TEMA 15.-EL SUELO A.- DEFINICIÓN- Se denomina así a la capa superficial disgregada de la corteza terrestre, de espesor variable, procedente de la meteorización de la roca preexistente. B.- ESTRUCTURA- Se diferencian una serie de capas que reciben el nombre de horizontes. El número y desarrollo de éstos define el grado de madurez del suelo, que está relacionado a su vez con las características climáticas de la zona. Así, podría hablarse en forma general de tres horizontes: Horizonte O (orgánico) - en la superficie del suelo, formado por material orgánico suelto (hojarasca, raíces, ramas), no saturado de agua. Horizonte A - de color oscuro y predominan los procesos de lavado (lixiviación). Se divide a su vez en nivel A1 o humus (restos vegetales y animales en descomposición que forman agregados con la materia mineral. Estos agregados retienen el agua y cationes como Ca 2+, K +, Mg 2+, NH 4 +...) y A2 (con predominio de la materia mineral) Horizonte B - de color variable, debido a los precipitados de elementos procedentes del nivel superior en forma de sales Horizonte C - con fragmentos procedentes de la meteorización mecánica o química de la roca madre (D) subyacente. C.- COMPOSICIÓN- En el suelo aparecen dos tipos de componentes: Orgánicos- formados por restos animales, vegetales y microorganismos que tras una serie de transformaciones físico-químicas forman el humus Inorgánicos- Que engloban gases como el O2, y CO2, agua con sustancias disueltas y materiales sólidos como los precipitados, los restos de la alteración, etc. D.- FORMACIÓN- Depende de diversos factores: El clima- que regula el balance hídrico del suelo y la velocidad de las reaccionasen él producidas, condicionando así la meteorización de la roca madre y la posterior evolución del suelo. Es por ello el factor más importante. La topografía- que determina la orientación y pendiente del suelo. Figura 1 La naturaleza de la roca madre- de la que depende la composición del suelo. La actividad biológica- que condiciona la transformación de la materia orgánica. El tiempo- los periodos de formación de sus horizontes son amplios en la escala temporal y su renovación es muy lenta (por esto el suelo se considera un recurso no renovable) E.- CLASIFICACIÓN- Observación previa: Figura 2 En 1951, el Soil Survey Staff del Departamento de Agricultura de los EEUU comenzó un nuevo sistema de clasificación, que desembocó en la publicación de un catálogo denominado Soil Taxonomy. Éste se ha convertido en la referencia estándar en muchos países del mundo y además ha servido de base para la confección de sistemas de clasificación similares en otros. Muchos países europeos tienen sistemas particulares, pero hoy en día es normal añadir siempre a un suelo el nombre correspondiente de la Soil Taxonomy. 1
Clasificación básica Puede hacerse una primera división en suelos zonales, en los que se produce una dependencia climática, y suelos azonales, no maduros, en los que apenas influye la climatología. Suelos zonales: Se distinguen fundamentalmente los suelos de zonas frías, zonas templadas, zonas áridas y zonas tropicales Suelos azonales: Los más importantes son el ranker, rendsina y gley SUELOS ZONALES a.-suelos de zonas frías y húmedas Es característico de los bosques de coníferas (taiga). De carácter ácido por tener gran cantidad de residuos orgánicos, ya que las temperaturas bajas frenan la descomposición (menor proliferación de microorganismos y las reacciones químicas son más lentas). La abundancia de precipitaciones origina abundante lixiviación, provocando la migración de cationes y coloides húmicos hacia el horizonte B (color oscuro). El horizonte A, pobre en nutrientes, es de color claro. Ej podzol b.-suelos de zonas templadas El carácter estacional de estas regiones proporciona una descomposición lenta de la materia orgánica, que se acumula en el horizonte A. En la estación húmeda se produce lixiviación hacia horizontes inferiores y en la estación seca, ascenso de los lixiviados por capilaridad. Si las precipitaciones con escasas (clima continental), los cationes se acumulan en el horizonte A (color pardo) y el ascenso de agua por capilaridad acumula en el horizonte B CaCO3 (color claro).ej suelos de cultivo (chernozen), encinares (suelos pardos) 2
c.-suelos de zonas áridas La ausencia de precipitaciones provoca el ascenso capilar constante y la posterior evaporación del agua, cediendo al suelo, en forma de precipitado, las sales que lleva disueltas. Se forman así costras superficiales de yeso y otras sustancias, denominadas caliches. d.-suelos de zonas tropicales Se caracterizan por tener un horizonte A escaso, ya que la elevada temperatura y las abundantes precipitaciones aceleran la descomposición de la materia orgánica. Por esta razón son suelos básicos que favorecen transformación química (alteración) de los minerales arcillosos, dando como resultado la acumulación de Fe +++ (limonita) y de Al +++ (bauxita) sobre el horizonte B y la lixiviación de los otros cationes. Este proceso se conoce como laterización y origina unas costras de estos minerales denominadas lateritas. Si éstas son grandes, impiden el asentamiento de la vegetación. Figura 5 Figura 6 3
SUELOS AZONALES Se pueden destacar tres principales tipos de suelos inmaduros: El ranker, asentado sobre roca silícea, la rendsina, asentado sobre roca caliza, y el gley, permanentemente encharcado. En este último se descompone la materia orgánica de modo poco eficaz, formándose acumulaciones de turba y concentraciones de arcillas con Fe reducido de color azul, por las que recibe dicha denominación. Rendsina Gley Figura 7 Figura 8 F.- LA DEGRADACIÓN DEL SUELO. EROSIÓN- a/ factores. En la erosión del suelo interfieren los siguientes factores: La erosividad, que hace referencia a la capacidad de un agente geológico concreto (viento, hielo...) para producir erosión del suelo. Su estimación se establece mediante diversos índices. Índice de aridez- I = 100t/P t-t media anual P- litros de agua precipitados anualmente. Índice de agresividad climática- I = p 2 / P p - litros en el mes más lluvioso P- litros anuales Índice de erosión pluvial- R = E x I 30 / 100 E-energía cinética del aguacero I 30 - intensidad máxima en l x m 2 caídos durante 30 minutos La erosionabilidad se refiere a la disponibilidad del suelo para ser movilizado. Para su estimación se emplean fundamentalmente dos parámetros La inclinación de las pendientes, expresada en %. El índice de protección vegetal (entre 0-ninguna y 1-total), que informa del estado de la cobertera vegetal El índice de resistencia litológica, que informa de la susceptibilidad del terreno a la disgregación b/ Valoración. El grado de erosión puede establecerse mediante una serie de indicadores: Físicos- hacen referencia a las marcas y estructuras originadas por el agente erosivo. Pueden citarse, la erosión laminar, la erosión en surcos, la erosión en cárcavas, la solifluxión, la reptación...etc. 4
Biológicos- referidos a la presencia de vegetación, su densidad, enraizamiento, etc (se establecen varios grados de protección). Métodos indirectos- basados en una serie de parámetros físicos combinados, entre los que destaca la denominada ecuación del suelo : A= R x K x L x S x P x C A-pérdida media anual de suelo R-índice de erosión pluvial K-factor de erosionabilidad del suelo L- longitud de la pendiente S-pendiente del terreno P-existencia o no de medidas preventivas C- relación entre pérdidas de terreno si estuviese cultivado y si estuviese en barbecho c/ Control. Las medidas más empleadas para controlar y recuperar las zonas con procesos de erosión (naturales o por la actividad humana) son: 1- Drenajes, aliviaderos y cunetas para canalizar la escorrentía. 2- Diques en cárcavas para retener los derrubios 3- Contrafuertes o muros de contención para evitar desprendimientos y desplomes. 4- Abandono de cultivo en zonas marginales con excesiva pendiente y poco suelo. 5- Cultivos en bancales siguiendo las curvas de nivel 6- Plantado de especies arbustivas y herbáceas en zonas de suelo escaso. 7- Formación de pastizales estables. 8- Mantenimiento de la superficie forestal. 9- Cortafuegos para evitar la deforestación. 9 8 6 7 4 2 5 1 3 Figura 9 G.- IMPACTOS SOBRE EL SUELO. DESERTIFICACIÓN- Es el proceso de degradación del suelo relacionado directa o indirectamente con la acción humana. Puede estar originado por los siguientes fenómenos: 1- De acción química - lavado de nutrientes (pérdida de fertilidad), concentración de contaminantes (metales pesados, acidificación, etc.) y salinización (acumulación de sales en zonas de regadío). 2- De acción física - pérdida de su estructura natural por compactación (uso de maquinaria pesada, pisoteo del ganado, etc.) 3 - De acción biológica - pérdida de la materia orgánica o mineralización del humus por actividad excesiva de los microorganismos. 4 - De potenciación de los agentes geológicos externos - erosión hídrica y erosión eólica. nota- no confundir con desertización, proceso natural de formación del desierto. 5