MISA INICIO SEMANA DE LA FAMILIA BENDICIÓN DE LA FAMILIA Y LOS ALTARES DOMINGO 07 OCTUBRE DE 2012 Área Agentes Evangelizadores Departamento Pastoral Familia y Vida familiayvida@arzobispadodeconcepcion.cl Caupolicán 401 Teléfono: 2222 489
INTRODUCCIÓN Motivación: MISA INICIO SEMANA DE LA FAMILIA BENDICIÓN DE LA FAMILIA Y LOS ALTARES DOMINGO 07 OCTUBRE DE 2012 La familia, en cuanto a comunidad, es un ámbito de acogida por el cariño y la calidad afectiva. Es el único lugar donde las personas son amadas por sí mismas en cuanto a personas, no por lo que producen o los papeles que desempeñan. Descubre así su función social, el misterio de su intimidad como persona, el hecho de ser único e intransferible, el alto precio de su vida. En una palabra descubre la dignidad de su ser persona. La familia humaniza porque acoge, porque acepta a cada miembro como es, porque lo quiere y lo valora. Nos ponemos de pie para recibir a quien preside nuestra celebración.., acompañamos cantando. Coro: Saludo del Celebrante RITO DEL PERDÓN: Celebrante: Introduce el rito. 1. Señor, Por no reconocerte como verdadera Familia. R/: Señor, ten piedad de nosotros. 2. Cristo, Porque no valoramos la familia que nos has regalado. R/: Cristo, ten piedad de nosotros. 3. Señor, Por no ser testigos de familias felices. R/: Señor, ten piedad de nosotros. Gloria Oración Colecta LITURGIA DE LA PALABRA Dispongamos nuestro corazón y nuestra mente para acoger la Palabra de Dios en la Escritura. Ella es alimento de nuestro espíritu y luz en nuestro caminar. Lecturas.
Primera Lectura: Gn 2,4.7.18-24 Dios crea al hombre y a la mujer en perfecta igualdad. El amor que los une hace de los dos una sola persona: un vínculo que nada ni nadie puede romper. Salmo responsorial Guía. Segunda lectura: Heb. 2,9-11 Jesús ha experimentado la muerte para bien de todos. Destinado a llevarnos a la gloria, asumió el dolor por amor a la humanidad. Evangelio: Mc. 10, 2-16 Jesús reafirma con fuerza el plan de Dios acerca del hombre y la mujer: unidos en matrimonio deben hacer realidad la Palabra del Señor: El hombre no debe separar lo que Dios ha unido. Homilía Oración de los fieles. Celebrante: (Introduce la oración) 1.- Padre Bueno, santifica a tu Iglesia en la persona de sus pastores, del Papa Benedicto XVI, de nuestro Arzobispo Fernando Chomali, de los presbíteros, religiosos, religiosas, diáconos y laicos comprometidos en el servicio eclesial, para que animen a los matrimonios y a cada familia como lo plantea el Evangelio. R/Escúchanos, Señor, te rogamos 2.- Padre Santo, Tú que, velando por la unidad de la familia, dijiste: Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre, guarda a los esposos siempre unidos con el vínculo indestructible de tu amor. 3.- Padre del Amor Infinito, ponemos ante Ti a todas las familias. Que en ellas reine el espíritu de unidad para que sean cunas en donde se aprenda el verdadero sentido del amor cristiano y sean células de una sociedad más humana en la que reinen el amor, la verdad y la paz.
4.- Padre y Señor nuestro, te rogamos por todos los que sufren, los que no tienen familia o si la tienen, está disgregada y sus miembros padecen la incomprensión, carencia de amor y lo elemental para su subsistencia, viviendo en condiciones reñidas con su dignidad de personas. Que puedan experimentar tu presencia a través de la ayuda de tus discípulos misioneros. 5.- Padre eterno, te rogamos por todos cuantos vivan este Mes de la Familia. Que el trabajo que realicen en estos días sea grato en tu presencia. Derrama sobre todos ellos tu bendición y la abundancia de tu gracia y así sean testigos fieles de tu amor en medio de su comunidad. Celebrante: Todo esto te lo pedimos, Padre, por Jesucristo tu Hijo porque sabemos que Tú, que tienes el poder, eres misericordioso y vives y reinas por los siglos de los siglos. R/: Amén LITURGIA EUCARÍSTICA Presentamos al altar de Dios la carpeta de la Familia que utilizaremos durante este mes: SOMOS FAMILIA, CONSTRUCTORES DE VIDA. Presentamos pan y vino, fruto de nuestro trabajo que pronto se convertirán en el Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor Jesucristo. Canto de ofertorio: Santo Padre Nuestro Cordero de Dios Comunión El Señor quiere fortalecer nuestra vida, nuestro matrimonio, nuestra familia y nos invita a recibir el alimento que nutre lo que somos y tenemos. Acerquémonos con confianza a recibirle. Oración después de la Comunión
Bendición del Altar, cuadernillo y detente. Celebrante: Motiva el sentido del trabajo con los materiales. Les invito a levantar sus altares y cuadernillo para recibir la bendición sobre este material que les acompañará esta Semana. Celebrante: Oremos. Señor, bendice estos altares y el material con que cada familia realizará su reflexión durante este mes dedicado a la familia. Bendice abundantemente este material + y haz fecunda su utilización. Concede a las familias que lo usen la gracia de ser fieles en el amor y así puedan ser un auténtico evangelio de dios en el ambiente que les rodea, compartiendo con otros la gracia recibida. Por Jesucristo, Nuestro Señor. Amén. Invitamos a que cada Familia presente en esta Eucaristía de inicio de este mes, reciba la bendición para que sean Constructores de Vida. Celebrante: Oremos: Oh Dios, Creador y Misericordioso restaurador de tu pueblo, que quisiste que la familia, constituida por la alianza nupcial, fuera signo de Cristo y de la Iglesia, derrama la abundancia de tu bendición sobre cada una de estas familias, reunidas en tu nombre, para que quienes en ella viven unidos por el amor se mantengan fervientes en el espíritu y asiduos en la oración, se ayuden mutuamente, contribuyan a las necesidades de todos y den testimonio de fe. Por Jesucristo Nuestro Señor Amén Guía REZAMOS JUNTOS LA ORACIÓN DE LA PARTE POSTERIOR DEL CUADERNILLO.
Quédate con nosotros, Señor Quédate en nuestras familias, Ilumínalas en sus dudas, Sostenlas en sus dificultades, Consuélalas en sus sufrimientos Y en la fatiga de cada día. Tú que eres la vida Quédate en nuestros hogares, Para que sigan siendo nidos Donde nazca la vida abundante y Generosamente se acoja, se ame y Se respete la vida Desde su concepción Hasta su término natural. Quédate, Señor, con nuestros niños y Con nuestros jóvenes Que son la esperanza y La riqueza de nuestro continente Protégelos de tantas insidias Que atentan contra su inocencia Y contra sus legítimas esperanzas. Quédate con nosotros, señor! Amén Bendición Final.