Las Victorias En La Humildad Hermano Samuel Tavico Tercer Servicio Guatemala, 27 de noviembre del Año De La Abundancia

Transcripción

1 Cuando vemos el ministerio de nuestro Señor Jesús podemos notar que una de las formas en que enseñaba a sus discípulos por medio de parábolas, con el fin de que sus discípulos aprendieran, sin embargo vemos la única vez que les dice que aprendan de Él es para enseñarles humildad. (Mateo 11:29) aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón. En esta oportunidad hablaremos de la humildad, y las victorias que vienen como producto de ella, para ello veremos qué es la humildad; esta palabra es traducida de la palabra hebrea anavá H6035; condescendencia, humana y subj. (Modestia), o divina y obj. (Clemencia): gentileza, humildad, mansedumbre. Diccionario secular: Es una virtud moral contraria a la soberbia, que posee el ser humano en reconocer sus debilidades, cualidades y capacidades y aprovecharlas para obrar en bien de los demás, sin decirlo. Esto era algo de suma importancia que aprendieran de su maestro, pues no les dice que aprendan a predicar, a sanar enfermos o a echar fuera demonios, lo que le interesaba al Señor que aprendieran de Él era su humildad. Vemos como el apóstol Pablo nos exhorta a tener el mismo sentir de Cristo quien no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse sino que se humilló (Tapeinós= humillado) a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz (Filipenses 2:6.8) En el proceso de exaltación de nuestro Señor Jesucristo podemos ver una relación entre la humillación y la exaltación, y es que no se puede ser exaltado sin ser humilde y no se puede ser humilde sin antes haber sido humillado, pues Él se humillo y aprendió humildad, por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le confirió el nombre que es sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, (Filipenses 2:9.10 LBLA) Pero recalquemos que su victoria no fue en que era Rey, su victoria estuvo en que se humillo a sí mismo y esa victoria nos permite que hoy estemos en la casa de Jehová. Victoria Humildad Humillación 1

2 Pero también podemos mencionar otros ejemplos de siervos de Dios que pasaron por un proceso de humillación para luego ser honrados. DAVID VENCE EL DESPRECIO 1Samuel 17:38-39 (LBLA) Saúl vistió a David con sus ropas militares, le puso un yelmo de bronce en la cabeza y lo cubrió con una armadura. David se ciñó la espada sobre sus ropas militares y trató de caminar, pues no se las había probado antes. Entonces David dijo a Saúl: No puedo caminar con esto, pues no tengo experiencia con ellas. David se las quitó. La humildad de David en este versículo radica en que reconoció su debilidad, y que no podía con la carga que se le estaba poniendo. El reconocer nuestras limitaciones delante de un rey puede ser difícil, pero es de humildes aceptar nuestras carencias y no tratar de asombrar a nadie por nuestras fuerzas. 1Samuel 17:44-46 (LBLA) También dijo el filisteo a David: Ven a mí, y daré tu carne a las aves del cielo y a las fieras del campo. Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo a ti en el nombre del SEÑOR de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado. El SEÑOR te entregará hoy en mis manos, y yo te derribaré y te cortaré la cabeza. Y daré hoy los cadáveres del ejército de los filisteos a las aves del cielo y a las fieras de la tierra, para que toda la tierra sepa que hay Dios en Israel, En el contexto de este versículo vemos como Goliat estaba menospreciando y tratando de humillar a David por su corta edad y su aspecto físico, sin embargo vemos como David puede avergonzar a Goliat cuando reconoce que no va en su nombre, ni enviado por Saúl, su humildad sale a luz cuando reconoce quien lo envió. Pues humildad como veíamos en el versículo anterior no es creerse más, pero en este versículo vemos que tampoco es creerse menos. MEFIBOSET VENCE LA VERGUENZA 2Samuel 9:3 (LBLA) Y dijo el rey: No queda aún alguien de la casa de Saúl a quien yo pueda mostrar la bondad de Dios? Y Siba respondió al rey: Aún queda un hijo de Jonatán lisiado de ambos pies. Algo interesante a resaltar es la intención de Siba al querer menospreciar a Mefiboset resaltando su discapacidad, pues en ningún momento David pregunto la condición en que se encontraba, la pregunta era únicamente si había alguien en la casa de Saúl. Esto nos puede servir como ejemplo cuando la humillación viene por una murmuración a nuestras espaldas, tratando de desprestigiarnos por nuestros errores o nuestro pasado. 2Samuel 9:7 (LBLA) David le dijo: No temas, porque ciertamente te mostraré bondad por amor a tu padre Jonatán, y te devolveré toda la tierra de tu abuelo Saúl; y tú comerás siempre a mi mesa. 2

3 Aquí vemos que a pesar que el enemigo trate de humillar frente a nuestro Rey, a Él no le importa, y está dispuesto a invitarnos a Su mesa. 2Samuel 9:8 (LBLA) Se postró él de nuevo, y dijo: Quién es tu siervo, para que tomes en cuenta a un perro muerto como yo? El nombre de Mefiboset significa: el que vence la vergüenza, sin embargo en este versículo vemos como él tiene un concepto diferente a su verdadera identidad. Mefiboset ya estaba cayendo en un menosprecio, y aquí es importante resaltar que existe una línea muy delgada entre la humildad y el menosprecio, pues la humildad es reconocer que no somos dignos, y el menosprecio es creer que no somos dignos. Lo cual es una diferencia demasiado grande. 2Samuel 9:9 (LBLA) Entonces el rey llamó a Siba, siervo de Saúl, y le dijo: Todo lo que pertenecía a Saúl y a su casa, lo he dado al nieto de tu señor. Y tú, tus hijos y tus siervos cultivaréis la tierra para él, y le llevarás los frutos para que el nieto de tu señor tenga alimento; sin embargo, Mefiboset, nieto de tu señor, comerá siempre a mi mesa. Siba tenía quince hijos y veinte siervos. Dios puede llamar a tu adversario, al que te quiso humillar e incluso te quito lo que tenías para ordenarle que te sea devuelto con creces. NOSOTROS VENCEMOS A NUESTROS ENEMIGOS Proverbios 25:21-22 (LBLA) Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer pan, y si tiene sed, dale de beber agua; porque así amontonarás brasas sobre su cabeza, y el SEÑOR te recompensará. Proverbios 25:22 (TLA) Así Dios te premiará, y harás que a tu enemigo le arda la cara de vergüenza. Si no comenzamos a humillar a nuestro adversario con nuestra humildad, él nos humillará para que aprendamos humildad. Debemos alcanzar la estatura de Jesús, quien a pesar de que sabía que Judas lo iba a traicionar, le permitió sentarse a la mesa con El, y por esa razón fue que Él nos dice que aprendamos de Él que es manso y humilde de corazón. EZEQUÍAS VENCIO LAS MALDICIONES 2Reyes 19:14-16 (LBLA) Entonces Ezequías tomó la carta de mano de los mensajeros y la leyó, y subió a la casa del SEÑOR y la extendió delante del SEÑOR. Y oró Ezequías delante del SEÑOR, y dijo: Oh SEÑOR, Dios de Israel, que estás sobre los querubines, sólo tú eres Dios de todos los reinos de la tierra. Tú hiciste los cielos y la tierra. Inclina, oh SEÑOR, tu oído y escucha; abre, oh SEÑOR, tus ojos y mira; escucha las palabras que Senaquerib ha enviado para injuriar al Dios vivo. 3

4 En el contexto de estos versículos, Senaquerib quería invadir Judá y envió cartas diciendo como había vencido sobre los diferentes reyes de otras tierras, y tratando de intimidarlo diciéndole que él no sería la excepción, pero Ezequías se humillo delante del Señor para que El Señor concediera una victoria inalcanzable pues Senaquerib había vencido a los demás reinos. La clave de esta victoria es nuevamente la humillación delante de Dios, cuando nuestros enemigos vengan en contra nuestra vayamos delante del Señor y dejemos que Él pelee por nosotros. 2Reyes 19:35 (LBLA) Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel del SEÑOR e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios; cuando los demás se levantaron por la mañana, he aquí, todos eran cadáveres. Dios tomo la batalla y le entrego la victoria a consecuencia de la humillación de Ezequías en la intimidad delante del Dios y no delante de los hombres. No podemos pretender obtener una victoria en lo público sino la hemos peleado en lo espiritual, en el secreto de Dios. (Mateo 6:6) JACOB VENCIO SU PASADO Génesis 32:27 (LBLA) Y él le dijo: Cómo te llamas? Y él respondió: Jacob. Y el hombre dijo: Ya no será tu nombre Jacob, sino Israel, porque has luchado con Dios y con los hombres, y has prevalecido. Cuando le preguntan el nombre a Jacob, él reconoció su identidad, pues su nombre significa engañador, y al reconocer su condición le fue cambiado el nombre. Esto lo habilito más adelante cuando su esposa Raquel quiere maldecir a su ultimo hijo al querer llamarlo Benoni (hijo de mi siniestra) Jacob se opone y le cambia el nombre a Benjamín (hijo de mi diestra). Él pudo cambiarle el nombre porque a él se lo habían cambiado primero, lo que nos enseña que cuando llegue nuestra honra, podremos y debemos honrar a los demás. JOSÉ VENCIO LA ENVIDIA Y LA CALUMNIA Génesis 37:28 (LBLA) Pasaron entonces unos mercaderes madianitas, y ellos sacaron a José, subiéndolo del pozo, y vendieron a José a los ismaelitas por veinte piezas de plata. Y éstos llevaron a José a Egipto. José es uno de los grandes ejemplos de superación pero a la vez de menosprecio en su casa, no solamente por sus hermanos, sino también por su padre al tratar de callarlo cuando trataba de contar sus sueños. Génesis 39:19 (LBLA) Y aconteció que cuando su señor escuchó las palabras que su mujer le habló, diciendo: Esto es lo que tu esclavo me hizo, se encendió su ira. Entonces el amo de José lo 4

5 tomó y lo echó en la cárcel, en el lugar donde se encerraba a los presos del rey; y allí permaneció en la cárcel. Veamos como Dios lo había metido en un proceso de humildad, no solo fue menospreciado en su casa, fue vendido por sus hermanos, era esclavo y ahora lo estaban acusando injustamente lo cual lo llevo a un nivel más bajo pues fue metido a la cárcel. Pero en medio de todo esto Dios lo estaba preparando para ser honrado. Génesis 41:38-40 (LBLA) Entonces Faraón dijo a sus siervos: Podemos hallar un hombre como éste, en quien esté el espíritu de Dios? Y Faraón dijo a José: Puesto que Dios te ha hecho saber todo esto, no hay nadie tan prudente ni tan sabio como tú. Tú estarás sobre mi casa, y todo mi pueblo obedecerá tus órdenes; solamente en el trono yo seré mayor que tú. Aquí inicia su honra, pues fue en el mismo lugar donde había sido esclavo, donde había sido acusado, donde había sido preso en donde fue exaltado. El Señor te va a llevar al lugar de tu humillación para honrarte, pero para que esto es necesaria la humillación. RECOMPENSA DE LA HUMILDAD Dios tiene un propósito por cada humillación que podamos haber vivido, Él tiene preparadas recompensas si salimos aprobados de ellas, dentro de las recompensas encontramos: Proverbios 22:4 (LBLA) La recompensa de la humildad y el temor del SEÑOR son la riqueza, el honor y la vida. Proverbios 15:33 (LBLA) El temor del SEÑOR es instrucción de sabiduría, y antes de la gloria está la humildad. Notemos en estos dos versículos que la humildad y el temor del Señor van de la mano, pues este nos guardara de practicar una falsa humildad, sin dar alardes de ella. Solo cuando somos humildes podemos valorar el proceso de humillación, y reconocer como lo hizo el salmista al decir: Bueno me fue haber sido humillado para aprender tus estatutos (Salmos 119:71). Solo humillándonos bajo la poderosa mano de Dios podremos cobrar esas victorias inalcanzables por nuestras fuerzas. 5