LA LEYENDA DEL MINOTAURO. Texto escrito por los alumnos de 1º A del curso 2008-09 ESCENA I EN CRETA, EN EL TEMPLO DE ZEUS ( PASIFAE Y ZEUS) ( entra en el tempo de ) Oh, qué bonito ha quedado el templo, con su naos y su pronaos con columnas jónicas, son la última moda en Atenas. Bueno, espero que esté. ( elevando la voz)oh, gran, escucha a esta pobre mujer Te escucho, aunque ya sabes que no deben vernos juntos. a qué has venido? ( con tono de reproche)han pasado veinte años y ni siquiera has hecho una visita a tu hijo Cómo quieres que vaya a visitarlo si es un monstruo?. Esa cabeza de toro y encima es peligroso, además de mala uva, si tocas su piel abrasa. como para darle un abrazo ( enfadada)por más que tenga defectos es tu hijo y creo que se merece un poco de respeto y el cariño de su padre no? Además, la culpa es tuya. Mira que disfrazarte de toro. ( disculpándose) Si hice eso fue porque no quería que nos cogiera mi mujer, Hera, y esa era la única ocasión que tenía. Pues te salió mal, y encima no quieres ir a ver al monstruo, ( corrigiéndose) digo al hijo que engendraste Nunca pensé que iba a pasar esto ( cortante)pues pasó y no puedes hacer como si no hubiera pasado nada. ( con tono de fastidio y desprecio)hombres, todos son iguales. ( se siente culpable) Tienes razón, intentare ir a verlo, pero en ese laberinto que lo tenéis encerrado, da un poco de cosa, no? Encima ponle pegas donde quieres que lo tengamos si se entretiene en matar a cornadas a todo bicho viviente y además le encanta la carne humana? ( empieza a estar harto) De acuerdo (Satisfecha) Así me gusta, y que sea pronto, o volveré y se va a enterar todo el mundo de quien es. Mucho padre de los dioses, pero el peor padre del mundo sale del tempo
ESCENA II EN ATENAS EN EL PALACIO DE EGEO ( EGEO Y TESEO) Amado padre, tengo que hablar contigo qué quieres hijo mío? Pídeme lo que sea que estaré encantado de concedértelo. Después de veinte años separados tengo ganas de disfrutar de mi hijo. Qué se te antoja, un caballo, una espada nueva, una novia? No es eso, padre, no es nada material, lo que quiero es tu permiso para ir a luchar con el ( Sorprendido y agobiado) con el? Estás loco, veinte años sin saber de ti y ahora quieres marcharte a una muerte segura. Nadie ha vuelto del laberinto. Por eso, padre, si hay alguien que tiene una oportunidad soy yo. Como príncipe ateniense no puedo permitir que se derrame ni una sola gota de sangre de mi pueblo. ( queriendo dar pena par influirle y convencerle) Pero hijo, quién me consolará si tu mueres? Estaré solo quién me sucederá en el trono? Padre, es mi deber, no podría llamarme ateniense si no lo hiciera. Hijo mío, bien veo que no podré hacerte cambiar de opinión. Toma esta espada y prométeme una cosa. Lo que quieras, padre. Si triunfas, pon a tu vuelta velas blancas en tu barco, para que desde lejos yo pueda celebrar tu triunfo, pero si fracasas y el Minotaruo acaba contigo, haz que pongas velas negras para que yo ponga fin a mi vida, pues no podré vivir con esa pena. Así lo haré padre Que mis bendiciones vayan contigo y la protección de los Dioses. Haré sacrificios a Atenea, la Diosa protectora de la ciudad, para que ella te proteja y te haga salir victorioso. Que así sea.
ESCENA III EN EL PALACIO DE MINOS ( e hablan en el jardín) ARIADNA, ISMANE, ZEUS, TESEO Hermana has visto a ese ateniense? es guapísimo, está cañón Si que está bueno, pero no sueñes con que se fije en ti. Sabes que somos enemigos desde la gran batalla. Cuando los derrotamos nuestro padre les obligó a pagar un gran tributo, siete doncellas y siete mancebos cada año para ser sacrificados a nuestro hermano, Ya lo sé hermana, es nuestra familia, pero me parece una barbaridad. Y es que está de bueno el condenado!!! Eso, tu lo has dicho, está condenado Pero a lo mejor no, a lo mejor él derrota a Minotaruo ( indignada)pero qué estás diciendo? hablas de que mate a nuestro hermano!!! Pero es un bicho monstruoso Pero es nuestro hermano No, sólo hermanastro y además, nos da miedo desde que éramos pequeñas o no? Tienes razón, qué le gustaba perseguirnos!!, más de una vez, si no lo hubieran evitado, nos habría matado allí mismo. Por eso debemos ayudar al ateniense Pero cómo? (Pasa y sonríe. Guiña un ojo) (suspirando) Es amor a primera vista Debo ayudarlo, pero no sé cómo Yo tampoco, debemos pedirle consejo a alguien A quién? A, él que es el más poderoso de los dioses seguro que sabe cómo. Vamos. (Se acercan al templo de ). Oh todopoderoso. Ayuda a estas humildes fieles Escúchanos, oh misericordioso y ayúdanos para que podamos ver a nuestro hermano ( se nota que está mintiendo) ( tono hipócrita) Nuestro querido hermano que no vemos desde pequeñas y al
que echamos tanto de menos ( sus gestos desmienten sus palabras) ( sale apresuradamente) Nooo, qué decís, locas?, no podéis ir a verlo, no os gustaría nada Pero lo echamos tanto de menos, ya ni recordamos como es. Nos lo podrías decir tú?. cómo es físicamente? De verdad es tan fuerte y tan terrible como dicen? Es un monstruo horrible, con unos cuernos de metro y medio, un pecho que parece un armario empotrado y con tan mal carácter que no distingue ni a su padre. Si lo sabré yo, que he ido a verlo y os digo casi me ensarta con los pitones y eso que era su padre, ( se corrige) digo el padre de los dioses Pero nosotras querríamos ayudarlo, no nos haría daño. No, es mi última palabra, además nadie puede salir del laberinto Pero Dédalo, su constructor sí lo hizo Si, el astuto Dédalo, usó el hilo amarrado a la entrada, que iba devanando según avanzaba y luego lo fue recogiendo hasta encontrar la salida, muy ingenioso, sí. Pero vosotras no, dos jovencitas tan hermosas no deben arriesgarse en esas cosas. Las doncellas deben estar en la casa, aprendiendo a cuidar del hogar para sus maridos, dejad que de la guerra y de la política se ocupen los hombres ( feminista indignada) Eso es lo que os interesa a todos. La mujer en casa y con la pata quebrada, anda que el día que tengamos derecho al voto os vais a enterar. ( intenta sacarla de allí) Ya está bien hermana. Ella y sus ideas feministas, desde que estuvo en Lesbos con Safo ha vuelto con unas ideas muy raras en la cabeza. Bueno nos vamos. Por cierto, un templo muy bonito. Hasta otra. (Salen del templo y van al encuentro de que aparece en el jardín) Psss, Pssss. Eh tú, el ateniense Que deseas?, princesa, no es propio de una princesa cretense dirigirse a un enemigo. Ya sabes que nuestros pueblos se odian a muerte ( se insinúa) Pero yo no te odio, más bien lo contrario ( se hace el tonto) Lo contrario? No te entiendo qué quieres decir? Como si no lo supieras,. crees que no he notado como me miras?. A ti te pasa lo mismo que a mí. Sí, el dios Eros es caprichoso y ha jugado con nosotros hiriéndonos con sus flechas doradas. Pero lo nuestro es imposible. Mañana puede que esté muerto
Adriana No digas eso, no lo digas que me moriría yo también. Estoy dispuesta a lo que sea por ayudarte Pero eso significa ir en contra de tu familia y de tu sangre. Traicionarías a tu pueblo? Yo no tengo más pueblo que tu. Te seguiría a donde tú fueses. me llevarás contigo si te ayudo a salir victorioso del laberinto? Por supuesto Ten presente que si traiciono a mi familia y ayudo a la muerte de mi hermano aquí me aguarda un destino funesto. Prométeme que me llevarás contigo a tu patria y me harás tu esposa Prometido. Pero cómo me ayudarás? Tengo la forma de salir del laberinto.( le entrega el ovillo) Toma este ovillo y ata un extremo a la entrada, luego ve deshaciéndolo según avances y cuando hayas matado al sólo tendrás que recogerlo y volver a tu barco donde yo estaré esperándote. Cuenta con ello. Pero ese es el modo de salir. Ahora falta derrotar al Te ayudaré también en eso. Toma esta espada, he conseguido ocultarla de los guardias. Además te contaré un secreto. No debes tocar al monstruo, su piel quema, si llegas al cuerpo a cuerpo morirás. Mantente siempre a distancia, déjalo que se canse, como es muy pesado, tiene más fuerza que tú, pero se fatiga mucho, no aguantará, cuando caiga al suelo es tu momento, debes clavarle la espada en la nuca y cortarle la cabeza. Así lo haré. Nos veremos en el barco o en el Tártaro. ESCENA IV teseo En el laberinto MINOTAURO Y TESEO Quién es el incauto que anda por mi laberinto? Soy yo, que vengo a firmar tu sentencia de muerte Presumido, que te hace pensar que serás tú, cuando ya he devorado a trescientos más fuertes que tu, que no me pareces un bocado muy musculoso, más bien canijillo y bajito, si hasta pareces una niña con el pelo largo ese. El pelo me da ardores, pero aun así te voy a comer. Pues este canijillo se va a hacer un perchero con tus cuernos Además de presumido, loco y cómo vas a salir luego, si nadie conoce la salida? ( Tocando el ovillo que guarda en su bolsillo) ese es un lío que yo me traigo
entre manos, no es tu problema. Y cómo piensas matarme?, sabes que no puedes tocarme? Lo sé por eso he traído esta amiga.( descubre la espada) Luchan como una corrida de toros. Al final se cansa el Minotaruro y lo apuntilla (suena pasodoble) ESCENA V se reencuentra con e que suben al barco. TESEO, ARIADNA, ISMENE, Debemos hacer una parada en la isla de Nasos para coger agua Estupendo, aprovecharé para coger algunas flores para mi vestido de novia Bajan todos y cogen lo necesario, pero se distrae y parten sin ella ESCENA VI,, vuelve Y ahora que hago yo con el vestido de novia? A ver a quién encuentro. pero quiénes son aquellos que hacen mçusica por allí? Voy a ver ( sale ) (Al darse cuenta de que no está ).,. no está. Se ha quedado en la isla Oh desgracia, se venga de nosotros por matar a su hijo Se apena pero pronto se consuela con ). Yo tenía que hacer algo con las velas, pero no me acuerdo ahora mismo. Vamos a tomar el aire de mar a ver si me despejo En Atenas esta asomado a la ventana ( Con tono grandilocuente y ridículo) Cuantos días han pasado desde que partió mi hijo!!!!. Que desgracia para un padre!. Llevo días asomado a este balcón por ver si diviso las velas que sentenciarán mi vida. Pero qué es aquello que veo? Su barco se aproxima a puerto. Y trae velas negras ( se aproxima al balcón y comienza a hacer aspavientos) Oh destino cruel, oh dioses por qué me castigáis así, oh dolor, oh pena ohhhhh que me caigo. ( se cae por el balcón) FIN