Déjame ver de nuevo. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, Amén.

Transcripción

1 1 Déjame ver de nuevo En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, Amén. Una de las cosas más importantes que escuché el domingo pasado en el Taller de la Congregación fue como muy fácil que es para nosotros para crear grupos en contra de otros. Incluso el lenguaje que es utilizado, si no tenemos cuidado, puede comenzar a pintar esta realidad. En cierto modo, es la naturaleza humana, cuando se tiene algo que es valioso para uno, uno quiere erigir una barrera para que no se pierda. Todos tenemos mucho miedo de perder lo que se tiene, perder lo que es tan importante para nosotros. Hemos estado viendo a los discípulos que hacen esto durante semanas en las lecturas del Evangelio, no es así? Los discípulos no son nadie especial. De hecho, muchos de ellos provienen de distintas profesiones y fondos que no fueron respetados terriblemente en la sociedad. Ellos han llegado en torno a Jesús, ya que, en palabras de uno de mis músicos favoritos, Rich Mullins, Jesús les llama "Los Ragamuffins." Jesús llama al destartalado, al desaliñada y a el quemado. Jesús invita a todos seguir incluyendo los ricos, poderosos, e impresionante. Sin embargo, son los Ragamuffins los que por lo general terminan tomando este camino. Y así sus discípulos tratan muy rápidamente de convertirse el grupo nuevo. Un grupo nuevo que es poderoso, que es impresionante. En palabras de un erudito, "Jesús está rodeado por los internos auto-identificados y seleccionados. Él esta amortiguado por las personas que quieren ser identificados por él." Una y otra vez, los discípulos que se han reunido alrededor de Jesús actúan para mantener a los que están en el exterior de distancia. Ellos tratan de impedir que alguien echara fuera demonios, alguien que no están en su grupo. Pidiendo a Jesús posiciones de poder y honor.

2 2 En el evangelio de hoy, un hombre ciego llamado Bartimeo grita que Jesús tenga misericordia de él. Las multitudes tratan de silenciarlo. Qué es este pobre ciego haciendo arruinando nuestra agradable experiencia de espiritualidad? Pero Bartimeo no se contuvo. Él llama a salir de nuevo, más fuerte, más allá de los que le están diciendo que se callara. Jesús se detiene a la multitud de viaje y les dice que lo llamara aquí para él. La multitud finge piedad, ahora con ganas de animarlo a acercarse a Jesús. Bartimeo arroja su capa y se dirige a Jesús. No se pierda ese momento, cuando se despoja de su capa. Para alguien como él, un mendigo ciego, su capa habría sido su preciada posesión. Hubiera sido lo que lo mantiene caliente por la noche. Probablemente envuelto lo que pocas posesiones que tenía en su interior para mantenerlos a salvo. Pero Jesús lo llama y él arrojó su capa. Jesús le pide lo que quiere. Bartimeo le dice que quiere recobrar la vista. Jesús le dice, tu fe has sido sanado, y Bartimeo recobra la vista y sigue a Jesús en su camino. La multitud trató de mantener Bartimeo atrás, para que no tenga una experiencia de Dios en Jesucristo. Las multitudes alrededor de Jesús siempre van a tratar de silenciar a aquellos que vienen a ser sanado. Como iglesia, estamos tan envueltos en nosotros mismos, en mantener nuestras fronteras donde lo que queremos, que nos olvidamos de nuestro llamado no es principalmente para las personas que están aquí en estas sillas. Nuestra llamada fundamental, como cristianos, es que aquellos que no están en estas sillas, los que están en los bordes, a los que se les ha dicho una y otra vez que no son lo suficientemente buenos para Jesús. Las multitudes siempre tratará de silenciar a aquellos que vienen a ser sanado... por lo general debido a los que se reúnen en torno a Jesús no quieren enfrentar la realidad de que también estamos en necesidad de curación. Confundimos cercanía a Jesús, estar cerca de él

3 3 físicamente, ya sea en una carretera del siglo primero o en un banco de madera duro, confundimos estar aquí físicamente con estar abierto al mensaje de Jesús, abiertos también a Jesús para lograr encontrar la verdadera curación en nuestras almas. En vez de esto, creamos barreras y fronteras, nos aferramos a las cosas que queremos, porque tenemos miedo a reconocer que somos tan ciegos como Bartimeo en el lado de esta carretera. Es posible que somos más ciego. Pero incluso nuestra ceguera no se detendrá este reino que Cristo está trayendo. Después de que Bartimeo es sanado, el texto nos dice que él sigue a Jesús en el camino. Sabía usted que Bartimeo es en realidad la única persona en el Evangelio de Marcos que está curado y que responde por seguir a Jesús? La mayor parte del tiempo, cuando Jesús cura a alguien, esa persona se despidió con la orden de permanecer en silencio. Parecía que iba a ir por ese camino, así, como también Jesús no le invita a seguirlo. Él simplemente le dice: "Vete, tu fe te ha salvado." Bartimeo no solo recupero su visión física, sino recupero también algo más importante. Ahora, su visión espiritual está claro. Él sigue a Jesús a Jerusalén, caminando junto a los otros discípulos que se han estado resistiendo desde hace un tiempo. Tengo curiosidad que se parece lo que el resto de la jornada de Bartimeo. La primera persona que llame a Jesús "Hijo de David" en el Evangelio de Marcos, la primera vez que escuchamos ese título atribuido a Cristo, tengo curiosidad lo que será como cuando llegan a Jerusalén en un par de capítulos cortos. Tengo curiosidad qué será para Bartimeo cuando las multitudes adoptan su nombre para Jesús como propio, arrojando ramas de palmas y gritando: " Bendito el reino que viene, el reino de nuestro padre David!"

4 4 Tengo curiosidad qué será cuando, pocos días después de eso, el tono de las multitudes cambia. Me pregunto qué será como ver las multitudes se tornan violentas, pidiendo por la muerte de Jesús, por su crucifixión. Este mendigo ciego que fue retenido de las multitudes en un principio verá la maldad de la gente una vez más. Él ve el varadero cambio que de Jesús tiene para con él, en cierto modo, como Jesús se convierte en el objeto de desprecio y burla de la multitud. Cómo desesperado Bartimeo debe haber sentido en ese momento, ya que las multitudes se agolpaban las calles una vez más, como Jesús camina hacia su muerte. Qué tan profundo seria la curación de Bartimeo? Podía ver que este era el camino que se propuso en ese día cuando decidió seguir a Cristo? Podía ver que aquí es donde el camino a Jerusalén siempre llevó? Podía ver que aquí es donde el seguimiento de Cristo conduce al discípulo fiel? Una de las razones que caemos en la multitud de los que son como nosotros, barandilla contra los que son diferentes, es porque creemos que la poderosa sanación que teníamos hace mucho tiempo fue el final de nuestra historia. Y así gritamos sobre los fracasos de nuestros líderes muy humanos. O gritamos a los que atacan a los fracasos de nuestros líderes más humanos. Pero a cada lado, lo que estamos haciendo está deslizando hacia la multitud, levantando las paredes, y olvidando que la curación que tuvimos un día, hace mucho tiempo, la curación que pone el fuego en nuestro vientre y nos hace gritar al otro, que la curación no fue el final de la historia. Tenemos que ser sanados de nuestra ceguera una otra vez... una y otra vez y otra vez. Jesús usa las mismas palabras en el Evangelio de hoy que se utilizaron en el Evangelio de la semana pasada. Cuando habló con Santiago y Juan, les preguntó: Qué quieren que haga por ustedes?" Preguntaron por el poder, para sentarse a la derecha y la izquierda. Asimismo, cuando

5 5 se aproxima a Bartimeo, Jesús dice a Bartimeo, " Qué quieres que haga por ti?" Pero Bartimeo es diferente a Santiago y a Juan. Él dice: "Maestro, quiero recobrar la vista." Y la fe de Bartimeo produce su vista. Si Jesús que se acercaba por el camino, como vas a lo largo de cualquier camino que se encuentra, con lo que se multitud usted elige identificarse... si Jesús te acercó y le preguntó: " Qué quieres que haga por ti?" - Lo que haría tu dices? Qué quieres salir de esta cosa, esta religión, este cristianismo que todos seguimos? Qué es lo que quieres de Jesús? Quieres recobrar la vista? Nunca pidas ver de nuevo a menos que primero reconozcas que la ceguera siempre se arrastra de nuevo en nuestra vista. Quieres recobrar la vista? Quieres ver de nuevo? Cree usted que tiene que saber más y entender más de lo que actualmente conocemos y entendemos? Debido a que en el reino de Dios, sólo los que saben que son ciegos de corazón y quieran ser salvados tendrán pues la verdadera visión. Amén.