PONTIFICIO CONSEJO PARA LA PASTORAL DE LA SALUD Ciudad del Vaticano

Documentos relacionados
SERIE: CAMINANDO CON DIOS 1. Un Nuevo Nacimiento

INTRODUCCIÓN. colección cristianos de hoy

Elementos fundamentales

EVANGELIO DEL DOMINGO. 1

CONTEXTO SOCIAL Y LA CUESTIÓN DEL SENTIDO DE LA VIDA

PLAN DIOCESANO DE PASTORAL NUESTRA PARROQUIA ACOGE Y ANUNCIA LA PALABRA

SESIÓN 2: EN EL PRINCIPIO ERA LA PALABRA Y LA PALABRA ERA DIOS Y LA PALABRA SE HIZO CARNE Y HABITÓ ENTRE NOSOTROS: Jn 1,1.14.

EL CORAZÓN DE LA BIBLIA CON LA LUPA DE LOS EVANGELIOS

La misericordia es la característica de Dios, la forma como viene a nuestro encuentro, es la que abre el corazón a la esperanza de ser amados para

FICHA 5. Ser y Formar Discípulos de Cristo. Resumen DP # 44-65

MI CAMINO DE FE A LA LUZ DE LOS RASGOS DE LA ESPIRITUALIDAD MARISTA

1 Juan 4. Permaneciendo en Dios y en Su Amor

Red de Contenidos Segundo Semestre 2008 Departamento de Religión

El amor a Dios y el amor al prójimo

Creer no es saber, pero... también La fe no consiste en un saber intelectual, ni siquiera en un saber acerca de Dios. El contenido fundamental de la f

TEMA 8.- CREO EN JESUCRISTO, EL HIJO DE DIOS NUESTRAS PREGUNTAS Mirando el mundo y escuchando las noticias, conociendo la debilidad de la

[JUBILEO DE LA MISERICORDIA PARA ADOLESCENTES: CATEQUESIS PREPARATORIA.]

LA PALABRA HOY: Hechos Apóstoles 1, 1-11; Salmo 46; Efesios 4, 1-13; Marcos 16,15-20

Sacramentos y Sacramentales

Al comienzo de la Eucaristía

PROGRAMA DE FORMACIÓN GENERAL SOCIEDAD DE LA PRECIOSA SANGRE

FICHA 7. Ser y Formar Misioneros de Cristo. Resumen DP # 78-93

Si, tu vida es importante! Cómo puedes creer esto? Porque Él murió por ti, resucito de entre los muertos, y te llama "ven y sígueme".

CAMINO DE DIOS AL HOMBRE, 1

KERYGMA O CINCO VERDADES DEFINICIÓN

Jesús de la Divina Misericordia

JOOS van Wassenhove La institución de la Eucaristía Galleria Nazionale delle Marche Urbino. La Eucaristía, misterio de fe y de amor

La Formación en la fe

ORACION, EN LA NOVENA A NUESTRA MADRE, CON LOS ENFERMOS

CARTA A LOS JÓVENES DE LOS OBISPOS DE GALICIA. Como el Apóstol Santiago, amigos del Señor

LA PALABRA HOY: Ezequiel 33,7-9; Salmo 94; Romanos 13,8-10; Mateo 18,15-20

Realizado por Hna. Evelyn Maria Montes de Oca, SCTJM. Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María

EL PODER Y EL EJERCICIO DE LOS DONES ESPIRITUALES EN LA VIDA DEL SIERVO.

FICHA 6. Discípulos y Misioneros En Comunión Eclesial. Resumen DP # 66-77

JUSTIFICACIÓN competencias

El Cristiano Saludable

una navidad para servir

Camino de Enriquecimiento

Las Buenas Nuevas! Dios te ama, y quiere que lo conozcas y lo ames. Él te ofrece paz, gozo y satisfacción en la vida. La Biblia dice, Yo he venido par

El Viático. El alimento del camino

Creo Iglesia que existes y que eres tú mi único amor. Y entre todos sus miembros no puede haber separación.

TRIGÉSIMO PRIMER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO. (Año Impar. Ciclo B) Parroquia Virgen del Carmen de Viña del Mar

Hospital Universitario de Salamanca Hospital Los Montalvos Carmen Galache Grandes (Enfermera Unidad de Cuidados Paliativos)

EL AMOR DE DIOS Y DIOS QUE SE COMPADE TEMA 2

El misterio de la Santísima Trinidad

Tema IV. El Credo, las bases de la Fe.

Lo Ordinario Se Hace Extraordinario

Katiuska Cáceres Pavez

Tema 6: La Iglesia continua la obra de Jesús

La Santa Sede MENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCO PARA LA CUARESMA Fortalezcan sus corazones (St 5,8)

La clase de Biblia y los niveles de aprendizaje

PARROQUIA SEÑOR DE LOS MILAGROS

Y heredero del cielo

La Ascensión del Señor

Habla de CRISTO y comparte tu fe con los demás a través del poder de tu propio testimonio.

BENEDICTO XVI AUDIENCIA GENERAL. Plaza de San Pedro Miércoles, 17 de octubre de 2012

María, la madre de Jesús de Nazaret, nuestra auxiliadora Ser de María y como María nos identifica como Hijas de María Auxiliadora.

ALABADO SEA JESUSCRISTO Departamento de Pastoral

NOVENA PENITENCIAL A JESUS, REY DE TODAS LAS NACIONES.

Guía de Estudio para Lectura Adicional La Fe que Mueve Montañas Les Thompson

La Santísima Trinidad en tu vida. Felipe Santos, SDB. * Entramos en la presencia de Dios a pie descalzo:

Guía de Estudio para Lectura Adicional La Confesión de Fe de Westminster

Es un movimiento de vida cristiana, que asume la espiritualidad mercedaria según el estilo propio del Padre José León Torres.

FICHA TÉCNICA Dios me regala la Creación Colección: Y vio Dios que todo era bueno Segunda Unidad: La Familia Fichas de trabajo para Pre-Kinder

22 de abril de Subsidio litúrgico-

Oración de petición * Por la Iglesia, por nuestra parroquia; fe a lo largo de este año. Roguemos. R/ Te lo pedimos, Señor

Curso de Tanatología y Duelo Primera sesión

#6 LA FUENTE DEL PODER CRISTIANO

El Padre Pío explica, durante una entrevista, la Santa Misa:

Pues de su plenitud todos hemos recibido gracia tras gracia (Jn 1,16)

MISIÓN Y KERIGMA Jn 4. Para configurarnos con Cristo. Año de la catequesis. Subsidio de formación Nro. 6 Año de la Catequesis

OPCIÓN FUNDAMENTAL. El seguimiento de Jesús

CURSO: UN ACERCAMIENTO A LA ORACIÓN TEMA 2 CÓMO ORAR?

CONCILIO ECUMÉNICO VATICANO II

LA RESURRECCIÓN DEL SEÑOR JESUCRISTO. 1 Corintios ; 14-17

FRENCH SCHOOL San Carlos Borromeo Église de Saint-Nicolas-du-Chardonnet, Paris. La unción de los enfermos

Sector de trabajo: A Misión rural.

Mártires. ANTÍFONA DE ENTRADA Gal 6, 14 ORACIÓN COLECTA 6 DE FEBRERO. SANTOS PABLO MIKI, y compañeros. Memoria

(jesuita Guillermo Ortiz RV). Traducción de la catequesis que el Santo Padre pronunció en italiano:

Lección IV-5 Unidad IV: La Iglesia Página 289 Las Responsabilidades de los Miembros

DECIMOQUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO 10 de Julio de, el año 2016 C ORACION PARA EMPEZAR: Dios de ternura, nos reunimos una vez más para

MISA INICIO SEMANA DE LA FAMILIA BENDICIÓN DE LA FAMILIA Y LOS ALTARES

La fe nace en la Iglesia, conduce a ella y vive en ella 1

Liturgia Viva del Bautismo del Señor - Ciclo B

PRESENCIA DE DIOS EN LA ESCUELA CATÓLICA

EDITORIAL Con María, misioneros de Cristo! fuera conocido y amado por más y más

LOS SACRAMENTOS: presencia de Dios en nuestras vidas

CORONILLA A NUESTRA SEÑORA DE LA CONSOLACIÓN

Instituto Secular Siervas Seglares de Jesucristo Sacerdote HORA SANTA

REFLEXIONES SOBRE LA FE DESDE LA PORTA FIDEI

NUESTRA VOCACIÓN ES AMAR A DIOS

El Dios del día a día

Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la Tierra

Evaluación de la Educación Religiosa - Grado 5

DOS ENCÍCLICAS ANTERIORES

Celebración de la Corona de Adviento para cada domingo analizando la presencia de Jesucristo y sus enseñanzas en la vida familiar

PARROQUIA NUESTRA SEÑORA DE LA SALUD. Bendito seas, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has revelado los secretos del reino a la gente sencilla.

Kínder: Guía de recursos arquidiocesana del currículo de religión para padres de familia

INSTITUCION EDUCATIVA LA PRESENTACION

Misa inicio Semana de la Familia Bendición de los Altares

Transcripción:

PONTIFICIO CONSEJO PARA LA PASTORAL DE LA SALUD Ciudad del Vaticano XXI Conferencia Internacional Gli aspetti pastorali della cura delle malattie infettive 23-25 de noviembre de 2006 Aula Nueva del Sínodo - Ciudad del Vaticano CONFERENCIA Pastoral de las enfermedades infectivas desde el punto de vista psicológico-cultural La educación en la fe S. E. Mons. Francisco Robles Ortega Arzobispo de Monterrey Viernes, 24 de noviembre de 2006

2 Eminencia Reverendísima, Sr. Cardenal Javier Lozano Barragán, eminencias, excelencias, sacerdotes, religiosos y laicos, participantes en esta vigésima primera conferencia internacional del Pontificio Consejo para la Pastoral de la salud: Mi intervención, en su brevedad, quiere responder a dos preguntas: es posible educar en la fe a un paciente que, por padecer una enfermedad infectiva debe permanecer aislado? y en caso de que fuera posible, cómo debería hacerse esta educación?. 1. Es posible educar en la fe a un paciente que sufre una enfermedad infecciosa? Hay que tener muy claro que, cuando hablamos de la educación en la fe católica, estamos hablando de guiar hacia una experiencia personal de Cristo, ya que el cristianismo no es un simple libro de cultura o una ideología, tampoco es un mero sistema de valores o de principios, por más elevados que sean. El cristianismo es una persona, una presencia, un rostro: Jesús, que da sentido y plenitud a la vida del hombre 1. Por eso, educar en la fe no es otra cosa que transmitir una experiencia personal de Cristo, y eso es posible siempre. Para decirlo con palabras del Santo Padre: No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva 2. La naturaleza específica de la fe es la relación con el Dios vivo 3. Por ello, educar en la fe no se reduce a conocer a Cristo o a imitar a Cristo; no, realmente es mucho más. Educar en la fe es transmitir una experiencia personal de vida en Cristo. Educar en la fe es promover un encuentro en el que el ser humano se siente llamado a dar una respuesta de amor a Aquel que percibe como Dios de amor. Dicho así puede sonar muy elemental, pero este es el fondo de la vivencia de nuestra fe. En definitiva, educar en la fe es enseñar a considerar a Cristo el centro de la vida: es enseñar a responder a su amor. Educar en la fe es enseñar al hermano a no fijarse tanto en su enfermedad, en sus problemas o en su pequeñez humana, para lanzarse al misterio de la confianza y el amor a Dios. Es orientarle a vivir con una nueva dimensión; iniciarle a edificar su vida según los planes de Dios dejando en un segundo término los propios planes. Educar en la fe es entregar un tesoro 4 que un día hemos descubierto y compartirlo por amor. Por ello, la respuesta a la pregunta inicial: es posible educar en la fe a un paciente que sufre una enfermedad infecciosa?, es siempre positiva, siempre y cuando sea una recta educación en la fe que motive y convenza, más con el testimonio que con las palabras, de que vale la pena vivir en el amor de Cristo: En esto hemos conocido lo que es amor: en que Él dio su vida por nosotros. También nosotros debemos dar la vida por los hermanos 5. 1 JUAN PABLO II, Discurso a los jóvenes en el Palacio de hielo de Berna, Suiza, 5 de junio de 2004. 2 BENEDICTO XVI, Carta encíclica Deus Caritas est, 1. 3 BENEDICTO XVI, Carta encíclica Deus Caritas est, 28. 4 Mt 13,44. 5 1 Jn 3,16.

3 En el mundo de hoy, en el que el sentido de la palabra amor aparece muchas veces tan devaluado y se rebaja hasta un simple disfrutar del otro, el cristiano, discípulo de Cristo, mirando al crucifijo, descubre que el amor es entrega y entrega total. La educación en la fe tiene que llevar a la vivencia de este amor, a afirmar, como San Pablo: La vida que vivo al presente en la carne, la vivo en la fe del Hijo de Dios que me amó y se entregó a sí mismo por mí 6, y a proclamar al mundo que Nadie tiene mayor amor que el que da su vida por sus amigos 7. Educar en la fe es posible siempre porque es mostrar el amor de Dios a cada ser humano, un amor que se demuestra en la entrega absoluta hasta la muerte y muerte de cruz. 2. Ahora bien, Cómo se debe afrontar la educación en la fe con pacientes que sufren enfermedades infecciosas? En realidad, cada proceso de educación en la fe es un proceso individualizado, personal, profundo, en el que los principales protagonistas son Dios y el enfermo. Los demás, los que estamos en torno al enfermo, podemos ayudar, impulsar, motivar, informar, orientar, pero es el mismo enfermo quien debe descubrir el amor de Dios y responder con su vida. Dicho esto, conviene aclarar que, efectivamente, hay circunstancias que pueden ayudar en ese proceso de conversión y acercamiento al Dios del amor. Voy a considerar los cuatro que considero más importantes: a. La vivencia de la cruz. La primera experiencia, y seguramente la más importante en este proceso de educación en la fe para el enfermo, es la vivencia de la cruz en su sentido más profundo. En la cruz se puede descubrir a Cristo y encontrarse profundamente con su amor. Es verdad que muchos de los que rodeaban a Jesús en su suplicio, gritaban esa frase que todavía hoy resuena en muchos corazones: Si eres Hijo de Dios, baja de la cruz 8. Creo que todos los que han estado junto al lecho de los enfermos, pueden afirmar que esta frase también aparece en el ser humano que sufre y se rebela en su dolor. Cuesta mucho aceptar el sufrimiento que se presenta como algo contrario a la naturaleza humana. Sin embargo, con los ojos de la fe, en la cruz de Cristo descubrimos al Hijo de Dios que se entrega por mí, para que tenga vida eterna. Este es el camino que hay que ayudar a recorrer al enfermo: la aceptación redentora del sufrimiento en Cristo. Viendo el mundo de la enfermedad, el hecho de que Dios entregase a su Hijo a la muerte en la cruz, aparece casi como necesario. Es el modo como Dios se justifica ante la historia del hombre, tan llena de sufrimientos. Lo hace poniendo la cruz en el centro de esa historia, la misma cruz de Cristo. Cristo se convierte así en la explicación del sentido del sufrimiento humano, un nuevo sentido que vence al pecado y a la muerte. Por ello, un modo muy eficaz de educar en la fe es introducir al enfermo en el misterio de la cruz de Cristo, sabiendo que el Señor sufrió y experimentó el dolor por él, por amor a él, para librarlo del pecado y darle la vida eterna en la plenitud del amor. 6 Gal 2,20. 7 Jn 15,13. 8 Cf. Mt. 27,40.

4 El camino de la cruz muestra a un Dios que, además de ser Omnipotencia, es Sabiduría y es Amor. No es el Absoluto que está fuera del mundo, y al que por tanto le es indiferente el sufrimiento humano. Es el Emmanuel, el Dios-con-nosotros, un Dios que comparte la suerte del hombre, y participa de su destino. Dios no es solamente Alguien que está fuera del mundo, feliz de ser en Sí mismo el más Sabio y Omnipotente. Su sabiduría y omnipotencia se ponen, por libre elección, al servicio de la criatura amada. Si en la historia humana está presente el sufrimiento, se entiende entonces por qué Su Omnipotencia se manifestó en la humillación de la Cruz. El escándalo de la Cruz sigue siendo la clave para la interpretación del gran misterio del sufrimiento, que pertenece de modo tan integral a la historia del hombre 9. Todo agente de pastoral que ejerza su ministerio entre enfermos infecciosos debe ser para ellos un consuelo profundo en el dolor que fortalezca al Cristo Místico que sufre, como el ángel de Getsemaní 10 que confortaba a Jesús. Consolar cristianamente desde el Cristo de la cruz es educar y fortalecer en la fe. b. La caridad o el amor. Otra experiencia que ayuda en la educación y crecimiento en la fe es la caridad, el amor, el signo más elocuente de los discípulos de Cristo. El enfermo que experimenta el amor de Dios en el actuar de aquellos que le atienden, puede llegar más fácilmente a comprender el amor de Dios a su alma. La caridad es seguramente la herramienta apostólica que ha conseguido más conversiones al cristianismo. El amor es, como la cara más convincente de nuestra fe, el mejor argumento, la mayor prueba de autenticidad y uno de los signos de credibilidad más rotundos de la revelación cristiana. Vivir el amor es el distintivo del cristiano 11, el principal mandamiento de Cristo, un mandato nuevo 12 del que derivan toda la ley y los profetas 13. Y, puesto que es Dios quien nos ha amado primero 14, ahora el amor ya no es sólo un mandamiento, sino la respuesta al don del amor, con el cual viene a nuestro encuentro 15. Vivir el amor es amar como Cristo nos amó. Es la caridad la que hace a tantos cristianos acercarse a los enfermos infecciosos, aun a riesgo de la propia vida. Y es la caridad la que nos recuerda constantemente que en cada uno de esos enfermos está presente Jesucristo. El amor es donación y esa donación abnegada nos enriquece como nada ni nadie puede hacerlo. La caridad cristiana, que a lo largo de veintiún siglos de cristiandad ha movido a los misioneros, ha entusiasmado a los mártires, ha inspirado a las madres cristianas, ha llevado a las religiosas al heroico desgaste de sí mismas en el servicio al prójimo, ha 9 Cf. JUAN PABLO II, Cruzando el Umbral de la Esperanza, Dios es amor. Entonces, por qué hay tanto mal?. 10 Cf. Lc 22,43. 11 Cf. Jn 13,35-36. 12 Cf. Jn 13,34. 13 Cf. Mt 7,12; Mt 22,40. 14 Cf. 1 Jn 4,10. 15 BENEDICTO XVI, Carta encíclica Deus Caritas est, 1.

5 guiado a los sacerdotes y ha roto las barreras del odio entre países y familias, se inspira y alimenta en la Eucaristía. El cristiano, cuando vive la caridad, se hace eucaristía a sí mismo. Efectivamente, esta caridad, que es, seguramente, el instrumento más eficaz de la evangelización cristiana, se nutre y se inspira de y en la Eucaristía. La Eucaristía nos adentra en el acto oblativo de Jesús. No recibimos solamente de modo pasivo el Logos encarnado, sino que nos implicamos en la dinámica de su entrega 16. Por ello, el educador en la fe tiene que ser un hombre o una mujer profundamente eucarísticos. La Eucaristía, gracia increada, es la fuente de toda gracia y es ella, verdadera presencia de Dios en el alma, la que mueve a las conversiones y abre a los seres humanos a la recepción del Evangelio 17. La preparación del hombre para acoger la gracia es ya una obra de la gracia, y la gracia es necesaria para suscitar y sostener nuestra colaboración a la justificación mediante la fe y a la santificación mediante la caridad 18. La santificación por la caridad es siempre obra de la gracia y esa caridad no es un simple sentimiento, una ambientación vital positiva o una energía, sino un vivir como Cristo nos enseñó en la plena donación de nosotros mismos. Ahí está el núcleo que inspira y fortifica la caridad. c. La vida de oración. La iniciación en la vida de oración es otro modo muy eficaz de educar en la fe. Enseñar a orar es enseñar a creer. La fe es un don en sí mismo, un don que Dios otorga. Por eso es necesaria la oración de petición para recibirlo. Además, el ejercicio de la oración fortalece la vida del creyente. Orar es mantener la mirada fija en Cristo 19. En la liturgia de la Iglesia, en su oración, en la comunidad viva de los creyentes, experimentamos el amor de Dios, percibimos su presencia y, de este modo, aprendemos también a reconocerla en nuestra vida cotidiana. Él nos ha amado primero y sigue amándonos primero; por eso, nosotros podemos corresponder también con el amor. Dios no nos impone un sentimiento que no podamos suscitar en nosotros mismos. Él nos ama y nos hace ver y experimentar su amor, y de este antes de Dios puede nacer también en nosotros el amor como respuesta 20. La oración nos enseña a descubrir en profundidad al Dios del amor, a experimentarlo, a conocerlo con el corazón, a saborearlo. La oración nos descubre que la debilidad humana forma parte de los planes de Dios, que no nos aleja de Él. Nos hace percatarnos de la grandeza de Dios y de cómo lo necesitamos. La oración nos lleva a aceptar la humillación y aceptarla como algo que Dios permite para purificarnos en el amor a Él 21. La oración nos descubre que sólo Dios llena. 16 BENEDICTO XVI, Carta encíclica Deus Caritas est, 13. 17 Cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 2001. 18 Catecismo de la Iglesia Católica, 2001. 19 JUAN PABLO II, Carta a los sacerdotes con ocasión del Jueves Santo de 2004, 5. 20 BENEDICTO XVI, Carta encíclica Deus Caritas est, 17. 21 Cf. Sal 119, 67 y 71.

6 En cualquier proceso de educación en la fe no puede estar ausente la oración porque forma el corazón en la fe, fortalece y enriquece nuestro modo de conocer y amar a Dios y sostiene profundamente nuestra esperanza. La oración nos lleva al contacto directo con Dios. Orar es llamar y responder. Es llamar a Dios y es responder a sus invitaciones. Orar es tratar de amor con quien sabemos que nos ama 22 ; es un encuentro real con Dios que se hace presente en el hombre por la acción del Espíritu Santo. La oración es fe en acto. La oración es como un gimnasio de la fe porque la fe sostiene la oración, la pone en marcha, se ejercita en ella. Orar es ponerse en la presencia de Dios que, por amor, se ha revelado libremente, nos ha invitado a conversar con Él y nos ofrece el don de la comunión con Él. Por la oración, el ser humano aprende a aceptar los planes de Dios sobre su vida y supera la tentación de conformarse simplemente con meter a Dios en los propios planes. Por eso, la oración es a veces el único remedio cuando se ha perdido el deseo de vivir. d. La experiencia del perdón y de la misericordia. Entre los muchos dones que Dios hace a cada ser humano: el don de la vida, el don de la fe, etc., hay uno que toca profundamente el corazón humano: el don del perdón y de la misericordia divina. El perdón es seguramente el momento en el que mejor se descubre el amor de Dios. El rahamin, la misericordia divina, nos descubre la identidad más profunda de Dios: Dios es amor 23. Educar en la fe nos lleva a descubrir a nuestros hermanos al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo 24 a través del sacrificio de su vida; nos lleva a presentar la historia de la salvación como una comunicación del amor y de la misericordia de Dios que quiere acercarse a nosotros a pesar de nuestras miserias, o mejor dicho, precisamente por nuestras miserias. Mostrar el misterio del perdón y de la misericordia de Dios conmueve profundamente. Por mi experiencia personal, en el trato con las almas, el perdón despeja eficazmente muchos prejuicios que pudieran existir contra la fe católica. La experiencia de la misericordia y el perdón renueva la esperanza y la confianza en Dios y descubre la cercanía del corazón de Cristo. La experiencia del perdón descubre la dignidad personal. El ser humano perdonado percibe su valor ante Dios. Es un hijo amado, no un siervo. El penitente se encuentra con el amor personal de Dios hacia él.ve el pecado como una ofensa hecha a un Padre amoroso que le había dado todo lo necesario para ser feliz. No acepta el pecado y se confiesa pecador ante Dios, un Padre en el que confía. El retorno a la casa del Padre parece imposible para el hombre, pero no es imposible para Dios 25. Y el hombre recobra su fe en el Padre. Por ello, en todo proceso de educación en la fe es necesario presentar el encuentro decisivo con la misericordia divina. Conclusión 22 SANTA TERESA DE JESÚS, Libro de la Vida, cap 8. 23 1 Jn 4,8; 4,16. 24 Cf. Jn 1,29. 25 Cf. Mc 10,27.

7 Antes de terminar, no quiero dejar pasar una consideración fundamental y es que, en lo más profundo de la educación en la fe nos encontramos siempre ante una premisa inalterable: La libre iniciativa de Dios exige la respuesta libre del hombre, porque Dios creó al hombre a su imagen concediéndole, con la libertad, el poder de conocerle y amarle. El alma sólo libremente entra en la comunión del amor. Dios toca inmediatamente y mueve directamente el corazón del hombre 26. La educación en la fe no puede prescindir de la libertad humana que, al mismo tiempo, es la herramienta que usa el ser humano para responder a Dios. El educador en la fe intenta llegar a esa libertad sin violentarla, empujándola, motivándola, guiándola; sabiendo que Dios ha puesto en el ser humano una aspiración a la verdad y al bien que sólo Él puede colmar. Por eso, el educador en la fe sabe que lo que está ofreciendo es un regalo, un tesoro para el ser humano, especialmente para el que se encuentra en una situación de sufrimiento. Sabe que le está entregando un bien, el mejor bien, el único bien que se abre a la vida eterna. Y por ello vale la pena cualquier esfuerzo. Muchas gracias! 26 Catecismo de la Iglesia Católica, 2002.