SALA DE PRUEBAS LO MEJOR El filtro UHC-S elimina de forma satisfactoria la contaminación lumínica tanto con aberturas grandes como pequeñas. El filtro Skyglow mejora ligeramente la visión en cielos rurales poco contaminados. LO PEOR El filtro Skyglow no minimiza de forma clara la luz parásita lunar. El filtro O-III no mejora mucho la imagen con 250 mm. de abertura. FILTROS BAADER O-III, UHC-S Y NEODYMIUM Sabemos que existen filtros que nos ayudan en las observaciones de cielo profundo, normalmente aumentando el contraste o eliminando la contaminación lumínica. Este mes probaremos tres filtros visuales de Baader-Planetarium. Texto y fotos: Jon Teus Consultas: astrofoto@observarelcielo.com Hace tiempo probamos ya algunos filtros antipolución fotográficos. Este mes, nos decantaremos por tres filtros diferentes, pero todos con una aplicación común; observar mejor las imágenes de cielo profundo. He seleccionado el clásico antipolución luminosa UHC-S, un O-III para observar nebulosas planetarias y el Neodymium (también conocido por Moon&Skyglow), los tres de la marca Baader. Todos conocemos que, para realizar observaciones de cielo profundo, necesitamos cielos oscuros y poco contaminados. Hasta la fecha, y mientras no nos cambien las farolas de las calles por unas de tipo LED blancas (serán catastróficas para el astrónomo amateur), sabemos que las fuentes de contaminación luminosa provienen principalmente de dos tipos de iluminación urbana, la de vapor de sodio y la de vapor de mercurio. Las de mercurio iluminan con un tono azul-verdoso, mientras que las de sodio lo hacen en amarillonaranja. Son colores concretos que se pueden bloquear con filtros especiales denominados antipolución luminosa. Para eliminar en parte estas longitudes de onda que emiten las farolas, Baader tiene el UHC-S. Además, este filtro está diseñado para permitir un uso más satisfactorio con telescopios de poca abertura, pues estos tipos de filtros suelen comerse 62 ESPACIO _02UCN_SP_109_062CC.pdf SP_109_062 066.indd 62 27/11/13 10:35:04
Transmisión Esperaba más del filtro O-III. Sí que delimitaba un poco mejor los contornos de las nebulosas planetarias que observé, pero la diferencia fue muy pequeña. El fi ltro UHC-S de Baader bloquea claramente las longitudes de onda que emiten las farolas de sodio y mercurio, el ultravioleta, el violeta y el infrarrojo. El hecho de que bloquee el ultravioleta y el infrarrojo será muy útil para aplicaciones fotográfi cas, pero no para un uso visual. El filtro Skyglow (en teoría) reduce la luz parásita lunar, algo que se agradece en cielo profundo. Lo probé en este sentido y la diferencia era mínima. No fui capaz de detectar una clara mejora en contraste en una noche de Luna de diez días. El Neodymium tiene unos pasos de bandas menos restrictivos que el UHC-S. De hecho, es el menos oscuro de los tres fi ltros. Bloquea el ultravioleta e infrarrojo, gran parte de las emisiones de vapor de sodio y, en alguna medida, también las de vapor de mercurio, así como parte del violeta. No hay que olvidarlo nunca, la base para disfrutar de una buena observación de cielo profundo es un cielo oscuro. El fi ltro O-III es el más oscuro de todos. Sólo tiene un paso de banda de 8 nm. centrado en las líneas de emisión del oxígeno, elemento químico muy abundante en las nebulosas planetarias. En resumen, el fi ltro O-III bloquea todo el espectro menos las líneas del oxígeno, incluyendo por tanto el bloqueo de la contaminación luminosa. bastante luz lo que, normalmente, obliga a utilizar aberturas de 200 mm. como mínimo. En Baader han pensado en esto y dicen que este UHC-S es también muy útil con aberturas menores. O-III Y NEODYMIUM El O-III es un filtro de banda muy estrecha que solamente deja pasar un ancho de banda de 8 nm. Su uso se centra principalmente en nebulosas planetarias, aunque también puede dar buenos resultados con nebulosas de emisión. Este filtro sí que es muy oscuro por su estrecho paso de banda, por lo que el propio fabricante recomienda usarlo con telescopios que tengan como mínimo 200 mm de abertura. Se trata de un filtro que bloquea gran parte de las emisiones de vapor de sodio y algo de las de vapor de mercurio. También bloquea el llamado skyglow, o luz del cielo generada de forma natural por distintos motivos. Es un filtro muy adecuado para observaciones planetarias (Marte, Júpiter y Saturno), pero que puede tener también su aplicación en observaciones de cielo profundo. Comencé por utilizar el Neodymium con un Newton de 200 mm. f/5, y con la nebulosa M20, o Trífida, en el centro del campo. Después de varias comparaciones con y sin filtro, no pude apreciar gran diferencia. ESPACIO 63 _02UCO_SP_109_063CC.pdf SP_109_062 066.indd 63 27/11/13 10:35:14
Simplemente, me pareció tener una mejor sensación en contraste con el filtro, pero tan poca cosa que prefiero denominarla sensación, ya que esta diferencia no fue nunca ni clara ni evidente. Ambas imágenes fueron prácticamente idénticas y el uso del Neodymium, como digo, no aportó ninguna mejora evidente. Con la nebulosa del Velo (la parte NGC 6992) sí me pareció (solo me pareció) tener algo más de facilidad para detectar mejor sus límites pero, una vez más, había muy poca diferencia. Con la nebulosa M27 (la planetaria Dumbell) no detecté nada de nada. No hubo ninguna mejora respecto a la imagen sin filtro. OBSERVACIÓN CON UHC-S Sé que donde este filtro deberá aportar lo suyo será bajo cielos contaminados, pero quería comprobar si mejoraba algo la imagen en cielos oscuros, aunque con algo de contaminación residual lejana (prácticamente siempre presente). Seguimos con un Newton de 200 mm. f/5. Comencé con M20, ya que esta zona de Sagitario está algo baja y, por tanto, siempre más afectada por lejanas fuentes de contaminación luminosa. Bueno, pues lo único que me aportó el UHC-S Los tres filtros probados este mes tienen aplicaciones para la observación de cielo profundo. El que mejor hizo su trabajo fue el UHC-S Booster. de Baader en esta imagen de M20 fue más oscuridad. Nada más. Me fui al Velo y aquí sí pude ver alguna diferencia que, aunque no grande, sí fue evidente. El UHC-S me permitía delimitar mejor el grueso de la nebulosa, me la levantaba del fondo del cielo algo mejor que sin el filtro. Ya que Baader dice que este filtro es también útil en aberturas pequeñas, lo probé también con un refractor de 102 mm. f/9 (estaban juntos sobre la misma montura el Newton y el refractor) y se notaba. La mejora es la misma que con el Newton; algo más contrastada la nebulosa respecto al fondo del cielo. Vamos ahora con la prueba en cielos contaminados. Me desplacé hasta una localidad con unos 11.400 habitantes y me situé en lo alto de la ciudad, en su zona externa Norte, donde existe un pinar perfecto para realizar este tipo de observaciones de cielo profundo bajo bastante contami- 64 ESPACIO _02UCU_SP_109_064CC.pdf SP_109_062 066.indd 64 27/11/13 10:39:01
Bajo cielos contaminados, el UHC-S Booster trabajó muy bien. Me gustó cómo eliminaba el velo grisáceo del fondo de la imagen, originado por la luz urbana. Trabajó estupendamente tanto con el Newton de 200 mm. como con el refractor de 102mm. Durante la prueba, eché de menos una rueda portafiltros. Para los observadores 100% cielo profundo, puede resultar un accesorio interesante. nación. Comencé por utilizar el refractor de 102 mm. de abertura ya que, como hemos comentado antes, Baader especifica que su filtro antipolución UHC-S es capaz de rendir satisfactoriamente incluso con pequeñas aberturas. Dirigí el telescopio hacia la nebulosa de Orión. Utilicé un ocular de 35 mm. para tener una imagen de la nebulosa completa y holgada en el campo de visión. Estuve un buen rato observando este objeto sin filtro, memorizando las estructuras que era capaz de detectar como la extensión de los brazos principales de M42, la débil intensidad de M43 y por supuesto, el fondo del cielo. EN CIELO CONTAMINADO No esperaba el resultado que vi al colocar el UHC-S. El cambio fue realmente importante. De entrada, el fondo del cielo se oscureció casi por completo, eliminando ese velo gris que producen las farolas. Muchos aficionados no pueden desplazarse a cielos poco contaminados con la frecuencia que quisieran. Es en estos casos cuando un filtro antipolución luminosa aportará más contraste a la imagen. ESPACIO 65 _02UCP_SP_109_065CC.pdf SP_109_062 066.indd 65 27/11/13 10:35:23
Para una observación de cielo profundo con filtros de banda estrecha es fundamental disponer de abertura. En mi opinión, los 250 mm. son, como poco, el punto de partida. De ahí en adelante es lo ideal. Pero lo que más me gustó fue comprobar que las extensiones de los brazos principales de M42 ganaban en tamaño gracias al contraste mejorado que este filtro me ofreció. Este aumento en la extensión tampoco era como para tirar cohetes, pero sí claramente evidente. Sin duda, la imagen mejoraba de forma muy clara. Algo inevitable es que las estrellas se tiñan de un tono verdoso-azulado. En cualquier caso, es algo a lo que te acostumbras pero, sobre todo, supone un mal menor porque la imagen global, como digo, mejora claramente con el filtro UHC-S. Pasé luego a usar un Newton de 200 mm. f/5, esta vez, con un ocular de 12,5 mm. para comprobar la diferencia sobre una imagen más ampliada de la nebulosa. Al realizar el cambio de imagen sin filtro a imagen con UHC-S, comprobé de nuevo la gran capacidad de este filtro para oscurecer el fondo del cielo sin perder estructura o nebulosidad. Debido a esto, las estructuras oscuras, los entrantes de polvo oscuro que solapan las zonas brillantes de la nebulosa, se detectaban más claras. Una vez más, centrándonos en si vemos más estructura o no, el resultado no era escandaloso pero, como digo, al oscurecer el fondo del cielo, se observaban más claras. OBSERVACIÓN CON O-III Vayamos con el O-III. Es el filtro más oscuro de los tres, por lo que de entrada lo utilicé con un Newton de 250 mm. f/4,8. Es un filtro diseñado principalmente para la observación de nebulosas planetarias, así que vamos a por M57 y M27. La verdad, tampoco me ofreció grandes cosas este filtro tan oscuro. Con M27 sí que detectaba algo más oscuros (poca cosa) los extremos de la nebulosa (las partes de este objeto más oscuras y difusas), pero sin aportar nada significativo. Los tres filtros probados son de 1 1/4. Su uso fue fácil y cómodo. Con M57 apenas ganaba nada la imagen. La pude ver algo mejor delimitada, ya que el O-III oscurece mucho el fondo del cielo; mejor levantada pero, una vez más, sin aportar nada realmente importante. Existe otra versión de filtro visual O-III de Baader con 10 nm. de paso de banda. Probablemente, sea más eficaz con aberturas de 250 mm. que el probado de 8 nm., no lo sé, ya lo veremos en otra ocasión. 66 ESPACIO _02UCQ_SP_109_066CC.pdf SP_109_062 066.indd 66 27/11/13 10:35:29