Te presento mi edificio María Cecilia De Freitas Cañas - Karen Maritza Barker Hernández
Marcos Barraza Gómez Ministro de Desarrollo Social Ernesto Ottone Ramírez Ministro Presidente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes Texto: María Cecilia De Freitas Cañas Ilustraciones: Karen Maritza Barker Hernández Ministerio de Desarrollo Social Consejo Nacional de la Cultura y las Artes ISBN (pdf): 978-956-352-211-2 Primera edición Otoño 2017 Santiago, Chile. Esta obra fue seleccionada como mención honrosa en la categoría Naturaleza, juegos y medioambiente, línea cuentos ilustrados del Concurso Chile Crece Contigo para la Primera Infancia, 2016. Chile Crece Contigo es el Sistema de Protección Integral a la Infancia del Estado de Chile. Encuentra más información y materiales de apoyo a la crianza en www.crececontigo.cl y en Facebook/chcrececontigo.
Te presento mi edificio CONCURSO NACIONAL DE CREACIÓN MUSICAL Y CUENTOS ILUSTRADOS PARA LA PRIMERA INFANCIA
Hola mi nombre es Manuel, pero me dicen Manu. Vivo con mis papás en el piso 10 de mi edificio. En este lugar vive mucha gente diferente. Esta semana vino de vacaciones a visitarnos mi prima Laura, que es un poco tímida. Tenemos la misma edad. Yo vivo en la ciudad y ella vive en el campo. Como nos gusta mucho jugar juntos, después de almorzar pedimos permiso para bajar a jugar al patio del edificio.
Llamamos al ascensor, pero no pasó nada. Se había echado a perder, así que nos animamos a bajar los 10 pisos por las escaleras. Íbamos conversando cuando llegábamos al piso 8 y venía subiendo la vecina nueva con su hija que yo no conocía.
- Hola chicos, dijo su mamá muy amable, con acento extranjero. - Hola, contestamos. - Esta es mi hija Sandra. Ha estado un poco triste, pues no sabía que habían niños de su edad en el edificio. - Nosotros vamos a jugar al patio. Puede venir ella con nosotros? - Claro que sí. Tan lindos, tan bellos que son, dijo su mamá. Seguimos bajando ahora los tres. Sandra era muy conversadora. Nos contó que era de Colombia y que había llegado hace poco a Chile. Usaba palabras que a veces no entendíamos y en otros momentos ella no nos comprendía. Nos reímos mucho de los malentendidos.
De repente, empezamos a De escuchar repente, un empezamos sonido BUM a escuchar un fuerte BOM BUM BAM, BOM y cada BAM, escalón y que cada escalón que bajamos, se se escucha oía más fuerte mas BUM fuerte BUM BOM BAM. BOM Al BAM. llegar al piso 7, BUM BOM BAM era muy muy fuerte. Sandra y Laura pusieron cara de asombro.
Al llegar al piso 7, el ruido BUM BOM BAM era muy fuerte. Sandra y Laura pusieron cara de asombro. - No se preocupen, les digo, el ruido viene del departamento 72. Ahí vive un músico y a esta hora ensaya. Él es muy respetuoso y considerado, puesto que avisó a los vecinos su horario de ensayo. Toca un tambor llamado tumbadora en una orquesta y necesita practicar.
Seguíamos bajando, cuando de repente apareció un perro solo y sin correa. El perro empujó a Laura, se puso a ladrar y ella se asustó mucho. - Disculpen, disculpen, nos dijo Francisca, la dueña del perro. Este perro es muy loco. - Laura, no te asustes que ya lo amarró, la conforta Sandra. - No se qué hacer, todos en el edificio se molestan con Pipo y él no hace nada, es muy pequeño, dice Francisca. - Pero si tú lo dijiste recién Francisca, tu perro es muy loco, y si lo llevaras con correa siempre, para que no nos bote o asuste, todos nos sentiríamos más cómodos con él.
Con el alboroto del perro, se entreabrió la puerta del departamento 33. Ahí vive doña Julieta, que es una señora viejita y que vive sola. - Quién mete tanta bulla? Preguntó enojada. - Vayan a jugar a otro lado.
Por el reto y el susto, bajamos las escaleras hasta el primer piso muy rápido. - Manu, qué les pasó, que vienen tan apurados? Me preguntó don Rogelio, el conserje de nuestro edificio. Le contamos lo que nos pasó con doña Julieta. Él se rió y nos dijo que la señora no tenía mucha paciencia, pero que no era mala persona. Le presenté a Laura y a Sandra. Don Rogelio le contó a Sandra que él también viene de otro país llamado Perú, pero vive hace muchos años en Chile. - A veces extraño mi país, echo de menos sus comidas, mis amigos, sus tradiciones.
Nos sentamos a conversar en la entrada del edificio y vimos llegar a don Walter, un señor muy simpático que juega ajedrez con mi papá. Venía cargado con bolsas del supermercado, entonces los tres nos miramos y le dijimos al mismo tiempo: - Lo ayudamos? Él nos dijo sí, moviendo su cabeza. Don Walter vive en el cuarto piso y subir a pie con todas las bolsas es muy pesado. Nos agradeció mucho nuestra ayuda, regalándonos un paquete de dulces.
Volvimos a bajar disfrutando de nuestros dulces, cuando se abrió la puerta de doña Julieta, que solo nos miró y nosotros salimos corriendo al primer piso.
En ese momento llegaron los técnicos que venían a reparar el ascensor. Estaban hablando con don Rogelio cuando entró un joven que le entregó un paquete que traía del doctor para doña Julieta Ramírez. Se fue rápido, porque su moto estaba muy mal estacionada. - Manu!, dijo don Rogelio, yo no me puedo mover de aquí. Pueden llevarle este paquete, que es urgente, a doña Julieta por favor? - Claro, le dije, pero reconozco que nos daba susto ir al departamento 33.
Subimos muy preocupados, ya que no sabíamos con qué nos encontraríamos, cómo nos recibiría y si se enojaría. Nos dimos ánimo y juntos tocamos el timbre: Rin. Se abrió nuevamente la puerta. - Qué quieren ahora niños, no me molesten! Suavemente Sandra entregó el paquete que le mandó el doctor. - Este paquete es para usted, dijo ella con voz baja.
- Es lo que estaba esperando. Gracias, muchas gracias, nos repetía una y otra vez doña Julieta. Su cara cambió, se iluminó con una gran sonrisa. - Perdón niños, tuvieron la amabilidad de subirme los remedios de mi gato que está enfermo, y yo retándolos toda la tarde.
Entonces nos explicó que estaba nerviosa, porque su gato necesitaba tomar todos los días ese remedio, y como estaba malo el ascensor, no podía ir a comprarlo. Ella quedó feliz y nosotros nos fuimos muy contentos de haber podido conocer y ayudar a doña Julieta. FIN
María Cecilia De Freitas Cañas es licenciada en Arte de la Pontificia Universidad Católica de Chile, con especialidad en Grabado. Obtuvo el primer premio en el concurso organizado por la ONG Elige Educar, con la obra La pedagogía que Chile sueña (2015). Actualmente desarrolla ilustraciones para diseños de envases y productos. Te presento mi edificio es su primera publicación. Karen Maritza Barker Hernández es Diseñadora de la Universidad Técnica Metropolitana, con estudios en ilustración y fotografía. Actualmente se dedica a participar en exposiciones con sus ilustraciones, además de realizar talleres para potenciar la creatividad de adultos y niños. Las ilustraciones de Te presento mi edificio fueron realizadas a lápiz y acuarela con fondos trabajados en técnicas mixtas de lápiz, acrílico, collage y aplicaciones digitales.