Es evidente que después de seis años de bonanza, la Universidad Autónoma de Tlaxcala, quedó completamente aislada. Al menos así se pudo percibir, en el primer informe de labores que rindió el rector Víctor Job Paredes Cuahquentzi. 1 / 5
Pocos personajes de la vida política, educativa, económica, social y cultural, desfilaron en el recinto universitario. Brillaron por su ausencia la mayoría de funcionarios estatales, delegados federales, diputados locales y presidentes municipales. Ni siquiera estuvieron presentes en el informe, los ex rectores Héctor Ortiz Ortiz, Juan Méndez Vázquez y Eugenio Romero Melgarejo. Y por ende, no asistió ninguno de los gobernadores que ha tenido Tlaxcala, desde la fundaci ón de la máxima casa de estudios de la entidad. En el caso de Emilio Sánchez Piedras, su impulsor, se entiende, porque ya pasó a mejor vida, pero Y los demás? No creo que eso pase en otras entidad federativas del país. Lo anterior refleja el escenario de crisis que se está viviendo en la universidad pública local, producto de su abierta politización. Como no se tiene precedente en alguna institución superior de su tipo, la UAT ha tomado partido en los últimos procesos electorales. Cambio el color rojo de su emblema y se pintó de azul, para meterse de lleno en las elecciones para renovar la gubernatura de 2010. No sólo eso, desde la rectoría se retó al sistema priísta que le arrebató el poder estatal al principal jerarca universitario. 2 / 5
Hoy, la institución está pagando las consecuencias de esos actos, cada vez más aislada de la sociedad. No se aprendió la lección de la confrontación abierta que se tuvo con Alfonso Sánchez Anaya, cuando fue gobernador. En ese sexenio, el entonces mandatario perredista, castigó a la UAT a tal extremo que le suspendió las aportaciones estatales. Sin importar que el veterinario gobernante representaba a esa izquierda que dice defender la educación pública. Fue una de las peores crisis económicas, que ha tenido la universidad local en sus 35 años de historia, después vino la bonanza, y de nuevo la confrontación. Ahora la institución que se partidizó, reclama que los recursos públicos no se utilicen con fines partidistas, vaya contradicción. No obstante, hay que reconocer que el rector Víctor Job Paredes actuó con sensibilidad durante la presentación de su informe de labores. Cuidó demasiado las formas para evitar una nueva confrontación. Hubo reclamos de más presupuesto, pero estos fueron demasiado tibios y bien cuidados. No dijo otra cosa ajena a la situación que enfrentan todas las universidades públicas del país, sobre la falta de recursos para cubrir todas sus necesidades. 3 / 5
Pero si se comparan las partidas que se canalizaron a la UAT en el sexenio pasado, cualquier presupuesto que se destine se quedará corto. Por lo demás, los que sí estuvieron presentes, fueron los ex rectores Alfredo y Héctor Vázquez Galicia, así como René Grada Yautentzi, y Serafín Ortiz Ortiz. Lo que evidenció una notable ausencia de liderazgos RAFAGAS Con la novedad que ningún priista tlaxcalteca figura en los primeros lugares de las listas de candidatos a diputados por la vía plurinominal que se dio a conocer anoche. Los que significa, que el PRI local no tendrá representación ni en la Cámara de Diputados Federal, ni en la Cámara de Senadores. No es la primera vez que eso sucede, el CEN del PRI siempre ha marginado a Tlaxcala de las posiciones que han llegado de manera directa al Congreso de la Unión. Quienes sí han tenido esa posibilidad son contados con los dedos, y entre ellos figuran Beatriz Paredes Rangel y Mariano González Zarur. -000- Cuarto de Guerra le da la bienvenida a su nuevo columnista, José Camacho Valenzuela, joven tlaxcalteca con notable talento en el análisis deportivo. 4 / 5
A partir de esta fecha, usted podrá leer su sección Destilando Futbol Esperando que sea de su agrado. Bienvenido! victortamayo5@hotmail.com 5 / 5