ARTÍCULOS UN PASO MÁS EN LA EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL

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1 ARTÍCULOS UN PASO MÁS EN LA EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL La Evaluación de Impacto Ambiental (E.I.A.) es un instrumento diseñado en los años 70 para prevenir la incidencia ambiental que los proyectos e iniciativas puedan producir sobre el medio ambiente. La reglamentación básica española del 86 ha sido recientemente modificada por otra que amplía el número de supuestos sometidos a E.I.A. La Rioja no es ajena a este cambio y en los últimos seis meses ha multiplicado el número de proyectos sometidos a evaluación desde Josef H. Reichholf, profesor de biología evolutiva y ecología en la Universidad de Munich y miembro directivo del World Wide Fund for Nature, en el prólogo de su libro de mayor éxito La aparición del hombre, afirma lo siguiente refiriéndose a la especie humana: En ningún lugar encajamos en los hábitats naturales, así como, por ejemplo, los leones o los búfalos, los lobos o los gorilas ocupan su lugar correspondiente en el hogar que es la naturaleza. Necesitamos toda una serie de accesorios para sobrevivir; nos vemos obligados a trabajar la tierra para cultivar alimentos, y modificar la naturaleza de la tierra de tal forma que podamos vivir en ella. En este sentido nos diferenciamos claramente de otros organismos, si bien muchos de ellos también modifican el entorno natural. Nunca una especie ha ejercido una influencia tan constante y amplia sobre los procesos naturales como los humanos. Si nos paramos un poco a pensar en ello nos daremos Roberto Jiménez cuenta de que lo que dice Reichholf no solamente es cierto sino que, en muchos aspectos, se queda corto. El hombre no sólo ejerce esa influencia constante de la que habla Reichholf, sino que ésta ha crecido exponencialmente durante los 50 últimos años conforme avanzamos técnica y tecnológicamente. Cada vez queda menos territorio natural y cada vez nuestras infraestructuras, industrias, prácticas agrícolas, aglomeraciones urbanas y modos de vida tienen mayor capacidad de impacto. Acaso esto tiene alguna posibilidad de freno? Más vale prevenir Uno de los resortes que el hombre moderno ha inventado para evitar los desastres provocados por sus intervenciones en el medio ambiente es el proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (E.I.A.) de aquellos proyectos de obra, instalaciones o actividades que por sus características puedan afectar al entorno. Esta herramienta se fundamenta en el no menos sabio por sabido postulado más vale prevenir que curar, y su implantación en Europa tiene acumulada ya una experiencia de más de 15 años desde que en 1985 la UE aprobara la Directiva Comunitaria 85/337/CEE, transpuesta al ordenamiento jurídico español mediante el Real Decreto Legislativo 1302/1986 que tiene atribuido el carácter de legislación básica, y que implantó así el procedimiento de E.I.A. a 12 tipos de grandes proyectos de obras (centrales térmicas, infraestructuras, industria química, etc.). Nadie duda de que el fin perseguido por la evaluación de impacto ambiental es bueno en sí mismo y que es la mejor herramienta para evitar desde el origen del proyecto las afecciones que su ejecución pudieran causar al medio ambiente. No obstante, su caminar se ha visto jalonado de críticas en cuanto a su aplicación, y algunas E.I.A. han sido puestas en entredicho por los movimientos ecologistas al considerarlas un mero trámite administrativo que rara vez plantea dificultades ni restricciones significativas a los proyectos más destructores. Quizás por ello, pero sobre todo por la creciente preocupación de los diferentes sectores sociales (científico, medios de comunicación, poderes públicos, etc.) en el agotamiento y la degradación de los recursos naturales y, sin duda, por estar cada vez más convencidos después de la Cumbre de Río de

2 que todas la estrategias de desarrollo sostenible tienen que procurar la integración entre el hombre, la fauna, la flora, el suelo, el agua, el aire, el clima y el paisaje, la UE aprobó en 1997 una nueva Directiva (Directiva 97/11/CE) que actualizó la anterior y que fue transpuesta a la legislación española mediante el Real Decreto-Ley 9/2000 y la Ley 6/2001 de Evaluación de Impacto Ambiental. Adaptaciones normativas que también han sido criticadas principalmente por haber dejado en manos de los órganos ambientales correspondientes -en esta región la Comisión de Medio Ambiente- la decisión de someter o no a proceso de E.I.A. a ciertas actividades contempladas en la Directiva europea con carácter obligatorio. E.I.A. más exigente y preventiva Sin embargo a pesar de sus imperfecciones es un hecho incuestionable que la nueva norma amplía sustancialmente el techo preventivo de las evaluaciones de impacto ambiental. Con la anterior legislación el número de sectores de actividad que debían obligatoriamente pasar por el trámite de E.I.A. eran 12 y con la nueva superan los 50. Y entre las principales novedades incluye las grandes instalaciones de ganadería intensiva, algunas canteras y dragados fluviales, los gaseoductos y oleoductos, los grandes parques eólicos, las líneas de alta tensión, las depuradoras de aguas residuales, las fábricas papeleras, los grandes trasvases de agua, las incineradoras y vertederos de residuos urbanos, entre otros. Además la nueva Ley, introduce la posibilidad de someter a E.I.A. otras cuarenta y seis clases de proyectos no contemplados anteriormente, basándose en el estudio de las características de cada uno de ellos (ubicación, capacidad contaminadora, riesgo de accidentes y otros inconvenientes del proyecto); así como incorpora una serie de obligaciones que cumplir en los proyectos que trasciendan las fronteras del país. SECTORES QUE DEBEN SOMETERSE A E.I.A. Con la Ley 6/2001 deben someterse a evaluación de impacto ambiental los proyectos, públicos o privados, consistentes en la realización de las obras, instalaciones o de cualquier otra actividad comprendida en los sectores comprendidos dentro de los siguientes grupos: Agricultura, silvicultura, acuicultura y ganadería: Repoblaciones forestales, transformación de usos del suelo, concentraciones parcelarias, instalaciones ganaderas y de acuicultura. Industria extractiva: Explotaciones a cielo abierto de yacimientos minerales y demás recursos geológicos, minería subterránea, dragados y extracción de petróleo. Industria energética: Refinerías de petróleo bruto, centrales térmicas y nucleares, instalaciones para la producción de electricidad, vapor y agua caliente, tuberías para el transporte de gas y petróleo, parques eólicos. Industria siderúrgica y del mineral: Producción y elaboración de metales (amianto, hierro, acero, fabricación de materiales plásticos de cemento y vidrio y productos cerámicos). Industria química, petroquímica, textil y papelera: Incluye curtidos de pieles y cuero, pasta de papel y cartón, tratamiento de celulosa, etcétera. Industrias de productos alimenticios: Incluye las instalaciones para el sacrificio de animales. Proyectos de infraestructuras: Carreteras (con modificaciones y ampliaciones); ferrocarriles de largo recorrido; aeropuertos; puertos comerciales, pesqueros y deportivos; obras costeras destinadas a combatir la erosión y obras que pueden alterar la costa: diques, espigones y pantanales. Proyectos de ingeniería hidráulica y de gestión del agua: Presas, extracción de aguas subterráneas, trasvases, acueductos de larga distancia y plantas de tratamiento de aguas residuales.

3 Proyectos de tratamiento y gestión de residuos: Instalaciones de tratamiento o eliminación de residuos peligrosos, instalaciones de eliminación de residuos no peligrosos mediante incineración o tratamiento químico y vertederos que reciban más de 10 toneladas por día o que tengan una capacidad de más de toneladas, excluidos los vertederos de materiales inertes y de construcción. Otros proyectos correspondientes a actividades que, no alcanzando los valores de los umbrales establecidos anteriormente, por extensión o ubicación se desarrollen en zonas especialmente sensibles. En este grupo figuran también proyectos como instalaciones de energía hidroeléctrica, aeródromos, urbanizaciones y complejos hoteleros, pistas de esquí, remontes y teleféricos, parques temáticos y vertederos de residuos no peligrosos, de materiales inertes y de construcción. Asimismo, el Decreto-Ley incorpora una serie de proyectos como obras de aportación de arena a las playas, metros aéreos y subterráneos, tranvías, pistas de carreras, almacenes de chatarra, campings, etcétera que sólo deberán someterse a una evaluación de impacto ambiental cuando así lo decida el órgano ambiental competente en cada caso, que en La Rioja es el Pleno de la Comisión de Medio Ambiente. A qué llamamos E.I.A.? La legislación ha definido la evaluación de impacto ambiental como el conjunto de estudios y sistemas técnicos que permiten estimar los efectos que la ejecución de un determinado proyecto, obra o actividad causa sobre el medio ambiente. Por extensión es también el procedimiento administrativo que permite a las autoridades ambientales estimar los efectos de cada proyecto. La E.I.A. es por tanto una herramienta para la prevención. También es un instrumento de integración porque incorpora los condicionantes ambientales a la ejecución de los proyectos cuya implantación, hasta la fecha, se basaba exclusivamente en criterios técnicos económicos y sociales y, por último, aporta otro factor importante que no es otro que el de la participación pública en el proceso de decisión. Básicamente este apartado conlleva dos periodos participativos. El primero se realiza cuando el promotor presenta la memoria previa con la idea y la ubicación de la iniciativa, es entonces cuando la administración ambiental abre un periodo de consultas previas para recabar todas las sugerencias que quieran introducir en la fase de Proyecto y de Estudio de Impacto Ambiental los sectores sociales interesados por la iniciativa. El segundo proceso de participación es el llamado periodo de información pública que tiene lugar una vez elaborados tanto el Proyecto como el Estudio de Impacto Ambiental y sirve para que todos los interesados puedan presentar alegaciones al proyecto, antes de que Medio Ambiente emita la Declaración de Impacto Ambiental (D.I.A.). DEFINICIONES Impacto Ambiental: Es el conjunto de efectos o consecuencias de las acciones humanas sobre el medio. Los efectos pueden ser perjudiciales (impacto negativo) o beneficiosos (impacto positivo). Evaluación de Impacto Ambiental (E.I.A.): Es el conjunto de estudios y sistemas técnicos que permiten estimar los efectos que la ejecución de un determinado proyecto, obra o actividad causa sobre el medio ambiente. Estudio de Impacto Ambiental: Es el documento técnico que debe presentar el promotor (público o privado) del proyecto, que recopila toda la información de la iniciativa y sus efectos ambientales y sobre cuya base se produce la participación pública y la Declaración de Impacto Ambiental. Declaración de Impacto Ambiental (D.I.A.): Es el pronunciamiento de la autoridad ambiental en el que se determina la conveniencia o no de realizar

4 Las grandes obras hidráulicas deben someterse a E.I.A. para evitar sus impactos negativos. Gobierno de La Rioja la actividad proyectada y, en caso afirmativo, las condiciones que deben establecerse para proteger el medio ambiente. Con ella termina la E.I.A. y tiene que ser publicada para el general conocimiento. Las E.I.A. en La Rioja En la Rioja la entrada en vigor de el Real Decreto-Ley 9/2000 y la Ley 6/2001 de Evaluación de Impacto Ambiental se ha sustanciado en un considerable incremento del número de proyectos sometidos al procedimiento de E.I.A. que han pasado y pasarán por la Comisión de Medio Ambiente. De hecho, en el primer semestre de este año 2001, periodo en el que se ha aplicado en La Rioja esta normativa, se han iniciado 19 expedientes de evaluación de impacto ambiental y se han aprobado un total de nueve Declaraciones de Impacto Ambiental, más que en los tres últimos años. Las nuevas normas están incidiendo de manera importante en la integración medioambiental de sectores pujantes en el desarrollo de nuestra región, como por ejemplo, en el caso de la producción y conducción de la energía eléctrica. Actualmente la Dirección General de Calidad Ambiental acaba de sacar a exposición pública el borrador de la futura Ley de Protección del Medio Ambiente de La Rioja, en cuyo texto se han recogido las iniciativas de diferentes colectivos (agentes sociales, promotores, y técnicos redactores de proyectos y Administraciones Públicas). Su finalidad principal es agrupar en una única norma el ordenamiento jurídico básico vigente en cuanto a evaluación de impacto ambiental, actividades clasificadas, prevención y control integrado de la contaminación (Directiva IPPC) y ecoauditorías, gestión ambiental, etiquetado ecológico y derecho de acceso a la información en materia de medio ambiente. Así mismo el borrador de la Ley de Protección del Medio Ambiente de La Rioja incluye varios anejos en los que se relacionan los planes, programas, proyectos y actividades de obligado sometimiento a E.I.A. en la Comunidad Autónoma de La Rioja. J. H. Reichholf tiene razón cuando dice: Nunca una especie ha ejercido una influencia tan constante y amplia sobre los procesos naturales como los humanos. La reglamentación sobre impacto ambiental -con su remodelación a la que como hemos visto seguirán otras- acaba de pasar una nueva reválida para impedir que nuestra influencia sobre los procesos naturales no acabe con ellos. Podríamos decir que se ha dado un paso más para combatir los impactos negativos derivados de nuestra propia actividad, o quizás deberíamos decir de nuestra propia existencia. EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE EXPEDIENTES SOMETIDOS A E.I.A. TITULO PROMOTOR MUNICIPIO Planta de almacenamiento temporal, transferencia y gestión de residuos industriales en Arnedo Privado Arnedo

5 Instalación de centro de clasificación y reciclaje de residuos urbanos en la Rad de Varea en Logroño y Villamediana de Iregua Público Reforestación de M.U.P. 146 El Estepar y agregados de Préjano Público Préjano Logroño y Villamediana de Iregua Variante LR-115 en T.M. de Rincón de Soto Público Rincón de Soto Parque eólico de Yerga II Privado Alfaro y Autol Parque eólico de Escurrillo Privado Arnedillo, Ocón, Herce, Bergasilla Bajera y Bergasa Parque eólico de Gatún Privado Autol, Quel y Villarroya Línea eléctrica a 66 KV S.T. Yerga I y II, Gatún-Quel Privado Alfaro, Autol, Calahorra, Quel y Pradejón Alcarama I Privado Navajún, Cornago y Valdemadera Alcarama II Privado Cervera del Río Alhama, Igea, Cornago y Valdemadera Explotación de areniscas ornamentales de la sección C, Cuzcurrita de Río Tirón y Privado Garcitorre-1 Qchánduri Explotación de la cantera de áridos El Canal Privado Zarratón y Rodezno Explotación de la cantera de áridos Carracarros Privado Bañares Explotación de la cantera de áridos Pascual Privado Nalda Repoblación de tierras agrarias en el T.M. de San Millán de Yécora Privado San Millán de Yécora Repoblación forestal de 130,3 Has en varias fincas propiedad del Ayto. de San Vicente de la Sonsierra Privado San Vicente de la Sonsierra Explotación de canteras de áridos Privado Sto. Domingo de La Calzada, Villalobar de Rioja y Bañares