Tratamiento con Injerto Autólogo de Sarcoide Inactivado (Autovacuna) Usamos estos tratamientos como alternativa o coadyuvante de la resección quirúrgica. Es en nuestra experiencia el tratamiento mas eficaz que hemos empleado, obteniendo una alta tasa de éxito sin recidivas y ninguna o muy escasas complicaciones postoperatorias. Los sarcoides son tumoraciones de la piel, que se presentan con alta frecuencia en los caballos. Corresponden al 20% de todos los tumores equinos y al 90% de los tumores cutáneos. Son tumores del tipo fibroblástico, con un componente viral, como el papiloma plantar humano, el papiloma uterino humano, el papiloma bovino, la papilomatosis juvenil de los potros, etc.. Se pueden presentar en cualquier parte del cuerpo, pero sus lugares más frecuentes son la cabeza, abdomen ventral o extremidades. En algunas ocasiones aparecen sobre una herida y eventualmente pueden tener cierto grado de contagio. Pueden crecer e invadir estructuras sensibles, como el ojo, labios, prepucio, pene, ubre etc.. Se presentan con una forma variable y se han clasificado en 4 tipos. TIPO I: Verrugoso y pequeño, de superficie seca y queratinizada, semejante a un papiloma o coliflor. Luego de un trauma o de una biopsia, puede transformarse en un tipo II. TIPO II: Fibroblástico, de aspecto semejante a un queloide o tejido de granulación. Aparecen desepitelizados y sangrantes.
TIPO III: Mixto. Es una combinación de los dos anteriores. Algunos tumores se presentan como nódulos fibrosos y circunscriptos a la dermis, cubiertos por una epidermis intacta, mientras que otros aparecen como grandes masas las que exceden los 25 cm. de diámetro, con superficies hemorrágicas, ulceradas y cubiertas de secreción purulenta. TIPO IV: Reconocido sólo por algunos autores, se llama también "Forma Oculta". Se presenta como áreas de piel ligeramente engrosadas o de superficie algo rugosa y grisácea, sin pelo y son de crecimiento lento. Esta forma aparece, generalmente, alrededor de los párpados y en las orejas. Esos tumores no metastatizan, por tanto no crean un cuadro canceroso que conduzca a la diseminación interna del tumor, sino que pueden producir un daño local. Podemos definirlos como tumores benignos, que tiene malignidad local, esto es, que son invasivos localmente, afectando las estructuras adyacentes y que tienen alta tendencia a la recidiva y muchas veces responden al tratamiento tanto quirúrgico como médico, reapareciendo rápidamente y a veces de forma mucho más virulenta que la primera manifestación del propio tumor. Son muy numerosos los tratamientos empleados como herramienta para eliminar los sarcoides equinos. Los tratamientos clásicos han sido la extirpación sola o acompañada de otros tratamientos, o bien tratamientos tópicos, con pomadas a base de nitrato de plata, fitoterapias, pomadas antitumorales, etc. Hemos empleado citostáticos, como fluoruracilo o cisplatinum, o inmunomoduladores como la vacuna antituberculosa, (BCG). También hemos usado criocirugía con nitrógeno líquido y terapia con láser. Todas ellas con resultado variable. En general los tratamientos tópicos con capacidad de irritar, como el nitrato de plata, pueden ocasionar efectos rebote y estimular el crecimiento del tumor. Normalmente el diagnóstico clínico es muy sencillo y basta el examen del tumor para saber con certeza que se trata de un sarcoide. En caso de dudas se puede recurrir a la biopsia y estudio anatomopatológico, pero no está recomendada, porque la agresión de la prueba puede ser desencadenante de crecimiento.
DESCRIPCION DE LA TÉCNICA DE INJERTO En algunas circunstancias, como por ejemplo la presencia de varios sarcoides en el mismo individuo, la localización de algunos situados en lugares críticos, o la proximidad del tumor, por ejemplo al ojo, impide su resección completa o el tejido circundante sano, como margen de seguridad o bien la recidiva de alguna extirpación anterior, son los motivos para realizar el tratamiento acompañante con autovacunas. Inicialmente como autovacuna se usaba un lisado celular del propio tumor, suspendido en formol al 0.5% y se aplicaban una o varias dosis IM del producto obtenido. Los resultados fueron aceptables, pero era frecuente la irritación y a veces la abscesación en el punto de inoculación. Posteriormente hemos probado con éxito el injerto en el tejido subcutáneo de trozos del tumor, en varios puntos de la tabla del cuello en su tercio más alto, próximo a la crinera. Estos trocitos se preparan cortando dados de unos 0.5 cm de lado, después de haberlos limpiado de restos epiteliales. Se congelan en nitrógeno líquido durante 5 minutos, con el fin de agredir y desactivar las partículas virales y posteriormente se introducen en un ojal, previamente realizado en la región anteriormente señalada. Estos ojales se suturan con uno o dos puntos y el procedimiento ha concluido. Si el tumor es pequeño, se puede resecar totalmente y realizar el preparado para evitar la recidiva o la eliminación de otros de distinto tipo o mas difícilmente extraíbles. Si fuera mas grande, podemos retirar una porción de sarcoide, del suficiente tamaño para preparar las muestras. Con este procedimiento generamos en el organismo una respuesta inmune lo suficientemente poderosa para que él o los sarcoides que quedan, se caigan espontáneamente. Los resultados que hemos obtenido han sido muy satisfactorios, habiendo remitido los tumores en prácticamente todos los casos en que hemos implementado este tratamiento y en algunos casos habiendo desaparecido completamente todos los sarcoides que presentaba el paciente. Hemos tenido casos donde además del tumor inicial, han remitido otros del tipo IV, con forma de placa.
Localmente no se han presentado complicaciones significativas. En muchos caballos tratados, solo se aprecia un nódulo inflamatorio, durante 8 0 10 días. En algunos caballos ha habido cierta respuesta negativa, con algo de supuración, sin mayores consecuencias.
Autores: Álvaro Vázquez, Pablo Adrados EQUISAN Veterinaria Equina Integral