La Historia de la Navidad Desde el Punto de Vista de Pablo Segunda Parte 6 de Enero, 2008 Filipenses 2:5-11 Esta semana vamos a continuar estudiando la historia navideña desde el punto de vista de Pablo basándonos en Filipenses 2:5-8. Déjenme leerles los versículos. 5 Haya, pues, en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, 6 el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo haciéndose semejante a los hombres. 8 Y hallándose en forma de hombre, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por qué he representado este pasaje como un pasaje navideño? He representado este pasaje como un pasaje navideño no porque nos detalle los hechos observables del nacimiento de Cristo, tales detalles como los que encontramos en los evangelios, sino porque nos describe ciertos hechos no observables de Su nacimiento que nos dan perspicacia acerca de Cristo. Noten que esta sección de versículos comenzó con un reto. Y, cuál fue ese reto? Pablo retó a la iglesia en Filipos en Filipenses 2:5 a que hubiera en ellos esta actitud que hubo también en Cristo Jesús. En otras palabras, él los retó, como Cristo, a que tuvieran el corazón de un siervo. Pero Pablo no estaba satisfecho con simplemente retar a la iglesia en Filipos a que, al igual que Cristo, tuvieran el corazón de un siervo, sino que él continuo describiendo como Cristo manifestó ese corazón, como Él muy metódicamente y con propósito descendió de las riquezas que Él conocía en el cielo a las pobrezas que Él vino a conocer en la tierra. Y esto, por su puesto, nos guió a la pregunta que comenzamos a contestar ase dos semanas. Así que, cuál es esa pregunta? Ésta es la pregunta: Qué pasos tuvo que tomar Cristo para descender de riquezas a pobrezas? Y, cuál fue el primer paso en el que nos enfocamos ase dos semanas? El primer paso en el descenso de Cristo de riquezas a pobrezas fue que Él voluntariamente cedió Sus derechos (Filipenses 2:6). Dónde vimos que Él cedió Sus derechos voluntariamente? Dejen que les lea Filipenses 2:6 el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Noten la palabra forma. Es la palabra griega MORPHE, la cual describe el carácter esencial de algo. Así que de acuerdo a Pablo, qué era el carácter esencial de Cristo, o Su MORPHE? Él nos dice. Su forma o MORPHE era de Dios, o sea, Su Deidad. Y porque Su carácter esencial era el de Dios o Deidad Él tenía ciertos derechos. Y uno de esos derechos era el derecho de igualdad [con Dios]. Dejen que les lea Filipenses 2:6 de nuevo, pero esta vez leeré el versículo completo. Qué es lo que dice? Esto es lo que dice: el cual [o sea Cristo], aunque existía en forma [o MORPHE] de Dios, no consideró el Todas las citas bíblicas son de la Biblia de las Américas; The Lockman Foundation; La Habra, California; 1986. 1
ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Y por su puesto, cuando habla de ser igual, está hablando acerca de una igualdad exacta. Por lo tanto, aunque Cristo, siendo Dios, tenia el derecho de disfrutar una igualdad exacta con todos los miembros de la Trinidad, Él en Su servicio a otros voluntariamente cedió su derecho. Esto es ciertamente lo que se nos implica cuando el versículo dice que Cristo no consideró igualdad con Dios, o igualdad exacta [con Dios] como algo a qué aferrarse. Tal vez éste es el mensaje que nosotros, como discípulos de Cristo, hemos tomado a pecho. Y por qué es esto tan importante? Esto es tan importante porque si nunca llegamos al punto donde estemos personalmente dispuestos, como Cristo, a ceder nuestros derechos en el servicio de otros, fallaremos cuando encontremos pruebas. Pero no hemos terminado todavía. Esta mañana vamos a considerar el segundo paso que Cristo tomo en Su descenso de las riquezas que Él conocía en el cielo a las pobrezas que Él vino a conocer en la tierra. Así que cuál fue este segundo paso? El segundo paso que Cristo tomo en su descenso de riquezas a pobrezas fue que Él se despojó a sí mismo. Es una cosa que Cristo no considere la igualdad con Dios como una cosa al cual aferrarse, pero es otra cosa para Él el tomar la acción para hacerlo. No obstante, esto es exactamente lo que Cristo hizo. Veamos Filipenses 2:6 de nuevo, pero esta vez también leeré la primera parte de Filipenses 2:7. Así que, qué es lo que dice? Esto es lo que dice, 6 el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, [ahora escuchen lo que dice la próxima frase] 7 sino que se despojó a sí mismo La palabra despojó (KENOO) en griego secular puede traducirse vaciar, o hacer vacío en su sentido literal o hacer de no efecto cuando es usada en un sentido metafórico. Así que cómo podemos entender mejor el termino despojó (KENOO) aquí en Filipenses 2:6? Es mejor entender el uso de la frase se despojó a sí mismo en su sentido metafórico ya que eso es consistente con el modo en que la palabra [KENOO] se usa cada vez que aparece en el Nuevo Testamento (Romanos 4:14; 1ª Corintios 1:17; 9:15; 2ª Corintios 9:3). Así que, qué quiere decir prácticamente para nosotros lo que Pablo quería decir? Esto es lo que quiere decir: Cuando Pablo dijo que Cristo se despojó a sí mismo, él dio a entender que Cristo se despojó a sí mismo de sí mismo al no insistir en retener Su derecho a igualdad con Dios, por lo tanto haciéndose a no tener efecto. O podríamos decirlo de este modo: Cuando Pablo dijo que Cristo se despojó de sí mismo, él en efecto dio a entender que Cristo murió a sí mismo. A menudo hablo con gente que dicen que quieren vivir una vida centrada en Cristo o que ellos quieren un matrimonio centrado en Cristo. Pero, muy a menudo ellos no comprenden lo que ellos dicen que desean. Una vida centrada en Cristo o un matrimonio centrado en Cristo es algo que cuesta mucho. Una vida centrada en Cristo es una vida voluntariamente dedicada al servicio de otros sin ninguna consideración a nuestros derechos personales. Una vida centrada en Cristo requiere que nos despojemos de nosotros mismos, haciéndonos a nosotros mismos a no tener efecto. En 2
otras palabras, una vida centrada en Cristo requiere que en nuestros deseos de seguir en los pasos de Jesús muramos a nosotros mismos. Del punto de vista del mundo este tipo de planteamiento de la vida es algo estúpido. Pero la verdad es que éste es verdaderamente el único modo en el cual esta vida pude ser planteada si es que vamos a encontrar vida y vida abundante. Dejen que les lea Mateo 10:39. El que ha hallado su vida, la perderá; y el que ha perdido su vida por mi causa, la hallará. Y ésta es la verdad. Queremos seguir por los pasos de Jesús? Entonces debemos estar listos a ceder nuestros derechos, no solamente algunos de nuestros derechos, sino que todos, para que cuando encontremos pruebas podamos, como Cristo, despojarnos de nosotros mismos. Y por su puesto, si esto es algo que hacemos voluntariamente, el resto de nuestras vidas va a cambiar, y basándonos en lo que dice la Palabra de Dios nuestras vidas van a cambiar para lo mejor. De nuevo, cuál es nuestra inspiración para hacer esto? Nuestra inspiración para hacer esto es el ejemplo de Cristo, quien aunque existía en forma de Dios no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse sino que se despojó a sí mismo. Y a dónde llevó este despoje de sí mismo a Cristo? El despoje de sí mismo de parte de Cristo lo llevó a que dejara la gloria del cielo para tomar Su vivienda en la tierra (Filipenses 2:7). Para hacer esto, dos cosas fueron requeridas de Él. Primeramente, el cambio de domicilio de Cristo del trono del cielo al pesebre en Belén requirió que Él ocultara Su majestad. Cómo exactamente fue ocultada su majestad? Primeramente, Su majestad fue ocultada con respecto a Su apariencia (Isaías 53:1-2). Dejen que les lea Isaías 53:1-2. Y qué dicen estos versículos? Esto es lo que dicen. 1 Quién ha creído a nuestro mensaje? A quién se ha revelado el brazo del Señor? 2 Creció delante de El como renuevo tierno, como raíz de tierra seca; no tiene aspecto hermoso ni majestad para que le miremos, ni apariencia para que le deseemos. De quién están hablando estos versículos? Están hablando del Hijo de Dios en Su Encarnación, o Cristo. Y qué nos aclaran estos versículos? Estos versículos nos aclaran que la majestad que Cristo disfrutó en el cielo ya no era visible cuando Él tomo morada en la tierra. En otras palabras, nadie vio a la apariencia de Cristo y dijo, Ahora, verdaderamente Éste es Dios, el unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad. Pero ahora dejen que les haga una pregunta. En algún momento el Padre de Cristo le levantó el velo para que el esplendor de la majestad de Cristo pudiera ser vista personalmente mientras Él todavía estaba en la tierra? Y la respuesta es sí! Esto sucedió en el monte de la transfiguración donde se nos dice, de acuerdo a Mateo 17:2, que Cristo fue transfigurado ante ellos; y Su rostro resplandeció como el sol, y Sus vestiduras se volvieron blancas como la luz. Pedro mas tarde, testificando sobre este evento dijo a sus leedores en 2ª Pedro 1:16, Porque cuando os dimos a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no seguimos fábulas ingeniosamente inventadas, sino que fuimos testigos oculares de su majestad. Cristo siempre poseyó Su majestad aún durante Su encarnación pero estaba cubierta y solamente fue vista en esta ocasión. De que otro modo vemos la majestad de Cristo cubierta? 3
Su majestad fue cubierta con respecto al cambio de Su medio ambiente (Lucas 2:8-11). En el cielo constantemente vemos a Dios siendo alabado por los ejércitos del cielo. Ciertamente, si la majestad de Cristo iba a ser cubierta, Él necesitaba dejarla junto con Su visible comunidad de alabadores. Y esto es exactamente lo que pasó. Ciertamente por la mayor parte de su vida terrestre, Jesús cambio Su visible presencia en el medio ambiente celestial por un medio ambiente común junto con gente ordinarias. Pero ahora dejen que les haga esta pregunta. En algún momento el Padre de Cristo le levantó el velo para que el esplendor de la majestad de Cristo pudiera ser vista? Y la respuesta es sí! Oigan a Lucas 2:8-11. 8 En la misma región había pastores que estaban en el campo cuidando sus rebaños durante las vigilias de la noche. 9 Y un ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor. 10 Mas el ángel les dijo: No temáis, porque he aquí, os traigo buenas nuevas de gran gozo que serán para todo el pueblo; 11 porque os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor. Y en unos versículos después, una multitud de los ejércitos celestiales se les aparecen a los pastores y esta multitud está alabando a Dios. Cristo siempre disfruto la alabanza visible de los ejércitos celestiales antes de Su encarnación pero después que Él se despojó a sí mismo y Su majestad fue cubierta, al punto que alabanza fue raramente vista y solamente vista cuando Él Padre lo permitió. Pero hay más. Todavía hay otra manera por la cual la majestad de Cristo fue cubierta. La majestad de Cristo fue cubierta con respecto a cómo Sus pertinentes atributos serian desplegados. Sí Cristo y otros desde el momento de Su nacimiento estuvieron completamente concientes de Sus pertinentes atributos de omnisciencia, omnipotencia, y omnipresencia; esto ciertamente lo hubiera puesto aparte y lo hubiera identificado como divino. Por lo tanto, necesitaba un cambio. Cuál fue este cambio? El cambio que ocurrió cuando la majestad de Cristo fue cubierta fue que Sus atributos dejaron de estar en despliegue completo. Fue Cristo omnisciente? Sí! Fue Cristo siempre omnipresente? Y la respuesta seria sí también. Él no se despojó de su omnisciencia cuando Él decidió cubrir su gloria. Siempre estuvo presente y podía ser expresada en cualquier momento, dependiendo en la voluntad de Su Padre. Jesús siempre sabía más de lo que Él se daba cuenta! Y Él llegaría a darse cuenta de lo que Él ya sabía a la orden de Su Padre. Esto es porque dice en Juan 18:4, Jesús, pues, sabiendo todo lo que le iba a sobrevenir, salió y les dijo: A quién buscáis? y aún en Mateo 24:36 Él podía decir de Su segunda venida, Pero de aquel día y hora nadie sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo, sino sólo el Padre. Fue Cristo omnipresente? Sí! Fue Él siempre omnipresente? Y la respuesta tendría que ser sí también. Él no se despojó de Su omnipresencia cuando Él decidió cubrir Su gloria. Su omnipresencia siempre estuvo presente y podía ser expresada en cualquier momento, dependiendo de la voluntad de Su Padre. Esto es porque Jesús necesitaba escuchar que Juan Bautista había sido arrestado en Mateo 4:12 antes que Él se retirara a Galilea, pero aún en otra ocasión pudo decirle a Natanael en Juan 1:48 en respuesta a su pregunta acerca de cómo Él ya lo conocía, Jesús le respondió, Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi. 4
Fue Cristo omnipotente? Sí! Fue Él siempre omnipotente? Y la respuesta tendría que ser sí de nuevo. Él no se despojó de Su omnipotencia cundo Él decidió cubrir Su gloria. Su omnipotencia siempre estuvo presente y podía ser expresada en cualquier momento dependiendo en la voluntad de Su Padre. Esto es porque en veces vemos a Jesús agotado, físicamente cansado por su ministerio; y en otra ocasión lo vemos alimentando a 5.000 personas con solo 5 panes y 2 peces, y recogiendo 12 cestas de comida de sobra. Cristo se despojó a sí mismo al no demandar que Él fuera desplegado como Dios. Esto lo llevó a que cubriera Su majestad. La majestad de Cristo fue cubierta por cambios en Su apariencia, cambios en su medio ambiente, y por cambios en el modo en el cual Sus atributos pertinentes fueron desplegados. Que Dios nos de la gracia para despojarnos de nosotros mismos para que en nuestra búsqueda de servirles a otros podamos seguir en los pasos de Cristo. 5