3 1. Qué son las caídas a distinto nivel? Las caídas a diferente nivel en prevención de riesgos laborales, son aquellas que sufre una persona al caer desde cierta altura, produciéndose un golpe o lesión. Se puede dar durante la realización de trabajos en zonas elevadas, manipulando escaleras manuales, en accesos a cubiertas, en andamios, etc. 2. Causas de las caídas a distinto nivel Las causas de las caídas a distinto nivel, comportan normalmente accidentes de carácter grave, o incluso mortal, siendo este tipo de caída la forma más frecuente de accidente mortal (en todos los sectores y especialmente en el de la construcción). Nada menos, este tipo de accidentes representa el cuarto tipo de forma de accidente laboral más frecuente, después de los sobreesfuerzos, los golpes por objetos o herramientas y las caídas a igual nivel. En concreto, el grupo de ocupación donde más incidencia tienen los accidentes mortales por caídas a distinto nivel, es en el de trabajadores cualificados de la construcción, seguido por el de los peones (en general) y por el de conductores/operadores de maquinaria móvil. Dentro de los dos primeros grupos comentados, la mortalidad se concentra especialmente en los picapedreros y paredadores y en los peones de la construcción. Una de las primeras causas de los accidentes mortales por estas dos ocupaciones ( picapedreros, paredadores y peones de la construcción ) es la ausencia o deficiencia de protecciones colectivas. 3. Medidas preventivas En los puestos de trabajo: El acceso a zonas elevadas siempre se tiene que llevar a cabo con dispositivos estables y adecuados (escaleras, andamios y equipos de trabajo debidamente certificados) y, si es preciso, utilizando sistemas de protección anticaídas adecuados y certificados. Los equipos de trabajo deben estar estabilizados por fijación o por otros medios. Cuando sea necesario, las zonas de los puestos de trabajo con riesgo de caída de personas, de objetos de contacto o exposición a elementos agresivos, tendrán que estar claramente señalizadas. En los trabajos en cubiertas se deben tener en cuenta los siguientes aspectos: Consultar previamente con el personal del departamento de infraestructuras, antes de iniciar cualquier trabajo en cubiertas, el estado del puesto de trabajo. No trabajar en condiciones climatológicas desfavorables: excesivo viento, lluvia, poca iluminación, suelos helados, etc. Evitar que los trabajos se desarrollen por un único trabajador en aquellas cubiertas que presenten riesgos. En los desplazamientos por las cubiertas, utilizar las escaleras de servicio y los elementos de paso instalados. Cuando sea necesario, hacer uso de sistemas de protección anticaídas adecuados. Mantener en todo momento el orden y la limpieza en los locales y áreas de trabajo donde se realice cualquier tipo de tarea. Recoger todas las herramientas y el material al finalizar la jornada. Depositar las basuras y desperdicios en recipientes adecuados. En general, se debe hacer uso de los elementos de protección colectiva instalados, dando prioridad a estos sobre los equipos de protección individual. Las condiciones del puesto de trabajo siempre deberán cumplir las establecidas en el RD 486/1997 sobre disposiciones mínimas de seguridad y salud en los puestos de trabajo. 3
4 En las tareas: En función de las operaciones desarrolladas, así como de los métodos y medios utilizados, cada trabajador debe disponer, por escrito, de una normativa de seguridad que minimice los riesgos. Antes de iniciar su actividad, el conjunto del personal afectado debe recibir información sobre: Los riesgos existentes en la operación a desarrollar. La importancia del cumplimiento de las instrucciones ofrecidas. Las normas y procedimientos de seguridad, en lo que se refiere al trabajo en general. Esta normativa debe incluir la secuencia de las operaciones a desarrollar para realizar un determinado trabajo, con inclusión de los medios materiales (de trabajo o de protección) y humanos (cualificación o formación personal) necesarios para hacerlo. Cuando así se establezca, es necesaria la autorización o supervisión para el desarrollo de los trabajos que lo requieren. En operaciones con riesgo de caída de altura, la conducta debe estar regida por la responsabilidad y el sentido común. Es necesario evitar movimientos bruscos y no adoptar posiciones peligrosas, especialmente en trabajos en cubierta que puedan hacer caer al operario. Dada la importancia de una aplicación estricta de los protocolos de trabajo, se deberá proporcionar al personal afectado, antes de iniciar su actividad y de manera periódica, formación en materia de seguridad a un nivel adecuado a su responsabilidad y al riesgo existente en su puesto de trabajo. En el caso de los andamios: La estabilidad se tiene que garantizar con elementos de soporte protegidos. Los andamios solo pueden ser montados, desmontados o modificados sustancialmente bajo la dirección de una persona con formación adecuada y específica para las operaciones previstas, que será quien inspeccionará los andamios periódicamente. Las dimensiones, la forma y la disposición de las plataformas de un andamio, tienen que ser apropiadas para el tipo de trabajo a realizar, adecuadas a las cargas que deban soportar, y permitir que se trabaje y circule con seguridad. En el caso de las escaleras de mano: Antes de proceder a su uso, se debe comprobar el correcto acoplamiento y buen estado de travesaños, escalones, zapatas y otros componentes. Es necesario asegurar la estabilidad de la base, asentando ésta sobre una superficie llana, haciendo uso de mecanismos que impidan el deslizamiento. Cuando sea necesario, la fijación de la escalera se debe asegurar siendo sostenida por un segundo trabajador durante su uso. Deberán tener la resistencia necesaria para que su uso no suponga un riesgo de caída por ruptura y ofrecer las garantías necesarias de estabilidad, seguridad y, si fuera necesario, aislamiento. Se deben colocar las escaleras alejadas de elementos móviles que puedan ocasionar su caída. Nunca, en el área de barrido de las puertas, a menos que éstas se bloqueen y señalicen convenientemente. Para el acceso a lugares elevados, los travesaños de la escalera deberán superar en un metro la cota de desembarco o el punto de soporte superior. El ascenso, descenso y los trabajos desde escaleras, se efectuarán por una única persona, con calzado apropiado y frente a éstas. Los trabajos a más de 3,5 metros de altura, desde el punto de operación al suelo, que requieran movimientos o esfuerzos peligrosos para la estabilidad del trabajador, se efectuarán con un equipo de protección individual anticaídas, o si eso no es posible, adoptando otras medidas de protección alternativas. Se deben revisar las escaleras de mano periódicamente. 4
5 No se utilizarán escaleras de madera pintadas, dado que dificulta la detección visual de posibles desperfectos. No se utilizarán escaleras de mano de más de cinco metros de longitud, con resistencias de la base sin buenas garantías. En ningún caso se utilizarán escaleras reparadas con clavos, cuerdas o alambres ni se improvisarán empalmes. En ningún caso se utilizarán escaleras de mano de construcción improvisada. La utilización de las técnicas de acceso y posicionamiento mediante cuerdas, se limitará a aquellos casos en los que el trabajo no se pueda ejecutar de manera segura y en los que, además, la utilización de otro equipo de trabajo más seguro, no esté justificada. En estos casos se deberá cumplir con las condiciones específicas de utilización establecidas legalmente. En los equipos de trabajo: En la adquisición de cualquier equipo de trabajo se debe asegurar el cumplimiento de los requisitos mínimos de seguridad y salud en máquinas y componentes definidos legalmente (RD 1215/1997 modificado por el RD 2177/2004), sin los cuales no es posible su comercialización: Marcado CE situado en la máquina de manera clara, visible e indeleble. Declaración CE de conformidad, documento por el cual el fabricante declara que la máquina comercializada satisface todos los requisitos esenciales de seguridad y salud exigidos legalmente. Instrucciones de uso, redactadas en el idioma oficial, incluyendo información de utilidad para la instalación y uso de la máquina, así como instrucciones para desarrollar las tareas de mantenimiento de ésta (conservación y reparación). Equipos de protección individual o EPI: Cuando las medidas de protección colectivas no sean suficientes, se utilizarán los EPI necesarios para el desarrollo de los diferentes trabajos (casco de seguridad, arnés, conectores, cuerdas, calzado y guantes). Vigilancia de la salud: En relación con la vigilancia de la salud: Es altamente aconsejable participar en las campañas anuales de reconocimientos médicos con la finalidad de detectar posibles disfunciones y especiales sensibilidades. Es aconsejable consultar al servicio médico cuando sean detectados los primeros síntomas de trastornos en la salud para favorecer un diagnóstico precoz y el posterior tratamiento correcto de posibles alteraciones. 5