Adviento Admirable

Transcripción

1 Adviento Admirable I. Introducción a. Inicia la temporada navideña y en CDL siempre nos tomamos el tiempo para realmente celebrarla y poner los ojos en el lugar correcto b. Es una época maravillosa, pero i. No queremos dejarnos llevar por el consumismo de nuestro tiempo y cultura, donde para algunos se les vuelve una pesadilla ir a cualquier lugar o bien una maldición porque cedieron ante la presión y cayeron en deudas que luego van a tener que pasar un buen tiempo pagando ii. No queremos volvernos el Grinch y pretender que nada está pasando iii. Queremos celebrar iv. Queremos recordar v. Queremos adorar c. Necesitamos saber por qué estamos celebrando, qué estamos recordando y a quién estamos adorando d. Hemos escogido un texto en particular para toda la serie de adviento (Isa. 9:6) i. En este vamos a ver precisamente estas tres cosas ii. Particularmente, vamos a pasar todo adviento respondiendo a quién estamos adorando iii. Pero, hoy vamos a comenzar un poco antes y recordaremos por qué este tiempo es tan especial en el corazón de aquellos que hemos comenzado a entender la obra de Jesús aquí en la tierra e. Nuestro texto realmente comienza un capitulo antes de lo que vamos a leer, en Isaías 8, donde nos narra el juicio de Dios sobre un pueblo que se ha apartado de él y las consecuencias de su pecado (Isa. 8:22 Y mirarán

2 a la tierra, y he aquí tribulación y tinieblas, oscuridad y angustia; y serán sumidos en las tinieblas. ) i. El pueblo estaba perdido en su pecado, habían abandonado a Dios, estaban comenzando a ver las consecuencias de haberlo hecho ii. Dios había pronunciado juicio sobre ellos juicio justo y merecido iii. Parecía que no había esperanza para ellos iv. Qué tanto se parece esto a nosotros hoy? 1. Dios ha dictaminado que todos pecamos No hay lugar para nosotros delante de Dios (Rom 3:23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios ) 2. Dios ha emitido sentencia, la paga del pecado es muerte muerte eterna (Rom 6:23 Porque la paga del pecado es muerte ) 3. Nadie se puede salvar 4. Todo parece perdido, oscuro no hay esperanza II. Sí hay esperanza (Isa. 9:1-5 Mas no habrá siempre oscuridad para la que está ahora en angustia, tal como la aflicción que le vino en el tiempo que livianamente tocaron la primera vez a la tierra de Zabulón y a la tierra de Neftalí; pues al fin llenará de gloria el camino del mar, de aquel lado del Jordán, en Galilea de los gentiles. 2 El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos. 3 Multiplicaste la gente, y aumentaste la alegría. Se alegrarán delante de ti como se alegran en la siega, como se gozan cuando reparten despojos. 4 Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián. 5 Porque todo calzado que lleva el guerrero en el tumulto de la batalla, y todo manto revolcado en sangre, serán quemados, pasto del fuego. ) a. Saben por qué celebramos? i. Porque entendemos que estábamos en tinieblas y oscuridad, mas en Cristo no habrá no habrá siempre oscuridad para el que ahora está en angustia

3 ii. Porque hace 2,000 años el pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz, y esa luz sigue brillando tan fuerte hoy en nosotros, como lo hizo en sus discípulos iii. Porque cuando no había nada más que sombra de muerte, luz resplandeció sobre nosotros podemos esperar vida, no solo en esta tierra, sino vida eterna iv. Porque llevábamos un yugo pesado, atados por la ley y nuestra incapacidad de cumplirla, más ese yugo fue quebrado, y como cantamos a veces, la ley cedió a la libertad gracia tan gloriosa v. Porque los recuerdos y las marcas de la batalla fueron quemados en el fuego y podremos verlos como aguas que pasaron (Job. 11:16) b. Cuando comenzamos a entender realmente lo mucho que estábamos perdidos y lo grande que era la oscuridad, y comenzamos a experimentar su gloria brillando en medio de las tinieblas, no podemos sino aumentar la alegría i. Nos alegrarnos como los que se alegran en tiempo de la cosecha o en día de pago ii. Nos alegramos como quienes reparten los despojos de la guerra y pueden disfrutar del fruto de su lucha y esfuerzo III. Hijo nos es dado (Isa 9:6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado ) a. Hoy, en esta época, recordamos que, la única razón por la que tenemos esperanza y gozo es porque, hace 2,000 años, en un pequeño pesebre, en una pequeña ciudad llamada Belén, esa luz resplandeció en el mundo y se convirtió en una luz que alumbra en las tinieblas, a través de las generaciones esa luz se llama Jesús b. Jesús nació como cualquier otro, pero no era un niño cualquiera, era EL hijo de Dios, que nos fue dado, para traer esperanza a nuestras vidas c. No solo nació fue dado como un regalo, fue enviado con un propósito i. Celebramos que Dios, en su infinito amor, nos amó lo suficiente como para no dejarnos morir en nuestros pecados ii. Celebramos que Dios no se quedó de brazos cruzados, viéndonos camino a nuestra propia destrucción

4 iii. Dios, en su amor, dio a su hijo por nosotros (Jn 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. ) d. Notemos que no dice que solo un niño nació un niño NOS ES nacido, hijo NOS ES dado i. Él nació para nosotros ii. Él fue enviado por nosotros iii. Fue para nuestro bien iv. Fue para nuestro beneficio v. Fue para nuestra salvación e. Una cosa que puede pasar desapercibida si lo leemos demasiado rápido es esto está en tiempo presente i. No dice nos será dado, ni tampoco nos fue dado, dice nos es dado ii. Presente para hoy iii. Su venida sigue siendo tan importante para nosotros hoy, como lo fue en el tiempo en que él caminó físicamente sobre la tierra iv. También, podemos ver ese gozo y esa esperanza hoy no es solo una promesa para el futuro, es una promesa para hoy IV. Admirable (Isa. 9:6 y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. ) a. Vamos a pasar las siguientes semanas hablando de quién es Jesús, a quién adoramos i. Admirable ii. Consejero iii. Dios fuerte iv. Padre Eterno v. Príncipe de Paz b. Hoy solo veremos el primero de estos títulos le adoramos porque es Admirable i. Es mucho más de lo que cualquiera haya visto en esta tierra ii. Es tan extraordinario que supera cualquier expectativa de lo que los mismos antiguos podían esperar de él

5 c. Admirable en su Persona i. La gloria y la belleza de quién es ii. Es Dios y hombre en la misma persona 1. Dos naturalezas muy distintas, pero unidas en él 2. Dios naturalezas que le permiten ser el único posible mediador entre Dios y los hombres iii. Él mismo dijo que quien lo había visto, había visto al Padre (Jn 14:7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto. ) iv. Su amor para con su pueblo 1. Dispuesto a dejar su trono y humillarse al tomar forma de hombre 2. Dispuesto a ser humilde y paciente con tal de comprar nuestra redención d. Admirable en su nacimiento i. Nacido milagrosamente de una virgen, María ii. Adoptado amorosamente por un padre terrenal, José iii. Se movió a un imperio entero, por causa de un censo, para que sus padres pudieran llegar al lugar donde él debía nacer iv. Reyes fueron movidos desde el oriente para traer presentes y venir a adorar v. Perseguido al nacer por un rey y salvado por una revelación angelical e. Admirable en su vida y ministerio i. Sus enseñanzas eran maravillosas (más de esto la próxima semana) ii. Discutía, a los doce años, en el templo, con los maestros de la ley, dejándolos maravillados de su inteligencia y sus respuestas iii. Sabemos poco de sus primeros treinta años y transformó la historia de la humanidad en tan solo tres años y medio iv. Sus milagros fueron asombrosos 1. Su transfiguración en el monte 2. El caminar en el agua 3. El sanar a los enfermos 4. El tener misericordia de los leprosos

6 5. El echar fuera demonios 6. El ordenar a la tormenta se calmase 7. El resucitar a los muertos f. Admirable en su muerte i. El simple hecho de que haya muerto, aquel que es el dador de vida ii. Juzgado injustamente y callando frente a los que le acusaban iii. Muriendo la peor y más humillante de las muertes iv. Destruyendo, por medio de la muerte, al que tenía el imperio de la muerte v. Al morir 1. Un terremoto sacudió la tierra 2. Oscuridad vino sobre el mundo 3. Muertos resucitaron 4. El velo, que separaba a los hombres de la presencia de Dios, se rasgó g. Admirable en su resurrección de los muertos i. Resucitó por su propio poder ii. Resucitó con un cuerpo glorificado iii. Se levantó, asegurando también para nosotros, victoria sobre la muerte h. Admirable en su ascensión al cielo i. Una nube lo tomó, en presencia de sus discípulos y lo llevó al cielo ii. Se sentó a la diestra de Dios iii. Intercede, día y noche, por nosotros delante del Padre i. Será admirable en su segunda venida i. Con gloria y con poder ii. Será recibido con gozo por algunos, pero con terror por otros 1. Juzgará a las naciones 2. Recompensará a los suyos V. Conclusiones a. Cristo es Admirable, en todo lo que es, en todo lo que ha hecho y sigue haciendo b. Esa es la razón por la que celebramos i. Esa luz que alumbra vino al mundo

7 ii. Esa esperanza de salvación vivió y habitó en medio de nosotros iii. Este Cristo, Admirable, nos fue dado c. Durante adviento, cada semana encenderemos una candela recordando que i. Jesús es la luz del mundo ii. Que su venida alumbró a la humanidad iii. Que la luz triunfa sobre las tinieblas d. Cada candela tiene un significado y la primera es la de esperanza i. Hoy, ponemos los ojos en él y solo en él como nuestra única esperanza de salvación ii. Al poner nuestra mirada sobre él, podemos seguir maravillándonos por su obra por nosotros y decir, sin duda, su nombre es Admirable