Estrategia Industrial de Andalucía Energía

Transcripción

1 Estrategia Industrial de Andalucía

2 Creación y supervivencia de empresas Nuestras conclusiones Los datos que se exponen en este documento permiten alcanzar las siguientes conclusiones sobre la energía en la industria andaluza: La dependencia energética de la industria andaluza es baja. Únicamente en Minerales no metálicos, Papel y artes gráficas y Metalurgia el gasto está por encima del 5% de los costes de explotación. Con carácter general, no parece ser por tanto, un factor decisivo en la competitvidad. La electricidad tiene un peso mayoritario entre las diversas fuentes energéticas (52%), a pesar de su menor aportación en energía, que es del 15,6%. La mayor aportación en energía, sin embargo, le corresponde al gas natural. La biomasa tiene un papel significativo en la provisión de energía a la industria que experimentó una retracción hasta 2006, aunque en los últimos años se está recuperando. La industria, sin embargo, representa la tercera parte del consumo energético de Andalucía. La intensidad energética está mostrando una tendencia de medio plazo al alza, tras la reducción entre 2003 y 2006, cuando se logró un menor aumento del consumo de energía en la industria que el incremento de VAB gracias a la aplicación de medidas de ahorro y eficiencia. Las provincias de Cádiz y Huelva absorben la mitad de consumo energético industrial de la región debido a la composición sectorial de su industria. 2

3 Los datos Consumo energético La industria andaluza registra un peso del coste energético más reducido que en la industria española. Ello es lógicamente debido a la composición interna por sectores de ambos conjuntos. La composición de la industria andaluza es menos intensiva en energía. En 2012 la industria consumió el 33,2% de la energía regional, algo menos que la proporción española. El transporte supuso el 34,8%, una parte del mismo vinculado a la industria andaluza, estimándose que la industria está relacionada con cerca del 40% del consumo energético de Andalucía, aunque en los últimos años está perdiendo importancia. La industria regional consumió ktep en 2012, experimentando una reducción mantenida desde Esta reducción le ha hecho perder peso en el consumo total regional, pasando del 37,7% en 2003, pasando por el 32,9% en 2006 (año de menor participación) y recuperándose algo hasta el nivel actual. Intensidad energética, ahorro y eficiencia La relación entre producción y consumo energético (intensidad energética) experimentó un descenso entre 2003 y A partir de esa fecho inició un ascenso que se ha interrumpido en 2011, año en el que volvió a descender (4,2%). La intensidad energética creció entre 2007 y 2011 porque el consumo final evolucionó al alza, a pesar de que el VAB se reducía desde Evolución de la intensidad energética de la industria Fuente: Datos energéticos de Andalucía Agencia Andaluza de la La caída del VAB de industria en 2009 no fue tan radical como la de consumo final de energía en el sector, lo cual hizo descender la intensidad energética. Los años siguientes el consumo se ha mantenido, e incluso descendido en 2012, y el VAB se ha recuperado respecto a 2009, lo cual ha supuesto el citado incremento en la intensidad energética entre 2009 y 2011 y su descenso final en

4 Fuente: Datos energéticos de Andalucía Agencia Andaluza de la La reducción del consumo ha tenido un doble componente, por un lado la reducción debida al menor nivel de actividad y, por otro, la reducción derivada de las medidas de ahorro y eficiencia adoptadas por las empresas. Ahorro y eficiencia en la industria andaluza. Ktep Fuente: Agencia Andaluza de la Consumo por ramas Según los datos recogidos por la Encuesta Industrial las ramas manufactureras con mayor peso de la energía en sus costes de explotación son: Productos minerales no metálicos diversos (CNAE 23), el 9,51% de sus costes. Papel y artes gráficas (CNAE 17, 18), el 6,35%. Metalurgia (CNAE 24), el 5,81%. Madera y corcho (CNAE 16), el 4,90%. Industria química (CNAE 20), el 4,80%. 4

5 Si analizamos que ramas son las que más energía han consumido observamos una gran concentración en cuatro de ellas, que absorben conjuntamente la mitad del consumo energético de la industria. La alimentación pesa mucho por su tamaño, aunque tenga un menor consumo relativo en relación a su proceso productivo. Alimentación (CNAE 10), absorbe el 15,8%. Metalurgia (CNAE 24), el 11,92%. Industria química (CNAE 20), el 12,83%. Productos minerales no metálicos diversos (CNAE 23), el 11,17%. Distribuyendo el coste por tipo de energía, se observa como la electricidad tiene un peso mayoritario (53%), a pesar de su menor aportación en energía. La segunda fuente de energía de la industria en coste es el gas (28%), en tanto que los productos petrolíferos suponen el 20%. El peso relativo del coste de la electricidad está en ascenso en los últimos, aunque solo supone el 1,37% de los costes de explotación totales. Las ramas en las que más importancia tiene la electricidad en costes son Metalurgia, Papel y artes gráficas y Productos minerales no metálicos. Consumo por fuente El gas natural y los productos petrolíferos suministran conjuntamente las tres cuartas partes de la energía que necesita la industria andaluza. El gas suministró 1.588,3 ktep, en tanto que se consumieron 1.519,3 ktep de productos petrolíferos. Estas cifras ponen de manifiesta la fuerte dependencia de la industria respecto a los combustibles fósiles. La industria es actualmente el principal consumidor de gas en la región, el 79,8%. La evolución ha sido ascendente desde 2003, con una punta en 2008 (2.074,2 ktep) y desciende lentamente hasta Se ha ido produciendo una sustitución de productos petrolíferos por gas, aunque en los últimos años se registra también una reducción del consumo de gas. El consumo de productos petrolíferos se ha reducido el 36% desde El tercer combustible fósil, el carbón, tiene una presencia marginal, con 4,5 ktep, no llega al 1 por mil de la energía consumida en la industria. A un nivel claramente inferior se sitúa el suministro de electricidad con el 15,6% de la energía consumida. La industria consume el 21,7% de la electricidad regional, muy por debajo del sector residencial (40,5%) y de los servicios (32,7%). El consumo eléctrico es la fuente más estable de las analizadas. En 2003 el consumo fue de 9.734,1 GW-h, se mantuvo en el entorno de los GW-h hasta 2008, descendiendo los últimos años a un nivel entre GW-h y GW-h. En el consumo de energías de fuentes renovables en la industria (32,4%) se sitúa a la par con el transporte (34,1%). La evolución del consumo de renovables desde 2003 ha sido muy variable, con un descenso importante hasta 2006, subida rápida hasta 2008 y 5

6 descenso al nivel del entorno de los 300 ktep para el resto de los años. Si bien entre 2011 y 2012 se registró un ascenso del 13,4% en consumo de esta fuente de energía, frente al descenso registrado en el resto de las fuentes. Fuente: Datos energéticos de Andalucía Agencia Andaluza de la 6

7 Distribución territorial del consumo energético La distribución provincial del consumo energético sitúa a Cádiz como la mayor consumidora, seguida de Huelva, las dos provincias que acogen en sus puertos grandes industrias intensamente consumidoras de energía. En una situación intermedia se coloca Sevilla con un nivel de industrialización apreciable y ya en niveles inferiores el resto. Distribución provincial del consumo energético industrial PROVINCIA % respecto consumo energético total provincial Consumo industria ktep % provincia / total regional Sevilla 25,8 622,5 15,17 Málaga 13,9 277,0 6,75 Jaén 29,8 341,8 8,33 Huelva 61,6 948,6 23,12 Granada 19,8 243,6 5,94 Córdoba 24,8 290,0 7,07 Cádiz 53, ,3 29,65 Almería 17,8 162,7 3,97 Fuente: Datos energéticos de Andalucía Agencia Andaluza de la Se puede apreciar el significativo peso del consumo energético de la industria sobre el consumo total provincial en Huelva y Cádiz. En la primera provincia casi dos terceras partes del consumo energético de la provincia lo absorbe la industria. También son estas dos provincias las que encabezan el consumo regional, entre las dos absorben más de la mitad. 7