, intimiden a la gente honrada y trabajadora sin que las autoridades cumplan con su obligación? Ya basta de tanto silencio, de tanta complicidad, de arrodillarnos ante tanta injusticia. El año pasado también fui intimidado por otro sujeto que se dedica a la extracción de arena en el río Huista, pero en ningún momento me sentí solo, debido a que tuve el apoyo del periodista y abogado Eduardo Villatoro; asimismo, del Centro PEN Guatemala, que asocia a periodistas, poetas, escritores, editores y narradores, e integrante del Centro PEN Internacional, con sede en Londres, Inglaterra; y de CERIGUA (Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala). Definitivamente, la libertad de expresión es vista como un tabú en muchas regiones de Guatemala, y los comunicadores sociales corremos muchos riesgos. Elder Exvedi Morales Mérida, Santa Ana Huista, Huehuetenango, lunes 28 de mayo de 2012 CÓDICE / 17

18 Poesía Poemas de Esward Maquinse Gómez Vásquez TONTA NOCHE Tonta noche, no ves que aguardo con impaciencia una impuntual cita, y tú, atrevida y conspicua, mandas un trajín de lluvia. Luego, por un momento, pretendes solapar esta precipitación. Pero maldición, fue una trampa! Y sigues con tu afán de irrumpir mi levitación sentimental; que al final derrotado, recurro a retornar por donde vine, esperando ser citado nuevamente por mi amada luna. TÚ Y YO La belleza de las estrellas se opaca con la tuya, las nubes del cielo no impiden que tu resplandor agonice, pero la agonía de mi corazón despilfarra esperanzas por llegar a donde tú. Sin darte cuenta, me guías por el denso bosque de la incertidumbre. Arrimado, hundido, perpetrado con singular aspereza te recorro en sueños turbulentos. Atónito, mudo y mutilado en el techo indago tu imagen. Y tú? y tú recostada posas en el horizonte, disminuyendo mi hiperactividad. Y yo? yo tonto soñador en poseer tu minúsculo cuerpo. Y no sé si es realidad o sueño, mas tú, el origen de mi locura, omnipotente en mi corazón. TU EXISTENCIA EN MI SER Mis manos tiemblan, la mirada se ablanda, el cuerpo decae, el sudor frio recorre mis sienes Se agita mi aliento paralelo al latido de mi corazón. Todo en conjunto se estremece y enmudece, pido tregua en mi alma y un no concibo de repuesta. Tan entrañable es tu mística? Será menester ser recluso del amor? No me importa! ahora de ti vivo y tuyo quiero ser por toda la eternidad. MACONDO ENCUENTRO ÍNTIMO Una mano toca tu cadera, y mis labios, sumergidos, sin pena alguna, en un beso intenso están. La ropa impide que toque el paraíso. Mis ojos encuentran a los tuyos, están cerrados cerrados por la dulzura de nuestro amor. Pronto mis dedos, después de juguetear con tu pelo, encuentran tus pechos blandos, suaves y apetecibles. Sin falta, te susurro al oído el zumbido de mi corazón. Pueblo que dibuja sus mañanas, que pinta sus mujeres, que esculpe sus valientes varones, que borra sus desdichas. En ese pequeño espacio íntimo, encontró momentos de alegría, diminutas sensaciones de paz, lejos del caos y la envidia, justo ahí, en la entrega del amor, surge el origen de todo. La causa que perfecciona los aires, la que va hacia la frondosa realidad de un sueño, esa misteriosa onda que el silencio no contiene, esa mistral chispa que le da el plus a la valentía, la única verdad que el hombre descubre, emblema de una cadena de vida, la justa causa de la injusta muerte, el marchamo de una caricia. 18 / CÓDICE

19 En memoria a la diva silenciada Dennis Escobar Galicia F ue un 4 de agosto de 1962, en Hollywood, cuando /la hallaron muerta/ /en su cama con la mano en el teléfono/ /Y los detectives no supieron/ /a quién iba a llamar/ /Fue/ /como alguien que ha marcado/ /el número de la única voz amiga/ /y oye tan solo la voz de un disco/ /que dice: WRONG NUMBER/. (Ernesto Cardenal). Quien escribe esto ni siquiera había nacido y ya ella triunfaba y deslumbraba al mundo. La vio por primera vez cuando, siendo niño, la encontró en unas revistas que su padre guardaba celosamente en una de sus valijas. La miró como un ángel: candorosa, sonriente y sin nada feo que ocultar. Años después, ya de adolescente, la reconoció en las películas Con faldas y a lo loco y en La tentación vive arriba y no pudo impedir que su respiración se excitara y que su mano se deslizara bajo los pantalones. Mucho tiempo después, en México, asistió a un club de fans y ahí rodeado de extensa documentación se adentró en la vida y obra de la fulgurante actriz que obsesionó hasta a personajes como el escritor guatemalteco Luis de Lión. Cuando ella nació en los Ángeles ( Sería coincidencia?), el 1 de junio de 1926, ya muchas luminarias descollaban en el mundo de la farándula cinematográfica y cerraban filas para que nadie más ingresara, mucho menos una pobre huerfanita que se las había pasado de orfanato en orfanato. Pero ella, no obstante sus desgracias, comparadas a las que hoy sufren muchas niñas de la calle, se yergue sobre su despampanante metro sesenta y cinco e ingresa a la 20 th Century-Fox y se convierte en rutilante estrella de cine. Quienes consideran que la diva no aportó nada bueno al cine y se limitó a ser una peliteñida de caderas oscilantes, sex-simbol, están totalmente equivocados. La miopía del desliz es producto del ninguneo y la invisibilización que la mafia hollywoodense, apoyada por la CIA y el FBI, quiso hacer de la rubia talentosa que sedujo a los máximos dirigentes del imperialismo norteamericano de ese entonces (los hermanos Kennedy). Norma Jean Mortenson (o Baker) fue la actriz más taquillera en los años 50 del siglo pasado en los Estados Unidos. Además fue galardonada con el Globo de Oro a la mejor actriz de comedia por la prensa de Hollywood; en 1959 le otorgaron el David di Donatello, el equivalente italiano a los oscars norteamericanos; y los franceses le concedieron su L Etoile de Cristal, el máximo galardón que se puede conceder a una artista de cine. Ella, la que también cultivaba la poesía en sus momentos depresivos, compartió cartelera con grandes figuras del cine como Clark Gable, Jack Lemmon, Bette Davis, Laurence Olivier, Los hermanos Marx, Mickey Rooney, Claudette Colbert, Barbara Stanwyck, Cary Grant, Robert Mitchum, Dean Martin y Montgomery Clift. Esa mujer, que sabía mover las caderas de una manera increíble y abrir la boca como ninguna, rivalizó con estrellas como Elizabeth Taylor y Sofía Loren. Esa misma diva que se tuteó con intelectuales de la talla de Ernest Hemingway, Truman Capote y Arthur Miller (uno de sus maridos), fue estrella protagónica de películas como La jungla de asfalto, Eva al desnudo, Falsa Juventud, Niágara, Luces de candilejas, Río sin retorno, Vidas rebeldes (este fue el último filme que interpretó Clark Gable, falleció doce días después de finalizar el rodaje). Esa huerfanita violada a los nueve años y empleadita de tienda que a los dieciséis se quiso matar, soñó ser estrella de cine y lo logró. Pero, como una golondrina no hace verano, le fue imposible tan solo rozar los gruesos nudos del cerco de la industria ideológica del más arrogante de los imperios. Y como sabía mucho, pues los seducidos amantes eran de mucha importancia en secretos de Estado de una nación poderosa y guardiana del mundo, fue silenciada y después ninguneada por la misma industria del espectáculo que se hizo millonaria a costa de la rubia tonta, la vampiresa, así calificada por ellos. /Señor/ /quienquiera que haya sido el que ella/ /iba a llamar y no llamó/ ( ) / Contesta tú/ /el teléfono!/ (idem). SEÑOR, escucha mi ruego: No te olvides de Marilyn Monroe! CÓDICE / 19

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