La Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército Nacional de Colombia brinda seguridad en la región del Catacumbo La Fuerza de Tarea Vulcano, una unidad especial de la Segunda División del Ejército de Colombia, encabeza una masiva campaña militar y social para erradicar a los grupos armados ilegales de la región del Catacumbo. Santiago Wills Pedraza 8 January 2015
Desactivan AEI: Soldados de la Segunda División del Ejército Nacional de Colombia desmantelaron este artefacto explosivo improvisado (AEI) el 19 de diciembre, cerca de la localidad de El Tarra en la región colombiada del Catacumbo. [Foto: Ejército de Colombia] La Fuerza de Tarea Vulcano, una unidad especial de la Segunda División del Ejército de Colombia, encabeza una masiva campaña militar y social para erradicar a los grupos armados ilegales de la región del Catacumbo. Efectivos de la Fuerza de Tarea están confrontando a diversos grupos, entre ellos las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Ejército Popular de Liberación (EPL), además de pandillas criminales, con el objetivo de debilitarlos. Los soldados lograron importantes éxitos en Catatumbo en 2014: la Fuerza de Tarea capturó a 339 integrantes de organizaciones ilegales, decomisó o destruyó más de tres toneladas de explosivos, incautó casi 10.000 cartuchos y confiscó cientos de armas de fuego. Duro golpe al ELN Algunas de las confrontaciones de la Fuerza de Tarea con los terroristas han sido violentas.
Por ejemplo, el 23 de diciembre, efectivos de la Fuerza de Tarea Vulcano se enfrentaron a un grupo de terroristas del ELN cerca de la localidad de El Tarra, al noreste de Colombia. Los efectivos militares ultimaron a un comandante del ELN conocido como Ramón durante el enfrentamiento armado. Ramón había integrado el ELN durante 10 años y estaba a cargo de gran parte de las operaciones de narcotráfico del grupo, así como también de comprar y vender explosivos, según datos de inteligencia militar. La muerte de Ramón es un gran golpe a las operaciones del ELN en la región del Catatumbo, según el Ejército Nacional de Colombia. El Catatumbo es una zona neurálgica por la cuestión de la frontera con Venezuela, indicó el Teniente Félix Cuevas, comandante de la Compañía de Acción Integral de la Fuerza de Tarea Vulcano, una división que ofrece ayuda humanitaria a numerosas comunidades en la región del Catatumbo. Tiene muchos recursos como el petróleo y hay muchos cultivos de coca. Por eso es el foco de una multitud de grupos al margen de la ley. El Ministerio de Defensa creó Vulcano en 2012 para contrarrestar los ataques terroristas en la región del Catatumbo, donde las FARC, el ELN, el EPL y otros grupos criminales han acosado a civiles locales durante al menos 20 años. Antecedentes de operaciones terroristas Al menos desde comienzos de la década de 1990, las FARC, el ELN y el EPL han operado a lo largo del río Catatumbo, un curso de agua de unos 500 km que nace en el norte de Colombia y desemboca en el lago Maracaibo, en Venezuela. Grupos terroristas y otras organizaciones ilegales utilizan el río para transportar drogas, según el Ejército de Colombia.
Ayuda a civiles: Soldados de la Fuerza de Tarea Vulcano, una unidad especial de la Segunda División del Ejército Nacional de Colombia, ayudan a prestar servicios sanitarios y equipos a miembros de la tribu indígena Motilón Barí durante un taller de salud realizado el 2 de diciembre. [Foto: Ejército de Colombia] Grupos terroristas y bandas criminales emergentes (BACRIM), entre ellos grupos narcotraficantes como el Clan Úsuga, que comenzó a operar en la región en 2006, han participado en violentas luchas por el control del río y del petróleo y los recursos minerales del Catatumbo. En consecuencia, la Fuerza de Tarea Vulcano ha procurado debilitar estos grupos criminales atacando sus finanzas y su capacidad de llevar a cabo operaciones terroristas y de narcotráfico. Por ejemplo, para entorpecer las finanzas de estas organizaciones ilegales, el grupo militar destruyó en 2014 más de 420 laboratorios de pasta de cocaína y decomisó unas 108.000 toneladas de materiales líquidos y sólidos de procesamiento de cocaína. Asimismo, la Fuerza de Tarea detectó más de dos millones de plantas de coca que eran utilizadas para producir cocaína, además de 124 semilleros de coca, también cultivados de manera ilegal. Ayuda a la población civil La confrontación a las organizaciones terroristas e ilegales es parte de una estrategia más amplia que también incluye ayudar a la población civil de Catatumbo, según el Teniente Cuevas. Por ejemplo, la Segunda División, en cooperación con varias entidades gubernamentales y privadas, recientemente ha organizado actividades sanitarias y recreativas en pueblos y localidades remotas. Como parte de esta iniciativa, soldados de la Fuerza de Tarea acompañan a dentistas, médicos y psicólogos a comunidades lejanas, donde el personal médico brinda servicios gratuitos a la población civil. Los efectivos de la Fuerza de Tarea Vulcano también llevan consigo a soldados del Ejército, quienes actúan como payasos y magos para los niños de las comunidades donde prestan servicio. La gente de los poblados vecinos también suele acudir a las ferias de salud, lo que da como resultado que unas 1.500 personas reciban servicios gratuitos de salud en un período de dos o tres días. Los soldados también entregan diversos equipos para ayudar al progreso de la población civil. En noviembre, efectivos de la Segunda División del Ejército viajaron a La Gabarra, una ciudad azotada por la violencia en la región del Catatumbo. Allí donaron 20 computadoras, varios libros y dos televisores de pantalla grande para ayudar a la escuela local. Adicionalmente, en diciembre pasado los soldados trabajaron en cooperación con un centro comercial local de Cúcuta, ciudad capital del Departamento de Norte de Santander, para recolectar más de 3.000 regalos para los niños de la región del Catatumbo. La Fuerza de Tarea Vulcano llevó a cabo otras seis actividades similares en 2014 y otras siete en 2013. Entregar asistencia médica y equipos es ayudar al Ejército a ganarse y mantener el apoyo de la población civil. Las actividades sociales son muy importantes porque nadie llega al centro de la selva con toda esta ayuda, concluyó el Teniente Cuevas. Lleva tres años. Y ahora la población está apoyando al Ejército, a pesar de la constitución del área.
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